Partida Rol por web

Los fantasmas se volvían más sólidos, y los sólidos pueden cortarse, lo que agradaba a Mako. Para ver si aún eran translúcidos Mako frotó sus mangas, llenando la estancia con la luz de sus brazaletes, mucho más fiable que la de la antorcha, que él prefería usar como garrote, y además le quedaban ambas manos libres. La roca lanzada parecía no haber provocado ninguna consecuencia, hasta que una risa respondió desde las profundidades.

-...uhahahaha...

-je! (sonríe Mako)

-...uhahahahaAHAHAHA...

-jejejeje (Mako se contagia de la risa)

-...AUHAUHAUHAAAAHAHAHAAHHAAAAAAGHH...

-¡jajajaJAJAJAJAAAAAAAA! ¡qué cashondo er tío! Amo pallá que hay fiehta. (dice a Kalista) Por fin un zitio con marcha y buenrro.

Pero el sonido de un filo metálico crece al fondo de la estancia. Algo se acerca rápidamente y no trae buenas intenciones. A Mako se le eriza el pelo de encima de la raja del culo al ponerse alerta (no tiene sentido arácnido pero el sentido de la rabadilla es casi igual de  eficaz)

- ¡eshaté a un lao! ¡cantacantapajarito! (con la capa tan entrenada ya solo necesita un estímulo leve para ponerse en modo ON)

Mako aprovecha la ausencia de gravedad para esquivar el disco volador.

- ¡AGARRA LA CAPA!

No era demasiado agradable el lugar y menos si una risa extraña surgía del mismo corazón de la caverna haciendo eco en todo lo que nos rodeaba de manera extraña, sentí un mal presentimiento y me tomé la poción que llevaba encima, quizás fuese útil no tener la herida por ahora por si debía salir corriendo, no me gustaban nada los fantasmas que solo se dedicaban a reírse.

Por si no tuviese poco con la risa malvada, Mako comenzó a acompañar las risas malvadas con las propias suyas además de alegar que había fiesta. -No creo que sea exactamente un fiesta de disfraces donde te sirvan algo de be...- paré en silencio cuando un sonido metálico recorrió el lugar a gran velocidad dejando un rayo de luz de algo que se acercaba a toda velocidad, giré mi cabeza buscando como poder esquivar la trampa que se había activado pero no solo me encontré un una bella cuchilla giratoria sino que los fantasmas empezaban a lanzarse sobre nosotros, dos cosas simultáneas que hacer, parece que la acción comenzaba de golpe. 

Tenía que pensar rápido, pero escuché a Mako gritar unas palabras raras y comenzar a levitar a la vez que me gritaba que me agarrase a la capa, inspiré profundamente antes de moverme, tenía que esquivar la trampa lo mejor que pudiese intentado ayudarme de Mako o sino iba a ser cortada por la mitad

Mako y Kalista reaccionaron con rapidez a lo que sucedía, intentando esquivar inmediatamente las navajas de acero. Kalista logró hacerlo sin ningún problema, sin embargo, Mako vió como actuaba demasiado lento, sintiendo como la cuchilla pasaba por centímetros de su cabeza, llevándose su casco hecho trizas, conjunto a la mayor parte de pelo que tenía.

Justo después de eso, vieron como de todas las máquinas de tortura del lugar comenzaron a salir fantasmas horribles, de diversas personas, desde adultos hasta niños. Era una visión horrible, eran al menos una docena, y se lanzaron inmediatamente todos sobre ellos con intenciones de atravesarlos de forma horrible. La escena no podía ser más oscura.

Como detalle lograron lograr que las vestimentas y detalles de todas las personas se notaban bastante antiguas…casi podrían apostar que pertenecerían a las personas que antes vivían en el pueblo, pero otra cosa que llamaba la atención es que muchos de estos fantasmas parecían ser de antiguos aventureros…algunos se veían de forma bastante contemporánea.

on como de todas las máquinas de tortura del lugar comenzaron a salir fantasmas horribles, de diversas personas, desde adultos hasta niños. Era una visión horrible, eran al menos una docena, y se lanzaron inmediatamente todos sobre ellos con intenciones de atravesarlos de forma horrible. La escena no podía ser más oscura. Ahora solo quedaba batallar y vencer.

-¡PLONK!  (la cuchilla golpea en el casco de Mako, que  sale despedido y le aturde durante unos segundos dejándole un pitido en los oídos. La figura pivota sobre sí misma en el aire, resulta ridículo ahí girando con las manos en pose de volar como si de unas alitas pequeñas se trataran, moviéndolas arriba y abajo, la mandíbula entreabierta y los ojos en blanco, con la cabeza echada hacia atras)

- ...POchRÁS chALí A VOLá. 

CUANcho PAched PO mi CAchA, 

mE VENdRÁch A VIchITá, 

ME AchOMaRÉ A la Ven...

Kalista le grita algo pero Mako no puede oír más que un "piiiiiiiiiiiiiiiii". Hasta que vuelve en sí. Entonces se fija en los fantasmas que se acercan, se lleva la mano atrás para tomar el arco y se percata que el casco ha volado y que le duele la frente.

- Endevé, la ottia puta, otra veh er cahco deh agüelo a tomá por culo. Ya no me lo dejará máh.  Pohlo menos me ha librao de un güen gorpe, doh veceh. Pero como no lo encuentre nadie me libra der garrotazo que me va a mete er papa por perdé la reliquia familiá. Amo a encarganno de loh mamoneh ehto y ahora recojo er cahco. Zelo tendré que llevá a Karl Glash, er enano herrero, a que le dé otro repazo de shapa y pintura.

Mako toma una flecha tras otra y las lanza contra los fantasmas mientras se mantiene a distancia flotando sobre el suelo.

- ¡Toma, toma ioputa! ¡toma tú! ¿quiereh máh? ¡Po pilla! Oh ziii, tengo pa to uhtedeh, y no me pongah carusa, que por zé niño no ereh menoh cabrón. 

Las flechas vuelan por todos lados, algunas aciertan y otras no pero los fantasmas se acercan y Mako se decide a tomar la espada y empezar a rebanar rodajas de mortadela Miky al grito de guerra de su tribu.

-¡MADAFACAAAAAAAAAAAS, AR TURROOOOOOOOOOOÓN!

La verdad es que tuve bastante suerte con esta trampa, pude esquivarla aunque me asusté con ello y también me temí que el pobre Mako hubiese sido rebanado cuando vi su casco caer al suelo pero al buscarlo me dí cuenta que estaba bien, bueno más o menos bien aunque empezó a balbucear algunas cosas estando semi-inconsciente. Al menos ambos habíamos sobrevivido a lo que había ocurrido pero ese era el menor de nuestros problemas actuales, de las diferentes máquinas de torturas empezaban a emerger diferentes fantasmas nada amistosos e incluso algunos de ellos bastantes "vivos".

Me seguía doliendo un poco la herida así que viendo lo que se venía encima no podía evitar preocuparme por mi estado general, seguramente no aguantaría toda la batalla así que era mejor ponerse algo mejor, saqué una poción de un tono rojizo y no demasiado buen aspecto, al tomarla pude corroborar su dudoso sabor aunque fue realmente revitalizante e incluso al herida que tenía en el pecho cicatrizó en pocos segundo, ahora podría pelear algo mejor.

Inspiré profundamente -¿Mako tienes algún plan?- antes de que me diese cuenta estaba lanzando flechas a todos los fantasmas sin pausa mientras les gritaba como si eso diera mayor fuerza a la flecha, -esta bien parece que nuestro plan es no tener plan- , tomé el escudo que antes me dio Mako y saqué desenvainé mi florete yo no tenía arco ni sabía magia así que solo me quedaba enfrentarlos desde donde me encontraba lo mejor que pudiese

Mako se prepara para usar una variedad de armas para enfrentar a los fantasmas, pero todas los atraviesan, sin ninguna efectividad. Parecía estar lejos de poder hacerles daño de la forma de la que estaba actuando, y apenas cambió de armas, se vio rodeado de los fantasmas, quienes lo atacaron, llevando su armadura a no más que trozos de lo que antes lo protegería de cualquier ataque.

Kalista no estuvo en mejor opción. Se defendió como pudo con su florete, pero no logró hacer ningún daño a los enemigos, provocando que estos enemigos la atacaran directamente, y a pesar de su gran agilidad, vio como en un movimiento más rápido del esperado, uno de los fantasmas tomó su escudo y lo lanzó a la profunda oscuridad, perdiéndose allí. Solo quedaba ver de qué eran capaces ahora. ¿Lograrían enfrentar a aquellos fantasmas? ¿O sus gritos se unirían a coro con los de las fantasmagóricas figuras que había frente a ellos? Las cosas les pintaban muy mal, y podían sentir como una fuerza aún más oscura los miraba, en la oscuridad, a lo lejos, viendo como los héroes se enfrentarían al verdadero mal que había en aquél lugar.

Nada es eficaz contra los fantasmas, al menos nada físico, y a Mako la magia le da prurito. Las expectativas son muy negras, le indica su instinto, y estos enemigos no son tan fáciles de burlar como en el Hades, y allí se las gastaban pero que muy chungas. El sudor se empezó a enfriar  sobre la piel verde y los escalofríos recorrían la piel de Mako.

- Kali, ehto ehtá mu mal. A ehta jente no le hazen ná loh paloh y piedrah. Yo no entiendo ni jota de magia. Llámame cagao, pero creo que tenemoh que zalí por pata de aquí. (y tiende una mano a Kalista para sacarla de alli volando)