Partida Rol por web

¿Hay algún herido que no pueda andar? No tenemos camillas y deberíamos largarnos de aquí rápido. - Dice el hombre al tocar el suelo. - Lo subiré yo.

Al ver a James lo inmoviliza un poco con algunas cinchas y luego lo ata a su propio arnés colocando su cabeza en el hombro mientras espera que su compañero aparezca para darle la señal.

Espero de pie a que sea mi turno de subir al helicóptero, deseando llegar sanos y salvos de una vez. Como se vuelva a estrellar la nave... creo que será para morirme de la risa.

Emilie soltó una carcajada con los comentarios de Ellis, y negando con la cabeza, se apartaba para que hicieran su trabajo los que los habían venido a buscar. 

Quería subir cuanto antes, pero primero eran los heridos, y por ello se fue a ayudar a Bost.

Vamos, ¿puedes levantarte?

A pesar de mi descontento, acepto la ayuda Emilie, e intento incorporarme gracias a su ayuda, ya que mucho me temo que no podré sola. Un día de estos me pediré la baja por senilidad... Ni andar sola puedo ya, menudo desastre.

-Creo que deberían haberse traído otra camilla, a falta de una cama, sería un buen lugar donde echarme una siestecita. La verdad es que las piedras son bastante incómodas.. Sobretodo con esto clavado en el pecho, que me impide dormir boca-abajo... Lástima, es mi posición preferida.

Emma se había alegrado tanto de que porfin les viniesen a rescatar, que apenas se da cuenta de que su mascota había retrocedido. Cuando quiere darse cuenta, la ve escabullirse entre la maleza y solo le da tiempo a gritarle una palabra, pero muy sincera.

¡Gracias! Dice con ambas manos al lado de la boca en dirección al animal que ya ha desaparecido.

Luego se dispone a subir, eso sí, ayudando a quien lo necesite.

Os percatáis que el helicóptero parece haber llamado la atención de esos extraños pterodactiles del planeta.

Una manada de ellos se acerca haca aquí ... quien sabe, igual son amistosos.

Ummm ... quizá no.

El soldado termina de subir a James y lo coloca estirado al lado de Ellis donde el otro hombro le hace un repaso a las heridas para ver que alguien ya los ha tratado eficazmente (Allan).

Os pasan el cable de subida, señalando a la siguiente persona herida.

Venga, el ultimo herido.

Se puede ver el terror en la cara de Emma.

¡Rápido! ¡Se acerca una manada de pterodáctiles! Exclama señalando el lugar dónde los ve acercarse.

No, no podrían subir todos, pero estaría bien que se llevasen a los heridos que no tendrían posibilidades en tierra.

Me dispongo a subir cuando oigo las palabras de Emma, alertándonos. ¡Mierda! Siempre con lo mismo... espero que los soldados se hayan traído armas eficaces con las que rechazarlos...

-Ale, que suba el siguiente, que a mí no me corre ninguna prisa por subir a otra navecita... En tierra soy suficientemente capaz como para valerme por mí misma. Más vale que subáis una de vosotras que no sabéis ni manejar un arma...

Me aparto a un lado, e intento esconderme para no llamar la atención de lo que sea que se nos acerque sin esforzarme demasiado.

 El cable queda en el suelo mientras el helicóptero se tambalea un poco al recibir la noticia de los depredadores alados.

 ¿A que esperáis? ¡Que alguien se ate el maldito cable, joder!

 El otro soldado se pone al otro lado de la aeronave y empieza a disparar a las bestias sin recatarse.

De un movimiento rápido, Emilie cogió la cintura de Emma y miró hacia arriba mientras su mano se cogía al cable.

¡Subidnos! 

No es que quisiera dejar a nadie debajo, pero cuando se trataba de ella o los demás, y era su vida la que estaba en la bandeja, no era ni tan imbécil ni tan altruista como para dejar que otros subieran. Sería egoísta, pero ella también quería vivir. 

Esto va a ser divertido ...

El cable empieza a levantar a las chicas del suelo cuando el soldado le da al motor ... los pies se deslizan y finalmente pierden contacto ... Emilie debe aguantar su peso y el de su hermana.

Emilie tenía agarrada a su hermana cuando el avión empezaba a moverse, mirando hacia arriba y asegurándose de que su mano estuviera bien cogida al cable. Pero ya cuando sus pies no tocaban al suelo y veía que Emma no podría soltarse sin matarse/hacerse daño, fruncía el ceño y la miraba. 

¡¡¡Podrías ayudar!!! Pesas, ¿¡sabes!? - le decía de mal humor, evitando pensar que la estaba ayudando.

Te las apañas bien para sujetarte al cable mientras os suben hacia la aeronave.

Alguna de las bestias a las que están disparando parecen acercarse demasiado, por suerte realizan alguna maniobras defensivas para evitar que las cosen a tiros, lo que hace que aun no lleguen del todo ... pero no van a tardar.

El soldado os agarra y de un tirón os sube (con exagerada facilidad) y quedáis dentro medio tumbadas las dos, deshace el cable y casi sin mirar si estáis bien lo lanza de nuevo a los demás.

Rápido!