Partida Rol por web

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Khalis quedo pensativo y se señalo el rostro.

-De hecho... Eso seguramente explique por que no tengo boca jeje.

Y viendo que la furia de la Diosa de la guerra podia crecer por momentos el nuevo Dios decidio como minimo poner distancia entre ella y el, mas concretamente, un poco mas del rango de alcance de sus espadas.

  Tras los ultimos retoques visibles, el mundo habia cambiado ligeramente su forma, ahora contaba con rios, montañas y algunos lagos, creados por airlia y gálmaro, la mujer que Serune creo, pronto empezo a moverse, pero se apeno de no tener a nadie a su lado... y tirito, al no tener nada que pudiera abrigarle en las noches frias, y se encogio... al no tener nada que llevarse a la boca... y se acurruco, al lado de una roca, pues allá donde mirara, no encontraba mas que eso. Rocas.

A cada momento de las penurias que ve que padece su creación, el corazón de Serune se estremece.

-Soy horrible...yo..¿Como he podido? He creado el sufrimiento y la pena.-

Eso la hace llorar, por que encima, aún está débil y no puede hacer nada por ayudar a su creación.

No obstante de las primeras lágrimas derramadas por un dios, al caer a la creación de todos, provocan cambios, muy sutiles, e inútiles en esa situación, al menos desde el punto de vista de Serune.

Su mujer, nota esos pequeños cambios, de forma que sabe que hay algo...algo que está muy triste, que la observa y la quiere.

- No eres malvada, Serune. El dolor la hara fuerte, esta aprendiendo a sobrevivir sola pero necesita ayuda y yo se la dara. Le hare un compañero para que juntos se ayuden y se completen. Tal como tu y yo formamos una en el pasado.

- Con tu permiso, hermano.- dije dirigiendome al planeta por primera vez. Mi espada encontro una piedra dura y firme, comence a esculpirla con mi espada, con rapidos movimientos, perfectos. Pensando en una criatura con mas musculos, mas fuerte que la delicada hembra que mi hermana habia creado.

Cuando quede satisfecha me hacerque y puse mis labios en los suyos. Un beso de vida que convirtio la piedra en carne viva.

-Despierta.- susurre y sus ojos se abrieron pero yo ya no estaba alli. La mujer habia escuchado el sonido de la espada en la piedra y se habia hacercado para ver que eran esos sonidos extraños.

Apareci de nuevo al lado de Serune.- Concedeles un poco de tu amor, eso los unira y ninguno se sentira solo nunca mas.

-Amor...si...pero, no les haré amarse.-

Se anima de nuevo ante la perspectiva de...ver que ocurre.

-¡Solo les daré la opción de hacerlo!-

Colocando la mano frente a su boca, Serune sopla, abriendo nuevas posibilidades en las vidas de los "creados".

Se acueda de algo que dijo su hermano Tabahätta. -¿Ves hermanito? Mira esa espada horrible de Raiza...Ragna está hecha para destruir...pero ha creado con ella. Todos podemos hacerlo, no te preocupes nunca más por eso ^^-

¿Qué harían ahora sus hermanos? Ella tenía tantas ideas....pero a la vez ninguna...

No obstante cree al hombre con la destruccion misma... en su corazon estara la guerra que movera al mundo, que hara fuertes a las personas que lo habiten. La pasion estara en el, como lo estara su amor por la tierra y el instinto de proteger a los suyos de todo mal.

Sonrei a mi hermana y la abrace por detras.- Ellos no podran estar separados, han salido de nosotras, tienen parte de nosotras... se sentiran uno como tu y yo, el sentimiento que les has inspirado sera un regalo que sellara sus corazones.

Necesitan ahora un lugar para vivir y cubrirse del frio, tambien algo que les nutra de energia. Yo abrire un agujero en la piedra para que puedan encontrar cobijo... si Galmaro esta de acuerdo.

Mire a mi hermano entonces.- He usado tu piedra para crear algo mio, si necesitas de mi para crear algo solo pidemelo.

El Dios de la Tierra veía múltiples errores en la creación de aquellos dos seres. No obstante respetó a sus hermanas y no comentó nada al respecto... lo mejor sería ver como evolucionaban. Él se centraría en la Luna...

-He usado tu piedra para crear algo mio, si necesitas de mi para crear algo solo pídemelo. -le dijo Raiza.

-Sin problema Raiza. -contestó Gálmaro antes de ir con Tabahätta.

Apareció ante él, en el núcleo del Mundo. Le gustaron los cambios.

-¿Para qué me necesitas, hermano?

Cuando Gálmaro apareció ante él y los tres Dioses se hubieron reunido, el Señor del Fuego abrió los brazos, mostrando su obra.

- Os presento el lugar que hará que este mundo que estamos creando dure para siempre.

Estaba pletórico, y sus Hermanos podían distinguir cómo las placas de metal que eran su armadura a la vez que su piel brillaban lustrosas, como si ello dependiera de su estado de animo. Y conociendo al Padre del Caos, probablemente fuera así.

Tomó un puñado de la nueva sustancia que había formado, y se la mostró al Guardia de Acero - Mira, Hermano. Es la sangre de este mundo, formada por nuestras esencias. Pero necesito que haya un corazón que bombee esa sangre por todos los rincones, y le caliente cuando el Guardian Ardiente se aleje de su lado.

Y de repente, ya no estaba allí, sino delante de ambos dioses, Serune y Gálmaro.

- Quiero que me ayudéis a forjar el Corazón del Mundo - dijo, y al instante era el Titán gigantesco que abarcaba todo el nucleo del mundo - Yo dejaré gran parte de mi esencia aquí. Será mi Ser el que lo mantenga vivo en el frío del Vacío.

Luego era apenas unos centímetros más grande que el Señor de la Tierra, con el brazo sobre su hombro.

- Tú, Hermano amado, encerrarás mi Esencia en una gran joya, pues sólo tú conoces la mejor forma de hacerlo. La joya más hermosa que exista jamás.

Y tan rápido como un parpadeo, era un pequeño ser entre los brazos de la Diosa del Amor.

- A tí te dejo el final, Hermana. Me he inspirado en tí, y en tu "mujer" para hacer esto. Te quiero, y confío en tu Infinito Poder. Esto, es una obra de Amor, y no podía hacer esto sin tí. Quiero que el Corazón del Mundo tenga también parte de tí.

-Excelente idea hermano. ¿Ves cómo sí tienes buenas ideas para el mundo? -sonrió- Pero éste trabajo requiere tiempo. -"Y de paso, descansar yo un poco"- Dame tiempo para hacer los planos y esquemas necesarios, quiero que salga perfecto.

Desapareció, y reapareció ya en sus aposentos, en su despacho concretamente. Comenzó a coger pergaminos, reglas, escuadras y otros útiles de dibujo y se puso a hacer el diseño de la mayor joya que existiría jamás.

El Dios observa a los dos primeros seres inteligentes, mientras sus ojos fluctuan en tamaño y forma, observando las infinitas posibilidades que pueden producirse. La mujer proviene del agua y tiene la esencia de la diosa del amor. El hombre de la roca con la esencia de la guerra.

Algo ocurre pues el rostro de Khalis cambia completamente, volviendose serio. Y se dirije a Raiza y Serune, pues habian sido las creadoras y esta vez les habla sin galimatias.

-Desde que el tiempo existe, todo lo que ha empezado esta destinado a acabar. Desde esta creacion hasta nosotros mismos. Y los seres que habitan en ella no son una excepción. ¿Cuanto tiempo deseais que se mantengan en el plano fisico? La mujer vino del agua, el hombre de la roca... Aun no sabeis lo que pasa cuando roca y agua permanecen juntos demasiado tiempo pero... En fin, tanto la roca como el agua cuando nacen son ardientes pero se van enfriando con el paso del tiempo. Si su estancia en este plano es larga seran mas frios y cuanto mas corta sea, con mas intensidad viviran cada uno de sus momentos. Es mia la obligacion de atribuirles un tiempo. Asi que os pregunto de nuevo.. ¿Cuanto tiempo deseais que se mantengan?

Y de nuevo, casi con melancolia su mirada se desvio hacia los dos primeros seres.

Loke extenuado, mira alrededor, a sus hermanos.

- Debo descanzar, volvere cuando recupere fuerza o algo llame mi atención.

Y con estas palabras, el dios del agua desaparecio dejando solo un suave rocio impregnado en los presentes.

-Claro hermano- habla a Tabahätta -yo uniré tu esencia y la creación de Gálmaro, les daré la armonía que necesiten.-

De pronto, el pequeño ser que era Tabahätta en brazos de Serune, cae al desaparecer esta.

Furiosa cómo nunca la han visto, se acerca a su hermano Halis. El aire parece distorsionado a su alrrededor, levantando su pelo aunque no hay viento alguno, sus pasos decididos hacen temblar la casa, o tal vez solo sea la impresión de verla así, jamás nadie pensó que Serune pudiese ser...así.

Pincha repetidamente con dos dedos en el pecho de Khalis, haciendolo retroceder con esos empujones.

-¡Qué dices! ¡No! ¡¡Siempre vivirán! ¿¡Por qué los quieres matar?! ¿¡Por qué traicionas EL AMOR QUE LES DAMOS Y QUE ELLOS SIENTEN POR NOSOTROS AUNQUE NO SEPAN LO QUE SOMOS!?-

El volumen de su voz crece a cada paso y cada empujón en el pecho de su hermano. Incluso, en una ocasión, parece mirar en busca de Ragna...pero parece decidir que mejor no cogerla.

Era mi gemela, sabia que esa llama ardia en ella aunque a otros les pudiera parecer algo horrible. Fui hasta su oido para susurrarle con calma.- Hermana, estan hechos de carne... El tiempo los cambiara y no desaran vivir con la carne pudriendose sobre sus huesos, sentiran dolor porque sus cuerpos se desgastaran... no seran felices viviendo siempre... no obstante tambien quiero que nuestras obras perduren. Demosles capacidad para reproducirse, para que puedan tener descendencia que conserve una pequeña parte de sus esencias por siempre, que se transmita por generaciones... Asi seran siempre eternos y felices.

Medusa empezo a recuperarse de su efecto de vida y tambien vio con rejocijo como poco a poco se dividian y creaban más. Esa era una de las partes que mas le costo, que sobrevivieran.

-Sabran adaptarse, es el don que les he dado, tendran su propio instinto que les guiara hacia la supervivencia aunque quizas tengamos que ayudarles un poco.

Acercando su mano al agua y recogiendo algunas de aquellas celulas Medusa se concentro, les pidio a las celulas que se unieran, que formaran algo más complejo y poco a poco un brote germino en su mano. Antes de que creciera más Medusa lo coloco en la tierra, cerca de donde estaban aquellos seres, mujer y  el otro que aun no tenia nombre. una vez dejado en el suelo medusa se dirigio a Khalis

-Ven aqui hermano, necesito de tu ayuda, quizas asi dejes de fastidiar a nuestras hermanas que tanto esfuerzo estan poniendo. Haz que pase el tiempo más rápido para este ente, al cual llamare árbol, quiero que crezca en todo su esplendor y quien si no tu que controlar el tiempo sobre las cosas que hacerlo. Cuando pase el tiempo crecera y dara frutos, con lo que podra expandirse y a la vez dar alimento a quien se lo pida amablemente.

Mientras Serune y Gálmaro hacían sus propias tareas, el Señor del Fuego seguía allí, en el lugar que ocuparía el Corazón del Mundo. Decidió que, si ese sitio llevaría gran parte de su Esencia, lo haría de forma gradual para no quedar tan agotado como le había pasado antes.

Aprovechó esos momentos para meditar acerca de qué necesitaba para recuperar sus fuerzas, mientras sus divinos oídos se llenaban con el murmullo del "magma" (como había decidido bautizarlo) a su alrededor.

Con cada golpe del dedo en el pecho, Khalis retrocedia un paso y el pelo parecia erizarsele como cargado de electricidad, sus ojos se abrieron de par en par ante la repentina furia de Serune.

-Pero... ¿Quien ha hablado de matarlos? Precisamente por que les tengo que dar un tiempo te consulto. Puedo darles el don de la longevidad y hacerlos que perduren tanto como este mundo, pero no duraran para siempre, igual que nosotros algun dia desapareceremos ellos tambien. Asi que si deseas que vivan por siempre..

Apunto estaba de chasquear los dedos, cuando Raiza tomo la palabra.

-Veo que diferiis en su tiempo... Tambien puedo preservar su carne si lo deseais, si quereis que se... "Reproduzcan" ahi no tengo nada que ver. Pero decid su estancia terrenal y avisadme.

Lejos de aparentar enfado, Khalis sirve una reverencia a ambas diosas.

-Ya dije que estoy aqui para ayudar, solo ofrezco mis servicios... Tan solo pretendia darles un don a los primeros seres inteligentes y nada mas... Ah, eso me recuerda... Si de verdad quereis que sean "eternos" vincularlos a vuestra esencia como hizo Tabahätta. Claro que si moris ellos moriran y si ellos mueren.. Pues... No se lo que pasara.

Al escuchar la voz de Medusa, el Dios se desvanece en un parpadeo apareciendo a su lado.

-Por supuesto, hasta la edad de maduración...

Saco un pañuelo bajo sus mangas y lo lanzo al cosmos, este floto hasta tapar el brote y de pronto cunado se desvanecio la planta era ahora un ejemplar considerable, con sus ramas repletas de frutos de apariencia jugosos.

-Muchas gracias Khalis

Medusa se quedo expectante ante la belleza de su creacion y de como con la ayuda de Khalis habia podido ejecutarlo rapidamente. Se acerco aun más, tanto que sin darse cuenta aparecio a unos metros del mismo. Paso los dedos a traves de su piel, era dura, como si hubiera absorbido la dureza de la piedra que tenia cerca. Paso la mano y por ella dejo las rasgaduras de sus uñas, como si de un telar se tratara moldeo aquella piel para darle una forma diferente a la lisa que tenia. Dandole forma dejo un pequeño dibujo en el tronco. El dibujo de una ninfa bellisima. Acto seguido volvio a la habitacion donde estaban casi todos sus hermanos.

-Bueno, veamos que cara ponen cuando lo vean, podran alimentarse de sus frutos y eso les dara energia. Tambien podran usar su madera que el arbol no considere necesaria para hacer lo que quieran con ella.

Y sin mas Medusa se sento en su silla que habia vuelto a aparecer para observar como avanzaba lo que Khalis llamaba ...tiempo

Airlia observaba con ojos curiosos todo lo que sus hermanos hacian. Sin darse cuenta, cogio un trozo de las celulas, y creo una pequeña criatura parecida a ella en el color del cuerpo y del cabello de la diosa, que le caia como una cascada de oro sobre su espalda desnuda. La observo atentamente, y vio que tenia los ojos cerrados, como sin vida.Esperanzada, arranco un trozo de tela de su manga, y la vistio con ella. Como era muy parecida a las otras creaciones excepto en el tamaño, decidio hacer una señal para diferenciarlas mas. Cogio otro trozo de celulas, que se junto con la otra, y a la pequeña le aparecieron unas alas casi tan grandes como ella misma. En ese instante, abrio los ojos poco a poco.

-Parece un angelito...-susurro Airlia mientras le acariciaba con sus labios la pequeña cabeza del hada, que sonrio. Con mucho cuidado, la coloco en su anterior creacion (la nube), donde el hada se levanto y empezo a dar vueltas sobre si misma, como intentando ver que tenia en la espalda que le permitia volar.

En ese momento recordo lo que habia dicho Khalis: "¿Cuanto tiempo deseais que se mantengan? ...no duraran para siempre". Unas lagrimas le recorrieron la mejilla. No queria que aquella criatura muriera. Parecia tan delicada, tan fragil... Ahora entendia la furia de su hermana. Ella tampoco queria que desaparecieran. Entonces... ¿para que crear si no durarian mucho tiempo, y la tristeza de verlos perecer era tan insoportable? Frustada, se sento en su trono, al lado de sus hermanos, intentando comprender el sentido de la creacion y de la vida, y reprimiendo las ganas de llorar que cada vez deseaban y luchaban mas por salir.

Veia a mis hermanas deprimirse por lo efimero de sus creaciones, yo tambien habia creado vida. Un vida destinada a proteger a la creacion de su hermana y que por tanto sufriria mas que él resto, destinadas solo a vivir.

Yo no sentia que el tiempo se los llevara, lo comprendia, era parte de la naturaleza y del mundo que habiamos creado, pero no me sentia triste. Correrian por la tierra, amarian como nosotros, sus pulmones se llenaria de aire y conoceria tiempos felices largo tiempo... despues criarian a sus propias creaciones y les enseñarian lo que aprendieron ellos... una generacion tras otra.

No comprendia a mis hermanas, por primera vez en mi existencia.... Nisiquiera cuando habia usado mi esencia para otorgar un compañero a su mujer.

Gálmaro por su parte terminó rápidamente con su diseño. Había quedado perfecto.

Reapareció junto a Tabahätta, y con un movimiento de manos apareció ante él una enorme joya púrpura, casi tan grande como la caverna en la que estaban. Engarzada en titanio y con grandes engranajes girando, impulsando el magma por su interior.

Se giró satisfecho hacia su hermano: Funcionar funciona, pero le falta el "toque" que solo Serune puede darle.