Partida Rol por web

Los A17 tienen instauradas las tres leyes. Por lo que deberia de ser seguro hablar con ellos. Necesito respuestas. Quedate aqui. y te dio la pistola. Mientras se levantaba.

A17. Teniente Annalee Call cuerpo de Ingenieros del Ejercito Americano. ¿Proposito de su mision?

Asiento en silencio, tomando la pistola que Annalee me tiende y sujetándola con fuerza en mi mano. Cuando la veo dirigirse hacia los androides, permanezco atento a la conversación, sin mover ni un solo músculo, pero alerta por si mi compañera necesitase ayuda.

El sintetico se giro hacia Call cuando esta se descubrió. Se acerco hasta ella y se paro a un metro escaso. Podías ver que Call estaba inquieta.

Procesando. Su voz metálica sonaba casi comica con los ecos de la nave. Aunque mas bien pensándolo mejor parecía mas aterradora.Teniente Anales Call. Ingeniera. Ejercito de Tierra. Agregada a Weyland Yutani como Ingeniera militar hace tres años. Tres años destinada en Lv427. Nivel de autorización C. Insuficiente para este lugar...

El Androide habia accedido a su hoja de servicio por lo que tenia que tener contacto con una nave.

Eliminar.Y su brazo sintetico se lanzo con una velocidad pasmosa hacia el cuello de Call levantando a esta en el aire, mientras luchaba en vano por liberarse.

Aparentemente segura de sí misma, Call se dirige al inexpresivo androide en un tono de voz que denota cierto nerviosismo. Oculto en la distancia, observo el intercambio mientras apunto al ser inorgánico con la pistola, por si acaso. Apenas puedo oír lo que dicen, pero parece que la situación podrá resolverse sin violencia…

¡De repente, el androide lanza sus manos a toda velocidad hacia el cuello de Annalee y la agarra, estrangulándola con fuerza! El miedo se apodera de mí. Jamás había sido testigo de una agresión con una intención tan clara de matar. Sin embargo, a pesar de la fría y muerta expresión del androide, su ánimo asesino queda delatado claramente en su lenguaje corporal. Intento apuntar al ser artificial, sabiendo que es muy difícil derribar a uno de esos, pero Call, que comprensiblemente no deja de forcejear y debatirse, me lo pone muy difícil.

Y entonces, se me ocurre una idea.

Con toda la rapidez de la que soy capaz, activo mi dispositivo de pirateo y empiezo a teclear comandos, buscando la extensión del receptor del androide para controlar su sistema. En circunstancias normales no sería difícil, pero tengo un tiempo muy escaso para hacerlo. Pero lo que tengo claro es que no voy a dejar morir a Call.

«¡Vamos, Annalee, aguanta!», pienso, mientras exprimo al máximo mis conocimientos y mi rapidez de pensamiento para piratear al robot.

El Androide solto a Call nada mas notar tu intento de pirateo. La empujo varios metros de un golpe y se lanzo a por ti en una rapida carrera

«¡Joder!».

No puedo evitar sobrecogerme cuando veo que el A-17 arroja a Call por los aires y empieza a correr en pos de mí. Creía que esas cosas eran lentas, pero veo que son capaces de moverse a gran velocidad cuando la integridad de su sistema se ve comprometida. No puedo dejar que el miedo me distraiga. A toda prisa, sudando, sigo tecleando comandos en la consola de mi dispositivo e introduciéndolos. La buena noticia es que he llegado al receptor de esa cosa. La mala es que no va a dejar que ande trasteando en su programación.

¡Es ahora o nunca! Si alguna vez voy a necesitar suerte, ¡por favor, que sea ya!

El Androide estiro su mano para agarrarte del cuelo deteniendose a un par de escasos. Escasisimos centimetros de tu cuello.

—¡Eso es, hijo de puta! ¡Ahora eres mío! —exclamo, sin poder contener mi euforia al comprobar que he logrado salvar nuestras vidas. Sin embargo, mi alegría solo dura un instante cuando recuerdo el golpe que acaba de llevarse Call. Corro hacia ella, preocupado—. ¡Annalee! ¿Estás bien? ¿Te duele algo? —pregunto en un tono de voz moderado, intentando mantener la calma para no agitar a la ingeniera más de lo necesario mientras me agacho junto a ella y compruebo que esté bien—. No vuelvas a hacer eso, por favor. Aquí están pasando cosas muy raras, y no sabemos cómo están programados esos tíos ni qué protocolos de seguridad tienen implantados. Por lo que parece, se han convertido en máquinas homicidas... Así que, por favor, ten cuidado. No quiero que te pase nada...

Me incorporo y miro a mi alrededor, a las lóbregas profundidades de estos túneles que parecen las macabras entrañas de un ser muerto. No puedo evitar arrugar la nariz con disgusto.

—¿Por qué hay androides aquí si, en teoría, Weyland-Yutani no sabe que este sitio existe? Si mantiene la existencia de esta nave en secreto, significa que todo lo que te conté anoche en el comedor es real... La Compañía sabe que están desapareciendo personas y lo oculta deliberadamente, y es más... Esta nave tiene algo que ver con todo eso.

Me doy la vuelta para asegurarme de que nuestro nuevo amiguito de plástico no hace ninguna tontería, al tiempo que voy afinando nuevos parámetros de obediencia. Al menos tenemos un guardaespaldas, y parece bastante fuerte...

—En todo caso ya no tenemos que preocuparnos por el calvito. Y dado que, al menos por ahora, volver afuera no es una opción, yo sugeriría seguir adelante, a ver qué narices está pasando aquí. —Y añado—: Me alegro de que estés bien.

El Androide ni se inmuto a tus insultos.  Se quedo parado esperando nuevas ordenes.

Cuando te acercaste corriendo a Call estaba sentada tosiendo. Se llevaba la mano derecha a la cabeza en la cual parecía tener una herida que sangraba ligeramente.

Estoy…bien…creo. Suspiro. Joder no me puedo creer que no tengas los protocolos de seguridad. Son nuestros son de Weyland Yutani.

Se giro para mirar al Androide y luego a ti.

Gracias si no es por ti no lo cuento. Y te apretó la mano. Creo que seria un buen momento para hacerle unas cuantas preguntas. ¿No? Vete preguntando en lo que yo descanso un segundo.

Asiento ante las palabras de Call, y me doy la vuelta hacia el inexpresivo y espeluznante androide. Después de los desbloqueos que he realizado en su sistema, debería responder a mis preguntas sin ningún problema. Me dirijo a él como si fuese un alto mando acreditado de Weyland-Yutani.

—A-17, necesito que me recuerdes qué es este lugar en el que estamos, y qué operaciones estamos llevando a cabo aquí. También quiero saber cuántas personas y androides hay en esta... «instalación», cuáles son los potocolos de seguridad, qué peligros hay en este sitio. —Frunzo el ceño—. Y sobre todo, por que la colonia Hadley's Hope no sabe nada de este lugar, y qué ha sucedido con los colonos desaparecidos.

Me mantengo a la espera de que el blancuzco hombre artificial responda a mis cuestiones.

Lv-427. Nave desconocida. Operación de búsqueda y análisis de nivel 10.

Descontando a los presentes cero seres humanos. Dos Androides A-17 contando a esta unidad. 

Protocolos de seguridad Orden especial 937. Peligros desconocidos aplicar máxima cautela.

Dentro de la Colonia de Hadley´s Hope nadie con nivel 10. Desconozco situación de Colonos desaparecidos.

El Androide habia contestado de la manera mas directa y lógica posible. A pesar de que eso dejaba alguna preguntas en el aire.

Call te miro preocupada.

Nivel diez. No sé exactamente lo que eso significa, pero puedo imaginármelo: la Compañía se ha encontrado con esta nave en Acheron y no sabe muy bien qué hacer al respecto, y por eso ha iniciado una investigación secreta de la misma. Sin embargo, me parece innecesario y excesivo, por no decir inhumano, implantar la orden de matar a cualquiera que venga aquí, pues no es tan difícil encontrar esta nave por casualidad, como nos ha sucedido a Annalee y a mí. Por qué querrán mantener todo esto en secreto es algo que desconozco, pero no me da nada de buena espina.

Y de repente, como venida de ninguna parte, se me ocurre otra pregunta que podría resultar absurda, pero la hago igualmente:

—¿Hay otros seres vivos presentes en la nave? Hace un rato hemos recibido una señal que provenía de aquí. ¿Sabes quién, o qué, ha emitido la señal?

Hay tres mil setecientas cincuenta y dos formas de vida aqui. Contandoles a ustedes dos.

La señal procede de la nave. Baliza antigua activada en el momento del aterrizaje de la nave. Momento desconocido.

Al oír el recuento de seres vivos del androide, el corazón me da un vuelco. Es evidente que la cifra ha pasado un filtro que no tiene en cuenta bacterias o microorganismos, lo que quiere decir que en esta nave hay casi cuatro mil organismos vivos no humanos. Y esto me produce tanto temor como ira. En todos los informes acerca de Acheron que leí en la Tierra, no se mencionaba ninguna especie indígena del planeta. Esto confirma aún más el hecho de que la Compañía está metida en algo muy oscuro y que mantiene oculto no solo de la colonia Hadley's Hope, sino de toda la humanidad.

—¡Joder...! —exclamo sin poder evitarlo—. ¿Has oído, Annalee? Casi cuatro mil seres vivos. ¿Qué coño pasa aquí? ¿Tú sabes algo de todo esto? —pregunto, aunque sin ningún tono acusador—. ¿Has oído algún rumor, o tienes alguna pista de qué está haciendo Weyland-Yutani en este planeta?

La cabeza me da vueltas. Cuatro mil seres vivos... ¿Extraterrestres? Y en caso de que así sea, ¿serán peligrosos?

—Dios, Call... No tengo ni idea de qué hacer. ¿Salimos ahí afuera y nos arriesgamos a encontrarnos con ese grupo militar... o seguimos investigando esta nave? Empiezo a pensar que quizá la tropa cuya retransmisión interceptamos no fuese enemiga. Quizá hayan venido precisamente a investigar lo que la Compañía está haciendo aquí...

Call se incorporo y fue hasta a ti. No creia lo que estaba pasando.

Joder no puede ser cierto. No es posible. Cuando la preguntaste si sabia algo nego con la cabeza. Ni idea. Para mi esto no era otra cosa que un destino de mierda.

Pero la jodida compañia tiene que saberlo. Eso explica este despliegue . Creo que tenemos que seguir investigando.

Se puso en pie.

Venga vamos. Tenemos que averiguar mas. Luego volveremos a la Colonia y hablaremos con Al. Puede que sea el Supervisor pero es un buen tipo. El sabra que hacer.

Vamos. Y se puso en marcha

Fuisteis avanzando por el corredor hasta llegar a un sitio que ni en vuestras mas oscuras pesadillas hubierais imaginado.

Parecia una especia de ser vivo. Puede que el piloto de la nave. Pero era enorme. De unos dos metros y medio. 

Habian colocado escaleras a alrrededor para poder seguir a otro nivel. Call te miro alarmada.

Mis ojos están a punto de salirse de sus órbitas cuando veo lo que hay en el centro de la gran sala a la que llegamos. El cadáver fosilizado de una inmensa criatura, vagamente humanoide, descansa recostado en un asiento, frente a lo que parece una especie de telescopio gigantesco. A medida que nos acercamos, podemos observar que el pecho del ser, claramente alienígena, está reventado desde dentro. Miro a Call, con un oscuro presentimiento reflejándose en mis ojos.

—Nunca había visto nada parecido… —mascullo, intimidado ante la escala y la importancia de lo que estamos descubriendo—. La colonia tiene que saber esto.

Me giro sobre mis talones para encarar a nuestro escolta robótico.

—¿Qué es esa criatura y por qué tiene el pecho destrozado? —pregunto, comprensiblemente alterado por la desconcertante visión del monstruo fosilizado y preguntándome si acaso no habrá tres mil y pico gigantes como ese escondidos en algún sitio de esta inmensa nave. Luego, me giro hacia las escaleras metálicas que ascienden hacia una sección que queda fuera de la vista—. ¿Y qué hay por allí?

Tanto tu como Call os quedasteis impresionados por lo que estabais viendo. Un autentico Alienigena. Un ser de otro mundo. Con una vida , objetivos y metas que no podíais imaginar. Pero ahí estaba delante vuestro.

Yo tampoco. Acertó a decir Call. Sin duda tenemos que avisarlos.

El Androide A-17 os miro cuando le preguntaste.

Es el Piloto de la nave. Al parecer lleva muerto mas de cinco mil años. Aunque no hemos podido datarlo con exactitud. Lo desconocemos. Es posible que sea el resultado de un accidente o incluso una especie de forma de suicidio al verse solo y aislado.

Por alli se extiendes corredores que no han podido ser catalogados. Por ahi abajo esta la bodega de carga que hemos llamado cuatro. Aun tiene energía.

Era un lugar enorme casi parecia una caverna. Casi toda ella estaba apagada salvo una parte la cual parecia tener un manto azul.

Al llegar abajo visteis lo que parecian miles de huevos. 

Dios mio. Es increible. ¿Seran estas las formas de vida que dijo el androide?

Call se asomo por el agujero que parecía una escalera.

Creo que podríamos echar un vistazo.

Empezasteis a escuchar pasos que venían hacia vosotros. Parecía que el otro sintético venia hacia aquí.

Call miro al sintético.

A-17 líbrate de tu homologo. Y no le digas que estamos aquí. Nosotros vamos a la zona de carga. Después ven a buscarnos. Vamos Faisal deprisa.

Fuisteis bajando por las escaleras hasta llegas a una enorme bodega de carga.