Partida Rol por web

Ibamos bajando cuando llegamos a algo aun mas dificil que caer en paracaidas, intentar aterrizar, con tanta rama veia cerca mi final, si salia de esta, juraba que no iba a levantar los piesl del suelo asi me mataran.

Empece a notar como las ramas rasgaban mi paracaidas y trataban de clavarse en alguna parte de mi cuerpo, de pronto empece a notar algo que no me gustaba nada, un olor extraño ...

Colgada a unos 10 metros del suelo, solte un pequeño suspiro de alivio, no iba a morir espachurrada pero entonces note algo extraño, olia raro ..., el oxigeno no olia asi ¿Gas? mi cuerpo se tenso al momento y note como el exopack estaba ligeramente separado de mi cara, seguramente se separaria por culpa de una rama.

Pense en coger aire y parar la respiracion, pero asi tambien cogeria gas, ¿cual era la mejor opcion? si dejaba de respirar ahora no aguantaria demasiado.

Mi corazon latia con fuerza, si me agitaba, podia ser que el exopack se desenganchara mas y por lo tanto estaria en un problema, con una mano sujetaba firmemente el arma y con la otra intente alcanzar la rama que habia movido mi exopack para volver a colocarlo y evitar que el gas siguiera filtrandose, me di cuenta de que tenia la respiracion contenida desde hacia unos segundos pero empezaba a necesitar una bocanada de oxigeno.

Gruñi, me estaba resultando imposible alcanzar la dichosa rama, solo tenia una oportunidad asi que agitandome, haciendo peso en el lado donde estaba la rama y cogiendo la mascara intente partirla, rece para que fuera una rama delgada o seca que se partiera en dos al cargar mi peso sobre  esa zona, al oir el "crack" vi algo de luz.

La mascara fue mas accesible y trate de colocarla en mi cara nuevamente con rapidez

El comentario de Ellis me deja atónita. ¿Qué problema tiene con que los demás intenten encontrar soluciones? Si la chica hubiese fallado en el tiro, tendríamos que buscar alternativas... Mi intención era lanzarle fuego, no malabares con ellos.

Le miro hoscamente cuando empiezan a saltar de la nave. Ni siquiera titubean. Me acerco a la puerta abierta, y al ver la altura a la que estamos, me entran dudas, y me quedo paralizada. Las alturas no son lo mío... Había sido instruida en el salto de paracaídas, pero sólo teóricamente.

El  suelo se acerca rápidamente, y dado que no queda nadie más en la nave, soy la última en saltar. Con un hondo suspiro, me acerco corriendo a la puerta y salto en vertical. No me quedaré atrás.

Afortunadamente, parece que salto en el momento justo, me espero un par de segundos y abro el paracaídas, manejándolo con el movimiento de mi cuerpo.

Aterrizo entre los árboles, donde parece que estamos todos. Manejando el paracaídas, evito que las ramas me hagan heridas, a pesar de que rasgan mi ropa. Cuando se queda enganchado entre las ramas, corto las cuerdas que me sujetan con mi cuchillo, y me dispongo a bajar.

Abrí el paracaídas en el momento justo, y por suerte conseguí no piñarmela, pero nada más librarme de un problema, empieza otro más gordo. El paracaídas se me queda enganchado en una rama, y quedo colgando en un árbol, a poca distancia del suelo, pero de una manera un tanto ridícula. Asqueada, me saco de la bota mi pequeño cuchillo, y voy cortando las cuerdas. Pero cuando queda una, con cuidado, me engancho a la rama, y de un tirón termino de deshacerme del paracaídas.

Poco a poco, voy pasando de una rama a otra hasta llegar al suelo. Al fin libre, suspiro aliviada. Entonces recuerdo el comentario del hombre del pañuelo en la cabeza, Ellis creo recordar.

-Oye, tú. Con que princesitas, ¿eh? A ver cómo nos llamas, listillo, que yo no me meto con tu altura ni nada parecido, a ver si nos respetamos más.

Voy descendiendo mientras sigo observando el cielo por posibles amenazas, sin querer, desvio la mirada de los árboles cuando las ramas me rasgan la ropa, cruzo las piernas para que no pase una rama entre ellas y hacerme polvo los huevos, entonces una rama descoloca mi mascara, quedando colgando de mi cuerpo....

-Aghhhh.....-

Asfixia, quemazón en los pulmones, los ojos me lloran y me empiezo a combulsionar intentando coger la mascara, pero desde mi posición y con la falta de aire, me es imposible....

Pandora es un paraje salvaje y amenazante, ya solo el aire es irrespirable, y me esta recorriendo los pulmones a placer mientras mi agonia aumenta...

Sorprendida por la aparición del monstruo (no puedo llamar a eso de otra manera) Zulene tarda en decidirse a saltar.

Cuando lo hace parece que el monstruo ya se ha ido, pero espera no caer muy lejos de sus compañeros.

- ¡Esperadme! 

Por suerte parece que el tipo de mantenimiento se portó y su paracaidas también se abre.

Al llegar casi al suelo, Zulene, con una serie de balanceos rápidos hacen que su culo no se enganche en ninguna rama y llega al suelo con todo en su sitio y sin heridas.

Todos habéis conseguido aterrizar mas o menos bien entre la maleza de la jungla. Zulene, que parecía haberse quedado en el avión, aparece también colgada un poco mas lejos que vosotros ... a quien no podéis encontrar es al teniente Smith, que también había saltado.

Apenas estáis recuperando el aliento, que os dais cuenta que a Jack le ha saltado la mascara y se está intoxicando con la atmósfera mezcla de distintos gases nocivos.

Por desgracia no tenéis ramas gruesas a vuestro alcance, solo ramitas de las que arañan y alguna hoja grande. Mirando hacia abajo, hay una mortal caída de 10 metros llenos de mas ramas, plantas y un suelo irregular que se encargara de romper lo que no haga la gravedad.

Apenas tenéis algo cortante, pero el paracaídas tiene una anilla para deshacerse de el ... el problema serán los 10 metros de después.

Parece que vuestra llegada ha causado una extraña conmoción en la selva, y no se puede escuchar ninguna alma o criatura alrededor vuestro, el único sonido viene de los agonizantes motores de la lanzadera en la lejanía.

- "Como si no fuese suficiente hacer de piñata a 10 metros del suelo..." - Murmuró el piloto volviendo a coger el rifle. Hasta el momento su intuición para los problemas habia sido, como poco optimista y nuevamente parecia que se avecinaba algo malo. Apuntando con cuidado rastreó la zona.

- "Chicos, me parece que no estamos solos" - Alertó mientras ajustaba la correa alrededor de su brazo para evitar que se cayese el rifle.

Me zarandeo un poco en el aire e intento tomar impulso para girar sobre mi mismo. Consiguiendo que las cuerdas del paracaídas se enrosquen y sea mas fácil trepar por ellas. Después de eso las agarro con fuerza y antes de que vuelvan a resenredarse y acabe por marearme dando un montón de vueltas, me apresuro a subir por ellas hasta alcanzar la rama en la que me he quedado enganchado. Por acabar me engancho también con los pies, quedando colgado como un perezoso

La hostia, que alto esta eso !. - Bromeo sin percatarme de la situación de Jake.

Colgando de la rama, me voy desplazando hacia el tronco principal del árbol, donde intentaré bajar sin prisas para no partirme la cabeza.

... A medio bajar del árbol, oigo la advertencia de Allan, me detengo y me quedo quieto. Inmóvil, a la espera de lo que pueda ocurrir.

James observó su alrededor rápidamente...tenia que bajar de allí pues corrien bastante riesgo colgados. Asi pues decidió agarar las cuerdas del paracaidas y inclunar su peso de alante hacia atras, con la intención de balancearse hacia alguna rama gruesa o alguna hoja verde gigante. Una vez se haya balanceado con el suficiente impulso, soltó su anilla del paracaidas con la intención de agarrar la rama o la hoja grande más cercana, realizando para ello una de las piruetas que estaba acostumbrado a realizar en las pruebas físicas.

Hay una especie de perros sin pelo y de piel oscura y reluciente. Parecen estar acechando y usando la maleza para trepar y acercarse sin ser vistos.

Habrá mas de una docena.

Me tome unos segundos para respirar oxigeno, parecia que no habia sido la unica con dificultades para respirar. Habia hecho muchas maniobras militares pero nunca me habia sentido tan pequeña y fragil, viendo como la naturaleza podia con nosotros y eso, que solo eran arboles.

Oi a alguien quejarse pero ahora mismo no era capaz de reaccionar, debia hacer algo y si queria salir de alli, llegar al suelo o a cualquier super ficie segura y ayudar a quien pudiera, debia soltarme.

Nunca habia sido de rezar, ahora tampoco lo haria pero si que necesitaba que alguna "ayuda divina" me hechara un cable para poder intentar trepar por las cuerdas.

Aunque por lo visto, no era mi dia de suerte.

Miró alrededor, y miró arriba, más valía que hiciera algo... suspiró y, con miedo, se soltó lentamente de la máscara de su boca para agarrarse a las cuerdas del paracaídas, no iba a soltarse del paracaídas, pues si la cosa no iba bien iba a caerse en el vacío, y no era algo que le apeteciese, prefería soltarse del paracaídas cuando estuviera ya un poco más a salvo, al menos, encima de alguna rama gruesa y que aguantara su peso*...

Se concentró durante unos segundos, y cuando abrió los ojos, decidió empezar a trepar por las ramas... pero nada, se resbalaba por las cuerdas y volvía a su posición inicial, y lo que le daba más rabia, aparte de hacerse daño a las manos es que todo su paracaídas se movía.

¡Agh...! ¡Mierda! - vociferó cabreada.