Partida Rol por web

Ahora es William el que lo mira ligeramente extrañado cuando se marcha. 

- Parecía especialmente nervioso... Aunque no consigo adivinar porqué. - Comenta sin mucho interés. - ¿No decías que venías mucho por aquí? 

Undine mira al dependiente extrañada, al cabo de unos segundos mirando como se iba vuelve su mirada a William con una leve sonrisa confusa por lo sucedido.

- Mi única teoría qes que creía que eras mi Pabot y al descubirir que eres un cliente humano más se ha avergonzado de su error. - Sonríe un poco más por aquello, aunque con cierta incomodidad.

- ¿Debería mostrarme más sociable y colocarme en una postura más natural, mi señora? - Dice con más neutralidad de lo habitual y la mirada pérdida en la nada. ¿Era eso también una broma? Costaba demasiado saberlo... 

Undine le mira un poco sorprendida, aunque divertida. No esperaba ver a William bromear sobre su propio parecido con un bot. Le haría efecto el delirio de la frustración y la falta de sueño.

- Me gusta como suena eso de "mi señora". - Dice pícara. - Pero no es necesario. Yo ya se que dentro de esa apariéncia se esconde el alma pasional de un artista. - Lo decía con sinceridad y orgullosa de ello mientras le sonreía con una preciosa sonrisa llena de dulzura. 

- Aunque si insistes tu señora no se negará un masaje en la espalda~ - Dice traviesa mientras le miraba a los ojos. Aunque ya sabía que la broma de William se quedaría allí y se termina riendo un poco divertida por sus propias palabras.

- Lo lamento, mi señora, no estoy programado para eso. - Dice sin mucho interés, tras eso mira su reloj y vuelve a mirar a Undine. No dice nada más, no parecía tener intención de sacar un tema de conversación él... Aunque nunca había sido demasiado hablador. 

La contestación de William la divierte y se ríe un poco, ya lo esperaba. Tras eso ella mira su dispositivo por si había algún mensaje de Fran y luego mira a su alrededor, observando la cafetería. Era agradable estar lejos después de tanto tiempo encerrada y ese lugar la tranquilizaba ya que lo relacionaba con sus quedadas con Fran.

Esperaba que no tardase mucho en llegar. Estaba más relajada y observa a William sin decir nada, con una leve sonrisa divertida de que estubiese allí. Nunca había pensado que podría estar allí con él. Como dos amigos que salen a tomar algo. Y mucho menos con la futura llegada de Fran para que se conociesen. Tenía curiosidad por ver como se llevarían.

Después de unos incómodos silenciosos minutos, al menos para Undine ya que a William no parecía afectarle demasiado, Fran por fin entra por la puerta. Ese día tenía el pelo recogido en una coleta y parecía contento por lo que al menos no iba a ser un drama cómo el día anterior. 

- ¡Blue! - Dice para llamar su atención. Y entonces se acerca y abraza a Undine de improvisto. - Me alegro que te hayas podido escapar, un descanso es justo lo que necesitabas. - La suelta, y entonces se fija en William. - Y tú debes de ser William, Blue me ha hablado mucho de ti. Un placer. - Le ofrece la mano para que se la estreche. 

Y entonces algo inesperado sucede. William se queda quieto en el sitio, con los brazos dónde estaban, mirando fijamente a Fran. Lo mira con mayor fijación que con la que miraba el vaso de agua. Sus ojos, parecían cargados de duda, cómo un animal atrapado... ¿Era confusión? ¿Era miedo? Undine no sabía determinarlo. Nunca había visto a William tan tenso.  

Fran, por su lado, simplemente le mira extrañado por aquel comportamiento, o mejor dicho, aquella falta de comportamiento. 

A Undine no le molestaba el siléncio de William. No había ido allí buscando una conversación. Era de esas personas que podía disfrutar del siléncio en compañia.

Al sentir el abrazo de Fran sonríe ampliamiente, feliz de poder estar junto a su amigo, lo necesitaba. Seguramente si no hubiese estado William allí le hubiese devuelto el abrazo aún más afectuosa. Pero no quería sobrecargar a Will con una escena empalagosa. Así que lo único que hace es apoyar su cabeza en Fran con su abrazo mientras le pasaba una mano por la cabeza.

Pero la reacción de William la sorprende, viendo que no cumplía un simple saludo formal. Le mira algo confusa. - Tranquilo Will, que no muerde. - Bromea para que se relajase un poco.

- Este es Francisco de Lince.- Le presenta con una dulce sonrisa.- Fran, para los amigos. 

La expresión de William cambia a una más alerta, cómo si se acabara de despertar de una hipnosis. De forma algo más torpe de lo que Undine estaba acostumbrada, extiende un tembloroso brazo. 

- S-si, claro, disculpa. Soy William Clermont, un placer. 

- El placer es todo mío, Will. - Dice Francisco mientras que le estrecha la mano efusivamente. - ¿Puedo llamarte Will? - Dice con una expresión de disculpa. William simplemente se encoge de hombros. - Genial. - Termina Fran, victorioso. 

Tras eso, Fran toma asiento al lado de Undine y le hace un gesto a unos de los PABOTs para que se acerque. Mientras tanto, Undine no le puede quitar el ojo de encima a William, y William parece que no le puede quitar el ojo de encima a su mano. Y entonces lo ve... ¿Era acaso posible? ¡William estaba sonrojado! No era cómo si cualquiera pudiera darse cuenta, claro, pero al menos Undine que conocía su color natural si que podía. 

Al ver aquello Undine sonrie traviesa. Vaya, vaya, vaya. Fran estaba hecho todo todo un seductor y sin siquiera proponérselo. William sería, sin duda, una mejor opción para su querido Lince que no ese quien fuese que lo tenía amargado y deprimido. Si hacía falta ella misma haría de celestina. 

- Te sienta muy bien la coleta. - Le dice sonriente a Fran. - Y te veo bastante feliz, ha pasado algo bueno?

Fran termina de pedir antes de contestarle a Undine. Cuando lo hace, se encoge de hombro. 

- Más bien... Se podría decir que no ha pasado nada malo. - Entonces parece inseguro respecto a decir algo, pero parece que se decide. - Pero hay una cosa que sin duda podría ser interesante. Se baraja la posibilidad de que sea uno de las encargados de la seguridad en cierta celebración. - Levanta y baja las cejas varias veces. 

Al escuchar aquello Undine le mira con los ojos abiertos llenos de ilusión.- De verdad!? - Pregunta emocionada. - Eso sería fantástico! - Se lanza a abrazarle feliz. Luego se aparta y le mira a los ojos.- Eso significaría que podríamos estar juntos en la fiesta, y podrías ver la actuación! - Sonríe feliz mientras intenaba serenarse un poco por la emoción.- Me sentiré aún más segura sabiendo que tu te encargarás de protegernos. 

- Bueno bueno. - Dice Fran, mientras que frena a Undine con un gesto de las manos. - Te recuerdo que al igual que tú, voy allí a trabajar. Pero si, me aseguraré de encontrar un hueco para ver tu actuación o para tomar algo. - El PABOT llega con la bebida de Fran y el mismo le da un trago antes de añadir. - Y no se si diría que te voy a proteger, estoy ahí para encargarme de que aquello que debe protegerte funciona de forma correcta. 

- Viene a ser mas o menos lo mismo. - Dice sonriendo burlona.- Prefiero verlo a mi modo.

Se calma un poco y da un pequeño sorbo a su infusión. - Pero es una notícia muy buena. Cuando pase la fiesta celebramos por los dos. - Sonrie y mira a William. - Invitaremos a William también, para que se relaje un poco. Tengo curiosidad por ver como te comportas cuando has bebido. - Le dice traviesa.

- Oh. - Dice Will al darse por aludido, que parecía perdido en sus pensamientos segundos antes. - Si, claro. Aunque yo no he sido invitado a la celebración... Tendréis que avisarme con antelación para que nos reunamos. - Entonces le da un sorbo a su café, cómo temeroso de que hablara de más. 

Fran asiente satisfecho mientras que le da otro sorbo a su bebida. 

- Guay. - Dice sonriente. Entonces vuelve a mirar a Undine. - Se que habéis venido a olvidaros del tema, pero... ¿Cómo va la canción? ¿Dónde os habéis atascado? - Mira alternativamente a Undine y a William, pero William no responde. 

Undine mira extrañada a Will cuando este dice que no está invitado, había abierto la boca para preguntar por ello cuando Fran había preguntado y centra su atención en él.

-Bueno, tenemos más o menos lo que queremos, pero nos falta encontrar algo que le de ese toque que lo convierta en algo verdaderamente especial. Algo que nunca se haya hecho para que la más alta nobleza vea que somos los mejores. - Mira a William y luego a Fran. - Nos falta un gran final.

Fran escucha con curiosidad las palabras de Undine, y cuando la misma termina sonríe de forma traviesa. 

- Vas a tener que darme más información, Blue. ¿O prefieres que sea una sorpresa?

- Pues para el espectáculo el escenário estará preparado de modo que parezca que bailo sobre el agua, o eso tenemos pensado, cuando me mueva crearé o das que se expandirán a mi alrededor. También tendremos unos dispositivos que haran flotar mi ropa y mi pelo como si estubiese dentro del agua.- Va narrando.

- Al principio queremos dedicarle la canción a Cele y a su lider, así que la primera canción será una épica história, una metáfora de la creación de la ciudad y lo que representa. Su fuerza, su poder. También su belleza y su amabilidad. Quiero que llene los corazones del público de orgullo. -Hace una pausa.

-Luego las canciones se mezclarán con bailes, aprovecharemos esos efectos para que sea aún más deslumbrante y hipnótico, haciendo que las ondas del agua que creo con mis movimientos se mezclen con el público, será precioso. - Dice emocionada con imaginárselo.- Pero nos hemos quedado ahí. No sabemos como terminar.- Hace una mueca, frustrada.