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Tras el golpe Escorpión los nuevos truenos están encargándose de reunir los pergaminos negros para poder derrotar a Fu-Leng.

Uno de esos truenos, Shiba Kyoshiro, necesita un jugador que lo maneje.

Pido compromiso y conocimiento de la ambientación y el sistema. 

El ritmo de la partida es de dos post a la semana.

Os describo al pj:

Descripción

Curtido por los años de servicio, Kyoshiro es un hombre de 32 años con un tono de piel claro. Su melena morena va recogida por un moño samurái y una bandana en la frente con el mon fénix que representa que siempre tiene en mente la obligación de proteger a su clan. Su mirada es penetrante a través de sus ojos negros como la noche.

Porta una armadura ligera rojiza con los mon fénix (a la altura del corazón) y Shiba (en el hombro derecho) que le da un aspecto rudo debido a su atlético aspecto.

Kyoshiro es un hombre confiado e idealista, que sigue los preceptos del bushido, destacando el deber con su clan y su protección. Dará su vida para cumplir su cometido sin dar un paso atrás.

Historia

Kyoshiro avanzaba por los pasillos de Kyuden Isawa sin conocer el motivo por el cual había sido llamado.

Para su sorpresa, su anfitrión era Isawa Kaede, uno de los miembros más respetados de su clan, una magnífica shugenja de gran poder. Kyoshiro se lanzó al suelo en una honda reverencia mientras recordaba la alegría con la que la magistrada a la que protegía, Isawa Nozomi-sama, le había comentado el rumor de que Isawa Kaede iba a ser la prometida del campeón león... Akodo Toturi.

- Te he hecho llamar porque traigo malas noticias de la Corte de Invierno.- la voz de Kaede era firme y autoritaria.- el emperador ha sido asesinado por Bayushi Shoju, campeón escorpión. Estamos en guerra, y debemos acabar con el traidor.

Las noticias provocaron un estado de "shock" momentáneo en el samurái, apenas visible debido a que tenia la cabeza gacha tocando con la frente la fría losa de la estancia.

- Isawa Nozomi-san, me ha dicho que le has servido lealmente en todos sus viajes como magistrada del clan. Cumpliendo tu labor de forma intachable.- La shugenja hizo un gesto para que Kyoshiro se incorporara.

- Puedo verlo... es cierto, los kamis del fuego habitan en ti.- Comenzó a escudriñar al samurái.- Tengo un cometido para ti. Has sido elegido como representante del clan para acabar con esta traición sufrida por el Imperio.

Kyoshiro no acaba de creer este gran honor, se quedó mudo sin poder mediar palabra alguna salvo tímidamente.- Hai... será un honor, arigato gozaimasu.

- Dicen que nos enfrentamos a un peligro mayor que al subterfugio escorpión... se rumorea que el Jigoku avanza para destruir el Imperio Esmeralda.- Kaede se giró para coger una caja lacada con bellos remates dorados, en su interior se encontaba un wakizashi.- Necesitarás llevar esto, te protegerá contra las hordas del Jigoku... el golpe inquisidor.

un regalo demasiado generoso para Kyoshiro y lo rechazó en dos ocasiones antes de tomarlo entre sus manos.- Juro que daré mi vida por salvar al Imperio en nombre de nuestro clan, Isawa Kaede-uesama.- Contestó Kyoshiro mientras desenfundaba de su saya el wakizashi adquiriendo una gran obligación con la shugenja.

No había tiempo que perder, Shiba Kyoshiro emprendió la marcha hacia Otosan Uchi junto con una gran expedición, una decena de legiones fénix marchaban a sofocar la revolución escorpión. El viaje era largo y sirvió para que el samurái hiciera una valoración de su vida, la cual no volvería a ser la misma.

Recordó con nostalgia a sus padres y hermanos. Había sido el hijo mayor de Shiba Yukimura, el yojimbo de un joven Ishiken-do... Isawa Hideo. El shugenja se pasaba los días en las bibliotecas Isawa tratando de ampliar sus conocimientos sobre los kami, por lo que el trabajador de Yukimura era en cierto modo tranquilo.

El mismo destino creyó que correría el joven Kyoshiro al superar su gempukku, pero mostró tal habilidad que fue invitado a la corte del emperador para participar en el campeonato topacio, honor que el joven rechazó alegando que su deber estaba protegiendo a su clan.

Según fue creciendo, los Ishiken-do con los que se cruzaba decían que estaba destinado a hacer algo grande para su clan... incluso un oráculo predijo que los kami de fuego habitaban en su interior, pudiendo haber sido un gran shugenja con los estudios apropiados. Pero Kyoshiro se sentía más cómodo con su destreza marcial que entre libros. Ese periodo rodeado de shugenja le dio un amplio conocimiento sobre los kamis... sus invocaciones e importunaciones, pero aún así el joven samurái nunca trato de comunicarse con ellos como los hacías los shugenja.

Tras prestar su sevicio a varios nobles y shugenjas, al fin se reconoció su habilidad y se le encargó el honor de proteger a Isawa Nozomi... una de las más prestigiosas embajadoras fénix. Con ella, tuvo que recorrer todos los rincones del imperio, defendiendo a su señora de grandes peligros... entre ellos recordaba con orgullo el intento fénix de dialogar con el daimyo de Shutai, para conseguir una lealtad de las llanuras ronin al emperador. Fue un viaje lleno de peligros, donde sanguinarias sectas ronin trataron de acabar, sin éxito, con la vida de Isawa Nozomi.

Ahora, todo eso quedaba atrás, todo lo conseguido parecía mínimo frente al que podría ser su último servicio. Tenía un protector más grande al que defender... Rokugan.

Interesados escribirme por aquí o mandarme un mp. No tengo prisa por lo que a lo mejor no cojo al primero que me escriba.

Reclutamiento cerrado.

Gracias por el interés ;)