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Bamberg: una caza de brujas

Dia 3: Juicio

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04/10/2021, 09:20
Director

Amanece de nuevo en Bamberg, con un redoble de campanas tañendo a misa, a pesar de que no es domingo.

Se celebra un servicio, dirigido por Förner en persona, para honrar a Dios por su intervención. El fervor parece estar alto. Pocos parecen dudar de que realmente, ha sido la intervención divina la que los ha salvado. Y aunque los ánimos están algo más altos que los pasados días, las caras pensativas y las miradas no han desaparecido.

Han visto su fe en Dios crecer, sí... pero también han visto de primera mano que no son desvaríos de loco o de fanático. Realmente, hay brujas entre ellos. Y una ya casi ha logrado matarles. Quién sabe lo que otras puedan hacer.

Finalmente, Förner se sube al púlpito.

Hoy Dios nos ha mostrado que no debemos temer. Ha aplastado la cabeza de la serpiente, como lo hizo Cristo en la cruz, y ha mostrado una vez más que no hay poder en esta tierra por encima de él. Pero el hombre virtuoso no espera que Dios lo haga todo por él. Desagradecido es el hijo que no trabaja y espera que su padre le mantenga, más al contrario, cuanto mayores sean los dones que se le dan, más se esforzará en ser digno de ellos. Hoy Dios nos ha dado un gran don. Demostrémosle que sabemos merecerlo. Él ya ha castigado a una bruja, ahora es nuestro turno.

Si alguno se preguntaba qué quería decir con eso, quedó claro a la salida. Las picotas habían sido retiradas, pero en su lugar, los carpinteros se afanaban en hundir gruesos postes en el suelo, y los leñadores apilaban leña cortada y ramaje en un almacén improvisado con lonas y cuerda.

Parece que esa noche iba a arder gente, independientemente de lo que sucediese en la sala.

La Comisión redobló sus efuerzos aún más si cabe. Si antes simplemente parecían entrevistar a gente al azar, ahora parecía que sus agentes iban siguiendo un método, entrando casa por casa. Parecían resueltos a peinar todo Bamberg, y no aceptaban un "no" por respuesta. No hubo escasez de ellos, pero los hombres de armas rápidamente se encargaron de ellos. A este paso, no iban a quedar celdas en la casa de guardia para tanto prisionero. Pocos se atrevieron a protestar, recordando lo que habían visto en la posada de Muriel, que ahora no era más que un montón de madera renegrida.

El herrero y el molinero parecían mirarse inquisitivamente, como juzgándose. ¿Qué habían visto u oído?. Por su parte, Eleanora pareció cambiar desde el primer momento en que se arrodilló a rezar. Su rostro se volvió grave y resuelto, y sus ojos brillaban con una sabiduría y autoridad que nadie recordaba haber visto en la sencilla muchacha de la granja antes. Era imposible mirarla sin pensar en esa voz que todos habían oído en sus sueños, y la mayoría de lugareños no eran capaces de sostenerla más de unos segundos. Fuese lo que fuese que había descendido sobre ella en la iglesia, sin duda no era algo que tomar a la ligera.

Y finalmente, llegó de nuevo la noche...

 

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04/10/2021, 09:40
Friedrich Förner

El silencio es total cuando Förner y los escribas entran, y por una vez el sacerdote no parece estar para soflamas. Sus palabras son parcas y secas, carentes de la emoción que tenían los dos primeros días, pero también frías como el hierro, e igual de duras. Algo ha cambiado también en él, y ese algo parece haber hundido sus raíces en el corazón del teólogo, haciendo su resolución aún más inamovible.

Creo que no hay mucho que decir que no se haya dicho esta mañana. Si alguien sigue sintiéndose tentado a decir "no sé si hay brujas", espero que recuerde lo acaecido. Si os mueve la compasión, no tiene por qué hacerlo. Las pruebas de la Comisión ya han detectado a otros agentes del Mal, y sus confesiones ya han desenmascarado a otros como ellos. Esta vez no esperaremos a que el Señor castigue a sus enemigos. Esta noche, empezaremos a hacerlo nosotros. Con su ayuda o sin ella. Que comience el juicio.

 

Notas de juego

Podeis escribir algo de ambientación en un post "libre" (es decir, que no cuenta como los 3 diarios) si quereis, pero tiene que terminar con vuestro PJ por la noche, en la sala de juicios.

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05/10/2021, 11:01
10: Wilburg

Wilburg llegó a la plaza del pueblo visiblemente azorado ese día. Caminaba de un lado a otro exclamando en voz alta frases sueltas que no dudaba en compartir con cualquiera con el que se cruzase. Iba de uno a otro asaltándoles con algo de demencia, les sujetaba por las solapas para compartir con ellos información y rápidamente saltaba al siguiente.

¡Ay mi ma! ¡Ay mi ma!

¡Lo qué descubierto!

¡El herrero! ¡El herrero!

¡Dios nos coja confesaos!

¡Qués uno dellos!

¡Dios nos libre!

¡Quese busca la ruina del pueblo!

¡Es duna secta o algo deso!

¡El herrero! ¡El herrero!

Después de varias afirmaciones desmedidas en su tono, vio llegar al susodicho herrero. Señaló con virulencia a Wilhelm y gritó

¡Tú! ¡Bellaco! ¡Malnacido! ¡Sectario!

Y rápidamente fue a esconderse detrás del leñador que, por su corpulencia, era de los pocos que podía servirle de escudo.

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05/10/2021, 12:41
4: Edeltraut

Entre las pesadillas de estas noches y lo ocurrido la noche anterior, Edeltraut estaba asustada y algo descompuesta. Mas trataba de disimular lo mejor que podía, igual que hacía en sus servicios como dama de la señorita. Aquel día apenas salió de casa, salvo cuando los guardias registraron el hogar de los Señores, que esperó fuera.

Llegada la noche, asistió al juicio con la mayor calma que pudo. Cualquier detalle era importante para descubrir a más brujas y no se lo quería perder.

De pronto empezaron las acusaciones. Edeltraut, con cautela, esperó la respuesta de Wilhelm.

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05/10/2021, 13:46
8: Berthold "Carnero" Bauer

Algunos creían que las piedras había sido cosa de simple azar y suerte pero Berthold estaba seguro de que el Señor había teñido la piedra de Muriel de un oscuro color, como su corazón por ser bruja, delatándola así al resto. Desde que ese milagro surgió el posadero bobalicón no dejaba de repetir en voz baja que el señor les ayudaba, que debían de tener fe, pero por desgracia la gente estaba demasiado ocupada prestando atención a otros quehaceres.

Por eso cuando llegó la noche se sentía pletórico, seguro de sí mismo. Mantenía en su mano la piedra blanca, como si aquello fuese una prueba más que suficiente de su inocencia, mientras caminaba de nuevo hacia la gran plaza.

¡Sí hay brujazos! – Gritó enérgico con una sonrisa de amarillentos dientes mientras asentía a Förner, esta vez más convencido que nunca.- ¡El señor nos salvará! – Pero a pesar de todo sentía lástima por Muriel. Le gustaba observar sus posaderas y su pecho virginal cada vez que paseaba por Bamberg y ahora tal visión se quedó reducida a cenizas, sintiéndose incluso decepcionado. Por suerte las cabras nunca lo traicionarían de esa forma.

Escuchó los gritos de Wilburg y no pudo más que buscar con la mirada al acusado, Wilhelm. Era un hombre que siempre le había parecido correcto y tranquilo, pero teniendo en cuenta que su amada Muriel era una bruja ya no confiaba en la apariencia de nadie.

¡La piedra! ¡La piedra! – Alzó la mano donde sostenía su piedra blanca antes de señalar a Wilhelm.- Si la piedra se vuelve negra es un brujazo d’esos.- Con evidente temor y convencido de que volvería a funcionar, se acercó a Wilhelm con la mano estirada, esperando que cogiera la piedra blanca.

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05/10/2021, 13:56
Friedrich Förner

Ah, las piedras, si... un fenómeno harto curioso. Tengo entendido que mucha gente despertó con una piedra blanca al lado de su cama hoy por la noche. Me pregunto...

La expresión del hombre es pensativa. No hay duda de que Dios ha intervenido, pero... se le antoja una forma de manifestarse harto curiosa. Primitiva, incluso. Si es él realmente quien las deposito allí. No es un hecho que le cuadre con su saber, pero tampoco algo que puedan ignorar.

... es igual. Prosigan.

 

Notas de juego

Las piedras son una mecánica de juego, algo que haríais fisicamente en mesa. Vuestros PJs no han sacado piedras de un saco ni han visto a Muriel sacar la piedra negra. Bueno, ahora sí porque lo he metido yo en la historia XD. Pero para el futuro, el saco y las piedras es una mecánica de jugadores, no de PJs.

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05/10/2021, 21:55
9: Horst “mataosos”

Aquel día Horst no había pegado ojo. Con la locura del día anterior apenas se había sentido persona. Había notado como le quitaron una parte de si mismo. Ni siquiera tuvo fuerzas para ir a votar, mientras su mente iba a la deriva, lo que quería decir que su voto iría en contra de su persona como sospechoso de brujería y eso podria haberle costado la vida... si no fuera por aquella piedra. La piedra que le había abierto los ojos que era verdad: había brujas en Bamberg

¿Acaso se salvo de puro milagro, o Dios Todopoderoso había hecho que la cadena de acontecimientos le llevasen a desenmascarar a Muriel. Aquella mujer tan amable, tan considerada con él, y Dios la mostró como lo que era: una bruja que no los había intentado hechizar o convertir en ranas como en los cuentos, no, los había estado envenenando.

-Señorita Muriel, usted era tan buena conmigo. Me daba también sus dulces pasteles y me lanzaba dulces palabras. ¿A mi también me envenenaba?

Iba meditabundo pensando en esto, cuando escuchó las acusaciones  de Willburg. Quizás Wilhelm fuera una persona hosca y apenas había cruzado palabra con él. Pero estaba seguro de que era un hombre honesto y bueno de corazón... hasta ahora

No, por favor, no sea malvado usted, señor Wilhelm. Pensó lanzandole una mirada de soslayo

 

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05/10/2021, 22:17
6: Franz Laurentius

Franz como el resto del pueblo, también estaba nervioso. Demasiadas cosas extrañas en muy poco tiempo, en especial todo lo relacionado con Muriel. Todo había sido tan tétrico... Tantos años dedicados a mantener el orden para que ahora en un par de días todo el pueblo se sumiera en la locura.

Sin embargo el era un hombre de Dios y de Ley, y como el resto de los días se afanó en que sus hombres hicieran su trabajo y evitara que el pánico cundiera en Bamberg. Al menos hasta esa noche, cuando Förner mandara a alguien a la hoguera (casi parecía que deseaba hacerlo fuera o no una bruja) quién sabe como pasaría.

Y ahí estaba una noche más. En primera fila. Colocado donde todos lo pudieran ver. Y Willburg una vez más comenzó a acusar. Cada día uno distinto. Pero antes de tomar partido en la disputa que se venía quería saber que decía el herrero al respecto. Estaba claro que ya no podía confiar en nadie. 

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06/10/2021, 12:28
2: Clara

Clara no había conseguido dormir en toda la noche. Pensaba en Muriel y le costaba pensar en ella como en una bruja, aunque las palabras de Förner habían sido claras. La joven cocinera era una servidora de Satanás, y probablemente hubiera estado jugando con ellos desde el principio.

-¿Alguien tiene la seguridad de que alguno de nosotros sea inocente? -preguntó la costurera, esperando que alguien pudiera dar una respuesta a sus inquietudes-. Hemos tenido suerte de que nuestras decisiones siempre terminaran en empates. De otro modo, puede que ya hubiéramos juzgado a alguien que no fuese una bruja. No hay duda de que Dios está de nuestro lado.

La mujer prestó atención a la acusación que Wilburg hacía sobre Wilhelm, el herrero. Le sorprendía que Wilburg siempre fuera un acusador, pero quería escuchar cuál era la respuesta que le daba Wilhelm antes de hacerse una idea clara sobre ambos hombres.

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06/10/2021, 14:11
7: Harby

El ovejero tuviese claro que su sueño fue tan real y veraz como lo tuviera el resto de habitantes, que como él, corrieran a casa de Muriel a corroborar que la pesadilla solo fuera eso, ensoñaciones nerviosas o un trozo de queso mal digesto, pero la realidad era bien distinta. Las brujas eran reales, las pesquisas por ende igualmente ciertas y Dios autentico salvador de aquel pueblo al obrar el milagro de salvarlos de aquella mujer, que con tanto cariño creaba sus delicias para luego verter veneno en ellas. -¿Acaso siempre fue bruja? ¿Siempre fue malvada? Imposible que alguien fingiera toda la vida, imposible... -Y al igual que el resto de congregados fue disuelto y devuelto a las sabanas tibias de su camastro, donde ya no pudo conciliar sueño, pero tampoco salio a laborar.

Esperose en casa hasta que callo la noche. Aquel día, temeroso por lo sucedido en la madrugada, no dio de comer a sus ovejas, no las controlo, ni mando. Estaba asustado y pensativo, sin poderse mover. -¿Su amabilidad fue fingida, su cuerpo un engaño? -Hasta que la campana avisara la hora del siguiente juicio.

Harby llego al edificio arrastrando los pies, sin gorro esta vez y con mirada clavada en sus zapatos. Se sentó repitiendo asiento y espero a escuchar la voz del Obispo.
-Es cierto... -Musito el joven al escuchar sobre la misericordia de Dios y calló ante la amenaza de Förner, otros en cambio llegaron gritando y acusando, Wilbrug de nuevo, esta vez sobre el herrero. Alzo la vista para mirar a ambos. Es cierto que él mismo albergo dudas de ambos en días anteriores, pero que de veraz era todo aquello, si las brujas pudieran fingir alegría, también urdir mentiras. Por eso, como el resto, se mantuvo callado mirando al acusado, esperando por sus palabras.

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06/10/2021, 14:53
10: Wilburg

Wilburg notó las suspicacias de todos los presentes, que le miraban con indecisión por ser el único que abría la boca apuntando a alguien. Normalmente, ni las hubiera notado, porque no era especialmente brillante, pero en este caso eran suspicacias muy evidentes.

Amo a vé, que sé que soy el único questá diciendo algo. ¡Pero esque soy el único que satreve! ¡Si tais tós más callaos queun muerto!

Ya lo dijel primer día, ¡aquí hay quablar! Si se sabe algo, hay que contarlo porque luego llegan las brujas con los hechizos y lo marean todo como ayer.

En el molino no solo mentero de cosas, también mentero de que otros senteran de cosas, no me miréis raro por hablar, ¡mirar raro al que no habla sabiendo cosas!

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06/10/2021, 15:18
4: Edeltraut

Ese es su problema, molinero. Que habla mucho y acusa sin ton ni son, o eso me parece. Esa actitud me hace sospechar de vos.—dijo Edeltraut señalando con su dedo a Wilburg.

También es cierto que Wilhelm no ha hablado y está distinto desde ayer. ¿Algo que decir en su defensa? No siempre quien calla otorga, pero...

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06/10/2021, 16:02
10: Wilburg

Pero amo a ve señorita, que si yo hablo es porque sé cosas. Si andase atenta a las intrigas del pueblo como ando yo, usted también sabría cosas.

¡Que no es que yo sea chismoso! ¡Es que estamos en una situación de mergencia desas como dice nostro algozí.

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06/10/2021, 17:16
6: Franz Laurentius

Y una situación de emergencia no se soluciona acusando sin ton ni son, Wilburg—dijo con gesto sancionador el algozí—. Entiendo que es el miedo el que habla, pero piensa lo que se nos pide. Estamos hablando de mandar a uno de nuestros vecinos a la hoguera. ¿De verdad crees que nos podemos tomar algo así a la ligera?

Franz sacudió la cabeza lentamente y se acercó al molinero.

—El demonio está aquí, su presencia es real en nuestro pueblo. Pero yo no quiero mandar a un inocente a la hoguera y estoy seguro de que no soy el único. ¿Cómo podríamos vivir con ello? Por eso todos nos mostramos cautos, atentos a cualquier señal, pero con la cordura suficiente como para saber lo que estamos a punto de hacer—el jefe de alguaciles le puso la mano en el hombro al molinero—. Y tú deberías actuar igual.

Entonces miró a Willhelm.

—De todas formas, necesitamos una explicación.

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06/10/2021, 23:08
1: Wilhelm Schlingel

¿Una explicación? No se puede tratar de justificar la lo injustificable. Y ese molinero dice cosas que no tienen sentido... pero, como decía mi padre, la calumnia es como el golpe de la sartén, no mata pero tizna.

¿Quieren que les diga que no soy un seguidor de Satanás? No lo soy. Pero no puedo demostrarlo. Al igual que nadie de los presentes puede. ¿Tengo razón, excelencia? - dije, interpelando directamente a Förner. Éste, impertérrito, apenas si desvió la mirada de sus documentos, por lo cual seguí hablando, siendo plenamente consciente de que a pesar de que aparentaba estar ignorándome, seguro que estaba tomando buena nota.

Igual es que eso que dices que sabes, Wilburg, no conviene a tus intereses, y por ello quieres eliminarme rápidamente. De ese modo, nadie se fijaría en ti. 

¿Puedes decir en que te basas para afirmar que soy... mmm... "uno de llos", "duna secta"? 

Mantuve la mirada fija en el molinero. Sabía de mi inocencia, pero era difícil demostrarla. Tenía la esperanza de que el alguacil, acostumbrado a tratar con maleantes, supiera leer la verdad en los ojos. Eso, eso me daría tranquilidad. Si no, estaría perdido, pues cualquier que hablara, sobre todo si lo hacía el primero, haría que el debate se centrara en el objetivo por éste propuesto.

¿Por qué te diste tanta prisa en lanzar mi nombre a los cuatro vientos? ¿Acaso para ocultar algo? ¿Algo de lo que ocultas en tu casa? Sabes de lo que hablo, ¿verdad?

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06/10/2021, 23:30
4: Edeltraut

Edeltraut escuchaba, pero no le quedaba nada claro lo que decían 

A ver, señores. Menos misterios. ¡Que se va a ejecutar a alguien, por el amor de Dios!—dijo mirando a ambos.—Si se acusa que sea con pruebas. Wilburg, ¿de dónde sacas que Wilhelm está en una secta? Wilhelm, ¿qué dices que sabe Wilburg, qué oculta en su casa?

—Más datos y menos adivinanzas.

Edeltraut los miraba inquisitivamente con los brazos en jarras. Algo le decía que uno de los dos iba a caer esa noche, y más les valía acertar...

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07/10/2021, 08:38
10: Wilburg

Decís que acuso pa quitarme ojos a mi mesmo... ¡pero si al acusar todos me miran! ¡Malnacido! ¡Lengua béfida! ¡Sectario!

La señora Edeltraut cortó la conversación antes de que escalase como solo un ignorante como Wilburg podía hacerla escalar. El herrero había hecho bien en no rebajarse con improperios, porque bueno es el dicho que reza nunca discutas con un idiota, pues te rebajará a su nivel y te ganará por experiencia.

¡Ya lo dije, señora! Tós los días se cuecen habas. Hay intrigas en el pueblo. La gente habla. La gente observa. Yo soy mu observador pese a lo que parezca y por el molino pasan tós.

El primer día supe algo de Horst, algo que como dije non era definitivo pero sí relevante. Supe quel leñador era alguien importante en esta historia y por puro número aquello era peligroso.

El segundo día supe que todo lo que sabía ya no valía de nada por la magia de las concubinas esas.

Pero no me rendí. Seguí buscando información y así pude averiguar hoy al amanecer que las lealtades del herrero no son con el pueblo sino con Satán. Es uno de los del culto ese. ¿Es brujo? Non lo sé, pero sí se algo que no deja dudas, si non es uno, busca su favor. Igual en vez de brujo es su pariente, eso non lo sé. Pero a fe mía que podéis creerme, ese herrero va contra nos.

Me señaláis por decir tó lo que sé, pero decilo tó es lúnico que vale dalgo aquí.

Pensad que nadie sabe que vota el resto, así que los que dudéis de mi abiertamente estáis señalándovos como objetivos para que el maligno os cace. Los que como Wilhelm sean concubinos y sus parientes irán calladitos a votarme por mi valentía y nadie lo sabrá nunca, ¡por eso ora que ya ha caído una bruja es importante que todos los del pueblo votemos unidos!

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07/10/2021, 11:17
1: Wilhelm Schlingel

No voy a entrar en ese juego, molinero. Puedes faltar todo lo que quieras, puedes acusar sin ningún tipo de fundamento, me es indiferente. Al final se trata de tu palabra contra la mía pero, si haces que me cuelguen, la verdad saldrá a la luz, quedando demostrado que soy un hombre de bien, y tus falacias harán que seas el siguiente, y también quedará demostrado tu... mmm... ¿cómo decirlo? Afinidad por artes más oscuras que otra cosa.

Tomé un poco de aliento, pues no estaba acostumbrado a hablar tanto, siempre que no fuese de mujeres o del hierro. Del primero de esos temas no faltaban doctos en Bamberg, y si no los había, el posadero era buen conversador. En cuanto al segundo, apenas un par de tipos sabían distinguir el cobre del bronce.

Pero estoy divagando, les ruego que me disculpen. Retomé entonces la conversación.

¿Me pregunta, señorita Edeltraut, que qué digo que se que sabe Wilburg? No se si el molinero sabe algo, solo me refería a que él sabe de que hablo cuando digo lo de que oculta cosas extrañas en su casa. Estuve allí, lo busqué para cambiar algunas cosas, lo habitual entre vecinos, la puerta estaba abierta y lo llamé. Al no encontrar respuesta, entré al molino esperando que no hubiera ocurrido ninguna desgracia. En el suelo tenía multitud de objetos, no sabría decir que cosas eran de tan raras eran, peculiares. Y desde luego muy lejos de lo que un buen hombre cristiano tendría en casa. 

A eso me refería, querida, supongo que él podrá explicar que son o para que las usa, en lugar de acusar sin base alguna.

Ah, una cosa le digo - dije, de repente, subiendo el tono mientras me dirigía directamente al molinero - vuelva a usted a mentar a mi santa madre, y su excelencia no tendrá que ocuparse de juzgarlo, sino de enterrar su cadáver después de exorcizarlo.

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07/10/2021, 17:53
7: Harby

Finalmente el herrero hablo y se desato la discusión, nadie esperaba un resultado diferente, acusaciones cruzadas y uno era el culpable del otro, algo evidente si pensamos que quien caiga en votaciones le espera el fuego... En quien confiar, en aquel que ha hablado primero siendo quien es, sembrando miradas de intriga, o quien se defiende acusándolo de forma velada.

-Si ellos mismos dicen no serlo pero ambos se acusan. Entonces... ¿Uno de los dos a de ser? -Pregunto el Ovejero intrigado a quien tuviera a su lado.

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07/10/2021, 22:28
9: Horst “mataosos”

-Yo tengo que decir que demasiado he visto acusando al molinero a gente al tuntun. Que si yo soy una cosa, que si el herrero es otra. Esto ya me esta pareciendo sospechoso. ¿Oculta usted señor algo de verdad, como dice el herrero?- Dijo Horst con un deje ya ligeramente molesto