Partida Rol por web

A Partir de Ahora.

Capítulo VI

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12/06/2010, 21:59

Byron terminó su plática, o discusión, muy bien aún no estaba definido con el padre de las Hancock. Caminaba con paciencia hacia sus habitaciones, aunque estuvo a punto de perderla varias veces durante la "charla". Repasando estaba todo lo vivido desde que conoció a esas chicas, los peligros a los que se vió expuesto, las acciones tan distintas a las que él estaba acostumbrado a manejar desde que el destino lo empujó a esta suerte de locura de la gripe, el falso doctor, la pedida de auxilio de las hermanas, y el encuentro con Claire, la dulce y pequeña Claire.

Entonces la vió. Estaba parada afuera de la habitación de Lord Byron. En sus ojos habían lágrimas, o al menos eso parecía.

Claire lo miró, y lo vió acercarse hasta estar a pasos de ella...

Notas de juego

Lo paso aquí así retomamos en la escena correspondiente.

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13/06/2010, 01:50
Walter Benwick

El hombre estudió a la joven de cabellos claros y ojos azules que abrió la puerta. Su porte parecía ser el de una dama a toda norma, mas su forma de dirigirse hacia él, carecía de cierto protocolo que el hombre gustaba usar. Se preguntó si esta era una de las damas en cuestión al tiempo que la saludó, inclinando levemente su torso hacia adelante y haciendo un círculo con la mano. Mary Anne reconoció que el señor era un experto en los modales de la clase a la que ella, para su alegría o pesar, pertenecía.

-Soy el señor Walter Benwick, señorita. He venido aquí a responder el llamado de la señora Hancock, quien muy cortésmente me ha invitado. ¿Vos sois...?

El hombre miró a Mary Anne escrupulosamente y ni prestó la menor atención a nada más.

Luego, antes de que la chica pudiera responder, el hombre agregó:

- Perdonad ¿pero no es costumbre que un criado venga a atender la puerta?

Luego sonrío, como si no hubiera dicho nada malo, pero la sonrisa duró medio segundo y retomó su expresión de seriedad y decoro. Todo esto mientras los miraba, aún arriba de su córcel, como estudiando si era correcto el desmontar y si ésta, era efectivamente la dirección.

Notas de juego

No marco a Jean porque creo que él definitivamente no va a seguir, así que hasta que me diga lo contrario, prefiero dejarlo así, pero él se encuentra a tu lado, aunque con intenciones de irse.

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13/06/2010, 05:18
Ethan Byron

 http://www.stuarttownsend.org/Dorian.jpgEl caminar de Ethan por la casa de los Hancock resultaba sereno y sin contratiempos. Después de su plática con el Señor de aquellas propiedades su mente trabajaba, perclara, en la búsqueda de sus propios fines, aunque aún no daba nada por seguro debería ser paciente para considerar los acontecimientos venideros, entre ellos, el desenlace que habría de tener el deseo de Mary Ann.

  Sus zapatos de blanco y negro elegantes habían abandonado ya su color de barro, su traje, ahora impoluto hacían de su aspecto uno renovado aún cuando los temores de Byron, si es que tenía algo así y no sólo demonios bajo su lecho que le impedían profundizar sus sueños, permanecían muy presentes en su mente.

 Cuando detuvo su bastón, como un cetro en su diestra sobre el suelo que recrría hacia su habitación estaba a escasos pasos de la más joven de las Hancock, ante la pequeña y subestimada Claire.

  Es duro vivir con la imagen de la debilidad, con la desconfianza de todos y la compasión de otros muchos.

 Ave cantora encerrada en una jaula con sus puertas y ventanas que a pesar de estar abiertas...no suponen una opción.

  Si...lo entiendo...

 - Había logrado vislumbrar cosas hermosas...Claire. - Dijo con voz varonil, serena que se sesgaba por un viento de la mística más que penetrante en su tranquila conciencia y garganta. - Pero los diamantes que brotan de las piedras preciosas de tu rostro es un bien demasiado hermoso y valioso como para desprenderse así de él.

  Apenas necesitaría extender el brazo para alcanzarla, y así lo hizo dejando caer su apoyo mientras lo recogía con la siniestra. Su diestra recorrió la distancia entre él y su mejilla y apenas si llegó a rozarla, sus movimientos eran seguros y firmes, pero parecería temeroso de siquiera rozarla, como si pensase que algo tan bello pudiese quebrarse en mil pedazos.

 - Puedes entrar en la habitación si lo deseas. No es apropiado que te vean de este modo. - ¿Qué diría vuestro padre? ¿Vuestra hermana...? El porqué de esa lágrima sin duda puede ser el estallido de una guerra...

 Pensaba, reflexivo, pero siempre agradable a la par de severo. Le mostraba una leve sonrisa en su rostro habiendo terminado por abrir el mismo la puerta, permitiendole el paso en su propia casa. Nisiquiera necesitaba su permiso.

  Claire...¿qué voy a hacer contigo?

 Pensaba mientras sus ojos, sin un solo parpadeo, la escrutaban con intensidad como el que admira una obra de arte.

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13/06/2010, 19:52
Claire Windsor-Hancock

Verlo aparecer fue un alivio, podría haber aparecido cualquiera o peor aún, la mujer de padre pero en cambio, como por gracia divina, había sido él quien aparecía por el pasillo. Parecía tan distinto, una persona totalmente ajena a la de aquella noche pero al mismo tiempo tan familiar y tan querido. Clavé mi mirada azul en sus ojos pero fue sólo un instante, el instante que tardó en decirme aquellas palabras. Habría sonreído pero no tenía una razón para hacerlo y cuando abrió la puerta, ni siquiera lo pensé. Entré en ella sin temor, sin indecisión, sabía que estaba con un caballero, aquello no me preocupaba pero cuando escuché el cerrar de ésta, me volví hasta ella y puse el pasador para que nadie pudiera abrirla desde fuera; luego lo miré y bajé la vista unos instantes, no sabía cómo empezar y quizás creería que me había vuelto loca. De pronto decirle algo me parecía la peor idea, me sabía a presión pero aún así, ya estaba allí.

-Me iré esta misma noche de casa y quería que lo supieras por mí...-bajé la mirada apesadumbrada y me senté en la esquina de su cama, luego volví a levantar la mirada, la cobardía no podía ganarme en ese momento.-Esa loca mujer..., Darla, quiere casarme con no sé quién, a las dos en realidad y no lo consiento y aunque podría refugiarme en mi padre temo que padre va a ponerse de lado de ella pues sabe bien cómo convencerlo, tengo que hacer algo y...

Las lágrimas comenzaron a brotar con más fuerza, no me dejaban hablar y me hundí por completo durante unos instantes que me parecieron eternos. Luego lo volví a mirar, mi cabeza daba vueltas, me sentía cansada, enferma, las piernas me temblaban. Puse mis manos a ambos lados de mis muslos sobre el colchón y respiré profundo.

-No es un secreto lo que siento por ti pero no tienes que sentir lo mismo, no puedes guiarte por un sentimiento que creció en el medio del temor a la muerte, sólo dime que no sientes amor por mí y lo único que evitaría que me fuera, terminaría con tus palabras. Sé que serás honesto, desde que te conocí descubrí esa cualidad en ti y no temas lastimarme, lo entendería perfectamente...

Tenía la mirada fija en los ojos de Byron, tenía ganas de abrazarlo, de refugiarme en él pero también quería dejarle la libertad de elegir lo que fuera mejor para él, quería que fuera feliz aún cuando eso significara que no lo sería conmigo. Una palabra suya bastaría para levantarme, ir directa a mi alcoba y arreglar algunas cosas para finalmente marchar. Ya encontraría el modo de ganarme la vida pero no iba a quedarme a esperar que me casaran con un tipo por mero capricho de mi madrastra. Las lágrimas caían lentamente por mi rostro mientras esperaba su respuesta.

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14/06/2010, 09:44
Mary Ann Windsor-Hancock
Sólo para el director

Notas de juego

Perdona cielo, creí que estabamos en el jardín.

Si quieres lo cambias o te sigo el juego? Me da igual. Como tú prefieras.

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14/06/2010, 19:28

Notas de juego

Están en el jardín, en eso tienes razón, pero yo tomé como que el caballero se acerca al portón del jardín y que tú le abrías. Disculpa, es porque recién retomo la partida y puedo llegar a cometer estas equivocaciones. Hagamos de cuenta, eso que te dije. Y a todo esto ves que Jean se retira.

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14/06/2010, 19:47
Ethan Byron

 - Entiendo que quieras irte. E incluso...te insto a hacerlo.

 Dijo con total naturalidad y cierta crudeza mientras mantenía su mirada, severa, clavada en ella y el matiz de sus labios era el sesgo de una sonrisa que se antojaba peculiarmente cálida.

  Avanzó hacia ella ignorando la puerta cerrada, y aunque fuese más conveniente para las apariencias que en todo momento aquella puerta estuviese abierta mientras ella estaba allí, no le importaba en absoluto que se hubiese sellado...no importaba de que pudiesen acusarle, aún cuando su honor estuviese en juego primaba la seguridad de Claire y también que prevaleciese su derecho a opinar...

  ¿A dónde va a conducirnos este camino, Claire...mi pequeña Claire...?

  Mi diestra acaba en su mentón con la sutileza del jardinero fiel que cuida de un rosal, sin ignorar sus espinas sino pletórico a contemplar su fuerza y su bella peligrosidad cuando la tomas entre los dedos. Hago ademán, sutil, de alzarlo, esperando que lo haga por si sola y encuentre con sus ojos mi mirada.

 - Pero no hay motivos para que lo hagas en una huída precipitada. La voluntad de la Señora de Hancock, Darla, no tiene efecto alguno sobre las elecciones de dos corazones que han encontrado el amor.

 No, aquello no eran palabras entrenadas para transformar la situación en algo convenido, Ethan no era Jean Antoine, Byron siempre hablaba con palabras meditadas, siempre en el buen sentido, aún cuando en ocasiones estas palabras fueran veneno para los oídos que se cierran a la verdad que presenta el mundo.

 - Vuestro Padre me ha dado permiso para pedir vuestra mano, mas...coincidiendo con la celebración de la boda de una de las Cornwell he pensado que sería mejor posponer una celebración y que podais disfrutar de un tiempo para que...podamos conocernos más apropiadamente.

  Salir ahí fuera, incluso huyendo de un mal como el que os intenta dañar, podría ser precipitado...más después de lo vivido la última noche en la que nos encontramos.

 Acarició su mejilla suavemente con el torso de su diestra...

 - Había pensando que podríais venir conmigo, con permiso de vuestro padre, para conocer mi verdadero hogar, elegir un buen vestido, hacer algunas compras y pasear por las calles de la civilización.

 No iremos lejos, pocas han sido las veces que he ido a la india, y por el momento será mejor posponer un viaje hasta allí hasta que sea apropiado o tengas apetito para viajar a un lugar exótico y poco convencional.

 Sonrió vivaz pero siempre con la sutilidad que le caracterizaba.

 - Aunque no sea necesario hacerlo, iba a preguntaros si sentiais lo mismo que yo...y dado que cualquier sorpresa al respecto a quedado desvelada, dejaremos abierta la posibilidad que la petición de vuestra mano por mi parte, se haga de forma oficial cuando menos lo espereis.

 Trataba de estar en los detalles, podía estar segura de que le pediría la mano en matrimonio, no obstante, entendía bien que las mujeres disfrutan también con celebraciones, y también de las sorpresas.

 Si no se precipitaba era porque no tenía miedo ninguno y no quería que su unión, de producirse, pudiese siquiera quedar en parte eclipsada por la unión de otra pareja, menos de aquellas llamadas "de Cornwell" que no habían demostrado ser mucho más que mujeres de nobleza ya perdida...

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14/06/2010, 23:28
Claire Windsor-Hancock

Sus palabras llegaron a mí poco después que aquella caricia suave y ligera como un poco de viento fresco entrando por la ventana en otoño y volví mis celestes ojos a los suyos, fijándolos allí mientras le escuchaba hablar. Llevé mi mano a suya pero no la toqué, rápidamente la bajé. Sólo escuchándolo hablar entendía muchas cosas y mi corazón encontraba de nuevo una razón para pelear por lo que quería. No podía estar jugando, el profesor tenía que haberse equivocado y yo era muy feliz de que así fuera. Me puse de pie lentamente, barajando en mi mente las posibilidades que se nos presentaban, entonces si sujeté su mano apretándola contra mi mejilla, humedeciéndola con mis lágrimas.

-¡Dios, Byron! Yo no...

Era verdad que deseaba que me amara con vehemencia, era verdad que suponía que lo hacía pero sentir la seguridad era muy distinta, aunque él siempre parecía no perder el control y mis mejillas se enrojecieron pensando que quizás estaba actuando de forma desmesurada pero al poco rato, estaba nuevamente pensando lo que diría a continuación porque finalmente, él iba a pedir mi mano y podríamos hacer un bonito viaje y... Mi corazón casi se detiene.

-Tengo miedo, ella buscará el modo de separarnos...-solté su mano y aparté mis ojos brillosos y enamorados, volviendo la vista hacia la puerta.-Si me descubriera hablando contigo se volvería loca, loca... No quiero que te haga daño o a Mary Ann, por eso quería irme. Ella sabe que yo...-sentía que alguien podría estar pegando el oído a la puerta pero no había marcha atrás.-Ella sabe lo que siento por ti, por eso tiene prisa de casarme y sé que tiene mañas para convencer a mi padre... Pero si él te ha concedido el permiso-una sonrisa tierna, casi infantil se dibujó en mi rostro,-quizás yo tendría que hablar con él...

Me acerqué de nuevo a él y tomé su mano derecha con firmeza, sin dejar de mirarle a los ojos.

-Si hiciéramos ese viaje, ¿cuándo podríamos irnos?

Y entonces reparé en que la noticia era mucho más fuerte de lo que me estaba dando cuenta, si todo salía bien, terminaría casada con él, siendo la señora de Byron y yo lo tomaba como si fuera cualquier cosa; mi corazón comenzó a latir con fuerza y, respirar era casi un suplicio, mi cuerpo temblaba como una hoja de pies a cabeza y, mis palabras se volvieron un murmullo.

-He confesado más de lo que debería, yo... Casi desearía que no hubiera una boda, ya me entiendes... O no, no tienes por qué hacerlo-sonreí tontamente, intentando mantener las formas.-Yo sé que lo que voy a pedirte es casi injusto pero prométeme que si ella intenta algo, me sacarás de aquí sin importar nada más...

Le suplicaba con la mirada tan temblorosa como el resto de mi cuerpo.

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15/06/2010, 10:16
Mary Ann Windsor-Hancock
Sólo para el director

La joven se sintió algo extraña al sentirse tan observada pero amablemente le sonrió y le dijo su nombre: Soy Mary Ann Windsor-Hancock, encantada, Señor. Esa es la costumbre sin duda, pero si puedo ayudar a cabrear a mi señora madre, no dejo pasar la oportunidad.

Trató de evitar pensar en Jean, porque la sacaba de sus casillas y la dejaba con la boca abierta sin saber qué decir, o más bien la hacía decir cosas que no sabía por qué decía... En definitiva la hacía entrar en su juego, y siempre llevaba las de perder, con lo que se enrabiaba por dentro y salía su peor humor. Pero no pudo evitar esperar la respuesta del francés, que no llegó nunca pues éste se alejaba sin haberse despedido como correspondia. Aunque en otras circunstancias aquello la habría exasperado de nuevo, esta vez lo agradeció y pudo dedicarse por entero a la nueva compañía que se presentaba, deseando que fuera mucho más agradable que la anterior.

Notas de juego

^^

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16/06/2010, 05:25
Walter Benwick

El joven bajó del caballo con suma presteza y agilidad. Tomó al animal de las riendas y se adelantó a Mary Anne. Buscaba algo con la mirada, sus ojos se movían a derecha e izquierda hasta que finalmente ubicó un poste en donde atar su corcel.

-Supongo que ésto servirá hasta que el servicio lo lleve a los establos.- dijo y luego volvió a mirar a Mary Anne. La estudió de arriba a abajo, como quien mira a una pintura y la analiza con esmero. Luego volvió a mirar directamente a sus ojos y, con el mismo tono neutro, inquirió.

-Señorita, si sois tan amable de llevarme ante Lady Hancock, pues estoy aquí por su petición. Os agradezco la... - como si le costara la palabra, carrapeó y luego continuó -... molestia.

Hizo un asentimiento nuevamente con el torso hacia adelante, saludándo a Mary Anne por segunda vez y esperó que la joven aceptara su petición, aunque tenía toda la pinta de ser alguien a quien le disgusta esperar. Una de las empleados llegó entonces pronto y tomó el caballo del caballero y sin decir nada, lo condujo a los establos, sabiendo bien que esa era su tarea. Quizás Darla ya había visto venir al joven y lo había ordenado, quizás fue la fortuna que hizo que el criado estuviera justo ahí. Lo cierto es que Walter no dijo nada sobre el tema. Él estaba parado, cual estatua griega, esperando ser llevado ante la madrastra de las chicas.

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16/06/2010, 11:18
Mary Ann Windsor-Hancock

Mary Ann se inclinó en respuesta ante la reverencia del caballero, y dijo cortésmente y tan neutra como él: Por supuesto, acompañeme por favor.

Cuando se giró para poner rumbo a la entrada principal de la casa en busca de su odiada madrastra, hizo una mueca de disgusto. ¡Qué hombre tan estirado! pensó.

Justo al entrar le preguntó curiosa: ¿Viene desde muy lejos Señor Benwick? aunque no elevó demasiado la voz, fue más una pregunta para ella misma que para su acompañante.

Notas de juego

^^

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18/06/2010, 04:28
Walter Benwick

El caballero escuchó la inquisición de Mary Anne mientras le dirigía camino a su destino.

-He llegado desde lejos, sí. Es así mi señora que como mi padre, no hay sitio en los siete mares que me sea desconocido. Pero no quiero contaros más, la opinión que tengáis de mi persona prefiero que sea a partir de nuestro mutuo conocimiento.

Luego el hombre se calló y entró a la casa. Darla estaba sentada en uno de los sillones y se levantó a toda prisa a saludar al caballero.

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18/06/2010, 04:31
Mrs. Windsor-Hancock

-Oh, por dios ¡Por Dios que has crecido!!

La mujer se acercó a Walter y lo contempló, evidentemente admirada. Respecto a Mary Anne, apenas le prestó atención, lo cual en parte se podría decir que fue un alivio.

-Realmente es un honor. - La mujer se inclinó, saludándolo más formalmente y el joven volvió a repetir el gesto de inclinar su espalda hacia adelante y bajar un momento la cabeza.

-Señora...- dijo él.

-No, no, no... por favor Walter, me incomodas.

Luego, como dándose cuenta de que la chica estaba presente, la madrastra le dice:

-Mary Anne trae a tu hermana de inmediato. Gracias, cariño. ¿A qué es un encanto?- dijo la mujer mientras sus ojos escrutaban a Mary Anne dándole a entender que su cortesía se debía a otros motivos y que no tuviera la menor duda que lo de su hermana era una orden.

-¿Tu hermano ha venido, Walter?- preguntó mientras esperaba que la joven partiera a buscar a Claire lo antes posible.

Notas de juego

Si vas a buscar a Claire no posteés hacia ella, hasta que yo te diga, sólo escribe tu intención. Quizás no sea tan fácil encontrarla.

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18/06/2010, 09:29
Mary Ann Windsor-Hancock

Mary Ann se sorprendió de la amabilidad y hasta parecía que afecto con el que recibía a aquel hombre extraño para ella.

Ya está tramando algo, pensó. Y solo se inclinó levemente antes de partir en busca de su hermana, que quizás supiera algo más.

No dijo nada y se retiró sin protestar, raro en ella, pero la presencia de aquel hombre la hizo sentirse cohibida y respetuosa. Quizás incluso algo asustada... Era demasiado serio y frío.

Notas de juego

^^

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19/06/2010, 05:16

Mary Anne probó en todos lados buscar a su hermana; luego se le ocurrió la idea descabellada de que quizás estuviera en lo de Byron. La chica cruzó el parque, con permiso de los criados entró en la mansión y con una voz bastante impetuosa llamó a su hermana, aunque sin saber muy bien dónde buscar.

Claire estaba esperando la respuesta del caballero, con suma ansia cuando la voz de su hermana la volvió al presente. Se notaba un tono de alarma en la voz de Mary Anne que quería decir que realmente la necesitaba. Y aunque no hubiera querido obedecer a Darla para nada, lo cierto es que Mary Anne conocía lo suficiente a su madrastra como para entender qué había querido decir esa fría mirada cuando le dió la orden de traer a Claire.

-¡Claire, ¿Claire?Claaaire, hermana, estás aquí??

Notas de juego

Dejo que Byron te conteste pero después tienes que decidir ir hasta donde está tu hermana o hacer que ella soporte el castigo de no haberte encontrado. Igual tu hermana no tiene por qué saber en que habitación exactamente estabas, ella te está llamando desde el hall.

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22/06/2010, 03:43
Ethan Byron

- Parece que una vez más el destino sale a nuestro encuentro mucho antes de poder estar prevenidos.

 Dijo sin alterarse en absoluto el estoico Ethan que se separó sin hacerle ninguna clase de desprecio a Claire y sonriendo muy levemente ante el giro que tomaban los acontecimientos. Parte de los más importante en aquel hogar, la hermana de la joven y hermosa Claire venía en su busca y parecía venir perseguida por el mismisimo demonio, si no huía de algún mal...lo haría para intentar que ellos pudiesen escapar a tiempo.

  Quizás haya sido algo injusto contigo... Negó para si. ...No...todo lo contrario.

 ¿No había tratado de protegerlas a las dos? si, puede que sólo fuera eso.

 Miró a Claire y asintió con determinación.

 - Si deseas ir lejos, es posible que se pueda arreglar hoy mismo.

 Separó ambos brazos y se encogió muy sutilmente de hombros, siempre tratando de mantener una apariencia perfecta aunque natural.

 - Será mejor que seas tu misma la que abra a tu querida hermana. No hay problema en que entre en esta habitación.

 Le dijo, tendiendole la mano para que avanzase sin miedo, señalandole con la siniestra la puerta que ella misma había cuidado de que estuviese cerrada. Prefería que su querida hermana no le viese como un obstáculo, ni literalmente ni de forma figurada.

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22/06/2010, 04:56
Claire Windsor-Hancock

Lo miré con tranquilidad, me sequé el resto de las lágrimas que aún quedaban en mi rostro y me acerqué hasta la puerta para hacer lo que tenía que hacer.

-Mary... ¿Qué sucede?

Había abierto la puerta y llamado la atención de mi hermana para que viniera dónde nosotros. La vi desesperada, casi al borde de la histeria y no pude evitar abrazarla.

-Tranquila, lo que sea sólo dilo. Ethan es de confianza.

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22/06/2010, 13:36
Mary Ann Windsor-Hancock

- Algo trama, miró al caballero. Nuestra... ya sabes... algo trama y no me gusta nada. Me ordenó venir en tu busca y llevarte ahora mismo ante ella, como si se tratara de la mismisima Reina. Ha sido todo porque ha llegado un estirado caballero, al que ha dado la bienvenida como si fuera más hijo que nosotras. No me gusta Claire, temo por lo que esté tramando. Vayamos pronto que no se enfade.

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22/06/2010, 20:33
Claire Windsor-Hancock

Me volví a mirar a Ethan sabiendo que aquel no podía ser otro más que el hombre con el que ella había decidido casarme.

-Bien, vamos a allá y no temas. Es el hombre con el que quiere casarme-dije a mi hermana con una sonrisa.-Pero no lo hará, antes me mato.

Tomé su mano y me encaminé hacia afuera de la habitación de Byron, volví la mirada unos instantes, hubiera querido decirle que lo amaba pero era demasiado, sólo lo miré y volví a caminar con mi hermana. Estaba segura de que él no vendría.