Partida Rol por web

Deadly Reborn // Renacer mortífero

Despertar de Noelia.

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12/01/2011, 06:39
Director

Un "Zumbido" del Messenger sonaba insistentemente en la Pc. Como cada noche algún fiel cliente requería los servicios de SexCam de SexyLoba23. Alguien golpeó a la puerta del departamento, pero nadie respondía. Tenía una cita exactamente a aquella hora, una cita programada mismo horario y mismo día de la semana, desde hacía meses. Estaba exitado. En todo sentido. Aquella mujer era su amazonas, su doctora, su dominatrix. Era lo que él quería. Pero sobre todo, era discreta. Un Senador no podía arriesgarse.

Volvió a golpear. Nadie respondía. Se puso nervioso, no tenía demasiado tiempo. Su mujer lo esperaba para festejar su aniversario de casados. En algún momento le pareció oir un ruido dentro. Miró a ambos lados del pasillo para asegurarse que no había nadie, y pegó su oído a la puerta. Se enfureció al oir una especie de gemido. Seguramente estaba con otro cliente. No lo atendería. Se fué maldiciendo, mientras le mandaba un mensaje de texto desde su número "nocturno".

El Nokia vibró en la mesita de luz. Pero Noelia nunca leería aquel mensaje. Con sus ojos abiertos de par en par, podía observar su cuerpo convulcionarse. Sus gemidos de dolor distraían el sueño de Beba. Vió el frasco de pastillas, casi vacío, al igual que la botella de escocés. Vió sus puños contraerse apretando las sábanas. Vió brotar espuma seguida de vómito de su boca. Se vió morir...

Ver era generalmente la ventaja de un espejo sobre la cama. Pero ella ya no quería ver más. Quería cerrar los ojos, pero al parecer ya no era dueña de sus músculos. Por un instante se preguntó cuanto duraría aquel sufrimiento. Poco. Unos cortos minutos, hasta que los pulmones colapsaron y el corazón comenzó a sufrir una fibrilación ventricular.

Beba se paró, curiosa. Se acercó a la cama y olió el vómito. Tal vez pensó en lamerlo, pero el whisky era demasiado fuerte. Jugueteó con una de las pastillas que había caído al lado del cuerpo de Noelia, hasta que el zumbido del Messenger la volvió a distraer. Salió por la ventana, a dar una ronda nocturna de un par de horas. Cuando volvió se acercó a su plato a comer unas piedritas de Whiskas y buscó dónde dormir. Se enrollo entre la media sábana que había caído en el piso. Solía dormir en la cama, al lado de Noelia, pero aquella noche su cuerpo estaba demasiado frío...

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12/01/2011, 07:27
Director

Luego de un intenso "Cero Absoluto", los ojos de Noelia se abrieron de par en par, tal cómo recordaba que habían quedado. Solo que ahora no veían mas que una mancha de humedad. Tenía la espalda entumecida por el frío. Estaba tirada en un piso extraño. Miró alrededor. La habitación estaba cerrada con una fuerte puerta de madera. En la pared que tenía enfrente había una cama, al lado una gran biblioteca, muy deteriorada. Pilas de libros se veían por todo el piso.

Un tarareo la asustó. Giró rápidamente su cabeza para ver quien era. Un hombre escribía, concentrado, en un gran escritorio, bajo la única ventana y fuente de luz de la habitación. Ventana, que dicho sea de paso estaba completamente enrejada por fuera. En una repisa que había a su lado parecían haber pequeñas estatuas.

Todo parecía irreal. La habitación era claramente antigua, medieval pensó primeramente Noelia. Pero al ver las vestimentas del hombre notó que no eran tan antiguas, siglo XVI, XVII tal vez. Su sorpresa fué aún mayor al ver que ella misma poseía un vestido de aquella época.

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12/01/2011, 08:12
Donatien

El hombre dejó su pluma en un tintero y giró la hoja hacia la luz de la ventana, leyendo lo que acababa de escribir.

"Pero nuestra amable Hermana Superiora no tardó en hacerme ver que no era yo la única que atraía su atención, y pronto me di cuenta de que había otras que compartían placeres en los que había más libertinaje que delicadeza.

Ven mañana a merendar conmigo - me dijo un día - Elisabeth, Mme. de Volmar y Sainte-Elme estarán allí, seremos seis en total; quiero que hagamos cosas inconcebibles...

¿¡Cómo!? - dije yo -¿Así que te diviertes con todas esas mujeres?.

Claro. ¿Y qué? ¿Acaso crees que me limito a esto? Hay treinta religiosas en esta casa; veintidós han pasado por mis manos; hay diecinueve novicias: sólo una me es todavía desconocida; vosotras sois sesenta pensionistas: solamente tres se me han resistido; las voy poseyendo a medida que llegan, y no les doy más de ocho días para pensarlo. ¡Oh Juliette, Juliette!, mi libertinaje es una epidemia, ¡tiene que corromper todo lo que me rodea! Y la sociedad tiene una gran suerte en que yo me limite a esta dulce manera de hacer el mal; con mis inclinaciones y mis principios, quizás adoptase otra que sería mucho más fatal para los hombres."

Dejó la hoja en la mesa y se quedó pensativo un instante. Noelia no podía ver su cara, aún estaba de espadas. Su forma de hablar era bastante particular. Sin saber por qué suposo que era una hombre de la nobleza, a pesar de la precariedad de las instalaciones y de su ropa.

Finalmente sonrió y exclamo. Es extremadamente raro que con tantos conocimientos alguien sea al mismo tiempo tan amable. He observado casi siempre que las mujeres instruidas tienen en el mundo una cierta rudeza; una especie de afectación que hace que se compre muy caro el placer de su compañía.

Hasta ahora parecía no haber reparado en su presencia. Pero luego de aquella frase, Noelia no sabía si hablaba para sí o le hablaba a ella.

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14/01/2011, 19:58
Noelia Milliard

Dolorosamente, abre los ojos, sintiendo una punzada en la base del cráneo a medida que las pupilas se ajustan a la luz del lugar. La cabeza le late terriblemente, y un acceso de nauseas revuelve el estómago. Poco a poco, las formas difusas antes sus ojos se van enfocando, y puede ver…

 Las nauseas, y el frío en la espalda hacen muy difícil concentrarse. Siente un regusto extraño en la boca, y siente la lengua embotada. Acalla una vocecita en su cerebro que quiere darse al pánico, y de pronto sus recuerdos la asaltan como flashes a su memoria...el boliche, el alcohol...los recuerdos dolorosos.. las pastillas....

...y la nada...

Su mente hilvana todos los acontecimientos, y una gota de sudor frío corre por sus sienes -Oh...no!!!! Qué estupida que he sido!!! Qué débil y estúpida...piensa Noelia indignada consigo misma. Fácilmente se imagina a su amiga Lorena, y a Beba!!! Quien cuidará de su gata ahora que ella no está?? Siente las lágrimas corriendo por sus mejillas.

Entonces este es el fin...Noelia no había sido instruida en ninguna religión, pero conocía el dogma del catolicismo y su postura sobre la muerte. Será verdad?? Estoy muerta y ahora estoy en el purgatorio...

-Basta!!! Una vocecita en su cabeza la insta a reponer sus fuerzas...Logra levantarse, alisando casi inconcientemente su extraño vestido, mientras que acomoda su cabello. Y camina un paso hacia lo que pareciera un aristócrata escriba...El juez?

-ejem!!! Disculpe señor... Soy Noelia Milliard...pausa. Estoy muerta verdad??...las palabras de la muchacha no constituyen una verdadera pregunta sino una aseveración casi implícita en la misma. Solo necesitaba reforzar esa idea, tan pragmática y clara como su cerebro analítico le decía...Fuera emociones...ese no era el momento para ello...

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18/01/2011, 09:44
Donatien

El canturreo del hombre se frenó de repente, al igual que todo movimiento de su cuerpo. Unos segundos después, ladeó la cabeza para la derecha y para la izquierda, como si tratara de escuchar algo, pero sin girar, ni ver a Noelia.

Justine??? Han vuelto las voces. Justine, eres tú?

Su voz parecía quebrada de la emoción, un susurro que pretendía no hacer mucho ruido, esperando oir nuevas palabras.

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18/01/2011, 14:55
Noelia Milliard

Noelle se para en seco soprendida por la reacción del hombre...Me ha confundido con otra...

- No señor, no conozco a ninguna Justine, como le he dicho antes, mi nombre es Noelle Milliard...Y usted quien es?? La muchacha camina unos pasos hasta ponerse al lado del hombre. Si me ve se dará cuenta...

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20/01/2011, 16:06
Donatien

Los músculos del hombre se tensaron completamente al sentir la presencia de Noelia junto a él, y su espalda quedó recta como una vara. Parecía no animarse a girar. Luego de unos eternos instantes comenzó a mirar de reojo. Parecía asustado, en un estado de alerta en el que uno se encuentra cuando algo extraño pasa.

Alguien golpeó a la puerta mientras se abría una pequeña abertura corrediza casi al ras del piso, y entraba una bandeja con alimentos. Pero el hombre ni lo registró. Estaba ensimismado en Noelia. Finalmente, una sonrisa comenzó a dibujarse, segundo a segundo, en su rostro, una sonrisa en la que alaguien reconoce al otro.

Eres tú... realmente eres tú mi pimpollo desflorado. Eres... eres perfecta, cómo siempre quise que fueras. Has vuelto por mi... Justine.

Parecía haber ignorado las palabras anteriores, embelesado ante la presencia de la fémina.

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20/01/2011, 17:08
Noelia Milliard

Noelia se para en seco, no pudiendo creer las palabras del hombre...Se detiene un segundo, mira en derredor pareciendo reparar en algo...Una celda!!!

Se coloca bien enfrente del hombre, emite una sonrisa y dice...-Mire, no soy ninguna Justine y no lo voy a llevar a ningún lado, ahora si es tan amable me puede decir quien es usted y porqué estoy encerrada con usted, y deja de dar tantas vueltas...cansada.

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24/01/2011, 05:28
Donatien

Al hombre pareció un poco desorientado ante las palabras de Noelia, hasta casi enfadado.

¿Como que no eres Just...? Ladeó su cabeza observando a Noelia detenidamente. Oh, ahora entiendo. Esos ojos... Su mirada se volvió extraña, obsena si se quiere. De golpe se acercó lo suficiente, como para tomarla de la cara.

Acercó su cara hasta quedar cerca del desnudo cuello de Noelia. Cerró sus ojos y pareció olerla y exitarse con ello.

Uh... si. Esos ojos en verdad negros, y ese perfume. Ese aroma a... a flujo, a semen, a sexo puro y sucio. Claro que no eres el angel de la virtud, no eres Justine, claro que no. Oh Juliette, mi perversa Juliette, no sabes como te extrañamos mi entrepierna y yo!

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27/01/2011, 02:34
Noelia Milliard

 Noelle sintió que el calor subía por su entrepiernas, y mojaba su sexo. El olor, y la proximidad de la piel de aquel hombre crispó su piel, tornándola de un azúleo casi imperceptible. Si estaba muerta, entonces estas sensaciones no deberían estar pasando...O acaso sí??

Decidió dejarse llevar por sus emociones, dejarse llevar por esa sensacion tan conocida por ella.Aprovechar ese fuego que la envolvía e inundarse en el placer de la carne de aquel desconocido, que la confundía con una cortesana, su cortesana.

Con la avidez del momento, busca la boca de su interlocutor...Ohh sí...te extraño!!! Tomame y hazme tuya de nuevo!!! temblando de placer....clavando sus ojos en los del hombre...

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31/01/2011, 03:45
Donatien

Donatien tomó a Noelia por la cintura y la arojó sobre la destartalada mesa donde escribía hacía momentos. Abrió sus piernas y mientras la besaba, llevó su mano a hacia la húmeda vagina. Luego de masajear su clítoris por unos segundos, volvió su mano hacia sus labios, y luego hacia los de la propia Noelia.

Juliette realmente eres un océano de pasión. Adoraría navergar por esas aguas, pero sabes que no soy marinero, soy hombre de tierra, soy hombre Sodoma!

Con un fuerte movimiento la volteó boca para abajo. Tomó la daga con la que afilaba sus plumas y rasgó el vestido, quedando sus firmes nalgas expuestas. Comenzó a dilatar su ano con los dedos, preparándola para la penetración.

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31/01/2011, 19:00
Noelia Milliard

La fémina temblaba a más no poder. El salvajismo de aquel hombre le excitaba de sobremanera, la brusquedad en sus actos y la lisonja de sus palabras, detonaban las fibras del placer.

Comenzó a moverse de manera serpenteante sobre la mesa, al sentir los dedos del hombre en su ano. Miraba al hombre de soslayo con su mirada húmeda. Llevó su dedo índice a la boca, mientras que apretaba su sexo, tratando de prolongar sus sensaciones.

-Tómame ahora querido!! Eres un salvaje...con la voz temblando de placer, casi en un murmullo...

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04/02/2011, 16:49
Donatien

Un salvaje?? Si, si claro, eso es lo que soy, y tu una yegua indomable. Ahora... ahora recordarás qué tan salvaje soy!

Pasó el filo del cuchillo lentamente por los labios de Noelia, y lo fue llevando por la espalda, presionando léntamente hasta que comenzó a desgarrar la carne en varios pequeños cortes. La sangre fluía levemente, y aquel extraño parecía desbocado. Pasó su lengua por las heridas, sinfrutando aquel festín vampírico casi.

Oh mi yegua, hasta tu sangre tiene el sabor de los placeres carnales mas oscuros. Cuánto te deseé, cuando tiempo!

Tomó la vela encendida que había sobre su mesa, y tiró unas gotas de parafina ardiendo sobre la heridas.

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18/02/2011, 21:57
Noelia Milliard

Noelia gritó, al mezclarse la cera hirviendo sobre las heridas de su piel. Pero su grito, no era de dolor...era un gemido agónico encubierto por el éxtasis del placer. El calor de su sexo era infinitamente mayor al dolor que sentía su carne.

Su sexo se meneaba y se tornaba cada vez más candente. Si piel había adquirido la exultnte transpiración del orgasmo...uno tras otro...-Tómame querido....tómame ahora!!

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23/02/2011, 05:34
Donatien

Oh mi querida, no sabes cuánto deseé esto. Ojala hubieras vuelto antes... hubieras vuelto cuando... cuando todavía se me ponía dura...

Un balde agua helada pareció caer sobre Noelia cortando sus orgasmos como una navaja de cirujano. Donatien se alejó unos pasos para centarse sobre su cama, con cara abatida, tocando su flácido pene.

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23/02/2011, 18:29
Noelia Milliard

Ál escuchar las palabras de aquel hombre, la frustración de Noelia se hizo evidente en su cara. Luego de un tiempo, y tratando de recobrar su compostura, se sentó al costado de Donatien y le dio unos golpecitos en su mano...

-No te preocupes querido...a cualquiera le pasa usando el latiguillo habitual que le hacía a alguno de sus clientes.

-Ahora dime, que haces encerrado aquí?

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11/03/2011, 11:29
Donatien

Donaten renunfuñó, casi ofendido. Se paró y caminó haci un estante, tomando un consolador de madera. Lo miró con nostalgia.

Puff... a cualquiera le pasa, a cualquiera... Pero a mi? Justo a mi?! Mi vida era esto! Era sexo!!! Sexo salvaje, y descontrolado. Gritos de dolor, de placer. Y ahora... debo escribir sobre cosas que ya no siento, que ya no puedo experimentar. Soy como una abeja que no puede chupar nectar ni aún en un mar de flores...

Se frena de golpe pensando en sus ultimas palabras, hasta que se da un par de golpes en la cabeza con el consolador.

Ves? Abejas? Yo hablando de abejas... Eso fue patético. Creo que tal vez es hora de retirarme. No se me para, y encima estamos locos. Por eso estamos aqui, porque estamos locos. Abejas? Por favor.. debería... ya se!!

Corrió hacia un baul y sacó un pequeño látigo. Se lo entregó a Noelia, con una sonrisa en la cara, mientras se levantaba la camisa y apoyaba sus manos en la mesa.

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22/03/2011, 21:01
Noelia Milliard

Noelia escucha las palabras del hombre con atención. De pronto, le acerca un látigo y se coloca en posición para que lo flagele. La muchacha sonríe, dudando si hacerlo o no. Era evidente, que el hombre podría ofenderse, pero ya no importaba. Deja a un lado el látigo. -Ahora no querido, se me han ido las ganas.

-Ahora, has tenido situaciones que te bastarán de sobremanera para escribir tomos y tomos cargadas de lujuria y placer querido, no puedes pretender que la vida pase como si nada...Igualmente seguirás siendo un viejo lindo para mí...riendo con una mirada cómplice.

-Tu piensas que estoy loca también?? Me gustaría saber que es lo que piensas de mí...

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29/03/2011, 23:23
Donatien

Una mirada de perro faldero decepcionado se apodera de la cara de Donatien cuando Noelia deja el látigo. Ya ni a eso tenía acceso. Se sienta al lado de Noelia y su cara se transforma en una mueca burlesca.

Que si creo que estás loca?! Ni siquiera sé si existes... o si existo yo... Demonios, no empecemos con eso Donatien, no empecemos. Tu existes... Ella... A todo esto, que haces aqui? Quien eres? Juliette nunca habría dejado pasar por alto una buena sesión de flagelo...

Se levanta con desconfianza y se aleja de la cama.

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03/04/2011, 00:50
Noelia Milliard

Noelia permanece con sus largas piernas cruzadas mientras que hace unos círculos con una de sus manos. -Todos cambiamos querido...incluso lo has hecho tú. Ahora, si los dos estamos metidos en esta pesadilla porqué no hacemos algo para saber la verdad. Acaso no quieres llegar al fondo de toda esta locura?...abriendo grande sus ojos, mirando la reacción de Donatien.