Tras una breve excursión a Olfden regresáis a Falcon Hollow.
El invierno parece haber venido con vosotros al pueblo.
El suelo cruje cuando pisáis la escarcha y el otoño se rinde sin resistencia.
El frío impregna toda la ciudad y el río Foam está congelado. Los pájaros han abandonado sus nidos en busca de climas más cálido y su ausencia acrecenta el frío abrazo de un invierno temprano.
Pero ahora el lecho helado del río está invadido de tiendas de campaña, gritos de júbilo y jugosos olores. La feria ambulante de Quinn ha llegado a la ciudad
Vamos empezando
Tras un descanso de la aventura anterior, donde rescatamos a esos condenados niños de las garras de una muerte segura, y eliminamos al maldito kobold que hacia aquellos macabros rituales, regresamos a Falcon Hollow. Aunque los rayos de sol a veces te hacían olvidar el frío, al llegar la tarde en esa zona se levantaba ventisca y le tocaba su turno para recordarte que el camino de vuelta se nos había echado encima el invierno.
Pero bueno, acostumbrados a la vida aventurera, a recorrer los caminos y a resguardarnos en los bosques y las rocas, no era nada que una buena capa (o mejor, una buena piel de oso) no pudiera mitigar. Además, hemos tenido suerte, pues hemos llegado a tiempo para disfrutar de la feria ambulante de Quinn.
Seguro que el invierno no se hace tan largo con ella aquí...
¿Qué sabemos de la feria ambulante esa?
Una feria. - se queda mirando Soker como si algo en su herencia cultural se hubiese encendido.
Deberíamos ir a ver qué podemos encontrar.
Tirada: 1d20(+9)
Motivo: Saber (local)
Resultado: 18(+9)=27
27 en Saber (local) para la feria...
Sin duda. Si es una feria, habrá lugares en abundancia donde beber y relajarse. Y habrá que estar alerta, pues no todos hacen justicia a estas alegres ocasiones.
Sabes que esta feria ambulante tiene como líder a un antiguo aventurero semielfo llamado Namdrin Quinn. Dejó su vida aventurera al fallecer su esposa y compañera. Montó la feria, pero se deja ver muy poco. Tiene contratado a un minotauro, que también fue de aventuras con él por temor a que fuera peligroso si campaba a sus anchas. La feria tiene atracciones, monstruosidades y juegos.
Casi todos los habitantes de Falcon Hollow están ya en la feria, y los que no seguro que irán pronto.
Creo haber oído que hay juegos y atracciones muy interesantes. Será mejor que nos acerquemos pronto.- comenta Soker a sus compañeros.
Muy bien. Seguro que será algo curioso de ver.
Para curiosear os acercáis a las taquillas de la feria. Dos podios hechos de cajas de manzanas apiladas forman las taquillas que indican la entrada al carnaval. Muchos habitantes se apelotonan junto a ellas con ganas de ver sus zancudos, sus atracciones y toda clase de bichos raros. Los feriantes trabajan tras las taquillas vendiendo billetes a los distintos eventos y hacen lo que pueden para controlar las colas de gente emocionada. Unos cuantos mendigos que se protegen del frio con harapos pide n limosna por un poco de comida. Muchos son niños o ancianos que han quedado minsuválidos por accidentes en los aserraderos o que han enfermado de pulmonía. Ricos mercaderes ignoran a los indgentes, haciendo oidos sordos, mientras que algunos leñadores se burlan o incluso golpean a los mendigos mientras se dirigen al interior de la feria.
Rumuk se acerca a los mendigos, en especial a los niños, y les da unas monedas:
Tomad, no es mucho, pero Iomedae no puede dejar que los más necesitados sufran mientras todo por aquí es alegría.
Doy 2 po, 4 pp y 4 pc.
Soker se acerca a las taquillas y las mira divertido mientras observa los distintos puestos y entretenimientos que ofrece la feria.
Pues eso, que echo un vistazo.
Los mendigos miran con lo ojos como platos las monedas de oro. Algunos de los niños incluso besan la mano del semiorco.
Mientras tanto, Soker cotillea un poco y se asoma por el curioso muro de nieve y hielo que se ha hecho alrededor del escenario. Hay un una cadena de carros enganchado a un carromato que da vueltas ocasionalmente por toda la feria. En varias tiendas la gente entra y sale mientras los feriantes gritan el consabido Pasen y vean en ellas. Una de las tiendas al aire libre es una taberna improvisada. También se ve una extraña máquina fabricada con los restos de un molino donde los transeuntes prueban su fuerza. En el lago helado la gente patina y al fondo se puede ver un laberinto de paredes heladas.
Borrate las monedas
Rumuk, una vez deja atrás a los mendigos, se fija rápidamente en los restos de molino para probar fuerza.
¿Por qué no puedo probar yo?
El semiorco se encamina decidido a participar.
Las monedas ya me las borré cuando dije que las daba.
Taaate quieto. Ande sta tu entrada dice uno de los feriantes a Rumuk.
¿Entrada? ¿Dónde puedo adquirirla?
Cita:
Ieee, paayooo XD
Entradas... Creo que estamos interesados en coger alguna. ¿Cuánto nos cuestan? - dice Soker mirando al feriante mientras tantea su bolsa para pagar.
A cobre el billete, y la voluntá dice el feriante.
Rumuk saca una moneda de cobre y se la lanza al feriante.
Hago lo mismo: abro la bolsa pequeña de las monedas sueltas (no voy a sacar allí las monedas de oro, me parece que habrá bastantes rateros por allí rondando) y le pongo una en el mostrador, esperando que me de el pase.
Soker se encoge de hombros, echa la mano a la bolsa, saca una moneda de plata, hace como que rebusca y se la entrega al feriante.
Quédate con el cambio. - dice mientras le guiña un ojo.
Moneda borrada.