Partida Rol por web

Casa de Muñecas - HLCN

Día 2: Momento de paz

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25/03/2014, 05:08
Narrador

La mañana había llegado y la tranquilidad reinaba en el hotel, aunque no estaban seguros por qué había tanta paz. Tal vez, una hecatombe como la del día anterior había hecho que una mayor calma reinara el lugar.

Algunos salían de sus habitaciones, asustados, esperando encontrar lo peor como la noche anterior pero los fallecidos estaban en sus cuartos, algunos sí se habían quedado a dormir en el salón que tenían en común. Hacen conteo y todos parecen estar allí, pero no parece haber realmente acabado. La voz de su anfitrión resuena por un altavoz una vez más.

- Vaya, esta vez no ha habido una muerte. ¿Será que ha terminado? ¡Pues, no! - solloza y parece que le costara hablar, mas no se detiene - ¡Mi madre sigue así y eso indica que aún hay maldad entre ustedes! ¡Lo sé y por eso no puedo dejarlos marchar! - los sollozos lo detenían de continuar hablando, pero la urna que él había dejado entre ustedes el día anterior brillaba con una luz verde en su interior. Todos suponían lo que eso significaba: una vez más, habría que votar.

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25/03/2014, 09:10
Benén Tinelli (Ben)

Ben se quedó dormido de puro cansancio en uno de los sofás del lugar, sentado en una posición imposible... sus ojos se entreabren de mañana al escuchar al chino de los huevos tras los altavoces...
Se sirvió un café y entonces calló en las palabras de Tae... -mi madre sigue así... dice?... significa eso que no esta muerta?...- piensa en alto, con cara de mal despertar, mientras se empieza a liar un cigarro, espacio sin humos decían... estaba claro que no le iban a dejar salir a fumar fuera... así que si saltaban los sensores de algún tipo de aspersor contra incendios no seria culpa suya...

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25/03/2014, 09:26
Lisseth Lefebvre

Lisseth había estado echando cabezaditas en un sofá, ya que no había podido pegar ojo más de 20 minutos.

Al escuchar la voz de Tae por los altavoces decidió levantarse para estirar un poco las piernas. Parece ser que dormir juntos les había salvado a todos, eso está bien, no tenía ganas de seguir viendo como gente volvía a morir delante suyo sin poder hacer nada.

Miró la urna como brillaba con una luz verdosa, y negó con la cabeza. Esto no puede seguir así...

Se acercó a Ben al escucharle hablar.

-¿Crees que no está muerta entonces? -suspiró y frunció el ceño mirando hacia la puerta donde el día anterior se fué Tae- A este hombre se le ha ido totalmente la cabeza... 

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25/03/2014, 09:45
Louis Nicolás de Poitiers

¿Pero qué clase de locura es esta, tío?. - Digo fuera de mí. - ¿Es que acaso estás desquiciado y quieres seguir provocando muertes hasta que te sacies?

Doy vueltas agitado por toda la habitación, que no haya muerto nadie es un gran logro y pensé que podríamos irnos de allí por fin. Sin embargo, aquel tío no parecía tenerlo tan claro y quería seguir obligándonos a votar quién de nosotros muere. ¿Es que esa pesadilla no iba a tener fin?

No podemos permitir que nos sigan manipulando, esto está claramente planificado. - Hago una pequeña pausa. - Aunque dentro de los delirios de un sádico sociópata. Tenemos que hacer algo.

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25/03/2014, 09:58
Charles Showman

Charles aunque estaba preocupado por este suceso prefirió quedarse en su habitación asegurándose que todo estaba bien cerrado para que no hubiera ningún problema, ya que el no podía dormir en los sofás donde iban a dormir los otros ya que eran demasiado incómodos para el.

Descanso plenamente en aquella habitación y no hubo ningún problema durante la duración de aquella noche. Cuando se despertó fue a investigar si le faltaba algo en la habitación pero estaba todo en orden así que fue a vestirse y cogió una libreta para apuntar todo lo que pasaba durante el día y salio por la habitación y se dirigió donde durmieron los demás huéspedes de aquel hotel para enterarse si había sucedido alguna muerte aquella noche. Llego y vio a una persona que se había despertado y estaba sentado en uno de los sofás mirando al horizonte como si estuviera pensando en algo. Cuando fui a preguntarle si había ocurrido algo, de pronto, se escucho una voz en los altavoces y con aquellas palabras pude saber que nadie había caído y no había que lamentar nada.

Pero parece que el juego continuaba y iba a seguir muriendo gente y nadie sabia como parar a este demente. La pregunta era:

¿alguien le pararía?

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25/03/2014, 10:16
Amanda Hopkins

No había ocurrido ninguna muerte por la noche, quizá lo de dormir en grupo sirviera. De todos modos, al abrir los ojos y aunque no había muerto nadie esa noche bastó solo unos segundos para darse cuenta de que nada había terminado.

Seung siguió con sus locuras, hablando ahora de su madre como si estuviera en un estado extraño diferente a la muerte. Estado que según desaparecería cuando unos hipotéticos culpables encontraran la muerte. Consternada, Amanda no tenía mucha idea de como seguir.

-Seung sigue empeñado en que nos matemos. Desde luego, yo soy la primera que no me fío de él, pero no debemos negar que ocurren cosas raras. Y que quizá haya alguien que ayude a hacerlas posible.

La idea de que hubiera un asesino entre ellos era nefasta para su cordura creando paranoia, pero no podían pasar por alto esa posibilidad o estarían a merced de quien fuera que hacía eso.

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25/03/2014, 10:47
Keelin O’Connor

Keelin habia dormido sentada en el suelo y apoyada contra una pared. Al escuchar que la gente empezaba a despertarse, abrió los ojos con pesadez y miró a su alrededor con temor mientras se incorporaba lentamente, sintiendo en cada músculo la rigidez de haber pasado la noche en el suelo. Con la mirada repasaba a todos los presentes, hasta asegurarse de que no faltaba nadie esta vez. 

La esperanza empezó a aparecer en sus ojos. Quizá podrían marcharse ya y dejar toda esta locura... Pero entonces la voz del chino psicópata sonó por la megafonía y Keelin apretó las mandíbulas al escuchar sus palabras. - No ha muerto nadie... Por lo que dice, ni siquiera su madre está muerta. ¡Pero aún así quiere que votemos y nos matemos entre nosotros! - Protestó la joven, con la voz todavía un poco ronca después de dormir. - Joder. Necesito lavarme la cara antes de seguir con esta locura.

Keelin salió del salón en dirección a su habitación y tras asearse volvió a reunirse con el resto. Su apariencia habría sido perfecta si no fuese porque en su rostro empezaban a notarse las marcas de la angustia acumulada durante dos días. Una vez abajo se dirigió al lugar donde el día anterior habían preparado el desayuno. Llevaba sin comer nada desde la fiesta de la plaza y pronto desfallecería si no ingería algún alimento. Con un café y algo de comer buscó un sillón libre donde sentarse. Desayunó en silencio, sin tener realmente hambre, perdida en sus propios pensamientos durante varios minutos, hasta que finalmente decidió participar. 

La joven se levantó y dejó la taza vacía en su lugar para empezar a caminar por el lugar. Se detuvo finalmente delante del Dr. Wolfgang para hablarle. - Su idea de votarnos a nosotros mismos podría ser buena si así garantizáramos que nadie moriría... Pero ya lo vimos ayer, da igual que no votemos, da igual que nos votemos todos a nosotros mismos... El señor Seung puede controlarnos con esas muñecas y hacer que matemos a quien él quiera. Ya vimos ayer lo que sucede si hay un empate. Probablemente si no elegimos nosotros, escogerá él al azar...  - Keelin bajó la mirada durante un instante. - Y además, yo tengo un problema. No puedo participar en eso, o no funcionaría... Pero si sigo sin votar tomará represalias contra mí. 

Después alzó la mirada - Sí, tenemos que hacer algo. - Dijo, mirando a Louis y asintiendo levemente con la cabeza. - ¿Pero qué? ¿Alguien tiene alguna idea para librarnos de esto? - Terminó, señalando con la cabeza la urna con esa muñeca en su interior y mirando al resto de personas en la sala.

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25/03/2014, 15:31
Wolfgang von Richter

Wolfgang había permanecido con el grupo durante la noche, decidió dormir con ellos para aumentar, relativamente, su seguridad. Intento permanecer despierto el mayor tiempo posible para estar atento a que sucedía. Pero acabo por caer en sueños, sueños en que las muñecas que les rodeaban se levantaban y le arrastraban a algún lugar oscuro. Sueños que acompañaban al lugar.

Acabo por despertar mas bien pronto cuando apenas llevaba un par de horas de sueño. Pero estaba acostumbrado, sus largas veladas despierto estudiando le habían preparado para ese tipo de situaciones.

Se levanto perezosamente y se fue sin decir palabra alguna a su cuarto donde se arreglo un poco y cambio de ropa, mas pronto que tarde volvió con todos los demás. Se tomo una taza de leche caliente para desayunar y no probo mas bocado que ese en toda la mañana. Cuando ya había acabado de beber y limpio su vaso fue con tranquilidad hasta donde estaban las muñecas para seguir observándolas. Nunca era mal momento para estudiarlas, sobretodo si tenía en cuenta que cualquiera podía ser su ultimo momento. Y le gustaría pasarlo haciendo eso que mas disfrutaba, estudiar antigüedades.

Estaba enfrascado en ello cuando noto que una de las chicas estaba hablándole. Escucho atentamente lo que le decía y con un leve suspiro a un paso entre la negación y la desesperación le respondió en el tono mas amable que pudo encontrar.

-Seguramente alguien caiga hasta que el juego pare. Pero al menos nuestra conciencia estara limpia al saber que la culpa no es nuestra. Yo seguiré votando por mi. No considero que mi vida valga mas que la de otro y no tomare esa decisión.

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25/03/2014, 15:59
Ian Kovaliov

Decidió quedarse junto al resto a pasar la noche, al fin y al cabo, estando todos juntos estarían más seguros. En un primer momento intentó mantenerse despierto, observó a la gente, observó las muñecas, cualquier cosa que lo mantuviera despierto, aunque al final el cansancio y las emociones vividas pudieron con él, quien se dejó caer en los brazos de Morfeo.

Despertó algo sobresaltado al notar movimiento a su lado. Miró durante unos segundos la habitacion. No faltaba nadie y no parecía haber habido ningún incidente durante la misma, o por lo menos todos parecían estar bien. Se levantó y estiró un poco su espalda, no estaba acostumbrado a dormir en el suelo. – Te lo pasarrras bien Ian… - murmuró malhumorado para si las palabras que le dijo su colega el Dr. Vladimirov cuando le comentó lo de la casa de muñecas.

Pasó, en primer lugar, por la cafetería, necesitaba café en vena para poder despejar su mente y afrontar de nuevo otro desmotivante día. – Buenos días señor y señorrrita… por decir algo. – comentó al llegar donde se encontraban Wolfgang y Keelin. – Votar por uno mismo no valer para nada doctor, ser más útil votar por chino loco, así tocar más pelotas!!. -

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25/03/2014, 19:36
Yorgan Yansen

Yorgan, el judío, bajo de su habitación con la misma ropa que ayer y con interés en desayunar, mantener la mente ocupada un par de minutos mientras se despertaba, pero en lugar de eso observo que todos estaban aun allí una buena noticia, pero las palabras que llegaron del altavoz poco después le quito toda esperanza.

-Yo mas bien entiendo que espera que su madre resucite, si acaba con todos nosotros. O como dice el quien esta tras la "maldición".-Se ayudo con los brazos.-Contesto a quienes preguntaron en alto, y que seguramente nunca tendrían respuesta por parte de Seung.

-Esta claro que quiere que repitamos lo mismo de ayer, una vez y tantas como sea necesario hasta que su perturbada mente se quebré o se canse. Me temo que estamos encerrados en una jaula de cobayas.-Estaba molesto, pero no quería gritar.

-Por cierto, votar por el no valdrá de nada, es tan cobarde y esta tan ciego que quien le vote a él seguramente se gane un auto voto. No permitirá que le pongamos una mano encima. Lo que no entiendo es a sus gorilas.-Se giro hacia las escaleras donde se escondía el chino.-Si continúan con esto, son claramente cómplices de asesinato. No tendrán derecho a nada cuando lleguen las autoridades y los arresten a todos. ¿Me oyen?-Gritaba a los guardaespaldas.-Su trabajo es ridículo, se van a pudrir en la cárcel por seguir a un niño desequilibrado con aires de vengador. ¡Sean mas listos! ayúdennos a salir de aquí.-Continuaba apelando al sentido común de la gente.

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25/03/2014, 22:11
Benén Tinelli (Ben)

Tras escuchar a Yorgan, Ben le responde a la chica francesa - ...Lo que dice el hombre tiene bastante sentido, puede seguir muerta... pero el chino desde luego esta fuera de control - se frota un ojo - Pero Yorgan, quizá... - le dice - tal y como nos deja claro nuestro ruso amigo... eres ruso, ¿no? - le dice al otro - lo mejor que podemos hacer es tocar las pelotas... vamos... buscar el voto nulo votando a Tae, y que sea lo que tenga que ser... En tal caso, creo que lo peor que podría pasarnos seria algo tan estúpido como alargar nuestra estancia en este hotel, porque estaríamos retrasando un día mas la búsqueda del... ¿culpable? ¿culpables?...- que es lo que pretende el chino... - piensa - pero no lo se...

- Eso si, tenemos que estar todos atentos y de acuerdo, si alguien se despista se comería un autovoto y nos cagará la prueba... emm, esto... suicidándose ...aunque todo esta por ver, claro... y de paso veremos quien se niega.... - piensa

- ¿A alguien se le ocurre algo mejor? termina.

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25/03/2014, 22:42
Narrador

Las discusiones se hacían tensas y mientras las votaciones se acercaban, sólo seguía aumentando.

Nuevamente, algo se sentía una extraña energía en el ambiente y todos guardaron silencio. Un aura extraña llenaba uno de los cuartos de la segunda planta y todos voltearon al instante. De una de las habitaciones, sale una persona, una persona que vieron incinerada y desangrada. Kenneth se levantaba, tal y como había hecho el día anterior Reuel.

Muchos no pudieron evitar la sorpresa y corrieron a su habitación. Parecía estar intacta. No había un solo rastro de aquel incendio que había ocurrido la primera noche que pasaron en ese hotel.

Kenneth agarraba su pecho, casi como si su cuerpo apenas estuviera aprendiendo a vivir y se encontraba desorientado, al igual que Reuel el día anterior. En su cuerpo no había rastro de ninguna de las heridas que le ocasionaron la muerte y estaba tan vital como cualquiera de ustedes.

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25/03/2014, 23:10
Kenneth Vernell

Me levanto desorientado y automáticamente me llevo las manos a la cabeza y me toco, preocupado por si estoy entero y no sigo siendo una muñeca.

¿Qué cojones ha pasado? —miro alrededor a la gente que se ha acercado a mi habitación. Echo un vistazo en el espejo y veo que no tengo heridas. Mi mano gravita casi por reflejo a mi bolsillo por un lado, en busca de mis cigarrillos. Por otro lado, busco mi libreta.

A la mierda lo de no fumar, con permiso... —digo, abriéndome paso entre los presentes para bajar mientras me enciendo un pitillo. No miro a nadie fijamente, necesito moverme y salir de ahí. Estoy temblando y me rasco a cada poco.

Cuando llego al salón miro mi estela para fijarme en la gente.

¿Dónde está ese cabronazo del chino? Hm... —pregunto, y añado un pequeño gruñido como risa—. Se va a cagar. ¿Alguien ha visto mi libreta?

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25/03/2014, 23:19
Keelin O’Connor

Keelin escuchaba a todos los que conversaban atentamente, arrugando levemente el ceño por la preocupación, cuando una extraña sensación llenó el lugar, como el día anterior y volvió la mirada hacia las escaleras por las que descendía el hombre que había dicho ser investigador paranormal.

Tras los primeros segundos de sorpresa, recordando cómo estaba su cadáver la mañana anterior, respiró aliviada al verlo entrar en el lugar y respondió a una de sus preguntas. - El señor Seung nos ha encerrado. Dice que no nos dejará salir hasta que no elimine la maldad que hay entre nosotros... O algo así. Nos obliga a votarnos unos a otros con esa urna. Ayer algunos votaron y después controló al señor Showman con algún tipo de vudú para que matase al muchacho que había revivido antes, Reuel. Hoy no ha muerto nadie, pero aún así quiere que votemos otra vez. - Resumió para poner al día al hombre antes de mirarlo esperanzada.

- Usted sabe de estas cosas raras, ¿verdad? Lo dijo el primer día... ¿Tiene alguna idea para salir de aquí? O... ¿Sabe cómo podemos eliminar la maldición de las muñecas o lo que sea? Y, perdone que se lo pregunte así, - añadió lanzada - pero... ¿Usted estaba muerto? Todos lo vimos calcinado... Y su habitación también lo estaba. ¿Puede explicarnos qué le ha pasado?

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25/03/2014, 23:43
Hikari Ayase

Pasé la noche en la sala con los que se quedaron, aunque pareciera absurdo me sentía más segura estando con ellos. Cuando me desperté, lo primero que hice fue comprobar que todos estaban bien y, al menos los que se quedaron juntos, estaban todos bien.  Subí a mi habitación, me di una ducha y bajé, no quería estar sola más tiempo del estrictamente necesario. El sistema de sonido funcionó de nuevo, el loco psicópata nos informó de que no había muerto nadie más, por lo que suspiré aliviada, sin embargo ese pequeño respiro duró poco, teníamos que votar de nuevo.

-Quiere que nos matemos unos a otros por algo que probablemente provocó su madre y nosotros vamos a pagar por ello. Nada de lo que dice tiene sentido, le va a dar igual si todos tenemos un voto o si e votamos a él, nos matará cuando quiera y como quiera. Controla nuestras muñecas y por tanto nos controla a nosotros. A no ser que decidamos cargar todos juntos contra él y sus empleados, iremos muriendo uno a uno, no estará satisfecho porque está loco.

El regreso del parapsicólogo ya no me sorprendió tanto como con Reuel, solo esperaba que sirviera de algo, ahora mismo era el único que podía orientarnos un poco sobre lo que estaba pasando.

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25/03/2014, 23:48
Narrador

Cruzarse con Kenneth vivo parecía ser sólo el inicio de una sorpresa porque una luz sobrenatural salía de la tercera planta. Sólo había un muerto en ese lugar y todos sabían quién era. La mujer cuyo cuello había sido destajado. Loren.

Suben con rapidez y la encuentran, saliendo de su habitación, extrañada de estar de vuelta, confundida. Pasa la mirada por todos pero no sabe si creer que ha vuelto. Al parecer, había recibido una segunda oportunidad, al igual que Kenneth momentos antes que ella.

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25/03/2014, 23:51
Esther Grenholm

Al despertarme lo hice sobresaltada, en tensión. Tardé algunos segundos en recordar dónde me encontraba, y el entumecimiento de mi espalda me hizo pensar en que si esto se volvía a repetir lo mejor sería bajar entre todos los colchones de las habitaciones.

Poco a poco, mientras terminaba de despabilarme, fui escuchando lo que los primeros en levantarse tenían que decir sobre el mensaje del señor Seung, pero yo únicamente negué con la cabeza.

Unos minutos más tarde llegó una nueva resurrección, tan sorprendente como la anterior, pero en esta ocasión había algo más: toda la habitación calcinada volvía a estar intacta.

- No tiene ningún sentido. - Dije en voz alta, como si eso continuase la explicación al señor Kenneth. Gesticulaba de de forma exagerada, nerviosa por la situación. Me moría de ganas de darme una ducha y cambiarme de ropa como otros habían hecho, pero sabía que no debía perderme nada. Casi podía notar la suciedad en el cuello de mi camisa comenzando a hacer que me picase la piel. - No tiene sentido que nos obligue a votar si no ha muerto nadie. ¿En serio vamos a seguir así hasta que su madre resucite? Aunque de verdad hubiera un responsable no tenemos cómo saber si ya hemos dado con él, porque que no haya más muertos parece no significar nada. - Expliqué, antes de observar cómo la mujer de pueblo volvía entre nosotros.

- Señor Seung, ¿por qué no les pregunta a ellos cómo lo han hecho, y nos deja tranquilos? - Propuse, aún creyendo que no serviría de nada.

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26/03/2014, 00:04
Lisseth Lefebvre

Se cruzó de brazos al ver los nuevos resucitados y ladeó la cabeza. Que un muerto reviva le parecía raro y la sorprendía, pero que hubieran revivido dos más, ya lo encontraba casi por costumbre...

-Esto empieza a ser absurdo, muertos que reviven de un día para otro... Va a tener razón la americana (Esther), el chino debería de preguntarle a ellos como lo han hecho, así podríamos irnos todos tan panchos... - puso los ojos en blanco y se encogió de hombros.

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26/03/2014, 00:14
Alec Schnieper

Al no haber muertes aquella noche había conseguido que Alec se mostrase un poco más relajado y tranquilo de lo habitual. Sin embargo, la voz del anfitrión hizo que frunciese el ceño. Ha perdido la cabeza... La cosa no hizo más que mejorar cuando volvió el primero de los muertos. Alec se atrevió a sonreír.

Cuando vio que Loren también volvía, levantó la cabeza del suelo y saludo a ambos caídos con una sonrisa tímida. Bienvenidos... Os encontráis bien?

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26/03/2014, 00:17
Kenneth Vernell

No tengo ni idea de qué es lo que ha pasado conmigo. Sé que alguien me atacó, me clavaron algo, y luego me quemaron, o algo así me pareció sentir. Luego... luego me vi como si fuera una muñeca en un estante. Una muñeca vieja y rota, sin ojos —digo, gesticulando con las manos ante mi cara—. Y estaban la mujer esa ruidosa de las tetas grandes, Loren, la niña del pelo azul y el chiquito ese, Reuel, que se fue y volvió. Así que quiere que esto sea una batalla de todos contra todos, si no nos matan las muñecas, nos matamos entre nosotros. Pues fantástico... —pego una profunda calada al cigarrillo y echo la humareda a un lado con una mueca de molestia, entonces me doy cuenta de que aparece precisamente Loren por ahí, y me quedo mirándola con curiosidad—. Esto es cosa de fantasmas o demonios, estoy seguro. Ese chino está muy loco... solo puede estar poseso, y las muñecas son un recipiente muy común de espíritus tanto buenos como malévolos. Creo que es evidente de qué tipo hablamos en este caso, ¿no?