Partida Rol por web

El burdelillo, como lo conoce la gente de la ciudad, es el burdel mas famoso de Kordava. Tanto la casa de placer para unos, como la del tormento y sufrimiento para otros, aunque estas dos cosas no siempre van separadas.

Aquí muchos hombres ,poderosos o buscavidas, buscan saciar sus impulsos mas bajos a cambio de pocas monedas con las chicas esclavizadas del local, normalmente contra su voluntad.

Hace ya mucho tiempo que dejaste atrás tus frías tierras, sus escarchados páramos y sus heladas montañas, pocos son los recuerdos que tienes de ellos eras muy niña todavía cuando tuviste que escapar en brazos de tus padres en busca de cualquier lugar mejor.

Forjarse una vida propia es duro, y no siempre acaba bien. Tu eres un claro ejemplo de ello, pues has ido a dar con tus huesos cansados en uno de los últimos lugares en que jamás querrías estar.

Hace unos meses, tu padre aceptó un trabajo como marino y mozo de puerto Kordava. Encontrasteis una modesta casucha donde vivir. Parece que por fin podríais dejar atrás el tiempo en que tu padre tenía que vender su hacha  para cualquier estúpida guerrilla personal entre dos nobles de las decadentes civilizaciones Hyborias disputándose un palmo de tierra, o un puñado de monedas. Ahora podríais estar tranquilos, en una ciudad nueva, donde tus padres pudieran criarte y demostrar su amor sin ser perseguidos, y sobre todo, un lugar donde podrías poner en tus manos cualquier cosa que algún Zíngaro había descuidado. Pero todo empezó a torcerse, aparentemente, sin razón alguna.

Hacía semanas que el trabajo empezaba a traer dinero a casa, cuando una mañana llamaron a la puerta una patrulla de la guardia de la ciudad. Traían una orden para llevarse a cualquier hombre de las tierras del norte, cualquier hombre bárbaro que midiese mas de dos metros (como tu padre) debía ser arrestado e interrogado. Un sucio papelucho con las palabras de quien mandase en esa ciudad, con eso creían que tenían el derecho de llevárselo.

Ramirez,el capitán de la guardia, era quien llevaba la orden, y quien sin ninguna piedad continuaba con su batida.

La situación, lejos de resolverse pacíficamente, continuó con serios abusos, físicos y verbales de Ramirez a tu madre y a ti mientras tu padre era detenido sin explicaciones. Todo se dio por perdido cuanto tu padre no pudo soportar mas esa humillación y ese abuso selectivo por esos estúpidos zíngaros, a los que atacó con todas sus fuerzas.

Tu padre murió intentando protegeros, tu madre fue asesinada a sangre fría mientras sujetaba el cadáver de tu padre en sus brazos. Tu no pudiste impedir que te cogieran y ataran con cadenas como a una perra y te llevaron presa.No dieron explicaciones a nada. Ni signo de compasión por tus lamentos. 

Pasaste varios días a oscuras en una celda, en algún lugar, sola, rota por el dolor de la pérdida de tus padres, y prometiéndote a ti misma que harías pagar a aquellos hombres por lo que hayan hecho, sean cuales sean sus motivos.

Al tercer día, los guardias de la prisión te sacaron fuera encadenada, a empujones y tirones, hasta un carruaje con una jaula en su carreta, te introdujeron en ella y te llevaron a ese burdel.

Te llevan a rastras hasta la entrada de aquel lugar.

Desde el recibidor ves una sala grande, con varias puertas en cada una de sus paredes y unas escaleras que suben a un palco, que permite el acceso a mas puertas.

Viene una mujer con un vestido largo y cabellos castaños, peinados con un largo flequillo. A cada paso que da suenan sus tacones sobre el suelo de la habitación. En su mano lleva un látigo enroscado.

El soldado se dirige a ella estirando de tu cadena.

-Aquí la tienes... Donde está el dinero?

La mujer parece complacida, le entrega una bolsa llena de monedas al soldado y este le entrega la cadena que junta tus manos y la anilla que llevas al cuello.

Se despiden sin decir mas palabras.

Desde el recibidor en el que te encuentras puedes ver la sala principal, hay un gran número de sillones y cojines en el suelo alfombrado. En ellos se encuentran varios hombres, de lo mas variados. Altos, bajos; con finos ropajes o con los mas desgastados. Todos bebiendo y disfrutando de la compañía de las mujeres que rondan la sala sin apenas nada de ropa, algunas con argollas de acero en sus cuellos, mientras eligen a cual de ellas van a subir al piso de arriba. Todo está bastante cargado de humo de aroma dulzón del incienso mezclado con el de tabaco de las pipas de la sala, que disimula bastante mal el olor de ese lugar. Olor a vicio.

A los lados de la sala, tres hombres grandes y fuertes, con el bigote típico de Zíngara, y espadas en sus cintos vigilan que todo esté al gusto de el Ama de la casa.

La mujer que te tiene sujeta de la correa se dirige a ti ahora mientras te lleva del recibidor a la sala central.

-Hmmm Pelirroja... hacía mucho que no teníamos a ninguna. Como te llamas?

Su voz es serena pero firme. No es melosa ni empalagosa, pero no es cruel, por ahora.

mi nombre es Ydhir.digo erguiendome ante ella,y mirándola fijamente a los ojos prosigo,fijate bien en mi porque pronto tendré la venganza que deseo y no te interesa estar en medio.

Verónica sonríe por tu respuesta. Pero pronto borra su gesto y se muestra otra vez seria y autoritaria.

-Bien Ydir, quiero que seas consciente que ahora eres una mas de mis chicas. Y nada mas. Tu venganza te la vas a tener que tragar por ahora. Pero no te preocupes, cogerás pronto la práctica.

Las cosas son muy simples. Tu trabajas para mi, haciendo lo que los clientes quieran que hagas.

Si te portas bien, todo irá bien. Tendrás cada vez mas libertad para hacer lo que quieras. Aquí hay chicas que empezaron como tu y ahora son libres, siguen aquí por voluntad propia.

Si no lo haces. Tendré que enseñarte yo misma. Y no creo que te guste.

Está claro?

No te preocupes, no voy a darte problemas, de momento.respondo sin apartar mi mirada de la suya y mostrando una risita burlona.

Bien... Pero no me gusta esa rebeldía que tienes. Vamos a tener que ir moldeándote poco a poco.

-Rubén, Matías! venid con nosotros...

La mujer estira de tus cadenas y te lleva escoltada por los dos gorilas a una habitación cercana. Es un cuarto pequeño, cutre, tristemente decorado y hace mucho que no se limpia decentemente. En el medio hay una cama con sábanas bastante viejas, y con un ligero olor a sudor y a sexo que cuesta arrancar.

Verónica te arrastra hasta la cama y te quita los grilletes. Se separa de ti y se apoya sobre la puerta.

-Desnúdate.

Los dos guardias te miran, son hombres grandes y fuertes, y aunque uno está un poco calvo, no son viejos ni especialmente horrendos.

Viendome encerrada en la habitación, en inferioridad y desarmada mi mejor opción por el momento es obedecer y estar atenta en busca de una oportunidad para escapar. Me desnudo tranquilamente aunque la verdad es que no tengo que quitarme.

Poco a poco descubres lo poco que quedaba tapado de tu cuerpo. La mujer severamente dice.

-Atadla al techo.

Los dos hombres pasan unas correas que hay al final de unas cadenas colgadas del techo que hacen que quedes con los brazos en alto y tus pies descalzos apenas pueden apoyarse en el suelo con las puntas.

Verónica se te queda mirando con seriedad. mientras cada vez Rubén y Matías están mas animados y encendidos por lo que viene ahora.

-Quiero que te acostumbres rápido a lo que te espera aquí. Y a lo que vendrá si no te comportas.

Chicos, es vuestra...

La mujer desenrolla el látigo y camina poco a poco hacia la silla que hay junto a la puerta. Desde ahí, se sienta y mira el espectáculo que le supone tu iniciación al oficio, mientras saca de su ajustado vestido un cigarro de tabaco* liado anteriormente, con el látigo lacio en el suelo.

Mientras tanto, Rubén, camina hacia tu espalda y se quita la camisa primero, dejándola tirada de cualquier manera sobre la cama y se baja un poco los pantalones. Te rodea con sus brazos grandes y fuertes y empieza a palpar tus pechos sin ningún cuidado ni cariño.

Puedes sentir su respiración en la nuca, pues es muy alto para su raza, aunque tu también lo eres y estás estirada por las cadenas.

Matías mira desde una cierta distancia esperando su turno. Su mirada no es lasciva ni viciosa, está mas que acostumbrado a estas cosas...

No puedes evitar pensar en lo que está claro que viene continuación**

Ydhir observa con resignación como uno de los hombres se le hacerca por detrás, sabe muy bien lo que va a pasar,pero en su interior no quiere darle mayor importancia.
Lo más importante para ella ahora mismo es trazar un plan de huida, que a primera vista tendrá que ser postpuesta a que acabe esta situación.Tengo que escapar,tengo que escapar,tengo que escapar.Se repite a si misma mientras el hombre comienza a penetrarla.
La rabia acumulada en su interior, la frustración por no poder hacer nada y el miedo a no conseguir escapar y que el tiempo y la costumbre le hagan sentirse normal ante esta situación,hacen que en los ojos de Ydhir se acumulen algunas lágrimas que trata de impedir que escapen,sin conseguirlo.
Cuando llega el turno del segundo hombre, la expresión en la cara de Ydhir y sus lágrimas podrían pensar a cualquiera que estaba derrotada, pero una vista más en profundidad,hacia su mirada,revelaría lucha,ira y esperanza.Una mezcla de sentimientos que se dejaban ver de forma clara en sus ahora vidriosos ojos verdes.
En su fuero interno Ydhir sabía que tarde o temprano llegaría su hora.Este no era el momento para venirse abajo,en su raza no se toleraba a los débiles,y todos a quellos que no eran capaces de hacerle frente a la crudeza de la vida real eran considerados como tales.
De momento la cosa estaba en su contra, pero no permanecería siempre así y Ydhir estaría a la espera para que su momento no le pillara desprevenida.

Tu nueva ama a estado todo el tiempo mirándote a los ojos por detrás de la leve cortina de humo que suspira el cigarro que pronto termina, observando cada una de tus lágrimas, de gemidos incontenidos de ira, dolor e impotencia.

Cuando Rubén y Matías han acabado contigo vuelven a colocar sus partes de un modo grosero dentro de sus pantalones, satisfecos por la faena. y salen de la habitación.

Durante unos segundos Verónica continua mirándote en silencio. con las piernas cruzadas, mientras tu cuelgas de las cadenas, desde las cuales apenas llegas al suelo para apoyarte con las puntas de los pies mientras notas como por tus piernas resbala el líquido espeso que han dejado en ti los dos hombres.

Cuando las miradas se clavan la una en la otra, el silencio se hace mas tenso aun. Pero pronto Verónica rompe este silencio, levantándos y al andar, empezar a sonar sus tacones sobre el suelo de madera.

-Muy bien, Ydhir.

Cuando llega a ti afloja la cadena del techo, y la deja atada a la pared, permitiéndote así un poco mas de mobilidad al rededor de la habitación.

Después del bautizo, ha empezado la hora de trabajar, a Mitra no le gustan los vagos. Sonrie

Límpiate un poco. Ahora llegará tu primer cliente.

De un mueble junto a la cama, saca un cuenco de arcilla y una jarra metálica de agua, y algunos trapos.

Luego vuelve a guardarlos. Y date prisa.

Luego camina hasta la puerta de la sala y se despide de ti asintiendo con la cabeza y cierra la puerta.

La sala solo tiene una pequeña ventana que da a un patio interior, pero sería complicado salir por ella. Pues tendrías que romper la persiana de madera y aun así sería un ejercicio de escapismo considerable.

La habitación está iluminada por varios candelabros de tres velas encendidas y un poco de incienso en la mesilla.

Mel impio con el agua y los trapos rápida,emte e intento comprobar cuanta movilidad tengo.

Viendo que alcanzo algún candelabro antes de que entre el próximo cliente alcanzo uno y lo cambio de posición hasta una mucho más cercana a mi.

Mientras espero a que venga el próximo cliente investigo las taduras que me mantienen prisionera, asi como el candelabro que he depositado junto a mi buscando una forma de soltarme,Luego tendré que pensar también en salir de aquí, pero lo primero es lo primero, tengo que desatarme.Aunque me concentro en mi pequeña investigación no dejo de hechar miradas de soslayo hacia la puerta, no me interesa que nadie me coja infraganti.

Viendo que de momento no viene nadie Ydhir trata de escapar escurriendo las manos de las argollas que la mantienen presa.

Cuando aun estás forcejeando con los grilletes, la puerta chirría detrás de ti.

Sobresaltada tratas de disimular y dejar que las cadenas cuelguen.

Cuando te giras, ves como el la puerta está la Ama Verónica, acompañada de un hombre pequeño.

Sus ropas son mugrientas, el pelo negro aceitoso y desaliñado deja ver parte de su calva entre rizo y rizo, y cuando sonríe al verte puedes apreciar como le faltan algunos de los dientes delanteros.

Tu nueva ama te señala y se dirige al patético putero.

-Aquí la tienes, recién traída desde los témpanos helados del norte. Pero que no te engañe su aspecto, su vientre es mas ardiente que un volcán.

El hombrecillo asiente con la cabeza y se relame mientras saca unas monedas de su bolsillo y se las da en la mano a Verónica, que las coge con algo de asco y se marcha por la puerta cerrándola con suavidad, diciendo antes de cerrarla del todo. En media hora volveré.

El hombrecillo se acerca a ti, mirando deseoso tu enorme cuerpo mientras menea los dedos ansioso. Cuando da unos pasos se baja los pantalones y los deja tirados por el camino a la cama, sin quitarse la camisa ni los zapatos. No llevaba ropa interior.

-Vamos... Túmbate boca abajo....

Dice medio jadeando mientras toca el extremo de tu cadena y la recorre hacia ti mientras se agarra la entrepierna con vicio.

Vamos Ydhir, esto es solo un paso hasta la libertad.Aguanta un poco, los dioses ayudan a los furtes y castigan a los débiles.Piensa ensimismada intentando abstraerse de lo que pasará a continuación,de repente una idea surge en su cabeza y un montón de preguntas empiezan a surgir en su mente ayudándola a obviar el hecho de qwue el mugriento hombre este montándola como si nada por unas míseras monedas.¿Cuales serían las represalias?,¿Merece la pena el riesgo?,¿por donde escaparía?
Sin pensarlo más alarga una de las manos para coger el candelabro de antes, lo sujeta con fuerza sin dejar de calcular en su mente los pros y los contras de lo ue va a suceder a continuación,derepente y con toda la fuerza de la que dispone le propina un golpe al hombre.