Agujeros

Tentados como ratoncillos hambrientos, vuestras mentes despiertan en un paraíso hecho de puro queso. Queso de múltiples sabores y texturas, listos para satisfacer al más exigente de los paladares. Vuestras miradas se cruzan para descubrir que no estáis solos. Puede que sea un sueño, pero es tan real... ¿Qué estará tramando quien os haya traído? Seguro que nada bueno.

Querida princesa, ¿cómo hemos llegado aquí? ¿qué lugar es este? ¿por qué no estáis en el salón principal?

Buenas tardes, hechicero. Al parecer alguien me ha matado. Responde la princesa entristecida. El tabernero también está muerto.  Por desgracia no sabemos quién ha sido. Mira el lugar, y tras pensárselo unos segundos, coge un trozo de queso y se lo come. De todos modos los muertos no podían engordar y ya no tenía que guardar su figura para el príncipe. No sé qué es este lugar y por qué estamos aquí.

Querida, lamento profundamente tu muerte y no tengo ni la menor idea de cómo he llegado aquí. Esta no es mi capacidad en absoluto. ¿Puedo preguntarte si tu objeto o el del tabernero son importantes o útiles para localizar a los asesinos? Tengo la posibilidad de recuperar un objeto caído.

Lo siento, pero nada importante para localizar asesinos. La del tabernero creo que tampoco.  Que tal van las cosas por ahí? no puedo ni ver ni escuchar nada.

Las paredes vibran y dos nuevas almas son capturadas

-Vale, eso fue  bastante desagradable.- comento para mi mismo momentos después de aterrizar sobre un enorme pedazo de Gruyere, sacudiéndome los pedacitos de queso del jubón. 

BRIEnvenidos a una broma de mal gusto. Os preguntaréis quién hCABRÁ-LEStado jugando con nosotros y nos ha traído aquí... ¡El-EMMENTHAL! PROVOLONEmente habrá sido cosa de alguien que no es ni de un bando ni de otro, alguien que actua de por libre. Un civil que contra el invasor y al margen de los leales: un PARMESANO. Pero descubriremos a ese sinverGORGONZOLA y le daremos su merecido. Está yendo demasiado lejos y cada día aFETA a dos personas más.

La princesa no pudo evitar sonrojarse cuando vio a su príncipe, incluso soltó el queso que se estaba comiendo por si acaso en modo fantasma también podía engordar. Oh, mi príncipe, permítame limpiarle el queso. Se acercó a él y empezó a limpiarle el traje de queso con mucho cuidado. Aunque me alegre verle de nuevo, me pregunto qué tipo de magia será esta y si estarán a salvo aquí. Después miró a Hechicero. Es alguien a quién le gusta el queso, eso seguro.

El niño miro a un lado y a otro y luego sin saber que pasaba dijo.- ¿Pero esto que es?... - Escuchó al hechicero y dijo.- ¿Quieres decir que esto lo ha hecho el Mago?, que siempre habla raro como si fuera un detective?.

El chico intenta ver alguna salida de aquel lugar mientras dice.- Si lo que dices es cierto, escribiré su nombre en ese libro... no creo que sea muy bueno si no da la cara aquí... pues si nos encerrara y dijera que fuera para protegernos vale, pero si alguien encierra a otra persona en otro sitio y no aparece para hacer nada... yo auguro esto como un secuestro.- Dijo mirando a la princesa en apuros y al príncipe encantador.

Que los secuestraran a ellos, tenía sentido, pues tenían vienes y posibles para dar en caso de rescate, pero ¿yo?... no tenía ni quien me echara de menos, menos que ofrecer para mi libertad.

-Haz el favor de calmarte.- respondo con calma al Niño. Tras dar la gracias a la princesa por su ayuda vuelvo a elevar la voz, igual de tranquila que antes- Por ahora estamos bien, si de verdad fuera un secuestro no creo que pudiésemos interactuar con el resto libremente,no es el caso, y además parece ser que los muertos no tienen problemas con comunicarse por aquí con el resto de nosotros. 

-Creo que podremos usar eso a nuestro favor para descubrir como salir del lío que se ha montado por la muerte del rey...

Miré al príncipe y dije.- Lo siento, pero nisiquiera me di cuenta de que si muero podré seguir hablando con vosotros y desvelar más cosas... - Dije mirando a la princesa, para luego decirle a ella.- Lo siento princesa, pero tanto baile de un sitio a otro, frio, cenizas, queso.... no sabía donde estaba ni quienes estábamos. Sólo hice caso a mis oídos y lo que escuché.

Es entonces cuando me giro al Hechicero y digo.- Aunque pueda escucharnos el culpable, quiero saberlo... ¿Tenéis sospechas sobre que el creador de esto es el Mago?... A mi eso de que no hable normalmente, y sea escueto y ahora con esto, no pare de hablar, me huele mal... pero también puede ser condicionado por tus palabras y que mi subconsciente unieran todo en uno y me esté jugando una mala pasada.

Si sabéis que es él... prefiero votarle a él, a alguien del que no sé nada... Sólo sé por ahora que la abuela es de fiar... espero.

Niño. Nunca señalé al mago. Fuiste tú quien lo hizo. A mi, de hecho, eso me ha hecho desconfiar de ti más que de él. Y que te apresuraras a publicar que estabas aquí solo refuerza esa desconfianza. Me parece el tipo de cosa que haría alguien culpable deseando aprovechar la situación para ganar confianza. Alguien inocente no necesita apresurarse a desviar la atención de lo verdaderamente relevante (los asesinos del rey) y no necesita ganar confianza del resto hasta que le señalen... Y el "no me di cuenta" no me ayuda a confiar más. Mi voto hoy será para ti

En el otro lado hemos descubierto algunos sospechosos, creo que os gustaría saber sus nombres. Habló la princesa tras estar un rato callada.

EL borracho del pueblo es uno de los asesinos. Y el lobo feroz también lo era.  

Malos Derelleno y abuelita son inocentes.

Mañana caerá borracho. Dile a Madrina que están hablando del modo de devolver su capacidad a la vida en la sala general, y dile también "Dedon vas tacirupeca" y guiñale un ojo de mi parte. Explícale también lo que te dije antes de que llegasen aquí el niño y el príncipe: Mis sospechas.

El niño se quedó mirando a la princesa y dijo.- Si lo que dices es correcto, mañana podremos decirlo delante de todos, y acabar con uno de ellos. Decirlo antes nos podría a los habitantes del queso vivos en la mira de los asesinos antes de tiempo.

Debemos de ponernos de acuerdo y atacar a uno de ellos todos juntos, y así caerá uno de los asesinos.

Miré al hechicero y dije aún todavía a la princesa.- Yo como dije entre los vivos, hoy le demostraré a la abuelita que soy de los buenos, y más aún sabiendo que puedo protegerla con los malos de relleno.

Pronto sabréis que es verdad, todo lo que digo.

Miró con rencor al hechicero y le sacó la lengua mientras le hacía una seña con el dedo bajo el ojo, apretando hacía abajo como en una infantil mueca.- Te darás cuenta de que ayer te equivocaste conmigo.

Si me equivoqué contigo, te pediré disculpas y ofreceré un bol de cereales

Lo siento hechicero, pero no recuerdo que me dijera nada sobre ningún sospechoso. Pero tu frase extraña y el guiño si lo he comunicado.

¿No dije nada de un sospechoso? Está bien, si puedes dile lo que dijera fuese lo que fuese. Ella entenderá mejor todo, creo.