Partida Rol por web

Romualdo se agachó para ponerse a la altura de Siriel y así tratar de calmarle y devolverle su estado de ánimo jovial y dicharachero.

-Esto, mi buen Siriel, es el preludio de tu vida de aventuras, logros, rescate de bellas doncellas y de otras pobres almas condenadas, aqui empieza de verdad todo lo que deseabas.- Le dice mientras le pone las nao sobre sus hombros y le mira a los ojos -Desfendunda tu acero amigo mio, pues hoy será tu bautizo, más se prudente y mantente siempre cerca.-

Dicho esto, Romualdo le dedica una sonrisa al halfling antes de incorporarse y sacar su espada junto con su escudo.

-Bien, ¿sabemos algo más de lo que nos vamos a encontrar ahi abajo?-

Me encojo de hombros por la pregunta de Romualdo -devoradores de cadáveres, no-muertos ponzoñosos cuyo toque puede paralizar. Aparte de eso sin duda viviran algunas criaturas mas en las cavernas, pero ni idea de su naturaleza-

- Ya se que eran orcas pero no deseo a nadie que lo devoren vivo. Tenemos que acabar con esos necrofagos y ¡por la luz de Petra que asi sera! - dice Vasily agarrando fuertemente el simbolo de su diosa que lleva colgando del cuello.

Siriel logro tranquilizarse (un poco al menos) tras las palabras de Rom.

Sacó su espada y su escudo y se dispuso a demostrar su valía

-Vale, propongo ir delante por si hubiera trampas, cosa poco lógica si han arrastrado a alguien porque las habrían desactivado pero no me fío. En segundo lugar irá el clerigo que puede darnos un respiro con los muertos vivientes-.Duncan se gira hacia el pequeño Siriel.-Esta es tu primera lección, ten siempre cerca a alguien que puede expulsar enemigos.-A continuacción se pone un trapo tapándole la nariz, saca una daga de detrás de la capa y comienza a bajar los escalones.

Siriel escuchó el consejo y asintió repetidamente con la cabeza

Al ver que Duncan se ponía un pañuelo en la cara se apresuró a hacer lo mismo,aunque no sabía para qué,a lo mejor no quería que lo reconocieran

Tampoco creía que  los muertos vivientes puedieran quedarse con la cara de nadie.

De todas formas,si lo había hecho uno de estos héroes,seguro que sería por algo bueno o necesario

Sin ningún contratiempo recorren los pasillos excavados, hasta que llegan a la sala donde habían acabado con el jefe orco - grr - un leve rugido de ira sale de la garganta de Ataulfo al ver como lo que mora en el subsuelo ha acabado, con toda probabilidad, con sus recien ganadas esclavas - vamos, esos seres no creo que vayan a tramar planes más enrevesados que roer huesos en busca de médula de la que alimentarse - dijo algo enfurecido.

Luego, con energía, sacó su mandoble y comenzó a avanzar junto a Duncan, que portaba una de las lámparas - si tienes miedo, ponte detrás mía, pero avanza rápido, esos seres van a pagar lo que me han hecho - concluyó espoleando al grupo a avanzar.

 avanzo el último de la fila iluminando de vez en cuando hacia atras, por si nos preparan alguna emboscada

Comenzais a bajar a la oscuridad por las estrechas escaleras y segun descendeis podeis notar que el aire es mas pesado y humedo. Tambien en la distancia os parece escuchar el sonido de algo escarbando y unos debiles gemidos.

Tras un par de minutos las escaleras terminan y os encontrais en una amplia caverna con el suelo de tierra y piedras bastante removido. A la luz de las lamparas solo podeis ver un pasillo a vuestra izquierda y segun avanzais un poco veis dos tuneles mas pero antes de poder decidir nada el suelo comienza a temblar bajo vuestros pies, de la tierra surgen dos seres enormes parecidos a gusanos de un intenso color rojo que retorciendose intentan morderos con sus afilados dientes.

Duren bajo las escaleras con los demás, sabía que ahí abajo afrontarían de nuevo peligros y no quería acabar malherido como la ultima vez. En ese momento iba a comentar que pasillo tomar cuando de repente, el movimiento bajo el suelo y los dos gusanos morados saliendo del suelo.

- ¿Qué demonios..? - dijo perplejo y tratando de mantener el equilibrio.

Dos gusanos salen del suelo sorprendiendo a alguno de mis compañeros, reacciono bastante lento pero aun soy capaz de asestar un golpe a uno de ellos

Siriel notó cómo temblaba el suelo y consiguió apartarese de lo que parecía un gusano gigante que salía del suelo,instintivamente espoleó su arma contra aquella criatura salida desde el mismo infierno,pero fue un  movimiento torpe que no consiguió hacer mella en la dura piel del bicho

Atento a cualquier peligro que pudiera surgir Vasily noto un pequño temblor en el suelo y rapidamente salto hacia un lado para ver surgir donde estaba antes un enorme gusano. Ni corto ni perezoso cogio con fuerza su maza y con rapidez golpeo al bicho con fuerza en la boca.

- ¡Vuelve a las profundidades que te engendraron, maldita alimaña! -

Duncan iba tan concentrado buscando trampas que las prisas de Ataulfo le despistaron solo un momento, todo lo necesario para que un monstruo te mate.-Por el dios de...-fué lo único que pudo decir antes de perder el equilibrio.

En el último momento Duncan rueda por el suelo incorporándose de un salto con el ánimo suficiente como para atacar al gusano.

por cierto utilizo la daga de la empuñadura de marfil.

A pesar de surgir repentinamente del suelo tanto Vasily como Duncan reaccion atacando a los gusanos y dandoles sendos golpes. Estos a su vez se retuercen y uno de ellos intenta golpear al escurridizo Siriel fallando su ataque; el otro gusano se abalanza contra el elfo golpeandolo con saña e introduciendole su acida saliva en el organismo.