Partida Rol por web

Un domingo a la noche se encuentran reunidos en casa de Buffy compartiendo una cena. Por suerte, hace un tiempo que no hay problemas en Sunnydale y disfrutan de la tranquilidad entre amigos. Incluso algunos vampiros que se han aliado para ayudar a los buenos se reunen en esta cena. Aunque la dieta de los amigos vampiros, es la mas dificil de satisfacer sin incidentes, se las apañan como pueden y todos han demostrado ser confiables y respetuosos con los demas.

- ¿Siempre tiene que haber morcilla para cenar? ¿Esto os sacia? - Xander miraba a Angel y Spike al lanzar la pregunta - ¿No podemos pedir pizza o chino como el resto de gente?

Sam llega un poquito tarde a la reunión.

Disculpad chicos, últimamente ando algo liado. Dean se había vuelto a meter en problemas, pero ya está resuelto.

Dedica una sonrisa amistosa al resto

Spike estaba apoltronado en uno de los sillones del fondo.

Afortunadamente la Señora Summers, la madre de Buffy, les había dejado algo de comida para pasar la noche. AL parecer iba a venir bastante gente. Incluso primos lejanos, al parecer, cuando vi por la puerta al menor de los Winchester.

Mierda!! Yo que quería una velada tranquila y tenía que aparecer el mata demonios! Genial!

- Pues no, Xander. Pero dudo que ofrezcas tu cuello como entrante. Mejor dicho... no.- Dije mientras me recorría un escalofrío por al espalda al pensar en el cuello de Xander y mis dientes. Ni de coña pongo los dientes ahí!

- ¿En serio no viene tu hermano ?- Pregunté al aire mirando de reojo a Sam.- Una lastima. Seguro habría traído cerveza... y una estaca.

Nunca se me han dado bien este tipo de reuniones. - pensó mientras dedicaba unos segundos a observar desde fuera la casa de Buffy.

Antes de entrar se acercó a una de las ventanas y se fijó en los invitados que ocupaban la mesa. Vio al vampiro Sam y sonrió mostrando una sonrisa blanca rematada por el tono burdeos de sus labios.
 
La cena de acción de gracias. - en su cabeza no sonaba irónica, sino normal. Vamos Sammy, mira hacia aquí. - el vampiro le devolvió la mirada y Faith actuó provocándolo.

Acercó su rostro al cristal y jugó con sus labios carnosos como si fuese a lanzarle un beso. No lo hizo porque tuvo una idea mejor, más infantil y estúpida, lo cual estaba segura que le molestaría. Sin embargo ella se reíria de todo eso.

Empañó el cristal con la boca y dibujó un corazón bonito con sus dedos, mientras los demás seguían jugando a llevarse bien y cenar como una gran familia americana, en paz y armonía.
 
Después de eso entró por la puerta y entró en el comedor, se quitó la chaqueta y miró al resto. - Esto se queda conmigo, por si acaso. - cogió la estaca que llevaba en el bolsillo y la puso sobre el mantel al lado de los cubiertos. - ¿Qué hay para cenar? la última vez que vine aquí estaba tan hambrienta que no pude aguantar las ganas de meter la mano en el plato de patatas de Buffy*. ¿Lo recuerdas, B? - sonrió quitándose el chicle que llevaba en la boca, lo pegó en una servilleta a la vista de todos. A veces era un poco bruta.  - Joyce fue un encanto conmigo.

Miro a Spike exasperada, porque siempre tiene que tener esa actitud, decido pararlo antes de que se lie.

-Cállate Spike, es accion de gracias aprobecha para agradecer que en esta ocasión no te hayamos atado como aquella vez, pero como sigas chinchando a mis invitados te juro que pasaras accion de gracias como aquella vez. Xander ni caso, ya sabes que es un gruñon.

Mientras discuto con el aparece Faith por la puerta.

- Siempre tarde F, en cuantos lios te has metido de camino y deja mis patatas hemos pasado de robarlas de esrangis a hacerlo en mi cara.

Horrible. Así me parecía que iba a ser esta velada, no tenía ya bastante sufrimiento viendo a Buffy allí, en su casa, en donde pasamos tantos momentos juntos, que también tiene que estar Spyke y el resto... Me detengo en la puerta sopesando si entrar o irme directo a mi refugio, mi mano se alza para llamar a la puerta y se detiene a mitad de camino, pensando... No puedo irme, me ha pedido que venga y mi instinto es protegerla, aunque ella no lo quiera, aunque ella no lo necesite. Si lo pasa mal por mi culpa me sentiré pésimo y no quiero otra carga para mi espíritu, ya bastante maltrecho.

Finalmente mis nudillos golpean suavemente la madera, que todavía está caliente por la luz del sol que se ha ido hace unas horas, el olor a cera es embriagador. Cuando ingreso a la casa saludo -Buenas noches a todos.

Willow había puesto especial empeño en su apariencia ese día. Al inicio, era solo su camisa sin mangas, pero luego también la gargantilla, la falda, sus zapatos. No sabía que podía estar nerviosa por encontrarse con Oz. Era su ex, al fin y al cabo. Ahora estaba Tara, así que era un poco incómodo. A pesar de todo, Willow entró con su habitual sonrisa despreocupada y con el atuendo que había elegido.

- Hola chicos. ¡Ah! Hola Ángel - algo sorprendida, ya que habían llegado casi a la vez. Puso una sonrisa bobalicona y dijo - Bueno, hola Buffy. Aquí estoy. Claro, sé que me ves porque acabo de llegar y todo eso. Tal vez sobraba que dijera algo como eso sabiendo que con llamar a la puerta se sabe que estoy aquí. Incluso todos saben quién está y quién no, así que sobraba un poco la intervención... - Willow discutió consigo misma por al menos otros tres segundos y luego se detuvo.

- En fin. ¿Qué hay para cenar? - al ver el variado menú y ver a Angel, Sam y Spike, Willow comprendió la razón y trató de ser agradable al respecto.

- Bueno, veo que hay todo... Un... Festín...¡Sí! ¡Festín! Festín aquí servido - rió suavemente y puso un pequeño mechón de cabello por detrás de su oreja. Al mirar alrededor, se dio cuenta que Oz no había llegado y se relajó un poco.

- ¿Y qué hay de nuevo, chicos? -.

Me levanto hacia Willow y la guio a la mesa, tan tímida como siempre, pensé desde que  la conozco siempre a sido así.

​-Willow calmate  y respira, vamos siéntate  y relájate esto es para relajarse  y disfrutar.

​Me acerco un poco y le susurro muy bajito para evitar los oídos de losvampiros.

​- Yo  también estoy nerviosa te entiendo perfectamente,

- ¡Ey Willow!, yo tambien estoy aqui eh? Hola y eso...

Xander no había esperado a que llegase todo el mundo para empezar a comer y saludaba desde la mesa. Toda la tarde en el gimnasio le había dejado canino y las cosas se iban a empezar a enfriar. Con la boca llena preguntó:

- ¿Por qué estáis nerviosas? - rompió la discrección de las chicas sin darse cuenta - ¿Por estos? - señaló a Spike y a Ángel - ¿Y por qué les habéis invitado entonces? No os comprendo... 

Mi buen Spike, le transmitiré tu pesar a Dean. Pero no sufras...

Sam deja en el aire la frase como si fuese a completarla inmediatamente después. Y de hecho la completa, porque justo antes de quitarse la chaqueta de cuero vuelto, saca de su interior una estaca de madera y la pone sobre la mesa delante suyo. Luego se quita la chaqueta con total normalidad, como si su gesto no hubiera sido en absoluto una amenaza velada.

Y entonces se hizo la luz, y las personas más positivas empezaron a llenar la sala. Y también las más inseguras. (No entendía muy bien como podía haber tanta inseguridad en alguien como Ángel, que siempre le parecía a punto de derrumbarse por la presión).

Faith captó su atención, se cruzaron las miradas y le provocó con un juego infantil.

Sam se fingió molesto por el comportamiento pero en realidad le encantaba ese jueguecito.* Después, siguió con la mirada a Faith mientras ponía su estaca en la mesa. Esa chica era capaz de llenar ella sola el Stanford Stadium.

Al parecer, Spike, si echabas de menos las estacas vas a tener dónde elegir.

Y seguro que tampoco faltan las cervezas.**

El palmface de Sam le complació, todo lo que ella hacía muchas veces le molestaba o hacía ver que era así. Faith aparentemente no quería cruzar la línea de seducción con el vampiro y materializar aquel juego en algo más, precisamente por la clase de enemigo que encarnaba. Ella había nacido para matar a tipos como Sam, pero en el fondo se sentía atraída por él y algunas noches se preguntaba como sería tener su cuerpo frío al lado abrazándola.

- Una japonesa muy mona quería dejarme seca en el Bronze, así que he tenido que entretenerme un poco con ella. - le dijo a Buffy cuando sugirió acertadamente si se había metido en líos - ... la caza me da hambre*. - miró otra vez a Sam con una sonrisa lobuna, estaban en una cena familiar sino seguramente le habría soltado una directa bien afilada.

Le faltó tiempo para meter la mano en el plato de buffy y robarle unas patatas, añadiendo a su menú hamburguesa, zanahoria y verduras.

Sander ya había empezado a comer para cuando ella también lo hizo. Le guiñó un ojo al chico conforme con empezar a comer sin esperar a todos y luego añadió. - ¿Te parece que no tienen motivo para estar nerviosas? Ésta es la cena de los ex. - miró alzando las cejas a Ángel el atormentado y a Spike, el hombre lobo aún no había llegado. - ¿Quién iba a pensar que Willow se liaría con una rubia en la universidad? - lo soltó sin más como si la bruja no estuviese delante. - ¿Qué? solo digo lo que todos estamos pensando.

Sam decide volver a omitir toda respuesta y busca el cambio de tema.

Giré la cabeza cuando habló Buffy y dijo lo de atarme.

- ¿Oh, en serio? ¿Lo prometes, rubita?- Dije poniéndola cara de cachorrito, evidentemente pensando en otro tipo de "ataduras".

En cuanto Angel apareció no pude evitar un pequeño bufido. - Vaya, si ha llegado el alma de la fiesta! En serio, Buffy, puedo presentarte a un amigo en el pueblo de Forks, Edward Cullen, que es mas interesante. Me lo agradecerás. - añadí dándole un sorbo a la cerveza.

Por la puerta asomó Faith haciendo el moñas a Sam. En realidad a Sam se le veía algo incómodo, y tratándose de Faith seguramente lo usaría de muñeco sexual y después como muñeco sexual... otra vez.

- Mira, seguro que lleváis estacas a juego. - Dije sonriendo estúpidamente cuando Sam dejo la suya para que la viera.

Willow apareció y saludo a todos. Bueno, a todos menos a mi. No puede evitar soltar otro bufido. Levanté la mano para llamar la atención sobre la bruja lesbiana- ¿Que pasa?! ¿Soy invisible otra vez?- Me quede pensando un momento.- No, en serio... ¿no lo soy no? No estaría mal... durante la primera hora o dos...

Faith seguía sin quedarse atrás. Realmente de todas las cazadoras me parecía las mas cachonda. Pero por eso mismo la mas peligrosa. Sin embargo no pude evitar levantar las manos y soltar un sonoro Uoooooo cuando soltó la puyita sobre lo de los ex, en especial sobre Willow.

- Te equivocas, Faith. Yo pensaba en cerveza y estacas de goma. Pero te concedo el punto por lo de la lesbiana- Añadí guiñándola el ojo.- Hey Sam, pilla una.-Dije lanzándole una cerveza.- Cerveza, digo...

Ignoro a Spike y sus comentarios, mientras me siento a cenar con todos.

- Bueno ya casi estamos todos a ver si llega el que falta. Angel me alegro de volver a verte a sido mucho tiempo desde que huias y te escondias de mi, que tal cordelia.

Buffy la recibió y le dio un poco de calma - Gracias, Buff... Estoy bien, ahora sí - entonces mencionó que estaban esperando a Oz y Willow se erizó pero trató de disimular un poco.

- Bueno, esperemos que llegue pronto, muero de hambre - reía.

Las conversaciones seguín y entonces Faith habló. Willow la miró algo molesta, bufó y le dijo - Tara no siempre fue rubia, bueno, cuando la conocí, sí, pero Oz ya se había ido... - se giró hacia Spike y le dijo - No eres invisible. Te estaba incluyendo en el saludo, Spike - le sonrió al vampiro. Era sarcástico, pero divertido.

Entra y camina hacia la mesa buscando algo que pueda comer y tras un rato mira a Faith y le dice - Además, Oz ya se había marchado una vez -.

Algo asi, distraido e inspirado toca y canta Giles, hasta que la presencia de Spike lo asusta...

Vestido casual y con ropas sueltas, con una guirarra en la mano y una cancion en la voz. Se entretiene mientras el resto esta en la mesa comiendo.

Hace tiempo que no sucede nada en Sunnydale y Giles esta algo relajado. Lo que no quiere decir que no lea sus libros con regular disciplina y continue sus investigaciones.

Giles siguen cantando y no irrumpe en la cena, en un rincon, solitario, dedicas sus notas a quien sabe quien, tal ves algun amor del pasado.

Te lo agradezco Spike, necesitaba algo bien frío. La noche ha empezado con la promesa de ponerse muy interesante. - añade dirigiendo una mirada hacia Faith mientra esta saqueaba la nevera.

¡Eh! ¡Ángel! Pilla una y siéntate. Estamos de celebración. Suéltate un poco.
¡Estás poniendo nervioso a Xander ahí parado como un pasmarote!

No hay motivo para dejar que la cena de los ex - dice en referencia a la alusión de Faith - nos impida relajarnos y rememorar los buenos tiempos.
¡con tanto pasado, todos tenéis recuerdos de las mejores versiones de cada uno! Y si no, siempre estamos a tiempo de crear nuevos recuerdos.

¿Eso había sido un guiño de ojo a Faith o fruto de su imaginación?

Bueno... excepto Spike, que siempre está en su mejor versión

Suspiré y me encogí de hombros mientras levantaba ligeramente la mano -No, gracias -me limité a decir, reinaba un clima extraño, algunos estaban contentos, otros ansiosos, todos incómodos, o eso es lo que percibía. Para colmo Buffy recordaba nuestros primeros momentos rompiéndome el corazón nuevamente, una y otra vez me arrepentía de haber venido, cada una de ellas con más intensidad, -Es verdad, ha pasado mucho, y Cordelia... es Cordelia, tú la conoces -repuse mirándola a los ojos para luego pasearlos por la habitación, tratando de evitar mucho contacto visual. Fue entonces cuando Spyke mencionó a Cullen -Ahh, debes estar bromeando Spyke, Edward tiene un pequeño problema -me señalo cabeza -¿O cómo le llamarías a esa obsesión con hacer la secundaria una y otra vez?

Me siento bajo la recomendación de Sam aunque a regañadientes. -¿Falta alguien más? -inquiero y miro en derredor como si los invitados fueran a materializarse antes mis palabras. En realidad quiero que la noche termine, y rápido.

-Vale Dani, tranquilo, ya estarán todos allí, solo es una cena, entras saludas, cenas, recuerdas cosas que no quieres y te vas. Sí, eso va a ser todo. -Oz,estaba en la puerta de la casa de Buffy, llevaba allí un buen rato sin estar seguro de entrar o no. Volver a verlos a todos no era fácil nunca lo era. Pero ya había dado su palabra así que no esperaría mucho mas.

Busco con la mirada la luna y al no encontrarla suspiro antes de llamar a la puerta y abrir sin esperar a ser invitado.

-Hola, siento lle-llegar tarde. -Dijo desde el quicio de la puerta, mientras miraba a todos, pero en especial a una persona. -Hola Willow. Vaya estas... muy guapa. -No pudo evitar mirar de arriba abajo a la bruja pelirroja. Por suerte a sus oídos llego una música conocida y tras mirar incómodamente unos segundos, que parecieron eternos a Will, dejo la botella que había traído consigo y se acerco a Giles. -Vaya no recordaba que supieras tocar. Igual tendría que a ver traido la mia...