Partida Rol por web

El virus esquivo tu ataque por poco. Y volvió a atacar el. El enfrentamiento iba a ser mas duro de lo que habéis supuesto en un primer momento.

El combate hubiera sido demasiado rapido para que un humano normal lo siguiera. Pero tu no lo eras ni por asomo.

Bueno no lo escuche bien la verdad. Ademas pensaba que pedirlas permiso. Pero bueno ya te he perdonado por ello. O al menos no te matare. jajajaja.

Rita saco una linterna y la encendio. 

Suspiro cuando volviste a preguntar.

El ver morir a toda mi unidad a mano de los Scavengers. Ver como los destriparon. Y a pesar de matarlos ver como seguían viniendo una y otra vez. Al final me hirieron y me capturaron. Se lo pasaron en grande por la noche. Y cuando se quedaron dormidos logre liberarme y matarlos a todos. Y no fue ni rápido ni poco doloroso para ellos...

Mi ataque fue desechado por la adaptabilidad del virus. Era un programa que evoluciona en respuesta a las exigencias de su rival. Su diseño es amor a primera vista para un ser superior como yo. Un humano jamás podría entenderlo, es cómo explicarle la relatividad a un simio.

Luego intento defenderme del contra ataque del virus pero en esta ocasión fallo… ¿Cómo será? Es la primera vez que fallo. Incluso esto es una intriga…

Los códigos de ataque y defensa iban fluyendo entre vosotros dos.

Ataques defensas y mas ataques. Ni siquiera Cassidy quien para ser humano era un genio de la informática podría seguir el combate. Millones de códigos circulando a velocidades imposibles de calcular para un cerebro humano. Hasta que llego algo que no pensabas que seria posible.

Fallaste. Habías fallado. Algo que pensabas que no seria posible. Por que al fin y al cabo. Eras perfecto. O eso se suponía.

Estabas siguiendo el ``combate´´entre David y el virus desde la terminal del Ordenador central. Pero todo lo que se estaba desarrollando iba a velocidad de vértigo. De hecho no podías seguirlo. Una incesante marea de código ocupaba todo.

Podias averiguar quien era cada uno con cierta dificultad. Y por lo que veias aunque el Codigo de David era mas rápido no estaba consiguiendo imponerse al del virus que aunque mas anticuado era muy muy adaptable a todo tipo de situaciones.

El daño llegó en forma de corrupción de datos en la línea de código secundaria, la que abarca los subprocesos. Al final no fue nada serio pero el daño allí estaba y tardaría bastante en ser revertido, eso sí, luego de salir del entorno virtual.

Nuevamente ataco con énfasis pero no consigo aumentar la fuerza del mismo. ¿Será que debo cambiar la forma y la táctica? Es un entorno virtual, tal vez debería amoldarme a él.

- ¿Permiso? - preguntó justo después de haber intentado hacer algo en la "batalla" que tenía el sintético con el virus, sin éxito. - Pensé que eran de la nave. ¿Pediste tu permiso para beberte la leche, el zumo, o lo que quiera que bebieses? - preguntó con sorna. - De todos modos ya te dije que lo sentía. Te lo compensaré.

Pero entonces cambió el tono del discurso y cesaron las bromas.

- Vaya, no lo sabía - repuso.

Era el eterno calvario del marine superviviente de una masacre. Depresión, sensación de culpa... y los que aguantaban se volvían serios, taciturnos y con falta de apego por los demás por miedo... como Rita. No quiso preguntar acerca de lo que había sido "pasárselo en grande"

- Supongo que aquello - dijo refiriéndose a su venganza - te proporcionaría una paz más bien efímera. No soy un jodido psicólogo pero creo que eso acaba superándose... con el tiempo.

El virus logro esquivar tu ataque y volvió a la carga de una forma que no esperabas del todo. Intento invadirte usando su propio código fuente.

Lo cual le exponía bastante. Pero si tenia éxito seria la mejor forma que tenia de vencerte pues podría acabar controlandote.

Te miro divertida cuando dijiste que se lo compensarias.

Mas te vale.

Cuando os pusisteis a hablar de su cambio de humor se volvió a poner seria.

​La venganza es lo único que me queda ahora. El poder infligir una pequeña parte del dolor que me infringieron a mi.

Lo superare cuando el ultimo de esos hijos de puta este muerto.

Su cara se relajo un poco.

Pero no quiero seguir hablando de eso. ¿Y tu? ¿Cual es tu historia?

Nuevamente logre detener su intrusión a mi código pero la próxima vez podría ser fatal. Si tan solo lograse encontrar otra forma de atacar al virus. En cada intento la probabilidad se reduce porque el virus aprende…

Podría llegar a insinuar que el programa se encuentra en fase de autoconocimiento. Debo detenerlo antes que suceda…

Si daño el entorno virtual, la estructura del núcleo entonces no tendrá ningún sitio donde refugiarse.

Pudiste esquivar el mortal ataque del virus. Pero ahora ibas a intentar otra cosa. Era peligrosa pero sin riesgo no habia victoria posible.

Tu ataque comenzó y por ahora parecía funcionar.

El virus no contraataca. Mi estrategia parece funcionar pero no cederé en mis intenciones aunque solo lamento no utilizar toda mi fuerza de procesamiento para atacar, por lo tanto reservaré algo para la defensa en caso que el virus intente escapar…

No sé cómo lo hará porque el humano desconecto todas las estaciones del núcleo…

- Oye - dijo, - echa el freno que sólo son unos cereales... - sonrió.

Asintió cuando mencionó lo de la venganza. Él había trabajado mucho con información scavenger sensible y sabía lo que eran capaces de hacer. Por eso decidió abandonar el tema.

- ¿Mi historia? Bueno, no es nada del otro mundo - explicó. - Tras estudiar ingeniería informática me alisté en los marines. Se puede decir que es vocacional - sonrió de nuevo, como si se excusase o estuviese mal visto ser voluntario. - He trabajado contra scavengers y también me repugnan.

Sus ojos volvieron a la pantalla y terminaron de teclear las últimas instrucciones.

Y el virus por fin habia desaparecido.

Jajaja. Antiguamente se mataba por un cordero. comento en broma.

Bueno si te repugnan y los quieres muertos nos llevaremos bien. Eres un frikicillo bastante agradable la verdad.

- ¿Frikicillo? - preguntó dedicándole una mirada intentando parecer ofendido. - Pero, ¿tú te has visto? - sonrió. - Si pareces una mezcla de... de...

Se quedó pensando cuál podría ser una buena respuesta pero no caía en ninguna en aquel momento.

- Bueno, que deberías sonreír más - dijo. - Todo eso de la venganza está muy bien, y hasta lo apoyo y lo fomento - aclaró mientras se ponía en pie y se dirigía a ella - pero no puede guiar el resto de tu vida. Tienes que saber desconectar - añadió. - Y sonreír un poco.

Y alzó sus manos cogiéndole los carrillos con suavidad desplazando las comisuras para formar una sonrisa. Era eso o mancharle la cara de hollín.

- ¿Ves, mucho mejor?

En aquel momento un ruido de estática le hizo soltar a su presa la cara de la marine y centrarse en la radio. Era el sargento Hammer.

- Sigo en ello, señor - respondió. A punto estuvo de decir algo sarcástico como que estaba terminando el crucigrama o algo por el estilo pero se contuvo. ¿Qué pensaban? ¿Que se rascaba los huevos a propósito?

¡Perfecto! El virus desapareció aunque el código original tampoco sobrevivió. Lo único que permanece el el sistema de soporte contra fallas y apenas sirve para mantener encendido el núcleo.

Ahora voy a reemplazar lo poco que hay del núcleo original y llenar los huecos con mi código binario y la copia de mis subrutinas.

Luego cuando reinicie la computadora todo parecerá en orden a simple vista pero yo me encontrare tras bambalinas dirigiendo toda la nave. Creo que será lo más seguro para evitar que los humanos se maten entre si con sus incoherencias de primates.