Partida Rol por web

- Arma cargada y Rona a los mandos jefe. En posición.

El Pandora hábilmente pilotado por Mormorac, a pesar de las continuos comentarios de Sherezade cuestionando la destreza del Capitán a los mandos de la nave, se posicionó frente a la puerta del hangar trasero. 

Hace bastante tiempo que la puerta desapareció. ¿Un misil de protones quizás? En su lugar sólo hay un montón de escombros diseminados por el suelo. Al fondo del hangar hay dos puertas levadizas que están cerradas. Afortunadamente, a la izquierda hay una pequeña portezuela rotulada en Vorin (lenguaje imperial antiguo) con la leyenda "Exclusa de descompresión". Esta última puerta parece estar en bastante buenas condiciones por lo que es probable que la exclusa siga funcionando.

Aterrizar en el hangar, a pesar de los escombros, no es un maniobra difícil, sin embargo, hacerlo cerca de la exclusa de descompresión requerirá la actuación de un piloto hábil. Aún acercando la nave todo lo posible a esa puerta habrá que hacer un salto exponiéndose durante unos segundos al vacío...

El comunicador crepitó cuando el pirata lanzó una buena mirada al hangar a través del grueso cristal de observación.

- Por el puto haz de muerte de un pulsar desatado... - Masculló lentamente con su voz aguardentosa.

El maldito hangar estaba medio bloqueado por los escombros y colar el Pandora por ahí sería bastante mas complicado que sus chapuzas habituales a los mandos. No había realizado una maniobra de aproximación compleja desde... desde...

- Capitán - dijo con dulzura Sherezade - detecto que su ritmo cardiaco se esta acelerando. Su glándula suprarrenal esta sobreestimulada. Quizás no esta capacitado para...

Mormorac puso un rictus homicida en su cara mientras sus ojos volvían a ser dos rendijas. Agarró con fuerza los mandos y conectó las luces de atraque de un manotazo. Después activó de un manotazo la alarma de colisión. Por toda la nave comenzó a sonar una estridente señal de emergencia y luces rojas comenzaron a girar en las intersecciones de los pasillos.

- Agarraros a algo - graznó con tono funesto - vamos a entrar y será movido.

Y sin mas, empujó las palancas con absoluta decisión. Al abismo con las dudas y con esa maldita IA.

Cuando Shiri informó al capitán de que sólo disponíamos de un traje de vacío en la nave y que existía una exclusa de descompresión no pudo evitar proponer una idea.

- Puede que en el interior de esa exclusa de descompresión haya más trajes de vacío, puede que incluso una sala de mantenimiento con herramientas -comentó con su voz cibertrónica- no se entiende como podrían hacer el mantenimiento del hangar o del exterior del asteroide sin trajes de vacío.

Al mismo tiempo, Mormorac hizo sonar la alarma de colisión, a lo que el droide respondió bajando el volumen de sus sensores de sonido y se agarró a lo más robusto que tuviese a mano.

El capitán hizo entrar decididamente el Pandora por la estrecha apertura del hangar esquivando los escombros con maestría. Una vez dentro, ayudándose de los sensores de proximidad por ultrasonidos y valiéndose de un pulso firme como no lo había tenido en años (maldito sea el grog voriniano) acercó lentamente la puerta del Pandora a la de la exclusa de descompresión. Se produjo un agudo chirrido de metal contra metal que  parecía presagiar un aterrizaje accidentado pero finalmente un sordo golpe anunció que los amortiguadores de la nave de aterrizaje habían tocado suelo. Habría que desplazarse unos metros por el vacío para llegar a la exclusa pero el aterrizaje había sido todo un éxito.

Mormorac lanzó un profundo suspiro cuando todo movimiento se detuvo. Se miró la manos, abriendo y cerrando los puños un par de veces. Quizás no estaba tan acabado como el pensaba. Sonrió como un predador del espacio profundo.

El regocijo solo le duró un instante. Después recordó que estaban haciendo y por qué.

- Señor Daft, por favor, anote en el diario de a bordo. Ch1ld_08 ha tenido una buena idea. Gracias Chatarra. Acabas de presentarte voluntario para una exploración preliminar. Sal y echa un vistazo. Si hay que forzar la puerta, veremos el siguiente paso. ¿Algún voluntario para acompañarle con nuestro único traje?

- Yo puedo llevar a quien sea necesario esos metros. - Dijo Rona abriendo un poco las alas y agitándolas, lo que provocó que el polvo que estaba descansando tranquilo sobre cada elemento de la nave, pareciera cobrar vida y revolotear asustado al rededor de la mutante. -Incluso puede que consiga abrir la puerta...

Yo acompaño a Roboto Capitán, habrá que revisar los trajes que encontremos y traer los operativos.  Y salió a grandes trancos hacía la zona de trajes.

Necesitaré ayuda para ponérmelo.

Ch1ld_08 y Kimbo se dirigieron al almacén del Pandora. En un rincón había un viejo traje de vacío arrugado y sucio. Kimbo lo examinó con más detenimiento: tenía el visor rajado y una fuga en la manga. Nada que con un poco de polímero adhesivo no e pudiese arreglar.

Vuelvo a la cabina principal donde están todos, con una única diferencia, no me agarré del todo bien, y tengo una tirita en la frente, en la esquina izquierda, debido a un pequeño corte que me he hecho con el bisturí

Rona, estoy convencida de que podrías lanzarnos a cualquiera de nosotros varios metros hasta allí, pero en los pocos segundos que estuviéramos a la intemperie, nuestra sangre pasaría de un estado líquido a un estado gaseoso, mucha suerte tendríamos si alguno de nosotros lograra pasar. Sin embargo, estoy segura de que tu fuerza nos será más que útil ahí dentro. 

Digo, dedicándole una sonrisa y guiñándole un ojo.

Si sólo hay un traje de vacío, espero que esté bien, habría que revisar el resto de la nave, tal vez nos hayan dejado una sorpresita llamada más trajes de vacío

Tras seguir los pasos de Kimbo hasta el almacén, le ayudó a reparar el único traje que parecíamos tener a bordo con algunos retales de aislante que había en el mismo compartimento. Posteriormente le ayudó a ponerselo, no parecía demasiado grande y aunque le estuviese un poco prieto, le valía.

- Espero que no hayan detectado la entrada de la nave al hangar, de lo contrario nuestra visita va a resultar más corta de lo planeado -intentó hacer un chiste con la preocupación que sobrevolaba los circuitos de su cabeza.

Kimbo y su mecánico acompañante se pusieron manos a la obra con el traje de vacío. Las roturas del tejido eran lo bastante superficiales para poder ser arregladas de manera provisional fácilmente.