Partida Rol por web

Dhaeva 2: El Caballero de las Tinieblas.

Transilvania: 1) Alba Iulia: Castillo de Balgrad. - Estancias de invitados.

Cargando editor
11/06/2014, 22:59
[...] Dubieta Szantovich.

Asintió despacio.

- Estoy mejor, aunque un poco debilitada -Medio sonrió-. Necesitamos descansar, tomarnos esta noche para pensar. Debemos tener opciones, prima, pero ninguna de ellas es dejar atrás a mi hijo -Tal vez estaba precipitando demasiado la situación.

Buscó el apoyo de su Caballero para salir al fin de la habitación, no sin antes dejar una última reflexión.

- Ciertamente los muros de este castillo son sólidos, pero ya han habido muchas muertes estratégicas y me pregunto cuántos más caerán antes de que regrese el Duque. Por cierto, ¿se sabe algo de él? ¿Puede ser el dique que frene la riada de sangre sobre esta fortaleza?

¿Lo sería? Había barajado esa situación, pero era una jugada delicada.

- Es hora de retirarnos. Que tengáis buen descanso.

Cargando editor
12/06/2014, 00:51
Schaar Dvy.

El caballero asintió a la dama Dubieta, recompuesto de "lo que fuera que le había pasado" unos segundos antes.

Por supuesto, mi señora. - miró entonces a Radovina- Dama Radovina... mis respetos. Espero veros pronto.

Tras esas palabras sale de la habitación con Dubieta.

Cargando editor
12/06/2014, 08:41
Guardia Tomescu.

Tomescu vio las intenciones de salir de su señora y Schaar y abrió la puerta de inmediato. Salió antes que ellos, pues no se fiaba que en ese castillo no hubiera nadie escuchando o tras una esquina dispuesto a acabar con la vida de Dubieta. Al comprobar que no había nada ni nadie, caminó con lentitud, descansando su mano en el pomo de la espada, hasta que llegó a la habitación de su señora.
Allí volvió a convertirse en una estatua. Su misión era vigilar, dar la voz de alarma si ocurría algo que hiciera que sus vidas peligraran.
Y, mientras esperaba que llegaran a la puerta, Tomescu se permitió pensar. Él poco sabía de lo que realmente estaba pasando en ese castillo, y dudaba que le dieran información si la solicitaba. Pero, ¿cómo escapar sin levantar sospecha o sin provocar un derramamiento de sangre? Él no lo veía posible.

Cargando editor
18/06/2014, 22:58
[...] Dubieta Szantovich.

Lo que tenía que comentar con Schaar no era algo que pudiera hacerlo delante de su prima, y menos ante su guardia. De hecho, aunque quisiera compartir ciertos detalles no podía hacerlo sin que Schaar lo supiera.

- Tomescu... -Giró hacia el guardia- mantén vigilado a Tiberiu, he de hablar con Schaar antes de retirarnos a descansar.

Señaló la estancia donde a ambos, Schaar y Tomescu, les habían procurado alojamiento. Ciertamente resultaba un impedimento para celebrar reuniones privadas compartir la habitación con su hijo.

Cargando editor
19/06/2014, 00:36
[...] Dubieta Szantovich.

Ojeó la habitación sin un interés especial pues no había demasiado que mencionar sobre una estancia pequeña y austera. Aún así era más que suficiente para mantener la conversación privada y necesaria que les urgía.

- He sentido una agonía y vacío tal que me hace preguntar si se trata de Iacobus o Azurbaal -dijo con algo de inquietud-. No sé hasta qué punto estamos unidos con el Caballero de los Cárpatos como para sentir con esa intensidad, por eso me hace pensar que... -Negó con la cabeza, no sabía si era la inquietud o el deseo de saber qué sucedía realmente-. Iacobus desapareció junto con Azurbaal mientras estuvimos exiliados, y hasta ahora la presencia de nuestro dador estaba bajo mínimos. No muerto pero sí desaparecido, ¿hasta ahora? Es casi probable que Iacobus supiera el lugar donde descansaba Azurbaal y haya decidido liberarse. Eso puede ponernos en un grave riesgo. Sin embargo, si el que ha sido decapitado es Iacobus...

Paró en su soliloquio al darse cuenta que estaba precisamente allí para lo contrario: necesitaba a Schaar.

- Son demasiadas incógnitas y muertes por doquier. Necesito de tu entereza, Schaar.

Cargando editor
19/06/2014, 18:53
Schaar Dvy.

Schaar no responde durante unos segundos. El caballero desposeído de familia y casi de título parece concentrado en el hecho de quitarse los guantaletes de su armadura. Luego mira un instante a la dama Dubieta y se despoja de su espada que deja sobre una de las mesas auxiliares.

- Creo que ha sido Iacobus el muerto, aunque no podría asegurarlo. El hecho que anteriormente hayamos sufrido dolor parece concordar mejor con que sea nuestro "hermano" el fallecido, que con el hecho de la destrucción de  Azurbaal. Además, no conviene olvidar que Iacobus no iba solo, sino acompañado por Durius. ¿Creéis sinceramente que nuestro hermano hubiera confiado algo así en alguien ajeno? Porque yo estoy casi convencido que no- mientras habla Schaar se ha despojado de su armadura, dejando solo sus pantalones de lino y su camisa y se acerca a la jofaina y se lava con naturalidad la cara y las axilas mientras respira pesadamente- Lo cierto es que tenga o no razón, la muerte de Iacobus es un nuevo motivo para mantener la fortaleza. Sin Iacobus, y sin su perro hombre lobo, el mejor y más poderoso hombre de armas del castillo soy sin duda alguna yo. Y eso implica que si mantengo su castillo elevará mi posición. Elevar mi posición implica elevar la vuestra. Y elevar la vuestra es el único medio para lograr que nuestro querido Tiberiu pueda llegar a tener una posición de poder. Es más, elevar mi posición podría suponer que tengo un cargo suficiente para casarme contigo, Dubieta, y para adoptar a Tiberiu. Como comprenderás... no es algo que pueda permitirme dejar. Aunque sea a costa de arriesgar la vida.- guarda unos momentos silencio y luego suspira y se gira mirando a la dama- No se si os he dado mi entereza, pero os he dado mi esperanza. ¿Qué piensas?

Cargando editor
21/06/2014, 13:28
Guardia Tomescu.

Por supuesto asintió Tomescu con la cabeza, dando fuerza a sus palabras. Abrió la habitación de su señora y comprobó que el chico seguía durmiendo. Cerró con el mayor cuidado que pudo y se plantó ante la puerta. Como siempre, si alguien quería entrar allí sin el consentimiento de su señora, debería pasar por encima de su cadáver.

Miró con disimulo cómo ambos se dirigían a la otra habitación. Una parte del guardia sentía mucha curiosidad por lo que se podía decir. Obviamente a él no le llegarían todos los detalles, pero por una vez le gustaría conocerlos. Se sintió muy tentado a poner la oreja en la puerta, pero luchaba con las órdenes que le habían dado, que tendría que incumplir para hacer realidad sus deseos.

Cargando editor
23/06/2014, 21:18
[...] Dubieta Szantovich.

La tranquilidad con la que actuaba fue suficiente para deshacerse en parte de su tensión, de cierta impotencia producida por la falta de información más que de la situación en sí misma. ¿Cómo actuar sobre bases imprecisas? ¿Cómo sopesar lo inesperado?

Tomó asiento y terminó de escuchar agradeciendo sin palabras la serenidad que necesitaba, pues por una vez que estaba decidida a emprender un viaje sin retorno una nueva amenaza los atacaba más allá de la carne.

- Me das mucho más de lo que merezco, Schaar. Pero esa es otra historia...

Mantuvo la mirada en su amante, al hombre que había logrado un punto y aparte en su constante agonía ya lejana. Le había dado lo más importante en su vida y lo había recompensando con una privacidad injusta, cruel. Su orgullo había corrompido demasiado para ser perdonada.

- No sé hasta qué punto la muerte de Azurbaal afecta a nuestros dones. No me siento diferente más allá del dolor causado, que ha sido terrible. Pero ese punto no es relevante si con su muerte no se lleva nuestro nuevo Ser. Por lo que bien podría ser cualquiera de los dos.

Como no estaban seguros si la muerte de su Creador dejaba o no intactos sus dones resultaba imposible, a priori, saber de quién se trataba.

- No creo que Iacobus llevara a Durius hacia él, a menos que tuviera algo que ganar con su muerte. Tal vez quisiera cortar todo lazo y así no ser doblegado por su Creador. A estas alturas cualquier posibilidad es plausible -¿Pero cuál les convenía?- Si tuviera que elegir, si pudiera, espero que Iacobus esté muerto. Es un elemento peligroso, inestable, capaz de vendernos sin miramientos. No lo considero un "hermano", no demuestra que se pueda confiar en él.

Al final todo se reducía a quedarse o intentar marcharse, y ese "intentar" era también un gran obstáculo a franquear.

- También he pensado sobre quedarnos aquí, permanecer regios ante las adversidades. Si decidimos hacerlo es hora de mostrarnos firmes, tomar la situación con las manos y no dejarla escapar. Reforzar nuestra posición el el Castillo no garantiza que podamos estar juntos como nos gustaría, pero sí movernos con más libertad. Pero no recorramos puentes antes de llegar a ellos...

¿A dónde irían? ¿Más sufrimiento, viajes inseguros y alojamientos inmundos? Estaba harta, por eso habían regresado. Y Tiberiu... ¿Hacía mal en querer lo mejor? ¿Acaso su hijo no podía ser feliz correteando en el campo, en una insignificante granja alejada de la mano de Dios?

La noche en la que dio a luz, instantes antes de padecer los primeros síntomas, supo que había llegado el momento. Supo que el destino de su hijo debía ser grande.

- Cuando el Duque regrese querrá ver quienes fueron fieles y quienes jugaron a emponzoñar las entrañas de sus dominios. Iacobus lo lleva muy mal al matar a la Bestia, y aunque Durius ha sido más precavido la evidencia pronto recaerá sobre él. Por lo tanto... Sé el hombre de armas que eres, justo pero firme. Las Damas podemos aplazar nuestra visita un día, de tal forma que pueda calmar las inquietudes de mi prima mientras hacemos vida en la Corte.

Tal vez salir sería demasiado precipitado. Tal vez las respuestas no estaban fuera de los muros sino entre los habitantes de los mismos.

- ¿Mejor? -sonrió.

Cargando editor
24/06/2014, 17:18
Schaar Dvy.

Schaar negó con una sonrisa.

Lo mereces todo- se encoje de hombros- Me has dado todo, Dubieta. No te menosprecies. Mereces una posición de privilegio y haré todo lo que está en mi mano para que puedas gozar de la misma- tras las palabras da un suspiro y se queda nuevamente pensativo mientras escucha a la dama, notando el frescor del agua aun en la piel- He tomado algunas medidas para intentar defender el castillo y las tierras del duque, con el permiso del capitán. En todo caso... os necesito, mi dama. Me vendría bien poder reunir a todos los hombres de armas, recordarles su compromiso con el duque, e informarles de las medidas adoptadas para intentar proteger el lugar y el poder de nuestro mutuo señor. Eso tendrá dos ventajas: demostrar nuestra lealtad, y demostrar que ambos estamos intentando proteger las propiedades de nuestro señor. ¿Os parece correcto?

Guarda un momento silencio y luego continúa.

En cuanto a quien ha muerto.... con toda sinceridad, no me importa. Iacobus no nos ha dado nada, sino quebraderos de cabeza. Su ascensión no ha sido la nuestra, y que desaparezca del tablero no me preocupa... salvo porque alguien ha tenido que matarle, y ese alguien es de temer. Si, por el contrario, ha matado a Azurbaal eso significa que regresará. En tal caso tendremos que ocuparnos de él más con diplomacia que con armas, y no oponernos a él, salvo que no nos de otra opción. 

Se queda mirando a Dubieta.

¿Te ves con fuerzas de preparar una reunión para mañana mismo? Como la viuda del senescal creo que es algo que podrías hacer. Y bien saben todos los poderes que necesitamos unir a la gente del castillo para lo que puede venir.

Cargando editor
25/06/2014, 05:22
[...] Dubieta Szantovich.

El tramo de la diplomacia y la Corte parecían ganar puntos en un camino aún repleto de obstáculos. Había pensado en esa opción, pero algo más discreto y neutral. Precipitarse sería un grave error.

Extendió la mano con la intención de ser tomada, además de una invitación para que se sentara junto a ella.

- Me pones las cosas difícil cuando hablas con tanta hombría y tienes esta pinta algo desaliñada -Se permitió unas risas algo traviesas acompañadas de una breve caricia a su rostro-. Parece que la vida no quiere ponernos las cosas fáciles. No dirán que no hemos luchado por lo nuestro...

Tomó la mano de Schaar entre las suyas y se entretuvo unos segundos antes de proseguir.

- El Capitán sigue siendo el que está al mando en ausencia de Durius, pero es cierto que ahora podemos hacernos valer siempre y cuando seamos comedidos. No debe parecer que queremos tomar las riendas del castillo, aunque sí ser recordados como aquellos que velaban por la seguridad del mismo -Schaar veía muy fácil reunirlos, pero no era así-. Por un instante he pedido a Dios que Durius dejara de ser un problema. Paradójico, ¿no crees? -Una sonrisa amarga empañó sus labios-. Pero no desesperemos, y por ello pensemos en cualquier posibilidad, como que ambos estén vivos y regresen pronto. Si fuera así no nos interesa que piensen que hemos urdido un plan para destronarlos, Iacobus es despreciable, pero su poder...

Besó cariñosamente su mano y deseó que aquel encuentro no estuviera cargado de premura.

- La pérdida del Senescal y la marcha de Durius crean la atmósfera adecuada para un almuerzo distendido para que los nobles acudan. Entre charla y charla prestaremos atención a las distintas lealtades y espero compartir unas alentadoras pero convenientes palabras -Con suavidad sostuvo la mano en su rostro para enfatizar así lo que iba a decir-. No podemos permitir que el veneno de la traición nos alcance, muchos han muerto y no sabemos a manos de quienes exactamente. Mostrar nuestras cartas demasiado pronto nos perjudica, cierta neutralidad nos beneficia. Habla con firmeza pero no seas extremadamente efusivo -Dejó caer la mano-. Si esos dos siguen vivos no debemos ser una amenaza para ellos, pero unas palabras alentadoras en su ausencia no hacen daño a nadie.

Sonrió satisfecha. Tal vez era mejor jugar en su terreno que jugarse la vida en el camino.

Cargando editor
25/06/2014, 19:34
Schaar Dvy.

- Mujer del diablo... - dijo con una sonrisa mientras tomaba la mano de Dubieta y se sentaba a su lado, escuchándola, y notando como la sangre se amotinaba al contacto con la piel de la dama- ¿Crees acaso que para un bestia como yo que se ha comportado normalmente de forma... distinta.... es fácil tanto fingimiento cuando lo que tengo en mente es muy distinto? - Schaar sonríe con una curiosa mezcla de malevolencia y ternura tras su pregunta y durante unos segundos, escucha a Dubieta sin decir nada, dejando a la mujer hablar, hacer, y lamentando no poder actuar con la libertad que quisiera. En todo caso, probablemente pronto habrá combate, y el placer es bueno para cuando los combates han terminado. No para cuando están por producirse. Cuando Dubieta ha terminado de hablar, asiente- Si, es verdad, mucho es lo que hemos luchado y sufrido. Ojalá todo eso nos lleve a buen término. Conforme con lo del capitán, y conforme también con lo que decís de Iacobus y Durius. No pretendo precisamente eliminar a ninguno de ellos, ni usurpar el poder. No tendría sentido. Por el contrario lo que deseo es poder demostrar a nuestro señor, cuando regrese, como nos hemos preocupado por sus intereses, y como hemos protegido su feudo. Tal vez eso de posibilidades a vuestras reclamaciones dinásticas y a las de nuestro Tiberiu.

Cargando editor
27/06/2014, 22:08
[...] Dubieta Szantovich.

Al fin habían llegado a un acuerdo, quedarse en el castillo de momento era lo más saludable para todos. Principalmente para Tiberiu, incapaz aún de defenderse no más allá de correr por su vida. Tampoco quería poner en peligro a su prima, aunque desconocía si tenía medios para defenderse más allá de su guardia.

- Entonces tenemos una línea a seguir. Mañana, a primera hora, nos reunimos con Radovina y comentamos lo que hemos decidido. Incluso con ella es necesario mantener cierta neutralidad. Así que todo lo referente a Iacobus será dirigido a lo peligroso que resulta, más que a una desconfianza desmedida -¿Podría ser su preocupación producto de un engaño?-. Espero que tanto temor no sea fingido, porque si es un ardid y nos pone en peligro yo misma le saco el corazón.

Tal vez se había extralimitado un poco, pero lo cierto es que quería tener a su prima junto a ellos, no conspirando contra ellos.

- ¿Me he pasado? -Sonrió-. Tantas conspiraciones van a volverme paranoica -Dejó de sentirse tensa al permitirse reír-. Es hora de retirarme, mi valiente Caballero. Pero antes...

Se levantó de la cama y sin apartar la mirada de aquellos ojos que la amaban y acercó despacio.

- Todo Caballero se merece un beso de su Dama.

Pasó sus dedos por aquellos labios tan apetecibles, los que tantas veces habían logrado anular sus sentidos, desposeerla de toda noción que no fuera sentir el fuerte retumbar en su pecho. Su corazón desbocado exigía más, aunque la satisfacción de llevarse consigo aquel sabor único de su amante era suficiente. Y probó, y saboreó, y ansió...

- Schaar... -Selló aquellos labios con un dedo-. Buenas noches, mi valiente Caballero.

Cargando editor
30/06/2014, 21:26
EL TIEMPO TODO LO VENCE.

TRANSCURRE EL RESTO DE LA NOCHE.

ALBA DEL CUARTO DIA DE MAYO DEL AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y OCHO.

Cargando editor
02/07/2014, 20:36
[...] Dubieta Szantovich.

Las primeras luces del día aún se entremezclaban con la oscuridad, pero era suficiente para que años de rutina hiciera que despertara. Se mantuvo acostada un rato, no demasiado, mientras su mente se despejaba y observaba a su retoño dormir.

"Sana envidia, mi dulce niño. Vives con no más preocupaciones que saber cuándo Schaar dejará que montes su caballo".

Era hora de moverse, tenían mucho que hacer y planear. Se levantó con cuidado, fue a asearse y comenzó a vestirse. No tenía criada, pero había aprendido a manejarse bien sola y ya obtendría un repaso adecuado cuando encontrara a la primera sirvienta del Castillo disponible.

- Tiberiu, dormilón. Despierta -Lo zarandeó con suavidad.

Cuando lo vio algo más despierto pasó un paño húmedo por su cara.

- Aséate y ponte la ropa que te he preparado, voy a buscar a Schaar -Era bueno que comenzara a ser autosuficiente.

Abrió la puerta para ver quién estaba de guardia. Si era su Caballero perfecto, más rápido. De lo contrario enviaría a Tomescu a por él así como, de paso, hacer llegar a su prima que deseaba compartir el desayuno con ella.

Cargando editor
03/07/2014, 11:25
Schaar Dvy.

Schaar está precisamente saliendo de su habitación, tras haber descansado bastante durante la noche. La desaparición de Durius y Iacobus, paradójicamente, le ha permitido relajar su vigilancia, y se le nota más fresco. LLeva al cinto su espada, pero no viste la armadura. Al ver a la dama le sonrió.

Buenos días, mi señora. ¿Cómo estáis? Creo que es el momento de que todos nos reunamos para almorzar

Cargando editor
03/07/2014, 15:55
Sargentos de Radovina.

Uno de los Sargentos feudales de Dama Radovina os avisa que están a punto de ejecutar sentencia sobre uno de los criados en el Patio.

Todos os dirigís hacia allí.
 

Notas de juego

// Salen de escena: Dama Dubieta, Dama Radovina, Guardia Boru, Guardia Tomescu, Schaar Dvy, Tiberiu.

// Siguen en: Patio del Castillo.

Cargando editor
23/10/2014, 08:54
EL TIEMPO TODO LO VENCE.

PASADA LA UNA DE LA TARDE.

CINCO DE MAYO DEL AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y OCHO.

Cargando editor
23/10/2014, 08:55
T01: CASTILLO DE BALGRAD: Estancias de Invitados.

- Dama Dubieta llega al pasillo del ala de invitados. No hay nadie más en el lugar.

Notas de juego

// Entra en escena: Dubieta. - Procede de: Patio del Castillo.

Cargando editor
23/10/2014, 20:53
Dama Dubieta.

Andando por los pasillos se podía apreciar el silencio opresivo, como si el castillo se estuviera preparando para lo inevitable y poco a poco algunas de sus alas cayeran con el fin de acostumbrarse al doloroso final. Para ella resultaba perfecto tal cual, en silencio, solitario...

No dudó un instante y fue hacia su estancia para rebuscar entre sus más valiosas pertenencias: principalmente joyas y dinero, y si buscaba un poco puede que encontrara algo más que pudiera meter en una bolsa pequeña, lo justo para que no abultara más de la cuenta y aún así fuera seguro.

En cuanto terminara allí debía entregárselo a Tomescu. Su lealtad era absoluta y sabía que en lo peor se ocuparía de su retoño, y una buena ayuda como aquella haría de su futuro más llevadero. Una vez entregado podría ocuparse del resto: criados, rezagados, cobardes...

Daba igual, lo primero era lo primero.

.

Notas de juego

Básicamente eso, y si no hay problemas directo a la Capilla para terminar.

PD: si no me equivoco Dubi tiene una daga, en tal caso la cogerá (con su funda, claro).

Cargando editor
24/10/2014, 18:03
T01: CASTILLO DE BALGRAD: Estancias de Invitados.

- Dubieta entra en los dormitorios asignados a ella y su hijo y comienza a recoger los objetos de valor de entre sus pertenencias, además de su daga.