Partida Rol por web

- Joder, ya era hora.- Digo, tirando las cuerdas al suelo. Me levanto para estirarme un poco y me doy cuenta de la situación en la que estoy, con gente desconocida, a saber donde, con dolor de cabeza y sin saber quién soy.

Intento respirar profundamente.

Cuando el grandullón consigue liberarme de las cuerdas, un leve gracias acompañado con un movimiento de cabeza asintiendo en símbolo de gratitud. Aguardo mientras los demás discuten y se van liberando, mientras me esfuerzo por recordar, ¿quién soy? ¿qué hago aquí? ¿porque ESTAMOS todos aquí?.

Lo de grandullón es una ironía, ¿eh? soy enano y con mucha mala hostia.

Miro paranoicamente uno por uno al resto de los prisioneros. Nadie abre la boca, nadie sabe nada, excepto quizás este tipo, que lleva el mono número 54.

No podemos quedarnos aquí parados sin más, como ovejas esperando al matarife. Al menos yo no. Echemos un vistazo por aquí. intento que mi voz suene tranquilizadora para transmitir algo de moral y tranquilidad al resto del grupo. Sin embargo, no creo que mi voz suene demasiado carismática. Mas bien refleja la lucha interna en mi cabeza por dominar mi pánico, que no estoy seguro de ganar.

Conservas la sangre fría, tal vez sea el instinto de supervivencia o el hecho de que tu estómago empieza a tener hambre. Pero sabes que esto no se va a solucionar solo y que hay que moverse.

Pesé a haberte quitado las ataduras y poder moverte libremente sientes un gran temor a lo que esta ocurriendo. ¿Quien os ha hecho esto? ¿Por que?
Muchas preguntas te retumban en la cabeza mientras poco a poco te mente se va alejando de la realidad intentando comprender que puede estar pasando.

Pues si, a eso se le llama pifia ;)
Creo que te haces una idea de lo que esta pasando y mira por donde era lo que esperaba de este PJ, je je.

Tu PJ esta realmente asustado y preocupado por lo que esta pasando. Mientras tus compañeros se mantienen callados y preocupados tú expresas tus miedos y temores hacía el exterior así que, por favor, ponte a gritar y da un poco la lata a tus compañeros.

He de descubrir que ostias pasa aqui, asi que tendre que ponerme a buscar la manera de escapar...

Al fin libres, aunque preocupados por saber donde estáis y porque hay tanta oscuridad os observáis unos a otros intentando recordar algo, un detalle, por insignificante que sea con tal de tener algún retazo de vuestra memoria al que poder aferrarse. Sin embargo la cruda realidad os obliga a volver al mundo real cuando observáis como una de las chicas empieza a hiperventilarse y tener problemas respiratorios.

Nada nuevo, gamuza con la forma de una pistola de inyecciones y espacio para diez dosis y faltan ocho; un par de guantes usados... aunque tal vez si le dierais la vuelta al maletín podríais ver el otro lado.
En la mesa no hay nada más.

Pretendes que estemos tranquilos...tranquilo estarás tu chiquitín, yo necesito salir de aquí y lo necesito... ¡YA!

Se puede observar como su cuerpo empieza a demostrar ciertos síntomas de exceso nerviosismo e intranquilidad. Se sienta en la silla, se levanta y mueve intranquilo alrededor de la mesa. Coge la caja, la levanta como si intentara encontrar algo que los sacase rápidamente de allí. Al instante se para en seco, pero no tarda en reanudar la marcha.

sentada aun en el sofá, intento recordar algo de mi vida y procuro mantenerme lo menos nerviosa posible, aunque no es nada fácil. para acabar de arreglar las cosas, la chica de mi lado empieza a boquear como un pez fuera del agua. me levanto de un salto. mierda! que te pasa? que alguien la ayude, que alguien haga algo! grito bastante nerviosa.

Cita:

Yo... yo tenía una vida... yo era alguien, ¿porque no consigo recordarlo?, ¿cómo han conseguido borrarme los recuerdos?, ¿dónde estoy?, ¿quienes son esta gente?... quiero... quiero salir de aquí... quiero mi vida... ¡QUIERO RECUPERAR MI VIDA!, pienso mientras poco a poco mi cuerpo reacciona ante tal confusión mental. Sudores fríos recorren mi frente, mientras mi boca se va quedando seca y un creciente tic nervioso en la pierna va dejándose notar. El leve cricri de mis dientes al repicar, y el constante movimiento espasmódico de mis dedos sobre el sofá ayudan a que la imagen que doy al exterior produzca verdadera angustia. De repente, una voz de la nada me despierta de mi letargo mental, es la chica... la chica me ha hablado... la chica de la habitación en la que estoy ENCERRADA, ¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!, grito desesperada y llorosa cayendo de rodillas al suelo solo esperando volver a mi vida.

Cita:

...

......

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Comenzaba a moverme para nspeccionar la habitación, cuando esas palabras alcanzan mis oídos.

Mi semblante se torna muy serio. Muy lentamente me giro hacia el tipo con el 58 en el mono.

Espero no haber entendido bien tus palabras. ¿Me conoces de algo? ¿Conozco a este tipo de algo? Yo a tí tampoco. Avanzo lentamente con los puños apretados y los ojos llenos de furia.
En ese caso, guárdate tus apelativos cariñosos para tus hijos. A mi no me puedes tratar como a un bebé, ¿entiendes?La próxima vez que me faltes al respeto me quedaré con dos o tres de tus dientes como recuerdo. ¿te parece bien? De ahora en adelante me llamarás ...
Quedándose pensativo uos instantes.
Insp... señor... señor ...

He olvidado hasta mi nombre, joder...

Señor Martin.