Partida Rol por web

Marqués mira a la tetona - Neh... Lah antenah son simpleh amplificadoreh o repetidoreh p'al caso... Lo que ehtá generando la señá probablemente se encuentre dentro de la furgo que tienen aparcá cerca de la base de una de lah torreh... En fin. El mérito de lo puedeh quedar tó, no hago ehto pa una puta condecoración, lo hago porque ehtoy hahta loh cojoneh y s'an carga'o a mah de un colega en el botellódromo, esoh cabroneh van a rebentar hoy- Le entrega los prismáticos al moro que quizás era el que más los iba a necesitar, cargó su escopeta y se acomodó la bandolera con las balas de la misma antes de empezar a correr al mismo ritmo que padilla, buscando lugares en los que emparapetarse y confiar en que el moro terrorista fuese tan buen tirador como había fardado.

Sacó la puntita de la lengua y disparó al primero para cubrirle.

Le dió en todo el pecho, destruyendo el chaleco, y le tiró al suelo con graves heridas. Inmediatamente, los GOES se pusieron en pie de guerra, y los de Preston se ocultaron tras la furgoneta.

El primero había caído, pero comenzaba el tiroteo. Su compañero se tiró cuerpo a tierra y les localizó avanzando. Disparó una ráfaga contra Padilla, y dos de las balas impactaron contra su chaleco, tirándole al suelo. El chaleco se había quedado pal arrastre, muy hecho mierda, pero las balas no habían atravesado.

No le quedó muy claro si se estaba tirando al suelo cuando empezaron los tiros o los tiros le tiraron al suelo. Pero joder, eso dolía y acojonaba muy mucho.

Enfiló el fusil y empezó a disparar a esos cabrones.

Marqués se emparapeta detrás de una piedra y lanza una mirada para intentar percatarse de la posición de los GOES. Al ver que impactan a Padilla, lo mira de reojo - ¿Tó bien, Padilla? ¿Te han traspasa'o el chaleco? - Pregunta al tiempo que sale para intentar dispararle a uno de los jodidos GOES que los están cociendo a tiros, llegando a alcanzarle pero por lo que ha podido ver, quizás no ha traspasado ni el chaleco.

"Imbecil" con que gusto se lo habría escupido a la cara al guapito ese. Meeeeeeeenos mal, empezó la ensalada de tiros y los polis cerraron la boca de una santa vez.
Chi y Pelayo se agacharon, ella se acercó a Alex y le susurró -Cubrenos-, despues hizo un gesto a su chico y, mientras estaban los unos y los otros entretenidos intentando matarse, ellos corrieron dando un rodeo por detrás de las lomas, con suerte llegarían a la furgoneta por detrás y ya se habrían cargado a los GOES

Asintió, y la siguió. Se iban a cagar aquellos cabrones. Con la capa puesta.

Los disparos de Padilla apenas tuvieron efecto. Rebotaron en el casco del tipo y uno le provocó una hematoma de cierta consideración al darle en el pecho. Había sido un impacto fuerte y lo hizo moverse un poco hacia atrás. Marqués acertó a otro cabrón, ahora con una herida más grave que le jodió la mano izquierda. Ya no podía sujetar bien el arma.

Marqués recibió un disparo, pero la bala no penetró. Eso si, le provocó un golpe serio y tendría un moratón de los que duelen. Pero entonces disparó Montañés. La Montaña. Apuntó a Padilla y una de las balas impactó directamente contra su cuello. Sintió que sangraba y que se ahogaba, que le faltaba el aire.

El turco dió dos tiros, pero aquellos cabrones se sabían parapetar bien. Solo mató al rezagado de Preston, un don nadie que terminó con el pecho pasado por un boquete enorme.

Se deslizaron por detrás de ellos como una sombra. Lo que hacían hasta molaba y todo. Sonaban tiros y balas por todas partes, pero ellos aparecieron reptando al otro lado. Por detrás de la furgoneta. Había un goe que disparaba contra los policías.

El "friki gordo" le cayó encima y le apuñaló el brazo contra el suelo. El cerdo gritó. Ahora le tocaba a su churri rematarlo.

A Chi se le había puesto una mala leche del copón, enadrenalinada al borde del Red Out (aunque sabía que era por causas distintas) mas que correr voló, en un santiamen se puso a la altura de los GOES. Sin pensar aceleró, desenfundó la katana y bajo la luz de la luna, como una mariposa de acero saltó y descendió sobre el cuello del agente mas cercano

se acabó... así acaba tó ¿no?...

El dolor le hizo retorcerse y sintió la boca llena de sangre. Quedó echado boca arriba mirando a las estrellas.

al carajo... era hoy o mañana... pero bueno, al menoh lo he intentao... mejor morir haciendo algo decente que acuchillao en un lindero... que se jodan tós... ereh una mierda de policía y has sio una mierda de persona estos año... hoy te tocaba intentar hacer algo bueno... por la gente decente, la gente que necesita protección de verdá y no que la estén jodiendo tol día... gente que de verdá necesita un policía que la tenga a salvo... como la francesita... espero que esto le valga de algo a la chavala...

Tosió sangre. El dolor era abrumador.

... lastima... podría haberla protegío mejor, salvarla... tan delicá y frági... ahora ya... na... dar unos tiros más y se acabó...

Se giró. Desde esa distancia y contra esos tipos tan bien equipados sabía que no podía hacer nada. Al menos podría entretenerlos mientras llegaban refuerzos, o para cubrir a los chavales. Algo es algo. No iba a morir de espaldas.

Habían dado al poli enrollao. El poli que siempre le chocaba la mano y le daba propina. Eso no iba a quedar así. Apuntó contra el hijo de puta más grande, el que le había disparado a él. Dijo algo en turco que significaba "Dedos no me falléis" y apretó el gatillo.

El tiro hizo caer a Montañés, reventándole el casco y provocando heridas muy serias en la cara. Cayó al suelo, más muerto que vivo.

Elvira realizó un corte perfecto. La cabeza del goe cayó al suelo separada de su cuerpo.

Se acercó a atacar a otro pero el golpe de katana no pasó su chaleco. El tipo vió que le estaban atacando por la espalda y fue a girarse para dispararle a él.

Franciso estaba llenando de plomo a los panolis del GOES pero es entonces cuando Padilla cae a un lado de él - ¡PADILLA! ¡ME CAGONTOSUSMUERTOS! - Brama mientras bombea su escopeta para disparar de nuevo, aunque en un momento dado se le había ocurrido utilizar las granadas que Padilla se había traído del uro, pero al ver que el gordo friki y la tetona se habían metido en el follón decidió que era mejor no hacerlo y seguir escupiendo plomo. Y efectivamente, el gordo intento asestarle un katanazo a uno de los GOES pero no pudo atravesar el chaleco, lo que hizo que éste se girara dispuesto a dispararle, pero Marqués apunto al joputa y le disparó con precisión.

La sangre salió disparada como un surtidor, si hubiera sido de día, el abanico líquido habría brillado al sol como un arcoiris, muy Kurosawa, ni una gota les manchó ni un cabello se les despeinó, eran poesía.
Se giró hacia Pelayo, le brillaban los ojos de serenidad, deseo y satisfacción, menos niña y más mujer, sonreía. ​Al desplomarse el cuerpo algo giró hasta sus pies, una granada de fragmentación. No hubo mucho más que pensar, corrió unos pasos adelante, tiró de la anilla y mientras la lanzaba le dijo a sus dos amigos del interior en un tono super cute -Matta neeeeeeeeeee- inmediatamente salió corriendo

De repente, un latido. Borja estaba buscando el hacha y sintió el ultrasonido. Un ultrasonido que amenazaba con tomar posesión de su cuerpo. En el patio del entresuelo, los cabrones que habían repasado su bloque destruían las ventanas de las casas del bloque de enfrente. Dispuestos a colarse por ellas.

Lupita fue a mear a las duchas, por que sentía la necesidad. Pero al llegar a la puerta, notó que estaba estaba cerrada por fuera. Cerrada con unas cadenas. ¿Pero que coño? Al otro lado vió la figura del policía de asalto. Le miraba con una sonrisa y tintineaba las llaves que tenía en la mano.

-Sin testigos...

Entonces los altavoces del lugar volvieron a emitir la misma promoción. "La fiesta mola. El ayuntamiento mola". Y la mitad de los supervivientes allí presentes se despertó, como un resorte. Dispuestos a matarles, aunque fuera con sus propias manos.