¿Dónde está el límite de nuestras convicciones? ¿Qué nos lleva a dejar a un lado nuestra humanidad, qué es necesario para que el instinto se imponga a la razón y la bestia salga a flote? Sultünge, apenas un puñado de casas olvidadas en uno de los muchos páramos helados de los Yermos Gélidos. Allí es donde empieza la historia que llevara a un grupo variopinto de distintos personajes a hacerse estas preguntas... Y a desenterrar un secreto que siempre debió permanecer oculto.
Primera parte de una crónica de tres capítulos, ambientada en los Yermos Gélidos.
Partida privada, las plazas ya están asignadas, aunque si alguien está especialmente interesado que me mande un MP.
Partida +18
La tensión entre los clanes opuestos sale a relucir
Creo que nuestra naturaleza tiende hacia la bondad.
De como Thorir Espada de Hielo lo perdió todo.
Saga realiza una difícil confesión.
De como Bedelia rechazó un ascenso.
Thorir tiene una idea
Drunfo y Thorir liman sus diferencias.
Bedelia toma las riendas de su destino.
Resmit tiene un encontronazo
Saga persigue un rastro peculiar.
El destino de los Yormef se decide.
Hay quien no se da por vencido
Saga y Will se ponen al día.
Ashe pide un favor a los forasteros.
De lo que le ocurrió a Will tras separarse de Saga.
Resmit revive las penurias de una guardia en el norte