Partida Rol por web

El nuevo día llegaba y con él, las esperanzas de muchas se alzaban al no ver ningún cadáver visible en el suelo del salón pero así como había muchos de ustedes que estaban allí para verlo, algunos de ustedes no salieron de sus habitaciones esa mañana.

El miedo y la tensión podían tocarse en el ambiente, a pesar de la cantidad de muertes que habían habido, algunos no se acostumbraban al golpe que producía despertar con un nuevo muerto entre ustedes. No podían identificar con facilidad quiénes eran los muertos, así que se dirigieron al lugar que les daría la respuesta: la estantería. Había dos muñecas en el suelo. La primera, llevaba ropa algo formal y unos lentes. Por las facciones y su cabellera, pudieron notar que era la muñeca de Efraín, el cual comenzaron a buscar por las habitaciones, encontrando así su cuerpo aún dentro de su cama en la habitación 203, con los músculos completamente contraídos, los ojos totalmente blancos y babasa saliendo de su boca. Su mirada perdida y el tono poco colorido de su piel, hacía que sus pieles se erizaran. Era una imagen tan impresionante como al muerte de Ben.

Aún faltaba una muñeca cuyo cabello era castaño, no muy largo ni muy corto pero sus rasgos eran característicos: Amanda, la tranquila Amanda era la otra víctima que había caído esta noche pero no daban con ella, hasta que en la habitación 303 de la tercera planta, pudieron encontrarla. Allí estaba, con el cuellos destajado con un corte fino y preciso y los ojos destrozados y sangrantes, mostrando la agonía de la cual la mujer fue presa antes de morir sobre su cama, tratando de buscar paz. Sus manos se habían teñido de rojo, tal vez su propio rojo, mientras que en la cama había unos cuantos trazos imposibles de entender, casi como si hubiera tratado de dejar un mensaje de su atacante a último momento.

Las noticias conmocionaban a más de uno y esto evitó que notaran que del suelo habían desaparecido las marcas de las alas. Esther era una de las últimas en haberse levantado y no lo hizo hasta que sintió una presión en su mano. Abre los ojos aún somnolienta y cansada para ver la mano de Alec tocando la suya. Por un momento, se sobresalta pero luego clava su mirada en el rostro del chico al ver que sus ojos están abiertos, su piel ha recuperado su color y sus ojos la miran directamente a ella. El joven sonríe como el hijo pródigo que regresa a su hogar para reunirse con su familia y saluda a Esther.

A pesar de todo, parecía que había esperanza, Alec había regresado, aunque podía ser cierto que devolverlo era símbolo de destrucción para él. Sin las alas, indicaba que Alec estaba nuevamente vivo.

Mi atención se concentra cuando nada más despertar encuentro a Alec de vuelta al lado de Esther. No pudo evitar mostrar una sonrisa de alegría por tener de vuelta a un inocente con un poder tan crucial como el suyo.

- Alec, me alegro de volver a verte. Había perdido la esperanza después de que la noche te llevará pero ahora que vuelves a estar con nosotros podemos seguir todos adelante. -Pero vuelvo a recordar por qué tanta gente se había mostrado en contra de su resurrección.- Deberías tener cuidado, los demás saben de tu poder y puede que todos los asesinos estén detrás de ti pero Andy dijo que tenía un as en la manga para que no mueras. Así que de momento no te preocupes y centrate en hacer bien las cosas, ¿vale?

Miro de nuevo al resto del grupo y luego a Noor.

- Noor, acertaste con las picas: Louis y Wolfgang son asesinos confirmados aunque Keelin pudo ser confundida por la persona que puede crear sueños. Por eso y junto a su poder de que sus votos valen doble no me queda nada claro si es asesina o inocente. -Miro a Andy, el tema era delicado tras la muerte de Amanda pero era hora de resolver todo esto antes de que se acabase el tiempo.- ¿También te paso a ti lo del sueño confuso ayer? Siento que esta noche se hayan llevado a la única persona en la que decías confiar pero ese sueño que tuviste fue tan falso como el de Keelin. -Me giro de nuevo a Noor mientras para preguntarle aquello que había estado dando vueltas a mi cabeza después de las últimas votaciones.-Tengo algo que me gustaría preguntarte ¿Puedes contarnos por qué has votado siempre a Charles Showman? Yo también desconfío de ese tipo, su comportamiento es raro: apenas colabora y se limita a decir algo sin relevancia de vez en cuando antes de volver a su cuarto. Además en sus últimos dos votos nos voto a Andy y a mi.

Lo que había conseguido hacer por la noche había surtido efecto. Así pues el despertar de Noor fue pacífico, sintiéndose en calma con el universo. Creía haber sido capaz de igualar un poco la balanza, posibilitando que los que aún estaban vivos pudieran salir de aquel universo de locura y muerte.

La mala noticia era dos muertes y la buena, la resurrección de Alec.

Esto sí que es una sorpresa agradable, murmuró al ver al chico. Insha'Allah

Desconfié de él y de Louis por la misma razón, contestó a April. El primer día después del acontecimiento, indicó haciendo referencia al grito espectral y el desmayo de la dueño del hotel, encontramos que habían asesinado por la noche y Louis no apareció por aquí hasta después de las votaciones. Eso no impidió que votara. Si os fijáis, cada vez que nos despertamos con alguien más asesinado, hay uno de nosotros que no aparece por la mañana y aún así vota como todos los demás.  Puede que sea una conexión demasiado frágil, pero creo que cuando los lobos, como los llamó Efraín, atacan por la noche, uno de ellos tiene que descansar.

No estaba seguro si estaba haciéndose entender. Puede que incluso aquella explicación fuese un delirio imaginativo y que por querer buscar una razón, había acabando por forzar los acontecimientos.

Pero no es eso lo que quería contar anoche, dijo de forma misteriosa. Era el momento de tratar de solucionar todo aquello.

Miró a todos los allí reunidos, hasta que fijó su mirada en Michelle. Señorita Dunsen, ¿te importa contarlo tú? Esperaba que la chica hiciese lo correcto.

-Os habéis equivocado con Keelin. Ella era buena. Y estaba igual de asustada que yo- dijo, afligida- Al menos ahora Alec ha vuelto. Podremos traer a quien no hizo nada malo de vuelta.

Miró a Noor, confundida- ¿A qué se refiere? 

Daba igual. Todo daba igual...

Se acercó a Amanda, en aquella habitación. Se acercó a ella y por unos segundos quedó mirándola, con lástima, hasta que finalmente se levanta y alcanza a los demas.

Miró a Alec con una media sonrisa confidente.

-Aquí estás de nuevo. Me alegro de tenerte de vuelta.

Luego se giró hacia los demás.

-Cada vez somos menos, pero parece que están mas claros los asesinos. April, Alec, debemos unir fuerzas si queremos tener alguna posibilidad de supervivencia. Cada vez queda menos... Debemos proteger a Alec, a toda costa.

No sabía si realmente Michelle no se habría dado cuenta de nada o si estaba haciendo algún doble juego. No quería ser él quien la descubriese al resto, pero aquella joven era su única esperanza.

Michelle, decidió apear el tratamiento a la chica. ¿No notaste nada anoche? ¿Un... cambio? Realmente necesitamos que sepas de lo que hablo, así podrías ayudarnos a acabar con todo esto.

Durmió en el salón, con todos lo demás, en su sofá habitual. Tenía la espalda dolorida de haber dormido todas las noches ahí. Al despertarse, no pudo evitar chasquear la lengua con la boca al ver los dos muertos. Joder... Cada vez somos menos... Pero entonces vio a Alec al lado de Esther y no pudo evitar sonreirle.

-Me alegro que vuelvas a estar entre nosotros. - se giró hacia Andy- y espero que sepáis como protegerle. 

Escuchó lo que decía Noor y se acercó a él.

-La verdad es que a mi tampoco me gusta el señor Showman, incluso tiene lógica eso que dices, que desaparecen todo el día, pero eso no evita que voten...

Se sentó en una silla que tenía cerca y se cruzó de brazos mirando de reojo a Michelle, a la espera de que diga lo que quiere Noor que diga.

- Sí, noté un cambio- dijo, sin más- ¿Ha sido usted? Debo agradecérselo entonces.

Me levante poco a poco y me desperece,esa noche había sido horrible,después de escuchar la confesión de Loren no podía parar de pensar en lo que había dicho días atrás,agite la cabeza intentando salir de mis pensamientos y mire a mi alrededor,al ver a Alec no pude evitar sonreír levemente,me quede mirándolo a el y a Esther unos segundos hasta que caí en la cuenta de que faltaba alguien,mire en dirección a la estantería y vi las dos muñecas tiradas,al ver la de Efrain me lleve una de mis manos a la cabeza y no pude evitar dar un gran suspiro -Pobre Efrain- .

Me levante y seguí al grupo,al encontrar a Efrain un escalofrió me recorrió la espalda,salí de la habitación y seguí con la búsqueda,el estado de Amanda era aun peor,al ver sus ojos no pude evitar una arcada,salí de la habitación y volví a la sala.Me senté en la silla de siempre y me quede escuchando al grupo,mire a Noor -¿Que cambio?- 

- Realmente Andy no tengo muy claro todavía los sospechosos. Por seguir el mismo patrón diría de nuevo Charles y añadiría José Peres. Estos dos siempre están ausentes por el día y no han colaborado en nada. Lo de Loren no tengo ni idea si es un farol, un truco o realmente está diciendo la verdad. No tengo forma de averiguarlo.

Miro el juego que se traen Noor y Michelle, a estas alturas no me gustan las medias tintas y quería saber a qué se estaban refiriendo. Michelle estaba claro que no quería soltar prenda y Noor parecía que no quería contarlo él ¿Tenemos tiempo para estos juegos?

- Noor, lo que has dicho parece bastante relevante. No volví hasta el tercer día así que no fije en ello pero parece tener sentido ¿Tienes algún otro sospechoso aparte de Charles? Aunque de momento creo que mi voto irá para él a menos que pueda dar explicaciones como hizo Kenneth, aunque todavía no me termina de encajar su historia prefiero votar a alguien más sospechoso. -Saco el tema que está tratando con Michelle.- ¿Puedes explicar de qué estás hablando con Michelle? No es que desconfié de ti, más bien todo lo contrario. Pero parece que ella no lo quiere contar y por lo que has dicho crees que ayudará a resolver todo esto.

Alec abrió los ojos y se encontró en un lugar completamente diferente. Una lágrima cayó por su rostro, mojándole toda la cara. Estaba de vuelta. No había muerto, le habían dado una segunda oportunidad.

Gracias... Susurró, a nadie en particular, mientras se incorporaba. Esther estaba a su lado, aún dormida. La miró durante unos instantes y una sonrisa triste apareció en su rostro. Después, presionó un poco su mano para despertarla. Buenos días, Esther.

Abrazó a la mujer de forma suave, no quería que se sobresaltase, demasiadas emociones tal vez. Pero no podía evitar hacerlo. Cuando por fin se separó habló a todos. En el otro lado hemos estado hablando y... Se ha llegado a la conclusión de que Keelin es la mejor opción para traerla de vuelta... Yo... Creo que la traeré a ella, pero me gustaría escuchar opiniones antes.

Dedicó a todos una tímida sonrisa para acabar fijando la mirada en el suelo.

Bajé la ultima pero nerviosa, bien nerviosa mientras fumaba sin parar un cigarro. Practicamente me lo acabé cuando ya estaba llegando a la recepción. Me cago en todos, os la tengo jurada!!! Vaya broma pesada esta noche!!! Sin duda en mi cara, llevaba un rostro que dejaba claro que estaba asustada. Quien cojones está jugando al lobo feroz!!!!

Pasando entre todos me acerco hacia April y le digo mirandola bien enfada hacia la cara. Apenas nuestros se separaban unos centimetros. Verdad que te gusta jugar? Así que disfracitos, ehh!?!?! Luego separo mi cara y le clavo la mirada en Andy. Os haceis los buenos, pero tambien las gastáis. Vaya doble papel el que haceis engañando a todos.

Me dejo caer en el mismo sofá que ocupe ayer noche y le grito con ansiedad a una trabajadora. Traeme un whysky, del mas fuerte que tengas. Me recoste como pude apoyando la espalda contra el respaldo y buscando una posición comoda. Necesito algo para recuperar fuerzas.

Estaba tan nerviosa y con ansias, que ni me percaté de quien murió y ni que Alec estaba vivo.

Cansada y hastiada. Exhausta. Así me sentía cuando fui cobrando consciencia de mí misma. Un día más se abría ante nosotros, y otra vez acarrearía muerte y más muerte. Y yo estaba harta de tener miedo. No quería abrir los ojos. No quería asomarme a lo que el destino, el chino loco o tantos otros tuvieran para nosotros. Sólo quería despertarme en mi casa, aunque fuera sola. Pero una pequeña presión en mi mano me hizo reaccionar.

Cuando mis pupilas enfocaron los dedos de Alec en mi piel lo primero que sentí fue ira. A quien se le hubiera ocurrido esta broma acababa de ganarse una enemiga, y se arrepentiría mucho. Quizá hubiera sido Efraín, o Jose Peres. Nunca había entendido el humor sudamericano. Mis ojos fueron entonces hacia el rostro del chico, y me quedé petrificada al verle mirándome. Aún incrédula y anonadada, sin terminar de creerlo del todo, mi boca formó una sonrisa enorme, y mis ojos comenzaron a humedecerse. Al recibir su abrazo todo mi pecho empezó a temblar en mudos sollozos, mientras poco a poco se deshacía el nudo que había tenido en mi garganta todo el día anterior, apretándome con fuerza. Y al separarnos llevé mis dos manos a su cara, tratando de asegurarme de que aquello era real, y que no era yo la que había muerto.

No pude responder a sus palabras, ni tampoco cuando se dirigió a todos. Sin embargo ponerme en pie y abrazarle de nuevo con mucha más fuerza fue lo primero que hice en cuanto fui capaz de salir de mi estado de estupor.

- Gracias. - Murmuré, sin dirigirme a él realmente. - Gracias. Gracias. - Repetí una y otra vez, sin ser capaz de decir mucho más. - A quien haya sido, gracias.

El ritual de todas las mañanas ya me resulta poco impactante. Por crueles y sangrientas que sean las muertes, no sé si los nervios o el haberlo visto ya muchas veces ha acabado por deshumanizarme un poco. Eso no quita que resople con preocupación al ver el escenario. También parece ser que el muchachito angelical está de nuevo entre nosotros. No saludo a nadie en concreto y trato de mantenerme al margen, observándolos para sacar mis conclusiones y saber a quién votar. Hasta que Loren empieza a gritar algo sobre disfraces, e increpa a April.

—¿De qué hablas? —le pregunto sin rodeos. No me acerco a ella, de hecho doy un paso hacia otro lado, evidentemente intimidado aún por la muestra de auténtica psicopatía que dio el día anterior.

Un maldito monstruo entró en mi habitación. Dos ojos sedientos de sangre acecharon en la oscuridad. Tu tuve quee escoderrrmeee debbajjoo de lla cammmaaa. Cuando intentaba recordar la escena, un escalofrío me entró por todo el cuerpo que me hizo derramar unas gotas del whisky que tenía en las manos. Un pequeño tartamudeo me llenaba la boca de saliba y apenas podía pronunciar correctamente. Nnoooo soporttoooo lloooss llobbooos!!!

Viendo la reacción de Esther ante la vuelta de Alec, los ojos de Noor estuvieron a punto de humedecerse. Decidió dejarles algo de intimidad, mientras se acercaba a prepararse un té para el desayuno. Ya con la taza caliente ente las manos, decidió retomar el asunto que había quedado pendiente.

Sí, fui yo, confirmó a Michelle. El kuwaiti realmente esperaba algo más de la chica. ¿Una revelación? ¿Una confesión? No sabía el qué, pero sí algo más que solo aquel agradecimiento.

Anoche descubrí el nasama de Michelle. Era oscuro, muy oscuro, dijo endureciendo el rostro. El trabajo que había realizado había sido difícil. Pude limpiar sus vidrieras, desempolvar el lugar y añadir un foco de luz que permitió que toda aquella oscuridad desapareciese y fuese reemplazada por pureza.

Para aquellos que no hubiesen entendido aquello, decidió resumirlo. Antes era un alma perdida y maligna y ahora ya no lo es.

Esta vez volviendo a dirigirse a Michelle, preguntó. ¿Tenías compañeros o actuabas sola? Piensa que ahora eres buena. No le gustaba nada dejar a la joven así al descubierto, pero veía que si no forzaba la situación, ella no cooperaría.

Cuando veo que Loren avanza furiosa hacía mi levanto las manos instintivamente intentando protegerme pensando que me iba a atacar. No era agradable que una psicópata asesina te echará cosas en cara pero me podía imaginar lo que había pasado y parecía que todos racionaban del mismo modo cuando pasaba.

- Aquí no ha pasado nada raro, es lo mismo de todas las noches. -Vuelvo a repetir la explicación por tercera vez pues parecía que no había quedado claro el asunto.- Eso que dices que ha pasado esta noche no ha sido más que un sueño inducido por alguien con su poder. Le sucedió a Keelin cuando soño que Hikari la torturaba, luego a Andy con el sueño de la muerte de Amanda y ahora a ti conmigo disfrazada y ese monstruo ¿En serio crees que escondiéndote debajo de la cama podrías haber sobrevivido si hubiese sido real?

Sacudo la cabeza en señal de desaprobación, debían de ser muy reales esas pesadillas para que se despertasen todos tan alterados. Pero ya se lo explique el primer día que regrese del otro lado, esperaba no tener que repetirlo cada mañana.

- Los tréboles en mi lista significaban gente posiblemente corrompida. Supuse que Alicia o Michelle fueron víctimas del poder de Louis, si no lo dije antes este asesino tenía el poder de llevar a su bando a un inocente. Si antes estabas corrompida Michelle, dime la verdad ¿Sigues defendiendo que Keelin es inocente o también está corrompida como lo estabas tú?

Un puto sueño de mierda!!! Exclamo al sentir esa explicación. Jugar conmigo es peligroso. Quien sea que lo haga, lo pagará. No me gustaría tener que hacer carnicería aquí dentro. Lástima no tener algo a mano. No tengo rencor por nadie, pero quizás me equivoque contigo, April. Sentía tener que dar la razón, pero habían jugado conmigo sin duda. Aquello fue tan real, que lo pasé mal.

Al saber los malos tambien juegan con sus compañeros y saben que no pueden matarme. Lastima que no pueda matarlos. Nunca he matado a ningun asesino, sufrirán como corderitos tambien?. Mientras pensaba en ello, la boca se me hacía agua. Me imaginaba cualquier matanza sucedida aqui pero aplicandoles a ellos. Les iria cortando dedo a dedo de la mano, mientras hacian soltar quien es eran sus compañeros. Quizás deba usar mi segundo poder.

- Estaba obligada a protegerlos. Podía ver sus sombras, pero no a ellos, por eso no puedo saber quiénes son con exactitud. Por eso sé que Keelin no hizo nada malo. Seguían siendo las mismas sombras cuando ella murió... Igual que cuando murió Louis, a pesar de lo que me estáis diciendo. No disminuyeron. Quizá le amenazaron, o fue corrompido...-dijo, nerviosa- Intente daros pistas... Yo no quería... No podía... Ahora ya no tengo miedo. No tengo que hacer nada que no quiera hacer. Gracias a usted.-finalmente se deshizo en sollozos, y las lágrimas comenzaron a surcar sus mejillas.

Una extraña sensación hace que todos giren hacia las habitaciones de la tercera planta, donde pueden ver una luz oscura que sale de la habitación donde hace poco encontraron el cuerpo masacrado de Amanda.

El silencio hacía que la curiosidad subiera y todos se preguntaban qué iba a suceder. Amanda sale de su habitación confundida y mirando su cuello, tocándolo, aún con el recuerdo de lo último que recordaba antes de morir. Los mira a todos y se une en el salón principal.