Partida Rol por web

 Observó a los gatos con cierta curiosidad, algún día tendría un gato o algo similar. Ya...es lo único que dijo ante el comentario de que no podías estar evitando a la gente toda tu vida.Lo dijo como si lo escuchara de pasada. Se mantuvo en silencio observando de reojo como parecía que se encontraba absorta en sus pensamientos, seguramente con un matiz amargado

¿Quieres tener hijos? Mephisteo y sus cambios de temas radicales. Nunca sabías por donde te podía salir. 

La pregunta me vino como un golpe a la cara, seguramente mi expresión habrá cambiado bruscamente.
-No -contesté quizás demasiado duramente, guardé mi PCPU -¿Para qué? ¿Para que vengan a sufrir a este mundo lleno de horrores? ¿A esta vida vacía en esta sociedad superficial? -no pude reprimir un gesto adusto -No puedo negar que la idea pasó por mi cabeza, un hijo que herede mis conocimientos mágicos, al cual dejarle mi legado -murmuré por lo bajo -Pero no, no mientras tantos enemigos acechen a plena luz del día-sonreí cínicamente -Pero tanto hablar de mí y tú sin decir nada, ¿Qué me dices de ti? ¿Tú piensas en tener hijos, una familia?

Tenía miedo, miedo de perder algo suyo. ¿Sentiría lo mismo si perdiese a sus gatos? ladeo el rostro mirándola fijamente con el cigarro bailando en sus labios mientras habló yo familia? no, no puedo engendrar como tal. dijo claramente, como si fuese lo mas normal del mundo. 

Así que te gustaría, pero cuando todo no fuese una mierda... Sopesó las posibilidades, el no era lo que se llamaría un animal social y lo había demostrado ya muchas veces. Parece que lo que estás creando en tu casa es un hogar donde estar totalmente fuera de todo esto miró alrededor como si se lo quisiera mostrar. Un Edén donde vivir y criar, un arca que te salve de todo aunque solo sea en apariencia. No lo decía con maldad en absoluto, y aunque se equivocara que era probable seguiría pensando lo mismo hasta verlo con sus propios ojos. Por que para el lo que su compañera hacía no era mas que un arca de Noe para el espíritu. 

Terminé de fumar y aplasté la colilla en el fondo del vaso de café, mientras exhalaba lo que me quedaba de humo; ahora que me lo decía me daba cuenta de que era cierto, es más, era obvio. -No... no lo había pensado -solté sorprendida -Mi hogar es mi refugio, no lo niego, tiene todo lo que amé y amo de mi vida, nunca había pensado en la perspectiva de que lo estuviera preparando para criar, como has dicho- sonreí amargamente -Es un Edén, sí, de la puerta para adentro: está protegida con hechizos que he realizado y aunque por fuera parece abandonada por dentro tiene toda la tecnología que una arcología puede dar -hice una pausa sopesando contarle algo más -Pero por fuera es otro cantar... No todo el mundo puede vivir de cara a la devastación, esta burburja en la que el nuevo orden ha encerrado al ser humano -miré alrededor -No hace otra cosa que hacerle olvidar qué es lo que pasó allá afuera, que es lo que yo veo todos los días... -me senté en la mesa -Además, no es seguro para un ser humano común y corriente, yo estoy segura por lo que te he dicho pero... en mis excursiones a las ruinas de la ciudad he visto y oído cosas que dejarían sin dormir algunas noches a cualquier hijo de vecino... gritos, murmullos, visiones fantasmasles...-negué con la cabeza -Una mierda- suspiré -Qué pena que no puedas tener hijos, una cosa es elegir no tenerlos pero saber que se tiene la chance de cambiar de parecer y otra es no poder definitivamente... ¿Es por tu constitución biológica o por otra cosa?

Historias...cuéntame... "o mejor llévame" reflejaba su mirada. Parecía que el tema le había causado cierta curiosidad obviando todo lo demás. Observó como apagaba en cigarro, ¿con algo de ira tal vez? Puede...si, seguro que si. Apoyó su coda sobre la mesa y su barbilla sobre el dorso de la mano, con esa mirada ambarina fijada en ti. Parece que pasó de hablar del tema de la cría de especímenes humanos. Ellos no eran humanos.

Me reí encantada por su curiosidad, la morbosidad siempre es amiga de lo extraño. -Una vez fui un día de lluvia a inspeccionar el ala norte de la ciudad, no sé si te dije que colecciono antigüedades y en esos lugares, y sobretodo en las casas de los suburbios, se pueden encontrar muchas cosas interesantes... Las que no me interesan las vendo en el mercado de coleccionistas, así es cómo me ha pagado mi casa -hice una pausa -Entré a una casa de dos pisos, eran las 5 de la tarde pero la tormenta hacía que parecieran las 8 de la noche, una suave luz gris plateada entraba por las ventanas rotas y los agujeros del techo. Estuve un rato largo buscando en las recámaras, no sé por qué pero siempre que hago eso me siento una especie de saqueadora de tumbas, esas ruinas son un gran mausoleo, créeme - fijé la vista en un punto fijo recordando -Finalmente encontré una caja de música de madera y una colección de zapatos en buen estado, estaba guardando todo en mi mochila cuando tuve esa inconfundible sensación de ser observada y la más escalofriante sensación aún de saber a ciencia cierta que eso no podía ser verdad, sabía que en esa parte de la ciudad no había nadie, me volteé y vi el cabello y el ruedo del vestido de una niña pero al salir al pasillo no había nadie. Exploré un poco más la casa y comencé a escuchar risas, susurros, maderas que crujían bajo pasos invisibles; al salir de la casa la vi en la ventana del porche, mirándome fijo y de pronto su rostro reflejó miedo y desapareció. Fue entonces cuando oí con claridad ruidos que venían de la casa cruzando la calle, una mezcla de vagido tenue y gorgoteo, algo que se arrastraba por el interior de la casa pesadamente, haciéndola crujir -la miré a los ojos tratando de leer su expresión -Y entonces me di cuenta de que si la expresión del espíritu había sido por lo que había en la casa de enfrente tenía que huir rápido de allí, fuera lo que fuese hacía que los seres espirituales se estremecieran, eso no podía ser bueno. Me fui enseguida y no volví más a esa parte de la ciudad.

Mientras escuchaba a Tagashi se terminó el cigarro apagando la colilla con tranquilidad en el cenicero. Tomó el té y se lo terminó de tres tomas más, la tranquilidad era muy relativa para ella. Es como si le estuviese contando una película de miedo, mentira, el comienzo, luego todos mueren.

 Y te asustaste pues, bueno se comenta y se dice que tanto fuera como dentro hay infiernos peores que los de la muerte definitiva. Se encogió de hombros ligeramente parece que nos quieren meter en algo parecido, Einar nos ha mandado a la boca del lobo. Ese hombre, el que murió en la grabación creía realmente en lo que decía y creo que EJ sabe algo que no nos ha querido decir, ni aunque se lo preguntes chasquea la lengua.

-Sí, nos ha mandado al matadero -apostillé con una sonrisa de costado -Debe ser que confía en nuestras capacidades -me encogí de hombros -Eso, o realmente nos odia -me reí entre dientes "¿Es eso Einar?¿te estás vengando porque te vencí en tu ley?", resoplé pensando para mí misma, "Tal vez era demasiado obvio si mostraba alguna empatía... ¿Empatía de qué? Ya me estoy enrollando en historias que no suceden más que en mi cabeza".
-No dudo de que el tipo de la grabación presenció algo que nosotros no podríamos comprender jamás -afirmé -Sé por mis estudios y por lo que he visto en rituales que hay verdades inasequibles y horrores incomprensibles a los que estamos ciegos, por ahora -me crucé de brazos -Y hablando de EJ, ¿Qué pasó con ella, estaba contigo en la estación no?

 Es lo que ha dicho el Doe, no somos mas que agentes que saben atrapar a chorizos con habilidades especiales, y nos han mandado una misión para la que Einar no está capacitado se frota la punta de la nariz con la yema del dedo corazón el es muy directo y no entiende que una investigación puede durar meses...manda cojones que lo diga yo sonrie de medio lado 

Cuando mencionas lo de EJ parece mosquearse pues refunfuña algo por lo bajo no, ella no estaba, se fue del centro cuando llevamos al recluso a la zona de contención de seguridad. Ella fue de niña buena, como si el recluso fuera un niño tonto, es mas si tuvimos el incidente del intento de ataque fue por su culpa se cruzó de piernas y apoyó la espalda semi doblada en la silla se fue, se largó y me dejó a mi con el hombre, menos mal que por una vez los del IOS mandaron a alguien decente que no es un estrecho come pollas de oro.

Me eché una carcajada con ganas cuando habló sobre el OIS, me reí tanto que me doblé sobre mí misma -Vaya que son unos huevones -cuando me compuse agregué -Qué bueno que te hayan mandado a alguien que vale la pena y EJ... me sorprende, ¿Qué le habrá pasado? Es bastante voluble, pensé que era más centrada -no entendía cómo había reaccionado así, negué con la cabeza -En fin, somos los dos miembros más jóvenes del grupo y nos mandan a esta misión, creo que habla bien de nosotros... -me estiré y me troné los dedos, "Y ahora Einar está con una xenomezcla, con lo cachondos que son los nazzadi... Bah, qué me importa".

Le pasó que se fue directa al interrogatorio sin hablar antes conmigo de que ibamos a hablar con el preso...y una vez dentro el mismo preso la tomó por tonta sentenció rapidamente al igual que ella le dijo no se que de que ella había visto lo mismo que el o algo parecido, luego cuando le pregunte a ella fuera no me quiso ni contestar, pasó del tema olimpicamente. Y así se pasó la mano por el flequillo para colocarselo tras la oreja no se puede estar en un equipo no hay comunicación, cada uno hace lo que le da la gana. 

Hace una pequeña pausa sumida en sus pensamientos, mira la taza...el poso de té en ella y suspira sin darse cuenta.

Golpeó el cristal del coche con los nudillos de su mano derecha mientras enseñaba su placa con la izquierda, despues hizo un gesto al hombre para que bajase la ventanilla - Cantáis más que los Il divo tercera generación, ¿sabes? - dijo con su media sonrisa ladina - A ver esa identificación... - sentenció con un gesto para que se la mostrara, mirando de reojo a EJ que en lugar de seguirle se estaba yendo directita a la escuela - Esta chica... - murmuró negando con la cabeza mientras observaba detenidamente al asiatico.

-Sí -asentí pensativa -yo también noté que cada uno va por su lado y no compartimos la información, como deberíamos -volví a sentarme a la mesa-Deberíamos empezar a reunirnos para establecer avances, varios cerebros piensan mejor que uno -permanecí callada, al principio la conversación parecía algo irrealizable pero poco a poco había ido fluyendo, hasta sentía que Teo se expresaba un poco más que al principio.
-Por eso propuse contarte lo que sé y he averiguado, aunque ya ves, expresé mis conjeturas en la reunión -me apoyé en la mesa con los codos -Hablando de eso, ¿Te parece si retomamos el camino hacia la biblioteca?

Si estaría bien hacer un punto de reunión una o dos veces al día. No apartaba la mirada de la taza, es como si algo estuviera absorviendo todo su atención. 

Vayamos dijo de golpe, levantándose para coger la chupa del respaldo de la silla. Cogió los vasos tras ponersela y ella misma lo acercó a la barra para que el que trabajase allí no tuviese que moverse en exceso. Yo intenté quedar con vosotros ayer por la noche, dije de ir a tomar algo ya que había cosas que no me cuadraron, pero no me hicieron ni caso...

El hombre dejó de masticar el chicle. Einar le miró un momento, y le reconoció rasgos un tanto extraños. Su acento igualmente resultaba extraño. Iba vestido más como un oficinista que como un patrullero. Sonrió un momento, como burlesco, y fue a sacar algo de su guantera.

-Claro, la tengo por aquí. ¿Compañero?

Realmente, lo que fue a empuñar era un táser. Einar debía moverse rápido. Aquel tipo no era trigo limpio.

Ya había visto el taser que llevaba el hombre antes incluso de que fuese a echar mano del mismo... En cuanto intentó engañarle diciendo que le iba a enseñar su identificación y acercó un solo dedo al arma aturdidora reaccionó, ni siquiera utilizó sus habilidades, desenfundó su nuevo arma y encasquetó dos disparos al hombre, uno en el pecho justo en el corazón y el segundo en la cabeza volándole medio cráneo y estropeando la bonita tapicería del vehículo...

- Jodido cabrón... - sentenció mirando de medio lado - ¡EJ la chica está en peligro! - gritó señalando a la xeno-mezcla que estaba ya casi en el edificio - ¡Corre! - ordenó mientras él hacia lo propio y empezaba a correr hacia allí - Astrid, informa a las autoridades del tiroteo y que acordonen la zona. - solicitó a su PCPU con el arma en la mano sin dejar de correr.

No sabía qué decir, ni siquiera recordaba que ella hubiera insinuado algo y me daba vergüenza decirlo -Bueno, lo hecho, hecho está. Procuremos avanzar en esto de la comunicación entre nosotros -me puse de pie junto con ella -Podríamos buscarlos cuando volvamos de la cúpula -sugerí al tiempo que la acompañaba y salíamos del comedor al corredor -Presiento que vamos a terminar tarde nuestro día de hoy...

Todo pasò tan pronto que la nazzadi no sabìa muy bien còmo o què, por suerte habìa tomado un poco de ventaja, no tenìa sentido avisar, su jefe era màs ràpido que eso y con el arma en la mano se dispuso a internarse en el edificio.

Llegamos a la biblioteca, luego de dejar los PCPu en el control de la puerta, ya que estaba prohibido llevarlos. Me senté en una mesa con Teo, aspiré suavemente, preparándome, y empecé -Sabemos que Yi hizo un ritual muy poderoso, posiblemente asistido por alguien más, para ir a Caeleno en busca del libro que se trajo consigo, Caeleno es un planetoide que gira en torno a una estrella muerta, allí hay una biblioteca, la biblioteca de Pnakatos que está custodiada por los byhakee, esta criatura fue convocada por Yi también por medio de otro ritual para que lo lleve a Caeleno, ya que puede cargar a un humano hasta allí y puede transitar nuestra atmófera y el espacio. Ten en cuenta esto porque después voy a retomarlo -le dije y me tomé una pausa -Nyarlathotep es un dios primordial servidor y mensajero del dios supremo Azathoth, tiene muchos apodos pero el más conocido es "el de los mil rostros", verás, esta deidad es muy peligrosa, más incluso que Cthulhu como bien dijo antes Cevy, porque no busca solo la destrucción, como los otros, también busca el sufrimiento y la abyección de la raza humana, el completo sometimiento, para él nosotros no somos más que esclavos rebeldes a los que tiene que aleccionar antes de aplastar -me sentía tensa hablando de todos estos temas tan oscuros, presentía que vendrían días más oscuros todavía.
-Ahora bien, Yi fue a por el libro pensando en contactarse con los Yith, una raza alienígena suprema que es favorable a nosotros, teóricamente, pero igualmente despreciada por este dios -retomé -Por otro lado, Farquad, o el ser que tomó su cuerpo, es "devuelto" a esta dimensión por Nyarlathotep, en la grabación dice "Él me ha devuelto de las tierras del sueño" y también "Los humanos no deben conocer la tecnología de los señores del tiempo. No deben contactar con ellos. Ambas razas están destinadas a ser siervos, y luego morir", o sea, que el de los mil rostros sabe que tenemos el libro y no está contento, ha mandado a sus siervos en busca del libro, ha matado a Yi... y quién sabe qué otras cosas haga para evitar que accedamos a los conocimientos de los yithianos, lo cierto es que está un paso adelante de nosotros y tenemos que ser rápidos. Es un dios astuto y puede tomar formas de todo tipo y sus servidores, como has visto, son incondicionales... en ese nido de serpientes tenemos que infiltrarnos.

Ella se sentó frente a frente con su compañera, con el codo apoyado en una de las mesas apoyó su barbilla en la palma hacía arriba de la mano y escuchó todo eso que le decía, la gran mayoría se quedó en la nada y Tagashi pudo comprobar como Mephisteo no sabía nada de nada de lo que le estaba hablando por el arqueado de ceja que poco a poco llegó a ser casi milagroso. Cuando concluyó solo pudo decir una cosa

Ajam...y eso, ¿se come?

No sabías si eso era una broma o no, pero parecía decirlo en serio.

Osease me estás diciendo que el tal Yi montó un ritual para montarse en un bicho, irse a un planeta apartado de la mano de dios, donde a saber porque hay una biblioteca de un tio chungo que es el de las mil caras que anda mosqueado y encima es una deidad que quiere exterminarnos a todos...

Tomó un poco de aire aun sopesando sus palabras 

...y que el Yi lo único que quería es contactar con una raza de seres que estaban de nuestro lado para evitar que...el de las mil caras o mil rostros como se llame venga y nos pete vivos? dijo de cierta forma incrédula, de cierta forma, ya que había visto el miedo del preso quemado...preso, si, no había que ponerle un nombre, ni un número.