Partida Rol por web

Camino del Ocaso

El polvo del camino (Escena para River-Sen)

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22/09/2007, 09:20
Director

Apenas un par de horas después de salir de Salifan sin rumbo claro, optaste por caminar hacia el Oeste, hacia la costa, donde suponías que habría más actividad. Tus agudos sentidos te permitieron observar que una carreta te precedía, apenas a media hora de marcha. No le diste demasiada importancia, simplemente un viajero que había tomado tu mismo camino. Durante toda la mañana pudiste ver a lo lejos el polvo que levantaba.

Hasta que en un recodo del camino te lo encontraste de golpe. Ni siquiera tus finos instintos te avisaron de lo que, evidentemente, era una emboscada. Sin embargo, antes de adoptar siquiera una posición de combate, pudiste apreciar algo que te tranquilizó: era un anciano druida (*), un enano de pelo cano. Resultó obvio que él también te había evaluado como amenaza en un instante, y te había descartado como enemigo.

Notas de juego

(*) En este mundo los druidas no son completamente neutrales, la mayoría sí lo son, aunque algunos son buenos, y no existen druidas malignos.

(En la escena de El Entorno voy poniendo algunas de estas cosillas)

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22/09/2007, 09:22
Dárfin

- Saludos caminante. Hace unas horas que te he visto a mi espalda, y dado que parece que seguimos el mismo camino he pensado que quizás quieras compartir mi carro, los viejos necesitamos conversación, y me sentiría más seguro si un monje me acompañase.

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22/09/2007, 09:39
Director

El acento del viejo era de claramente de Luola, el país de los elfos (*), aunque no sabías que hubiese enanos en ese lugar, quizás la explicación estuviese en su oficio, ningún país como ése veneraba a los druidas.

Durante los dos días que pasaste con él te quedaron claras dos cosas: Aquel anciano no necesitaba tu protección, a menudo despertabas por las noches y te encontrabas con que se había ido, para estar de nuevo por la mañana como si nada hubiese pasado, parecía hacerlo siempre en tus escasas horas de meditación. Y desde luego tampoco necesitaba conversación, apenas si habías intercambiado unas palabras durante ese tiempo. Ni siquiera necesitaba chófer, el caballo no tenía riendas.

El anciano tenía habitualmente una expresión de preocupación en el rostro, y su mirada se perdía a menudo en el horizonte buscando algo. A tus escuetas preguntas solía responder con una sonrisa y un gesto de 'no importa'.

Hasta ahora, el azar os ha llegado a la entrada de un valle, una carretera lleva a un pueblo al fondo, aunque hay un desvío a la izquierda a lo que parece ser una mina.

Toda la llanura está reseca, a pesar del río que la cruza, los campos están secos, y no se ve a nadie. La imagen te resulta muy desasosegante hasta para ti, debe ser peor para tu compañero.

Notas de juego

(*)En El Entorno doy algunas nociones de geografía general y de los países que componen este mundo.

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22/09/2007, 09:45
Dárfin

- Menudo desastre... -dice Dárfin mirando a las montañas de la derecha fijamente.

Tratando de distinguir lo que él está mirando ves, casi en el límite de tu capacidad, algún tipo de ave sobre las montañas.

- Hay problemas allí en las montañas. Creo que iré hasta allí. Iré a caballo así que es mejor que vaya yo sólo.

Percibes que es una excusa, no quiere llevarte, pero ahora hay una enorme autoridad en su voz y supones que hay una buena razón para ello.

- En el pueblo hay algunas casas quemadas. Ve hacia allí y actúa con precaución, no te metas en líos. Supongo que volveré pronto e iré hacia la iglesia. Intenta averiguar qué está pasando.

Y sin más explicación, bajó de la carreta de un salto impropio de su edad aparente y soltó al caballo para subirse a él a pelo y salir a buen paso hacia las montañas del Sur, dejándote sólo allí.

Notas de juego

Y... acción.

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23/09/2007, 06:08
River-sen

El enano no parecía peligrosos y, después de tantos años en el monasterio, River-sen pensó que algo de compañia distita a la de los monjes sería un cambio agradable. Fue un cambio, si, pero dados los silencios que se sucedían uno a otro en la carreta, para cualquier otro, probablemente hubiera sido dificil considerarlo agradable.

Sin embargo, había que reconocer que el viaje en carreta era más cómodo que la caminata y el enano, pese a sus pocas palabras era mejor que la soledad, así que el monje lo acompañó gustoso, tratando de obtener información y de aprender de las pocas palabras que le escuchó.

Cada anochecer y cada amanecer al descender de la carreta ó antes de volver a montar en ella, el monje realizaba sus rutinas de entrenamiento bajo la curiosa mirada del druida. Los movimientos que durante tantos años había mecanizado, fluian ahora con calma, brindando a River-sen una sensación de paz que le permitía seguir con su camino pese a su extraña compañia.

--

La separación no le dió mucho tiempo a reaccionar. Por un momento estuvo tentado de seguir al enano, pero sus palabras eran sospechosamente parecidas a una orden. Y si algo había aprendido el elfo en su estadía en el Monasterio era, precisamente, a obedecer ordenes, con lo cual solo contesto - Entendido, nos veremos en la iglesia -

Bajó de la carreta con un salto tan ágil como el de su compañero "Después de todo sin caballo será dificil moverla" se dijo a si mismo mientras se encaminaba en dirección a la aldea, dispuesto a cumplir las instrucciones de su nuevo amigo.

Sus ojos y sus oidos, como sus maestros le habían enseñado, trataban de no perder un detalle de su entorno. Sus pasos, ágiles y seguros, lo llevaron por el centro del sendero, tratando de dejar a sus lados el suficiente espacio como para que nadie pudiera sorprenderlo.

Solo era cuestión de llegar hasta la iglesia e intentar averiguar el porqué de las casas destruidas "No debe ser tan dificil" pensó convencido mientras se preparaba a cumplir su sencilla misión.

Notas de juego

Arrancamos...

Estoy tentado de seguirlo, pero trataré de seguir el alineamiento del monje. Legal neutral. En fin, se supone que "la ley" antes que "la curiosidad".

Supongo que no quieres negritas, así que, si estás de acuerdo - esto es un dialogo - y por otro, "esto es un pensamiento". Tu dirás si te parece bien.

Tiradas de avistar escuchar, etc., etc. Si nada ni nadie interrumpe mi camino, derechito a la iglesia. Y si pasa algo... Bueno, ya me lo dirás. Espero que no sea por sorpresa.

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23/09/2007, 19:11
Director

Desde donde te separaste de tu silencioso compañero, apenas quedaban ya un par de horas de caminata hasta el pueblo de Duvik. La naturaleza seca y moribunda te acompañó la segunda mitad de la caminata, en silencio, como silenciosa fue tu entrada en el pueblo.

Al llamar a las puertas del templo de Astarlar(*) un clérigo con los emblemas de ese Dios te abrió la puerta. Era un hombre agotado y como carcomido por la fatiga. Tras él, al fondo del edificio, puedes ver a un hombre de ricos ropajes y a un niño.

Notas de juego

Sí, me parece bien la convención de las comillas para los pensamientos. En todo caso, lo que no empiece por guión, no lo consideraré diálogo :)

(*) Astarlar es el dios del sol en este mundo, el equivalente a Pelor (voy a cambiarles los nombres a los dioses, buscando no usar material ajeno en mi mundo)

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23/09/2007, 19:12
Samuel

- Saludos viajero. ¿Qué os trae por aquí?

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23/09/2007, 19:13
Serdna

- ¿Es mamá? -Pregunta el niño.

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23/09/2007, 19:14
Samuel

- No Serdna, tu madre fue tras los aventureros, y si no está de vuelta es porque han dejado que los acompañe. Tardará en volver, supongo.

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23/09/2007, 22:09
River-sen

- Saludos, Servidor de Astalar - con tono agradable y una leve reverencia mientras envolvía el puño de la mano derecha en la izquierda, River-sen devolvió el saludo del clérigo

- Solo estaba de camino, pero al ver los estragos que ha causado el fuego me aproxime a ayudar - le explicó al sacerdote mientras sus ojos, curiosos, intentaban abarcar toda la situación.

El breve diálogo del niño no le pasó desapercibido y recordando su infancia, se arrodilló, para ponerse a su altura y con los suaves tonos propios de su voz élfica agregó - Tranquilo, muchacho. Ya volverá. Los padres siempre vuelven por sus hijos -

Tras el breve comentario al pequeño "Espero que no vuelva como mi padre. A punto de morir..." se dirigió al clérigo - Pareceis cansado. Combatir el fuego debe de haber sido duro. A cambio de un poco de compañía y charla, podría ayudaros. Que os parece? - La sonrisa que acompañó a sus palabras daba cuenta que "el pago" sería solo una formalidad.

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23/09/2007, 22:25
Samuel

- Los dioses parecen estar siendo generosos -respondió el clérigo con un profundo suspiro- Ayer mismo llegó un grupo de aventureros ofreciendo su ayuda.

- Pero empecemos por el principio. Mi nombre es Samuel, Padre Samuel para los de aquí. El fuego que habéis visto ha sido para cortar la expansión de una plaga que ha afectado al pueblo, la misma que ha secado los cultivos. A través de la intercesión de los dioses, he sabido que el origen está en la mina. Así que en estos momentos estamos a la espera de tener noticias. Enviamos a un grupo hacia el Sur, no sabemos nada de ellos. Y un hombre hacia el norte, que según los aventureros fue asesinado. Y además esos aventureros se fueron a la mina, con la madre de este niño, que se empeñó en ir porque su padre eera el Capataz.

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23/09/2007, 22:30
Estefano

- Yo soy el dueño de la mina. Precisamente antes de llegar estaba comentando que me gustaría ir hacia allá, a asegurarme que Arianna está bien, y ver si los aventureros pueden estar en peligro. Pero no soy un hombre de acción me temo, y mi criado no quiere venir. Si vos queréis acompañarme... iremos a asegurarnos que este muchacho recupera a su madre. De hecho jamás debió ir, el conocer qué causa la plaga es tarea de aventureros, no de una ama de casa.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Tirada: 1d20
Motivo:
Resultado: 19

Notas de juego

(iremos en esta escena al ritmo que tú puedas)

Tira averiguar intenciones.

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24/09/2007, 04:00
River-sen

- Plaga? - la palabra surgió de los labios del monje sin siquiera pensarla. Los recuerdos de la enfermedad de su padre se mezclaron con las instrucciones de su superior de conocer el mundo y lo llevaron a una única posibilidad. Dirigirse a la mina y acabar con ese peligro.

La presencia del tal Estefano, quizás, era la oportunidad que River-sen necesitaba. Lo miró con curiosidad, tratando de averiguar cuan sincero eran sus palabras, pero con una única idea en la cabeza. Combatir esa enfermedad y no permitir que este niño, Serdna, sufriera por su madre como el lo había hecho por su padre.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d20+2
Motivo: Averiguar Intenciones
Resultado: 14+2=16

Notas de juego

Mientras siga teniendo un montón de partidas semi-paradas por vacaciones puedo avanzar bastante (por lo menos entre semana, los fines de semana no tengo tanto tiempo)

Igualmente supongo que esas partidas se empezarán a acelerar en cualquier momento y allí si se me complicará un poco, pero mientras tanto... aprovechemos.

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24/09/2007, 09:32
Samuel

- Unas fiebres que empezaron en los mineros y que después se han extendido por el pueblo. Su naturaleza la ignoro y están más allá de mis capacidades de curación. El destino por ahora de todos los infectados ha sido la muerte, salvo el mío propio, que milagrosamente he podido sobrevivir. Cuando alguien enferma, se viene al templo, a una sala que tenemos para ello, y su familia se viene con él por si está infectada. Los vecinos queman su casa y todos rezamos a los dioses. El sistema ha permitido controlar la plaga. Ahora mismo no tenemos ningún infectado. He podido saber, por intercesión de Astarlar, aunque a un alto precio como podéis ver; que el origen del mal está en la mina, y desde allí se extiende por el agua y a través de las ratas. Bebemos el agua que almacenamos de la lluvia, pero nuestros campos se han secado, y hemos matado tanto a las ratas como a los animales domésticos que las cazan -Explicó Samuel.

- Si deseais acompañar a Estefano -al decir el nombre dio la impresión de que una sombra cubrió su rostro por un instante- os lo agradeceremos. La madre del chico está allí, así como los aventureros, y seguramente necesiten cuanta ayuda sea posible. Yo he de quedarme, por un lado mis fuerzas están agotadas y no sería de utilidad, y por otra soy el único que recibirá a cualquiera que venga al pueblo, si viene alguien más.

Notas de juego

El interés de Estéfano parece genuino, piensas que puede ser pariente de la mujer o un amigo cercano.

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24/09/2007, 15:12
River-sen

Tras asentir a las palabras del clérigo con un seco cabezazo River-sen miró al tal Estéfano con curiosidad. Sus ropas denotaban riqueza y, más allá de su natural deseo de ayudar a evitar que la plaga se propagase, el interés que parecía demostrar por la madre del pequeño podía ser aprovechado.

- Si realmente sois el dueño de la mina, entiendo vuestra preocupación - le dijo al noble. - Puedo acompañaros y ayudar a esos aventureros, aunque os dareis cuenta que dicha tarea tiene tiene su riesgo... -

No hacía falta decir nada más. Probablemente además de su natural deseo de evitar que la enfermedad se expandiese, podría obtener algún beneficio por sus acciones.

- Cuando vos gusteis... aunque supongo que necesitaremos algunas antorchas para revisar esa mina. Espero que podais proveerlas como jefe de la misión - Tan serio como lo permitían las circunstancias, el monje apretó sus puños, relajando su cuerpo para estar listo para lo que pudiera venir.

Notas de juego

Me acabo de dar cuenta que no tengo antorchas... espero que Estefano las consiga y que esté dispuesto a pagarme algo por la tarea de acompañarlo.

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24/09/2007, 15:22
Estefano

- Había numerosas antorchas en el almacén de la mina, compré una buena cantidad el mes pasado, y no creo que se hayan usado ni una cuarta parte en ese tiempo. En cuanto a la recompensa, por supuesto, el pueblo ha ofrecido un dinero por librarnos de la plaga y yo he puesto alguno más de mi bolsillo. El total asciende a 350 monedas de oro, así como comida y techo en este pueblo mientras quede alguien vivo que recuerde lo que hicieron por él. Si le parece bien, partamos de inmediato, temo por esa gente.

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24/09/2007, 15:33
River-sen

- Partamos - El elfo, serio, no se va por las ramas. Ya consiguió su recompensa "Aunque podrían ser más generosos..." y las antorchas que necesitaban "Aunque... " - Este almacen está en la mina? o en el pueblo? Supongo que necesitaremos luz al internarnos en las minas, si las antorchas están adentro será más dificil -

Acomodando su pequeña mochila a la espaldade forma que no le moleste para moverse, River-sen espera que Stefano abra la marcha - Cuando querais, estoy listo - comenta sin demostrar ninguna preocupación - Vos conoceis el camino, supongo -

Notas de juego

A todo esto, que hora es? Y como estoy de cansado, los elfos no necesitan dormir mucho, pero no se si cuando vimos el pueblo era el comienzo de la jornada (y estaba descansado) o ya llevabamos un montón de horas caminando.

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24/09/2007, 15:49
Estefano

- Las antorchas están en la mina, pero el almacén está cerca de la entrada. De todos modos siempre hay antorchas en la entrada, no habrá problemas. Y si nó de todos modos...

- ¡¡Samuel!! ¿Podemos llevarnos una antorcha para entrar en la mina?

El aludido contestó con un gesto afirmativo desde el fondo del templo, tras lo que Estefano tomo una antorcha apagada y salió decidido.

Durante el camino Estefano indicó que no había caballos, pues habían soltado a los animales hacia los montes para tratar de salvarlos del contagio, con la esperanza de recuperarlos más adelante, por lo qeu no quedaba más que caminar.

Nada más salir del pueblo, la misma carretera pro la que había venido el monje sirvió como ruta de salida, aunque ahora a medio camino tomarían el desvío hacia el norte, hacia la mina.

Nada perturbó la habitual calma en aquellos parajes resecos. Aunque hacia el Sur River-sen creyó ver algún brillo en las montañas. Sin embargo, su atención estaba ahora en el norte.

Notas de juego

Estás a media mañana, tu rudo entrenamiento te ha curtido el cuerpo, no notas cansancio alguno ahora mismo.

Bien, voy a hacerles un resumen a los del otro lado, y ya te uno al grupo en breves. Esta parte ha ido más rápido de lo que yo creía :)

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24/09/2007, 16:10
River-sen

- Caballos. No hay problema, igual prefiero caminar - contestó el monje a las palabras de su nuevo "jefe". - No creo que puedan entrar en la mina, no? Y dejarlos afuera sin protección no me parece correcto -

Con la habitual agilidad de su raza, River-sen se movió en el camino primero y en la senda hacia la mina, después, con soltura. Sus manos acariciaban por momentos las "tachas" de su cinturón en tanto que su ojos verificaban el entorno, sin ganas de tener que enfrentarse con algun animal salvaje.

Mientras caminaba, ya con un objetivo en mente, intentó averiguar lo que pudiera del lugar hacia donde se dirigía. "Mi maestro siempre me decia que no solo debo confiar en mis fuerzas, sino en mis conocimientos, asi que mejor trato de averiguar en donde me meteré"

- Estefano - se dirigió a su compañero - como de profunda es la mina? por lo que comentas hay un almacen cerca de la entrada, pero... tiene muchos niveles? Acaso han tenido problemas con anterioridad que nos puedan hacer suponer a que nos enfrentamos? -

El camino no era tan largo, pero si lo suficiente como para que el elfo pudiera seguir preguntando

- Sobre estos aventureros... que me podeis decir? Si entendí bien el problema es el agua, suerte que tengo mi odre lleno, y las ratas, pero no me extrañaría que hubiera algo más... El agua no se infecta así como así. No quisiera confundir a esos aventureros que nombrasteis con los causantes del problema -

Las preguntas y sus respuestas ocuparon el tiempo durante la caminata, mientras el monje, atento, seguía observando el entorno, sin ganas de que nada, ni nadie, lo sorprendiera.

Notas de juego

Tu manejas los tiempos. Yo tampoco te di mucho pie para alargarlo, pero supuse que la idea era ir a la mina de una vez.

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24/09/2007, 17:01
Estefano

- La mina no tiene más que un nivel, tuvimos suerte por ahora, hay un almacén a la izquierda y a la derecha una amplia cámara en cuyas paredes hay pequeños pasadizos siguiendo las vetas, no muy profundos. Y eso es todo, no hay niveles siquiera. Nunca habíamos tenido ningún problema, ni siquiera de accidentes, pues su simplicidad no los provocaba y los obreros siempre han sido muy buenos.

- Respecto a los aventureros, no puedo decir gran cosa, llegaron anoche y durmieron en el templo, partieron al amanecer hacia la mina. Parecían gente de confianza. Entre ellos había un clérigo de Astarlar, como Samuel, y para mí ese es aval suficiente. Tampoco estamos en lugar de cuestionarles, la situación es un tanto desesperada.