Partida Rol por web

Cornago

I. La marcha lúgubre

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07/10/2015, 10:40
Director

Uloxio se vió extrañado, dubitativo, pensativo. Si no estuviera allí Xilda presente, quién sabe si hubiera lanzado un pequeño grito de incerteza. Claro que, no era para menos. Pero al comprobar aquella estancia, lo único que ambos encontraron fue el cuerpo de su buen señor don Juan de Luna. Et nada más.

Notas de juego

Xilda, para seguir un rastro primero hay que Descubrirlo. En este caso, al fallar la tirada, no encuentras nada, por lo que seguir "nada" es imposible ;)

Uloxio, sí: sería "otear", que en la tercera edición, que es en la que jugamos, se denomina "Descubrir".

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07/10/2015, 10:42
Director

Al día siguiente todo estaba dispuesto. Los centinelas en sus puestos, los soldados comenzándose a despertar y un grupo de hombres (vosotros) con un carro fúnebre con techo y bien anudado, con una bestia ya preparada para el tiro. No os causó mucho problema encontrar ambas cosas, et menos para el bueno del vuestro señor, ya fallecido. Cerca del centro del campamento os reunísteis, y allí esperaba ya el oficial Sáez. Parecía preparado para viajar, con sus armaduras, y su caballo de guerra.

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07/10/2015, 10:45
Pedro Sáez

Señores -dijo Pedro Sáez-, vayamos a la tienda y carguemos el cuerpo de nuestro señor, que Dios lo guarde en su Gloria. Vamos. Et que en aquesas marchásteis a la tienda, y con ayuda de más soldados del lugar vendásteis en un sudario improvisado a don Juan, et que subísteis el cuerpo presente al carruaje. Había que tener mucho cuidado al tranportarlo. Una vez todo preparado, era el momento de partir ¿Lo lleváis todo? -dijo el oficial-.

Notas de juego

Ya podéis postear todos juntos.

No he entendido muy bien. ¿Tu no quieres ir, Dámaso?

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07/10/2015, 11:27
Dámaso Montalvo

A primera hora de la mañana ya me encontraba listo para marchar, con todos mis avíos y mis pocas cosas guardadas y listas para el viaje. Dejé que fueran otros los que cargaran con el féretro mientras yo los esperaba en el carro.

Notas de juego

Claro que voy, lo que no iba a hacer es ir a pedir permiso alguno, ya que no me encuentro entre la soldadesca. A mí no me importaba quién tuviera que dar permiso o no. Yo iba a ir sí o sí.

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07/10/2015, 11:37
Uloxio Arrugas

Agotado por no poder conciliar el sueño Uloxio sigue angustiado y desorientado. ¿Que fue eso? piensa mientras se aproxima a sus compañeros de viaje y amaga una sonrisa... terrorifica pues su desfigurada cara no da para mas.

Yo siempre estoy preparado señor. dice mientras prepara y afila su hacha. Sus pertenencias estan mas que revisadas.

Notas de juego

Tercera vez que escribo este mensaje.... :X::X:X

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07/10/2015, 14:39
Manuel de Fonseca

Ayudé en cuanto pude a preparar a Don Juan de Luna, cargar su cuerpo muerto me revolvió las entrañas, pero aguanté las nauseas.

Todo listo...un momento se me olvida...-y voy corriendo a revisar mi pollino, respiro aliviado-listo, estoy listo-

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07/10/2015, 15:47
Xilda

Xilda se levantó con el alba, como de costumbre pues era de poco dormir. Ayudó en lo posible a preparar el traslado del cuerpo del finado y junto a Pedro Saez, aguardó la llegada de sus compañeros de viaje sin decir palabra. Su gesto era serio y duro. Una rabia contenida asomaba tras su rostro. Era cosa evidente su devoción por Don Juan De Luna.

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08/10/2015, 10:11
Fadrique

Fadrique se descubre y hace el signo de la cruz delante del féretro. Lleva su armadura habitual y sus armas prestas. Los alrededores de un ejército siempre están llenos de gentuza o campesinos cabreados por las "requisas". Él mismo ha tomado parte en algunas, y no quiere ser troceado por hoces y guadañas.

Dedica unos instantes de reflexión a la muerte de su señor. Era un buen hombre y un hidalgo, pero de nada le ha servido frente a la Parca. No somos nada...

- Vamos para allá gente.

Ayuda a cargar el feretro en el carro. Luego piensa.

- Si hay gente de letra, se debería mandar una carta a su familia dando la triste noticia, no?

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08/10/2015, 17:40
Pedro Sáez

El oficial Pedro Sáez era fiero en la batalla. Sagaz y frío, inteligente y mortífero, y cuando andábase en la línea de batalla con don Juan, que en paz descanse, el enemigo se tambaleaba al momento, y las armaduras crujían tan tenebrosamente que al mismo demonio llamaba la atención. Sin embargo, ahora, estaba decaído: para él don Juan era un buen amigo, un hermano, un padre... cualquier cosa cual lazo de sangre. Mientras íbais llegando os iba asintiendo, agradeciéndoos por dentro el estar allí, guardando la compostura, en sabiendo que llevaríais el cuerpo hasta donde su última voluntad pidió.

No hace falta, Fadrique -respondió Pedro-. Allá vamos, a Cornago, su pueblo natal. En su monasterio de Campolapuente* sus restos quedarán, tal y como quiso. En marcha, señores -dijo secamente, que no era para menos-.

Notas de juego

*El Convento de Nuestra Señora de Campolapuente:

Eran señores de la villa de Cornago en el tiempo en que se fundó el convento de Nuestra Señora de Gracia de Campolapuente D. Juan de Luna y su esposa y prima hermana Dª María de Luna. Tenían los monjes cistercienses del Monasterio de Santa María de Fitero, en Cornago, una granja y en ella una pequeña iglesia dedicada a la Virgen, con la advocación de Nuestra Señora de Campolapuente. Los señores de Cornago tenían propiedades junto a esta de los monjes de Fitero, y en aquel lugar ameno y retirado de la villa pensaron edificar un convento de franciscanos.

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08/10/2015, 17:41
Director

Pedro Sáez marchaba a caballo, en la vanguardia junto con alguno de vosotros, liderando la marcha. Había dejado ya todo atado y bien atado en el campamento: los suboficiales que ahroa capitanearían el campamento, las órdenes ante nuevos eventos y los futuros movimientos tácticos que fueran beneficiosos para la toma de Lérida a los rebeldes. Entre Lérida y Cornago había unos 270 kilómetros que se traducían en, aproximadamente, unos 10 días de viaje, de los cuales 9 se hacían cruzando tierras aragonesas, evitando Navarra, en la que había demasiada agitación entre agramonteses y beamonteses. La marcha era dura, sin duda, y el camino rugoso y duro, por lo que el viaje se os iba haciendo agotador. Forzásteis el paso para llegar cuanto antes, para que el cuerpo de don Juan llegara lo menos descompuesto posible. Por suerte, andábais en el penúltimo día de viaje, y aún no habíais sufrido contratiempo alguno.

Ese mísmo día de viaje llegásteis a Cervera y, como en todas las paradas que realizábais, buscábais cobijo en donde pasar la noche.

Notas de juego

Tacháos todos una ración de viaje (si tenéis solo una, tacháosla, no la borréis). Si alguien tiene más, que se reste 1. Y si alguien hace el favor de tacharse 2 (en vez de una, Laureano podrá comer ;D pues su PJ lo utilicé para una aventura en una posada, y allí no hacían falta raciones, jeje).

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08/10/2015, 19:26
Xilda

Segundo llegaban a la villa de Cervera,  Xilda, como solía ser costumbre en ella, ofrecióse con un gesto quedo a llevar los caballos a las caballerizas mientras el resto se encargaba de encontrar alojamiento. Allá partió la moza con las bestias para reunirse un momento después con el grupo a fin de tomar aposento y disfrutar del merecido aunque triste descanso.

Durante la cena sacó de su bolsa buenas viandas. Xilda era mujer acostumbrada a viajar y sabía aprovisionarse de raciones variadas para el camino: Buen queso manchego, frutos secos, frutas secas, algo de embutido, pan...Completó la ración con unos figos que cogiera de una higuera que encontró a la entrada del pueblo. Conocida es por su generosidad, de modo que viendo que el Laureano no llevaba sustento, sonriole y ofreciole de lo que llevaba. A él lo mismo que al resto,  pues tal es la costumbre de su gente; compartir lo propio con sus congéneres cuando el hambre aprieta y el sustento falta. 

Más no dijo nada. Si alguien debía romper el silencio que reinaba entre la gente de aquella fúnebre comitiva, no iba a ser ella.

Haciéndose sitio en el hogar, pasó un chorizo sobre la brasa que crepitó al recibir el goteo. Repartido sobre el pan, resultaba el mejor de los manjares.

 

Notas de juego

Descontadas las dos raciones.

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08/10/2015, 20:02
Manuel de Fonseca

El viaje se me estaba haciendo agotador, tenía el culo dolorido de ir en el burro. Ir andando era peor y me costaba mantener el ritmo. De modo que solía quedarme ligeramente rezagado respecto al resto.

El estómago también lo tenía machacado de ir estos días comiendo de lo que llevábamos, quien me iba a decir que echaría de menos las gachas del campamento. Cuando llegamos a la posada se me hizo la boca agua cuando vi a Xilda cocinar el chorizo. Aún así, la dejé que lo disfrutase. Probé uno de los higos que cogió y fué un manjar delicioso, sentirlo en la boca, paladearlo, sentir como se deshacía. Abría pillado alguno más, pero dejé que mis compañeros los disfrutasen. Luego saqué un trozo de queso y un poco de pan duro que me quedaba y me dispuse a cenar. Añoraba esas gachas.

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08/10/2015, 21:04
Uloxio Arrugas

El viaje habia sido lento por la falta de monturas para todos pero que mas podia pedirse. Demasiado para el grupo que eramos.

Me acercare a hablar con los habitantes de la villa por si fuera posible alojarnos en algun lugar de la mesma. Acompañadme alguno no fuera a ser que tan cerca del destino sufrieramos contratiempo. dice mientras se aproxima montado a caballo a un ritmo tranquilo.

Cornago... ¿que escondes? ¿estara todo en mi cabeza? piensa mientras come algo rapido, casi sin mirar, y traga con poca agua la comida. Casi se atraganta con el ultimo trozo de comida.

Sin pausa se aproxima a la Villa...

Notas de juego

Quedo a la espera.

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08/10/2015, 23:24
Dámaso Montalvo

El viaje no fue nada especial para mí, había estado en otros peores junto a la panda de cómicos. Además, mi mente estaba perdida en la muerte de mi señor y ni siquiera disfruté del camino.

Al llegar a la villa, volviose la calma a su espíritu, la promesa pronto se cumpliría. Ésto lo animó un poco y decidió acompañar a Uloxio cuando éste decidió hablar con los villanos.

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09/10/2015, 12:29
Laureano Amezaga

Desde que viese a don Juan yaciendo no había vuelto a abrir la boca. No quería molestar a nadie en unas horas tan tristes así que me dediqué a cumplir con los quehaceres que se me iban encomendando y traté de pasar lo más desapercibido posible.

El camino fue duro, demasiado. Pero había que llevar al señor cuanto antes a sus tierras, con los suyos. Más duro se me fue haciendo el asunto de la comida. Que con las prisas por preparar los trastos para el viaje, me los había olvidado en el sitio de Lérida. Fui recolectando de lo que encontrábamos por el camino pero aquello no era suficiente para que mi cuerpo se mantuviese como debía y, claro, las tripas hacían unos ruidos que competían con los que nos proporcionaban las ruedas del carro.

Ya en la villa de Cervera, cerca de nuestro destino, volví a sentarme como todas las noches al calor del fuego mientras los demás, que si tenían buena cabeza, comían de sus provisiones. No lo hacía por mortificarme, era más bien por el calor de la lumbre. Una lumbre a la que Xilda le puso un chorizo encima y, como es normal, aquello mis tripas ya no lo pudieron soportar más y protestaron como si un niño chico estuviese en mis adentros. Creo que fue más por pena que por otra cosa que la joven irmandiña decidió compartir conmigo partes de sus sabrosas viandas.

- Os estoy muy agradecido y ahora tengo una deuda con vos, bella dama. – Le agradecí a Xilda después de dar cuenta de lo que ella me dio. Tan agradecido estaba que la hubiese abrazado y todo, pero me contuve y seguí con la cabeza gacha y un tanto avergonzado por lo que había pensado.

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09/10/2015, 22:57
Xilda

-No es nada-contestó la joven sonriendo mientras abría una nuez con ayuda de su cuchillo-Vengo de un pequeño pueblo de gente humilde, pero allí lo que tenemos, lo compartimos. Haced lo que yo cuando tengáis comida para compartir y haya una persona hambrienta cerca. Con eso habréis saldado vuestra deuda.

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11/10/2015, 19:48
Director

Uloxio se adelantó y comenzó a buscar población de Cervera. Sin alejarse mucho, el resto vísteis cómo el alcaide, que parecía haber tenido durante todo el viaje y todos esos dáis alguna preocupación en la cabeza, no tardaba en encontrar a alguien que le señalara un lugar. Al rato volvió y os dirigió a una posada donde podríais cenar y hacer noche*, no muy lejos de la entrada de Cervera. Aquel sitio era la única del lugar, un espacio tranquilo al igual que el resto del pueblo, que se escarama a ambos lados del río Alhama. Pedro Sáez se adelantó a hablar con el mozo de cuadras para darle parte de que llevaban consigo un difunto y cómo podrían pasar así la noche. El crío fue a avisar al posadero, et que éste y Pedro acordaron hacer noche junto al establo, pues no podían meter tal carga dentro de la posada. Claro que, cualesquiera que llegara o se marchara desde el establo, iba a ver el cuerpo presente de don Juan de Luna.

Notas de juego

* Xilda: no es que compartáis las raciones una vez llegados a la taberna, sino que me refería a hacerlo durante el viaje de 9 días. ;)

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11/10/2015, 19:55
Pedro Sáez

Tras encaminar el carro y los caballos al establo, nadie más que el posadero os hizo pregunta alguna con tal tumulto sobre ruedas. Tan sólo el posadero se dirigió a Pedro, cuando le hubo de cobrar (la mitad del precio, por cierto, por dormir junto al establo), et preguntóle sobre quiénes érais y a dónde íbais.

Somos simples soldados que regresan de tierras lejanas para enterrar a un camarada -contestó el oficial-. Por cierto, ¿puede vos traer menú para todos nos?, no es menester entrar a cenar et dejar aquí el carro sólo -el posadero asintió, afirmando que en un rato os traería a todos la cena-. A los pocos minutos habló de nuevo.

Manuel, Laureano... -dijo Pedro-, ¿podéis ir a interesaros sobre cómo van los caminos? El cuerpo de don Juan ha de llegar lo antes posible, y para eso debemos saber si puede haber contratiempos. El resto nos quedaremos vigilando y acomodando las mantas para pasar la noche.

El jolgorio dentro de la posada era evidente.

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11/10/2015, 21:00
Xilda

Notas de juego

Cita:

* Xilda: no es que compartáis las raciones una vez llegados a la taberna, sino que me refería a hacerlo durante el viaje de 9 días. ;)

No entiendo ¿Quieres decir que con dos raciones comemos los dos durante 9 días?

Yo estaba roleando que le cedo una ración para hoy. Si lo he hecho mal o algo, indícame cómo debo hacerlo.

Por cierto, tal como has descrito tu último post, ¿debemos entender que lo que describimos anteriormente no pasó?
 

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11/10/2015, 23:48
Uloxio Arrugas

Uloxio atiende a toda la conversacion silencioso y pensativo. Mira en derredor buscando algun curioso que pudiere estar vigilandoles o amenazandoles. Da una vuelta por los alrededores, buscando puntos desde los cuales pudieran atacarles.

Tened cuidado... no me fio de nadie...si alguien se ha enterado de lo acontecido, que es muy probable, pudieran estar siguiendonos... Mi señor Sanchez... ¿estamos aqui a salvo?

Pasaria la noche cerca del ataud sin perderlo de vista ni un segundo, de intentar cometer alguna atrocidad contra ellos responderia con contundencia.