Partida Rol por web

Mientras dentro de la nave Caronte sigue la conversación, se puede ver cómo Hermes abre una de sus compuertas, y de ella bajan Darius, Amelie y Mick.

Darius toca el suelo arenoso del lugar y casi se pone a dar saltos. Como un niño que ve por primera vez el mar, corre hacia él. Se escucha a Mick gritarle algo, mientras baja junto con Amelie un gran carro que sabéis que una vez desplegado y montado será un buen laboratorio de campo. Sea lo que sea lo que le dice Mick a su hermano, éste no hace caso, y en un abrir y cerrar de ojos se ha apañado para remangarse hasta las rodillas, descalzarse y meter los pies en el agua.

Con todos en la cabina, el exterior se veía a traves de las ventanas del exterior y la escena que se desplegaba resultaba extremadamente distractora para la situación que se estaba dando en la nave, disminuyendo la atención en un 70% del tema central asi como reduciendo la efectividad de futuras intervenciones de una forma drástica.

Por lo que rápidamente apreté el botón de bajar la persiana, y mientras miraba fijamente a todos los presentes con el rostro absolutamente serio y un silencio sepulcral, lentamente la estancia se fue oscureciendo según desaparecía la idilica escena hasta finalmente volver a la cruda realidad.

- Es seguro salir. - Ratificó de nuevo Eugenius. - Y deberíamos empezar a tomar muestras de campo para ver qué medidas tendremos que tomar si queremos sobrevivir aquí a largo plazo. -

Se levantó de su asiento y recogió un maletín con lo básico para unas primeras muestras de la zona cercana al lugar de aterrizaje de ambas naves.

Cuando se aseguró de que tenía todo lo que necesitaba, y nada demasiado pesado, se encaminó hacia la compuerta que le llevaría, tras pasar unas cuantas más, al exterior. 

- Eso sí, no nos vendría mal alguien armado fuera... por si aparece algún depredador autóctono. - añadió lanzando una mirada a Graham. Para algo estaba el soldado, ¿no?

El militar ya se había equipado con su equipo de combate, listo para entrar en acción. Lo que no esperaba era que la gente se saltara los protocolos de actuación, si es que había tales protocolos o si alguien se había molestado en leerlos. Estoy aquí para proporcionar seguridad señor Novák, confié en mí. Pero usted también tendrá que seguir mis indicaciones. Por ahora no se aleje de las naves, y mucho menos, acercarse a las plantas. Tenemos que poder establecer contacto visual en todo momento. En el momento de indicio de peligro, todo el mundo vuelve a embarcar.

Señorita Berghoff ¿Tenemos ROE,s¹ en caso de enfrentamiento con indígenas o aplicamos la clásica escalada de fuerza?  

El empeño era absoluto, las tablas de prioridades se habían dado la vuelta y el mundo parecía perder sentido a mi alrededor, era una sensación mareante pero implicaba que debía adaptarme a las nuevas condiciones del entorno, por poco de acuerdo que me encontrase con ellas.

Aún asi, tratemos de darle una forma organizada, por lo que tomando una larga inspiración empecé a pensar decir a continuación.

Triss era una prioridad, asi que por lo tanto los recursos debían dirigirse a su cuerpo, asi que me dirigí a Olaf.

-Hay material de laboratorio en camino, pero la capsula de hibernación no está preparada para las tareas de investigación asi que habrá que prepararlo; mi idea de asegurarnos de que disponga de sistemas de respaldo de emergencia exclusivos para que siempre esté conectada y un sistema de gases para recrear el ambiente alienigena en su interior son las prioridades, dado que los sistemas de la nave ¿puedes estimar que se requiere para dicha tarea?-Tal vez era cuestión de crear una conducción directa del exterior aprovechando alguno de los sistemas de ventilación, o sería necesario crear el depósito y regulador de gases a propósito.

Ahora, Scott y Eugenius.

-Aunque no es descartable, procuren no preocuparse por la presencia de formas de vida animales, de hecho insisto en que puede ser lo más inofensivo que encuentren ahi fuera; el planteamiento correcto es que todo es peligroso hasta que se demuestre lo contrario por lo que si de verdad sienten la necesidad de exponerse al peligro y explorar no hay reglas de enfrentamiento porque no puede haber enfrentamiento, pero si requiere algunas consideraciones; siempre hay que ir como minimo en grupos de 3, siempre bajo contacto visual, a cualquier actividad o sensación extraña registren el evento y reportenlo; si se les responde que algún cientifico puede ir a investigar mantengan la posición, sino retirense de vuelta a la nave para hacer un registro fisiologico antes de continuar y por último, no se aleje nadie a más de de un radio de 3 kilómetros de la nave o en su defecto, cualquier obstaculo que aumente el tiempo de respuesta o retirada a más de 30 minutos a pie.-Este planeta no es nuestro amigo, al contrario, somos intrusos en el  y somos muy pocos, esta es la aproximación óptima, además, lo prioritario ahora es confirmar la compatibilidad biologica con Hera no explorar el entorno.

Y finalmente para todos.

-Bien, dado que parece que no hay deseos de sostener una conversación sobre el liderazgo de este proyecto, voy a prepararme para salir para terminar los analisis de tejido de Triss en el laboratorio y preparar las pruebas de biocompatiblidad, una vez termine esperaría que se le diese la meditación que requiere para obtener una solución cuanto antes.

Escuchando las palabras de Eva y viendo que excepto Novak, más o menos el resto la estamos tomando cómo figura de autoridad, por lo menos momentáneamente. Paso a hacer caso. Sus "ordenes" eran ir en grupos de 3, teniendo en cuenta que habían salido solo Novak y Scott a explorar me vi en la "obligación" de cumplir esa orden. - Scott, iré cómo tu segunda. Tengo algo de entrenamiento militar y en armas de asalto. Si estás de acuerdo. - Espero la respuesta de Scott para equiparme y salir con ellos al exterior.

Bien, entre más seamos mejor podremos cubrirnos. Contesto a la ingeniero. No era el escenario que el hubiera elegido para jugar ni los elementos idóneos, pero no había posibilidad de quejarse. El hubiera preferido a sus hombres, marines aguerridos con los que había participado en varias batallas y con los que se coordinaba a la perfección, casi sin necesidad de hablar. 

Eugenius cerró los ojos por un momento. Todo aquello resultaba ridículo, pero era mejor que apartara esas distracciones de su mente y se centrara en la cantidad de datos que podría recoger del exterior.

- Señores, no hay tiempo que perder. - Se limitó a decir. - Cuanto antes exploremos y analicemos, antes podremos establecer un refugio seguro para los nuestros. - No era la palabra más apropiada, pues nuestros implicaba a varios, y apenas quedaban unos pocos y escasos supervivientes.

De hecho, Eugenius calculaba que las posibilidades de extinción completa de la raza humana ya superaban el noventa y nueve por ciento... de modo que tan sólo le restaba aprovechar el tiempo y enriquecer aún más su mente si era posible. Y en un nuevo planeta, claro que era posible.

Hizo un gesto con la mano libre para que tanto Scott como Raven se apresuraran a acompañarle al exterior.

 Era extraño.

 En cualquier otro momento habría suspirado, echado alguna mirada de frustración, o realizado algún que otro gesto que mostrase alguna clase de rechazo frente a la actitud de quienes se suponía que eran los que debían reconstruir la civilización humana desde 0, pues aún consideraba cuanto menos suicida este comportamiento arriesgado frente a un entorno que puede ser desde extremadamente amigable a hostil hasta el último átomo, pero ahora, hace un momento estaba con ellos al siguiente y ahora estaba justamente comparando mi comportamiento habitual con el presente mientras me colocaba el traje aislante y preparaba el resto de instrumentación para captura de muestras.

Pero al menos podía decir que podían atender a unas simples consideraciones de seguridad, puede que por concordancia con la lógica de dichas consideraciones o puede que por el hastío de no estar fuera explorando como si unos niños en un campamento de verano se tratasen, de una forma u otra el resultado es el mismo y eso debía bastar por lo pronto.

Lista de tareas:

-Empezar a tomar muestras de los alrededores; una tarea rápida para ahorrar tiempo ya que voy al laboratorio.

     -Suelo, agua y lo que parezcan organismos vegetales son prioritarios, deben estar en contenedores reforzados y sellados

-En el laboratorio finalizar los analisis de los compuestos encontrados en Triss.

-Establecer las tareas de investigación para el resto del día con el resto de miembros del equipo cientifico.

-Proceder a usar el cuerpo de Triss para estudiar los efectos de la exposición de Hera a una fisiologia humana.

 Y esto ultimo debería requerir el resto del día, todo depende los resultados.

Tomo nota mental de la solicitud de Eva, evaluándola unos instantes antes de contestar.

La mayoría de los demás bajaran directamente al planeta, de nada serviría repetir los mismos argumentos.

– Suerte en la primera exploración, no olvidéis tomaros imágenes para los archivos sobre nuestra llegada a Hera.

Finalmente respondo a la doctora. – Eva, puedo aprovechar el sistema de cámaras estancas para destinar el compartimiento de carga 21 para el laboratorio que desea instalar. Es el primero a la derecha de la rampa de entrada con lo que las muestras no tendrían prácticamente que entrar en la nave.

- ¡Eh, eh! - Darius saluda desde su posición a todos los que van bajando. - ¡El agua está buenísima! ¡Y muy limpia! ¡Eva, Eva! ¡Hay algas en la orilla!

El artista ya estaba metido en el agua hasta la cintura, sin importarle mucho que se le moje la ropa.

- Vamos, Darius, no seas crío. Ten cuidado. No sabemos si el agua tiene algún virus para el que no tengamos defensas aún.

Junto con Amelie, Mick tiene el laboratorio ya casi montado. Extrañamente, Darius le hace caso y sale del agua aunque con una gran sonrisa infantil, como la de alguien que se lo ha pasado genial y ahora simplemente se dispone a descansar antes de volver a jugar.

Durante la discusión, Raven se acerca al laboratorio móvil con la intención de ayudar y empezar a montar los dispositivos para la comunicación a distancia.

- Creo que lo primero que investigaré será cómo lanzar un maldito satélite. Sin él, estos trastos sólo tienen una coertura radio de cinco kilómetros.

Al oír a Raven a través del sistema de comunicaciones lo uso para comentarle que ya tenemos una red de ellos desplegados. – Mientras orbitábamos para aterrizar desplegué una serie de nanosatélites que son los que realizaron el mapa de Hera, cubren completamente el planeta. Se comunican entre ellos y la nave. Estoy seguro de que podrá usarlos para esa función.

Me mantengo a la escucha mientras me dirijo al compartimiento de carga 21 para adecuarlo a las necesidades de Eva.

- Interesante. - Comentó Eugenius examinando sin tocar un espécimen de la flora local. Asintió para sí y giró la cabeza para examinar los alrededores sin alejarse mucho de la nave. Sacó un aparato del enorme maletín que había bajado de la nave y lo encendió antes de apuntar a los alrededores y pasarse unos minutos comprobando la zona.

Aquello era una especie avanzada de contador Geiger, y por lo que el físico podía comprobar, no había radiación en las inmediaciones.

- Esto parece limpio, tal y como indicaban los estudios previos. - Confirmó. - No hay rastro de radiación ni, aparentemente, de agentes nocivos... - Explicó.

- Deberíamos avanzar un poco y buscar fuentes de agua y alimento. - Sugirió. Pero esperó a que Scott le confirmara si le acompañaría o no.

Te fijas en que los árboles, al menos los de primera línea, son delgados y parecen frágiles, probablemente por su cercanía al agua salada que impide que sus raíces estén del todo a salvo de ellas. Las hojas de los árboles recuerdan a las de una parra, pero son verdes oscuras por un lado, el superior, y amarillas por el otro.

A simple vista los árboles no tienen nada de especial más allá de ser una especie que no habías visto nunca. Al menos tú. Quizás alguien más experto podría identificarlo.

Los arbustos tienen tallos amarillentos y hojas pequeñas. Aquí y allá brotan lo que parecen flores de color blanco. Son curiosas pues no están compuestas de varios pétalos, si no de uno, redondo y flexible.

Justo de detrás de cada flor cuelga lo que podría llamarse un fruto. Parece una nuez pequeña.

En las cercanías de los arbustos, en el suelo, se ven cáscaras de dichos frutos, señal de que alguna criatura los ha abierto y se ha llevado o comido el interior.

La ingeniera mira a Olaf con gesto de agradable sorpresa.

- Gracias, Olaf. Ha sido una gran idea. Te debemos una.

Eugenius alzó una mano para llamar la atención de Scott.

- Aquí. – Avisó sin alzar demasiado la voz. Señaló luego los arbustos de tallos amarillentos y hojas pequeñas. – Mirad. Esto parecen frutos. Habría que recoger alguna muestra para ver si es comestible. – Explicó mientras sacaba unos guantes y se los colocaba, y rebuscaba para conseguir una bolsa de plástico del interior del maletín.

- Berghoff… ¿me escucha? – Dijo por el comunicador. – Creo que disfrutaría con esto… Debería echar un vistazo a esta vegetación. – Sugirió. – Necesito a un experto en flora. -

No le gustaba admitir que, en aquel mundo nuevo, por muchos conocimientos que tuviera, habría cosas que escaparían a su comprensión. Y la fauna y la flora seguramente serían algunos de esos campos. Berghoff tendría muchas más opciones de saber qué era aquello.

Poco a poco, al incesante y relajante sonido del mar y el viento en las hojas se le van uniendo otros, mayormente provenientes del interior. Sobre los árboles y los arbustos se escuchan golpecitos en la madera o tirones en las ramas. También silbiditos. Todo parece apuntar a que la posible fauna que había callado y se había escondido por la intervención de las naves comienza a retomar su rutina.

Me enfundé en el traje de aislamiento ambiental; soporte de oxigeno propio colgando lateralmente en la parte trasera cuyo tubo penetraba en la espalda y que tenía una válvula de emergencia para impedir la entrada de compuestos quimicos o entidades biologicas peligrosas por presión positiva, justo al lado del tubo estaba la cremallera de PVC autosellable que me tuve que ajustar sola, no sin cierta dificultad debido a que era una tarea para 2, y el interior estaba recubierto en tela de cloropreno y una capa externa de butilo dandole a todo un tacto áspero de plástico, finalmente y aunque los guantes y las botas estaban debidamente sellados por el propio traje, añadí cinta de PVC alrededor de las muñecas y tobillos para asegurar que estaba todo debidamente sellado.

Y observando las manos; fue como si me hubiera transportado de vuelta a la Tierra, esos guantes negros, esa sensación de encapsulamiento en plásstico y la atmosfera artificial de aire enlatado daban la sensación de que estaaba a punto de entrar a algún laboratorio, que los paneles de metal de detras de mis manos constituian parte de un puesto de investigación movil y el tiempo apremiaba para obtener resultados, para contribuir a los esfuerzos de contención de una de las muchas enfermedades que empezaron a expandirse en cuanto aumentaron las temperaturas globales y afectaban a poblaciones no preparadas ni inmunizadas naturalmente.

-Solo necesitaba un poco más de tiempo...-Esos recuerdos traían, sensaciones, sentimientos asociados que prefería olvidar, necesitaba olvidar, tanto estrés, con tantas noches sin dormir, pero negandome descanso alguno...