Partida Rol por web

0. Prólogo: Primeras armas

La fiesta del Jöll

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24/05/2013, 17:29
Thorgrím Olavsson

El berserk escuchó las palabras del jarl, mientras apuraba su primera cuerno de cerveza.

Eso puedo hacerlo - dijo asintiendo ante las ordenes de Hrolf a la vez que se alegraba de no ser uno de los hirdman de guardia esa noche.

¡Otra cerveza! Tanto hablar de maldiciones da sed a Thorgrím.

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25/05/2013, 09:23
Jorunn Hrolfsdöttir

Jorunn no se sentía cómoda con la idea de que Sigurd la siguiese a todas partes. No era cuestión del hirdman, pues era un hombre muy capaz y al que apreciaba mucho. Sin embargo, el que estuviese con ella la incomodaba ligeramente. No era lo mismo estar charlando alegremente con su amiga si tenían al guardaespaldas delante.

Además estaba la sensación de que si fuese varón, no pondrían un hirdman a su cuidado. Eso era lo que más la molestaba. De acuedo, no era tan capaz cmo lo había sido su falecido hermano, pero tampoco era una precisamente una delicada dama, aunque la herencia como lider estaba vetada para ella a pesar de los deseos de su padre.

No te preocupes padre, no me pasará nada—respondió la joven ante la petición del jarl al hirdman. —Además se cuidarme sola

No molesteís a Sigurd con eso, no merece la pena...  la aldea es segura y me preocupa más lo que pueda ocurrir a Gudrid.

La joven hablaba despacio y calmada, pues no quería que sus palabras pareciesen una ofensa hacia su progenitor. Sabía que lo más probable era que se negase, pero de todos modos, si su padre se negaba, al menos podría convencer a Sigurd para prácticar su técnica con la espada.

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27/05/2013, 12:25
Sigurd Ivarsson

"Haré como pide, Jarl" Sigurd parece ignorar el comentario de Jorunn. Es un soldado, y la jerarquía es la jerarquía. Sin embargo, habla serio y no con su tono desenfadado habitual. Parece que el trabajo de niñera no le agrada demasiado.

"Si me lo permite, señor, puede que los que hayan enviado a esos hombres estén aquí hoy. Quizá podamos hacer un par de preguntas discretamente aquí y allí"

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27/05/2013, 12:28
Hrolf Knudsson

El jarl asintió, pues pese a que todavía era joven Sigurd había mostrado ser un hombre capaz y de confianza.

-No quiero altercados durante la celebración así que deberéis ser discretos y sobretodo tened cuidado con lo que decís delante del enviado del rey Frodi-dijo con preocupación.

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27/05/2013, 13:38
Jorunn Hrolfsdöttir

Jorunn asintió levemente. Ya les había advertido a Sigurd y a ella por la mañana que debían cuidar sus palabras con los invitados mientras durase la celebración, pero no estaba de más que se lo recordaran... y menos después de lo que había pasado. De reojo miró al scalda, esperaba que fuese capaz de controlar la lengua si bebía y que no contase nada improcedente.

Pasando la mano por la recien lavada cara miró sus sucias ropas, con vetas rojas. Desde luego, aquello no parecían señales de una cacería, más bien de una carnicería, pero eran los gajes del combate cuerpo a cuerpo.

—No os preocupeís padre, voy a cambiarme antes de que me vea alguien— repuso la chica —no quisiera generar rumores ni asustar a mi hermana.

 

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27/05/2013, 17:49
Thorgrím Olavsson

A Thorgrím tampoco le gustan los altercados.- asintío a la palabras del Jarl mientras se acababa su segundo cuerno de cerveza.- Los ojos de este humilde guerrero estarán bien abiertos esta noche.

Con una reverencia al Jarl salió a cambiarse de ropa y prepararse para la noche.

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29/05/2013, 22:57
Hild Thorbjorndöttir

Viendo que todos se iban retirando poco a poco Hild decidió que también era hora de irse a su cabaña, también necesitaba cambiarse y sobre todo meditar. Miró a su amiga antes de despedirse, sabía que no le había hecho mucha gracia que su padre le hubiera puesto escolta pero Hild pensó que, dadas las circunstancias, sería lo mejor para ella.

- Con vuestro permiso Jarl Knudsson, yo también me voy a retirar. No estoy acostumbrada a verme involucrada en este tipo de refriegas y, sinceramente, quisiera descansar un poco. Además... me gustaría pesar en lo que ha sucedido.

Con una leve inclinación de cabeza se despidió del Jarl y del resto de compañeros que allí se encontraban. Una vez fuera, se dirigió a su cabaña.

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29/05/2013, 23:04
Hild Thorbjorndöttir
Sólo para el director

Una vez en su cabaña y después de haberse aseado y cambiado de ropa Hild se quedó delante del fuego que había encendido. Las danzantes llamas, además de proporcionarle un agradable calor a su cuerpo, le ayudaban a concentrarse. Sacó los huesos de la bolsita que siempre llevaba encima y, arrodillándose delante del hogar, los tiró al suelo esperando encontrar alguna pista que le ayudara a esclarecer lo que estaba pasando.

- Tiradas (1)

Notas de juego

9+8 = 17 + 6 (de la habilidad) = 23

Supera con creces el 14 de dificultad

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29/05/2013, 23:15
Hrolf Knudsson

El jarl asintió con la cabeza dando permiso a la mujer para que se marchase. 

-Bien, podeis marcharos también los demás. La fiesta dará comienzo esta noche cuando caiga el sol aunque mcuhos están ya festejando. Andad con cien ojos y tened cuidad-dijo al resto finalizando así la conversación.

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30/05/2013, 00:31
Jorunn Hrolfsdöttir

Aunque no la hacía gracia que la tratasen como a una niña, el rostro de la joven permaneció impasible.

Nos veremos en la cena— dijo inexpresiva mientras salía por la puerta unos segundos despues que la völva. Durante unos segundos sus miradas se cruzaron y Jorunn intuyó que su amiga estaba preocupada. ¿Acaso los dioses la habían dicho algo? Igual daba, lo que estuviese por pasar pasaría y ningún guardaespaldas podría impedirlo. Jorunn se despidió de su amiga y subió escaleras arriba hacia su cuarto. Obviamente allí encontraría algo de tranquilidad ya que ni el guardaespaldas más celoso entraría en el cuarto de una joven mientras esta se cambiaba.

Tardaré un rato Sigurd—dijo con ánimo de que el vigilante esperase hasta la cena para hacer sus labores—Si así lo deseaís podeís ir a cambiaros también...

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30/05/2013, 00:45
Jorunn Hrolfsdöttir

Tras cerrar la puerta a sus espaldas, Jorunn se echó en el camastro unos minutos. Aquello se estaba descontrolando y ella se sentía como un perro atado con una rígida cadena, tratando de alcanzar un plato de comida que estaba demasiado lejos. Dando un par de patadas a la paja de la cama se levantó y comenzó a cambiarse lentamente mientras observaba su herida. Klemet había hecho un buen trabajo y probablemente no la quedaría ninguna cicatriz. Aquello no era demasiado importante para ella ya que el lugar no era muy visible y no afectaría a un futuro matrimonio, pero aún así quería complacer a su padre. Y la chica tenía claro que una jovencita con cicatrices no era el mejor camino para hacerle feliz.

Una vez terminó de acicalarse, se acercó a la ventana para mirar el paisaje. Si hubiese tenido cuatro años menos habría tratado de escapar por allí para divertirse, pero ya no era ninguna niña traviesa. Ahora era una mujer y tenía que comportarse de acuerdo a su estatus.

Pues vaya...¿que hacer hasta la cena? Bueno, daré un paseo por el pueblo, escuchando a la gente. Es la mejor forma de enterarse de como está el panorama

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30/05/2013, 21:59
Yngwe Gilsursson
Sólo para el director

Yngwe, siempre solícito se retira dando un par de pasos atrás e inclinándose levemente alzando su mano derecha en una leve reverencia, siempre muy formal como si de un gran guerrero que se despide de su jefe se tratara. Una vez en su habitación se quita las ropas, están llenas de pequeñas espinas de zarza y barro y lo deja en un rincón para ponérselo mañana, pero no esta noche.  Ya se oye algo de jolgorio en el exterior y una ráfaga de aire entra por la ventana haciendo trepar el frío por su pierna haciéndole sentir bien. El frío sentaba bien.

Se frotó el cuerpo con una toalla húmeda.... ¡Esta era su noche!... se quitó el barro y se puso uno de sus mejores jubones. Unas ropas de artista de un verde oscuro, discretas, pero al verlas de cerca estaban cubiertas de runas de suerte y temas naturales. Unos pantalones normales y un calzado ligero, preveyendo que tal vez tuviera que corretear por el bosque detrás de una vikinga traviesa.

Sobre el cinturón de armas se puso una faja a modo decorativo, le ayudaría a disimular el rasguño, y una chaqueta larga cubriendo el jubón, cogiendo por último su lira, se asomó a la ventana - ¡¡Urduuur!! - Bramó exultante al ver que se preparaba una de las grandes hogueras cerca.

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31/05/2013, 15:17
Thorgrím Olavsson
Sólo para el director

El agua fresca se llevó los restos de sangre del cuerpo desnudo de Thorgrím. El día estaba saliendo redondo, había matado en honor a sus dioses, habia evitado que la gente del clan resultara herida de gravedad en el combate con los hirdmans y esta noche bebería y comería todo lo que pudiera.

Cuando estuvo seco volvió a ponerse su pantalón y anudó el cordón que lo sujetaba para después volver a colocarse las pieles sobre sus hombros desnudos.

Con la enorme hacha a dos manos dejada caer sobre uno de sus hombros se dirigió a la fiesta para tratar de ayudar en lo que pudiera o simplemente echar un trago en compañia.

Notas de juego

¿Porqué esto está como solo para el director? ¿Lo he puesto yo así o has sido tú? No me acuerdo.

He sido yo, lo he puesto solo para el director por que nadie a dicho que te seguía asi que estás tu solo XD

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31/05/2013, 16:52
Sigurd Ivarsson

"Soy un Hirdman, mi señora. La armadura que llevo es la mejor ropa de gala. Esperaré aquí abajo."

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31/05/2013, 17:08
Klemet Gandalvsson

Klemet se dio la vuelta y salió cuando el jarl hubo dispensado a todos. No le gustaban demasiado las fiestas pero era su deber honrar a los dioses y no podría faltar aquella noche. Pero hasta entonces se retiró para pensar sobre lo ocurrido sin que nadie lo molestase.

Notas de juego

PENEjotizado.

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02/06/2013, 20:05
Jorunn Hrolfsdöttir

Cuando Jorunn salió vio al hirdman en la misma posición en la que estaba cuando había cerrado la puerta. Ignorando ese hecho la joven comentó con tranquilidad.

—Voy a dar un paseo por el pueblo antes de que empiece la fiesta, Sigurd.—Jorunn sabía que no iba a librarse del hirdman, al fín y al cabo había dicho a su padre que la vigilase y era un hombre de palabra. No obstante se notaba que ninguno de los dos estaba contento con la tarea: a el no le gustaba hacer de niñera y a ella no la gustaba llevar guardaespaldas a todas horas.—Será mejor que estemos atentos a lo que se habla.

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03/06/2013, 10:53
Director

En comparación con el exterior atestado de gente y animales tu cabaña era un remanso de paz. Un lugar donde podías concentrarte sin prestar atención a lo que ocurría fuera. Tras meditar unos minutos lanzaste los huesos que rodaron en el suelo bajo el humo de las velas. Solo tuviste que mirarlos unos minutos para entender lo que decían. Hablaban de un traidor y de sangre. De un mal que ya se estaba cerniendo en torno a vosotros y que no podríais evitar. Aquello era lo que los huesos y los dioses te decían y no era un buen augurio y mucho menos en aquellas fechas...

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03/06/2013, 10:58
Director

Tras lavarte con el agua helada del río te volviste a colocar las ropas y regresaste a la aldea. Desde que habías despertado la aldea estaba llena de gente, hombres y mujeres y animales que iban por las calles de un lado a otro. Tantos que costaba abrirse paso entre ellos para subir la calle. Aún quedaban algunas horas para que empezase la fiesta cuando escuchaste al escalda gritar por una ventana.

¡¡Urduuur!!

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03/06/2013, 11:01
Director

Las calles estaban ahora llenas de gente. Hombres mujeres y animales iban de un lado para otro y aún quedaban unas horas para la fiesta. Todo se estaba preparando y algunos niños correteaban como locos luchando con palos de madera o persiguiendo gallinas. Te pareció ver no muy lejos a Thorgím, que parecía haberse limpiado en el agua helada del río la sangre y los restos del combate que había tenido lugar.

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03/06/2013, 11:03
Director

El pueblo estaba atestado de gente. Hombres, mujeres y animales iban de aquí para allá. Algunos niños correteaban como locos luchando con palos o persiguiendo algunas gallinas. Desde la mañana el pueblo se había llenado de gente, tanta que era difícil abrirse paso entre ellos. Jorunn intentó escuchar pero la charlas eran de todo tipo: la cosecha de aquel año, el ganado, la política de Dinamarca... pero ninguna conversación que fuera de interés para ellos. Aún quedaban unas horas para la fiesta cuando, mientras pasaban cerca de la puerta escucharon un cuerno...