Avanzáis por un pequeño pasillo hasta llegar en la sala principal de la iglesia. La zona del altar esta inmaculada, como en todas las iglesias que recordáis, todo tipo de santos, cruces y velas encendidas. Pero lo que os llama la atención es la parte dónde normalmente están los bancos para los fieles que vienen a misa: ahora están amontonados sobre la puerta principal de la iglesia, al parecer alguien tuvo la idea de usarlos como barricada y refuerzo para que no vencieran las puertas.
Y no solo tapaban las otras puertas, sino que otro de los accesos laterales también esta abarrotado de muebles y bancos.
Por el pasillo por el que habíais venido, pasasteis por delante de dos puertas mas, suponéis que podrían ser los servicios, la habitación del padre o pequeños almacenes.
Con un gesto con la mano, os invitó a seguirle, mientras os conducía por el pasillo hacia la sala principal de la iglesia. Mientras observabais el estado de aquel edificio por dentro, el Padre Matías os hablaba, intentando responder a vuestras preguntas.
- ¿Supervivientes? No se.. no creo.. - dijo algo abatido. Luego os miró con cierta confusión. - Y porque no abandonaron el pueblo ustedes cuando todo empezó? Es que no oyeron los avisos de las fuerzas militares? Por un momento pensé que veníais a rescatarme, porque me temo que estoy atrapado aquí dentro, y llevo días sin poder comunicarme con nadie.
Según comenté en el apartado de reglas, para ese tipo de tiradas se usaría "Leer los labios", para intentar entender su lenguaje corporal con cierta perspicacia y detectar si alguien puede estar mintiendo, nervioso, etc..
Escuchó atento cada palabra, absorviendo la informacion como una esponja. Luego se pueso de brazos cruzados con una mando sobre el menton, pensando. Estaban tan atrapados como antes. EN algun momento tenian que salir de alli. Lo que les dijo el padre era de mucha ayuda. Ya no deberia quedar nadie en el pueblo. Todos se han ido. Han huido.
-Nosotros vinimos en un barco, no sabiamos nada hasta que bajamos- dijo Marcos sorprendido de aun recordar lo del bote, algo tan lejano...
Mira a su alrededor con atencion, preguntandose como se las habia apañado hasta ahora.
-¿Por que no se fue?- pregunto con el ceño fruncido, agregando con respeto- Padre..
Carraspeo confuso, no estaba acostumbrado a hablar con alguien asi y no sabia muy bien como actuar.
Las palabras del padre no habían sido muy alentadoras, pero bueno, al menos podríamos recuperar energías descansando y sanando las heridas y rasguños.
-Como ha dicho mi amigo, nosotros dos nos encontrábamos con otra amiga, en un yate y por un percance que tuvimos, nadamos hacia la costa y nos enteramos de todo lo que ésta sucediendo- hago una pausa y suspiro -Escuché los avisos del ejército, pero no sabemos con exactitud a dónde debemos dirigirnos, además, la ciudad está infestada, creo que es casi imposible llegar allí...- mi voz disminuyó el tono y cada vez se hizo más lúgubre.
Tomo la mano de Marcos, apretándola suavemente, intentando así tranquilizar aquel tono con el que se dirigía al sacerdote. Lo miro de soslayo y noto como estaba a la defensiva, inquieto y era normal, especialmente con aquella forma peculiar suya.
Aquel hombre parecía algo confundido, sin duda era extraño que a esas alturas alguien no supiera lo que estaba pasando. Aunque pensándolo bien, había estallado todo ese conflicto en cuestión de días así que por una "mala coincidencia" podíais haberos visto metidos en ese lío sin quererlo.
- Ya veo.. - dijo pensativo. - Quizá tenga algo que pueda ayudaros, y sin duda lo explicará mejor que yo, que he estado aquí encerrado desde que empezó todo esto.
Se alejó hasta uno de los cuartos, que abrió con una llave. Al cabo de unos instantes volvió con unos cuantos periódicos viejos, de hacía días.
Decidís echarle una ojeada rápida a aquellos diarios viejos. Lo que leísteis, no os gusto nada de nada.
Esta edición habla de una "una nueva crisis vírica". Se han detectado muchos casos en Japón y parece que ya están trabajando en una cura. Los síntomas son parecidos al ébola. Hablan de las claves del desconocido virus. Ha habido muchas muertes y las autoridades aún no saben exactamente a que se debe.
El segundo periódico fecha de hace 4 días. Al parecer algo extraño está pasando. Ha habido miles de muertes en Rusia, y su gobierno ha decidido cerrar las fronteras. Al parecer permanecen herméticos en cuanto a la información y nadie sabe lo que está pasando dentro de sus fronteras. Miles de bloggers y twitters hablan sobre extraños casos de enfermedad. También se hablan de teorías conspiratorias y apocalipsis.
Estados Unidos tampoco se ha librado de extrañas muertes causadas por el virus. Han declarado el estado de emergencia DEFCON-2. Han ordenado volver a todas las tropas destinadas en misiones en el Oriente Medio y África.
En Europa se han detectado muchas cepas del virus, los principales dirigentes de los países europeos van a formar un gabinete especial para lidiar con esta crisis.
En muchas partes del mundo se ha desatado un caos absoluto, transformado en vandalismos, pillajes y asalto.
Esta última entrega es de hace 2 días.
Se ha declarado el Estado de sitio en el territorio español! El presidente, los comandantes de las fuerzas armadas y el congreso ha tomado esa decisión. Al parecer los casos de infectados con la extraña enfermedad no dejan de aparecer en toda la Peninsula Iberica. Todos los aeropuertos se han cerrado y las fronteras terrestres solo siguen abiertas para Portugal y Francia.
En muchas ciudades se ha decretado el toque de queda.
Nadie sabe lo que está pasando.
Se habla de un extraño virus, que provoca estados de furia descontrolada y degeneración mental, y de las capacidades. Solo afecta a las personas.
Algunas poblaciones catalanas han sido puestas en cuarentena y se ha desalojado a todo el mundo.
Echo un vistazo rápido a los titulares de los periódicos. Parece que la cosa es grave. Peor de lo podría esperarse, la verdad. Pero de momento, debían pensar en el día a día, en mantenerse a flote.
Mientras el padre Matías nos muestra los periódicos, observo su comportamiento. No se porque, hay algo tremendamente sospechoso en lo que nos ha contado. ¿De verdad se ha ido todo el mundo? ¿Y por qué se quedo él?
Quiza son sólo suposiciones mías, lo ocurrido en los últimos días nos está volviendo a todos paranoicos. Pero eso es lo que también nos ha mantenido vivos...
Tirada: 3d10(+11)
Motivo: Percepción + Leer labios
Resultados: 7(+11)=18, 1(+11)=12, 1(+11)=12
Ups... eso de dos 1 es pifia, ¿no? Vaya forma de volver a la acción... XD
Matías afirmaba a medida que veía como vuestros rostros de ensombrecías al contemplar aquellos titulares.
- Al principio no parecía mas que otra de esas enfermedades, como lo de la Gripe A o las vacas locas. - comentó - Muchos feligreses venían algo nervioso a pedir consejo, pues la gente mayor sobretodo, suele ser mas propensa a creerse todo lo que ven por el televisor. Luego todo pareció volverse cada vez peor, empezaron a salir noticias a diario, cada vez diferentes y peores.. nadie sabía que estaba pasando.
Parecía afectado mientras contaba lo ocurrido, pues al parecer él también lo había vivido a su modo.
- Finalmente empezó el caos. Se cerraron fronteras, aeropuertos, los servicios de transportes públicos dejaron de funcionar por miedo a la propagación. Lo peor de todo es que nadie sabía que pasaba. La policía local nos aviso que debíamos evacuar el pueblo lo antes posible porque se había encontrado varios brotes de esta extraña enfermedad. Pero yo no podía irme, muchos de los que vienen a la iglesia a diario, apenas están atentos a los medios, yo.. tenía que esperar no podía irme y abandonarlos a todos.
Sin duda parecía compungido.
- Al final.. ya fue demasiado tarde, me quedé encerrado aquí dentro como podéis ver. Contacté con las autoridades y me dijeron que mandarían alguien para evacuar a los que quedasen atrás, pero aún no ha llegado nadie. Parece que los teléfonos han dejado de funcionar.
Sentía un nudo en la garganta y unas intensas náuseas a medida que leía los periódicos. Estábamos atrapados, no había nada que hacer, tan sólo encontrar aquellos refugios donde había comida, medicamentos y estaríamos seguros de aquellas criaturas, pero ¿Y luego? La comida se escasearía, al igual que los medicamentos...
Mi mente estaba nublada en aquel momento, no podía pensar ni asimilar todo lo que había leído. Lentamente suelto la mano de Marcos y doy unos cuantos pasos hacia atrás -Disculpe, Padre ¿Podría utilizar su baño? Necesito refrescarme...- le dedico una triste sonrisa y sentía que las pocas energías que tenía me abandonaban.
-Si no es mucha molestia, claro...- agrego fingiendo un tono de voz animado, pero ¿Para que engañarlos? Necesitaba descansar, todos lo necesitábamos, para luego crear un plan.
- Oh si claro, supongo que estaréis exhaustos. Perdonad mis modales, con todo lo que esta pasando.. - luego te señalo del pasillo por el que entrasteis, una de las puertas. - Ahí tienes el aseo. El agua cae con muy poca presión, pero suficiente para asearte, tenéis toallas en el armario, eso sí, no hay agua caliente.
- Iré a buscar algo para que comáis, por suerte aún tengo la despensa llena.. - comentó mientras se apresuraba a ir a otra de las habitaciones, dejándoos solos en aquel recinto iluminado por velas.
Sonrío a Marcos y mis ojos se cerraron ante el tacto de su mano en mi rostro.
-Es hora de comer y descansar- murmuro al tiempo que abría los ojos, para encontrarme con los suyos -Luego, le preguntaremos al padre si tiene escopetas o alguna otra arma...- miro de soslayo la suya -hay que limpiar esa, si no consigues otra, claro...- agrego entre risas -Venga chicos, vamos a refrescarnos y a despejar la mente al menos por unas horas, lo merecemos ¿Qué dicen?
De repente se sintio muy cansado, todo el dia cayo sobre sus hombros en una avalancha. Suspiro y se paso la mano por el pelo. Isabel tenia razon, tenian que descanzar y recuperar fuerzas.
-Si, tenés razon, el padre nos va a dar refugio y comida por hoy. Despues tenemos que volver a buscar a Liz...-trago saliva al pensar en como estaria ella, estaba encerrada, con comida y agua, pero de todos modos...
Le hizo señas a Isabel para que se adelantara al baño y se aseara, mientras ellos esperaban al padre. Se acerco a la puerta y apoyo la cabeza en la madera, tratando de escuchar algo de afuera.
Tirada: 3d10(+15)
Motivo: Escuchar
Resultados: 6(+15)=21, 4(+15)=19, 1(+15)=16
mejor que eran tiradas de escuchar y no de salvar el pellejo ante miles de zombis
Liz... aquel nombre hizo que su corazón diera un vuelco. Solo se limito a sonreirle y rápidamente se encamino hacia el baño, pero en el trayecto, sólo pensaba en su amiga ¿Podría cumplir su promesa de regresar a por ella? Esperaba que así fuera, de lo contrario el sentimiento de culpa la acompañaría por el resto de sus días.
Sigo las indicaciones del Padre Matías y no tardo mucho en en encontrar el baño. Entro a éste, quito mi ropa y luego me adentro en la ducha. El tacto del agua en mi cuerpo, era relajante. En aquel instante mis pensamientos abandonaron mi mente, tan solo disfrutaba de aquel momento.
Al cabo de un rato el hombre volvió al salón principal, en sus brazos cargaba tres sacos de dormir aparentemente nuevos. Los dejó apoyados en una de las paredes mientras alzaba la vista para observar a Marcos y a Romo que parecían exhaustos.
- Supongo que estaréis cansados.. os he traído estos sacos de dormir para que esteis algo mas cómodos. - comentó mientras colocaba acababa de dejar los sacos. Aunque no comentó nada al respecto, dio a entender que dormiríais ahí mismo. Luego se giró otra vez para volverse a ir por donde había venido.
- Tengo unas latas de comida, que se están calentando, en unos minutos os las traigo, para que comáis algo y recobréis las fuerzas. - acabó diciendo mientras se encaminaba de nuevo hacia el pasillo.
Aguzando el oído, podíais escuchar a fuera los zombis, incluso algunos parecían estar cerca y golpeando la puerta principal, aunque no tenía mucha pinta de acusar los golpes. Por suerte la doble entrada típica de esas iglesias amortiguaba bastante el desagradable sonido y por unos momentos os podíais relajar ahí dentro.
A fuera ya era totalmente oscuro, así que solo estabais iluminados por la tenue luz de las velas encendidas. Por suerte, las iglesias disponían de muchos candelabros y parecían haber sido diseñadas, de alguna manera, pensando en que no había electricidad, por lo que la colocación era bastante buena y daba una iluminación óptima. Obviamente no estaban las cientos de velas encendidas, seguramente para ahorrar recursos.
A parte de que la mayoría de los bancos estaban abarrotados en la entrada principal, todo lo demás parecía intacto, sobretodo los múltiples motivos religiosos que adornaban aquel complejo.
Sin duda era un buen momento para descansar, reponer fuerzas y planear vuestro próximo movimiento.
Tirada: 3d10(+12)
Motivo: Oculta algo?
Resultados: 4(+12)=16, 5(+12)=17, 4(+12)=16
Hago la tirada para ver si noto algo en el padre, alguna cosa extraña...
La ducha había estado fantástica, a pesar que el agua estaba fría.
Me sentía mejor, un poco más animada, pero con deseos de descansar y rápidamente me encaminé hacia el lugar en el que estaban mis amigos.
Y allí estaban, sujetando unas bolsas para dormir. Me acerco a ellos y tomo una de ellas, luego la estiendo en el suelo y no espero un minuto más para tumbarme.
Suspiro y cierro los ojos por un instante -Que bien se siente...- murmuro y sonrío, un poco.
No notas nada raro. Tampoco es que con una tirada podáis averiguar mucho. Sin duda vuestros personajes son reacios a la hospitalidad y son desconfiados después de todo lo que han pasado. Por el momento aquel hombre no parece ir con ninguna mala intención.