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Despertar de Gerald

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09/11/2015, 18:01
Director

Edificio Joyplay Este, 23 de enero de 2016, 7:29

El sonido desesperante del despertador te saca de su sueño profundo, pero era hora de incorporarse al trabajo. Ser un miembro productivo de aquella sociedad, a cambio obtenías sanidad, educación y todas esas cosas que nos hacían civilizados. Era la hora del café necesario para no ser un zombie y oías a la tele de la señora Wang con la teletienda a todo trapo, la anciana estaba medio sorda y aquellas paredes eran de papel. 

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09/11/2015, 22:10
Gerald Smith

Gerald palpó a ciegas buscando el despertador y lo apagó más por instinto que conscientemente. Hoy le tocaba turno de día en la central. Le gustaba trabajar ese turno porque te dejaba la tarde libre, pero por otro lado le compensaba hacer turnos de noche para acumular descansos. Un turno de noche + día = tres días libres en vez de uno y medio. Y si conseguía encajar las piezas en el cuadrante mensual, cambiando turnos con algún compañero y devolviendo favores, una de cada dos veces conseguía que esos tres días empezaran el viernes y acabaran el lunes. Tres dedicados al disfrute, alguna escapada de montañismo y sobre todo, a Karyl.

Pero no era el caso. Era turno de mañana y tocaba currar. Se levantó, meó, se lavó la cara para espabilarse, fue a por café y mientras este se preparaba se metió en la ducha. Recordó que hoy había instrucción con un par de novatos que seguramente tendría que cargar con uno en el camión si había alguna salida. Y la habría, claro. Un bombero no descansa.

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10/11/2015, 15:01
Director

La ducha es tranquila, el agua está perfecta y la señora Wang sigue sin bajar el volumen de su televisor. La oyes gritarle en chino a algo, no sabrías si decir a la televisión con la teletienda o si ella estaba con alguien en su casa, cosa que te extrañaba. A esa vieja parecía que su familia la había aparcado en aquel piso para no tener que volver a verla, medio sorda y medio loca. Por suerte en aquel edificio no se podía tener animales, porque asegurabas que podría ser de esas señoras que las encuentran muertas a la semana de no saber de ellas, devorada por sus gatos.

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10/11/2015, 15:25
Gerald Smith

La señora Wang siempre con el volumen a tope. Era enervante. Típico caso de viejos que prefieren derretirse los tímpanos antes que ponerme un sonotone.

Gerald se vistió, preparó su taza de café y empezó a molestarse. Era de natural un tipo jovial y paciente, poco dado a la polémica y en general amable, pero más de una vez había tenido que llamar a la puerta de la señora Wang para pedirle bajar el volumen. Por suerte, se iría al trabajo en unos minutos y dejaría atrás ese estruendo.

Sin embargo, se extrañó. Ya se oía la televisión a tope desde antes de que le sonara el despertador. ¿Qué hacía la anciana viendo la tele tan pronto? No solía hacerlo. Y Gerald lo sabía porque si la Wang pone la tele, Gerald lo oye siempre. ¿Se la habría dejado encendida por la noche? Tomó un sorbo de café y no pudo evitar que el instinto profesional le diera mala espina. ¿Y si la señora Wang...?

Acabó de vestirse rápido y salió al pasillo de la planta a llamar a la puerta de la vecina.

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10/11/2015, 15:35
Director

Tu puerta no se abre, de ninguna manera.

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10/11/2015, 15:37
Gerald Smith

Se dio un golpe contra el marco de la pared en uno de esos gestos tontos que te pillan desprevenidos. Simplemente agarró el pomo de la puerta, tiró de él caminando hacia adelante, y se topó con el obstáculo antes de frenar.

-Mierda -se dijo, tocándose la frente donde se había dado el coscorrón.

Intentó girar el pomo para abrir, cada vez con más fuerza.

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10/11/2015, 15:42
Director

El pomo no gira, como si alguien que no fueras tú hubiera echado la llave.

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10/11/2015, 15:43
Gerald Smith

Miró en el cuenco que había al lado de la puerta, en el que siempre echaba las llaves.

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10/11/2015, 15:44
Director

Las llaves siguen ahí, nadie te las ha quitado.

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10/11/2015, 15:46
Gerald Smith

Gerald no recordaba haber cerrado con llave la noche anterior. De hecho no solía hacerlo, aunque sabía que era un temerario porque cualquier amigo de lo ajeno podría entrar. Negó con la cabeza y se dispuso a abrir con sus llaves.

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10/11/2015, 22:43
Director

La puerta no se abre, está como sellada.

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10/11/2015, 22:45
Gerald Smith

-¿Pero qué...?

Miró la llave, comprobó que no se había equivocado y luego miró la cerradura con detenimiento. Tenía que salir de casa. Fue al armario donde guardaba su caja de herramientas y la llevó a la entrada. Si la cerradura estaba atascada estaba dispuesto a desarmarla y recomponerla. Trabajo de rutina para un bombero. Salvo cuando es por un incendio, que las puertas se abren a hachazos. Pero por suerte no todos los días era así.

 

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12/11/2015, 14:37
Director

Justo en ese momento suena el teléfono fijo de casa.

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12/11/2015, 15:09
Gerald Smith

Estaba rodilla al suelo a punto de usar el destornillador, pero se levantó a coger el teléfono. ¿Quién llamaría a esa hora?

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12/11/2015, 18:12
Director

Al coger el teléfono una voz femenina dice:

Por favor, permanezca tranquilo, la situación está bajo control.

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12/11/2015, 18:15
Gerald Smith

Miró el teléfono.

-Ehh... ¿qué? ¿Quién es? ¿Hay una emergencia? -instinto profesional.
 

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12/11/2015, 21:02
Director

Por favor, permanezca tranquilo, la situación está bajo control.

(...)

Por favor, permanezca tranquilo, la situación está bajo control.

La voz se repite, como si fuera una grabación.

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12/11/2015, 21:08
Gerald Smith

Gerald colgó frustrado, con fuerza. Y fue directo a la ventana. Sabía que si algo importante pasaba, y además si ya estaba oficialmente "bajo control", afuera debería haber compañeros suyos o policía. ¿Qué demonios estaba pasando?

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13/11/2015, 22:49
Director

Fuera ves un montón de gente vestida con trajes protectores naranjas. Tu edificio se divide en tres bloques, dispuestos en forma de U, pues en el patio interior debe haber unas diez personas con trajes naranjas que van y vienen. Algunos de ellos entran en los otros edificios. De los otros pisos y edificios ves a gente también asomada a sus ventanas. En uno de ellos hay un hombre entrado en kilos que golpea desesperado su ventana.

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14/11/2015, 10:02
Gerald Smith

Eso ya tenía muy mala pinta. ¿Trajes NBQ? La cosa se ponía peligrosa.

Fue a por su teléfono móvil. Llamaría a la central, ellos deberían saber algo. ¿Cómo podían no haberle avisado?