Partida Rol por web

Solo un ser en toda la creacion podia lograr unir a 3 religiones que tenian tanto en comun, 3 religiones que compartian muchas figuras, textos, pensamientos y 3 religiones que desde incontables años se odiaban y se atacaban entre ellas.

Pero Dios volvio a la tierra en una epoca de necesidad y bajo su mandato se calmaron las aguas y los que hasta ese entonces fueron enemigos declarados se volvieron en hermanos. Pocas veces se vivio una epoca de esplendor teologico, de tanta tolerancia y de paz entre las 3 religiones como ultimos 10 años.

Ustedes fueron los elegidos del señor y fueron su consejero en la guerra santa que lleva acabo contra sus enemigos, todo el que esta contra el; y por eso todos vivian junto a el en el renovado templo de Jerusalem.

Era la madrugada del 25 de diciembre de 2022 en el templo, estaban dispersos, orando, debatiendo, durmiendo o simplemente ocupandose de sus asuntos cuando sienten que alguien grita y todas las puertas y ventanas se cierran de golpe. El grito no lo escuchan sino que lo sienten quemando profundo en sus mentes como un hierro al rojo blanco escuchan, el peor grito de dolor que jamas oyeron en sus vidas.  Uno a uno van llegando al salon principal donde esta el trono de Dios, algunos llegan tambaleandose, mareados o con sangre en los oidos o nariz.

Ven la silla de Dios y en ella esta su figura, traslucida y desapareciendo; tiene los ojos cerrados y una mueca de dolor. Todos ven como desaparece mientras escuchan nuevamente la voz de Dios en sus mentes Hijos mios! he sido herido de muerte y mi asesino se encuentra entre ustedes. Las puertas del templo estaran cerradas hasta que los justos encuentren a los impios y le hagan pagar caro mi asesinato! la ultima palabra se extiende en sus mentes mientras desaprece la voz y la figura.

Lo vi desvanecerse y mis ojos se llenaron de lágrimas que bajaban por mi rostro - Padre... - me arrodille y besé sus pies mientras se hacía incorporeo - no se vaya... no podemos estar sin ti...

Su cuerpo se desvaneció y mi sotana solo estaba en el piso, con mi cuerpo... esperando a entender que había pasado... - No lo entiendo... no lo entiendo... ¿que ha pasado?...

 Me inclino tres veces y oró por el señor, tras lo cual me levanto y secundo a Jibrail.

Hermano jibrail. no somos mas que meros instrumentos del señor para efectuar el justo castigo sobre aquellos traidores que seguramente influenciados por "El Gran Satán", han traido la desgracia a esta casa... Liberemos entonces la morada del señor nuestro dios de esos infames pecadores. Enviemoslos a las llamas del infierno que es donde corresponden, y arrasemos con su capital de infamias.

Me quedo estupefacto al ver al Señor desaparecer poco a poco mientras mi nariz sangra por el shock producido.

Tras su desaparición oigo a mis compañeros hablar y salgo de mi estado, llenandome poco a poco de ira.

Ruhollah tiene razón, debemos purgar esta casa de los seguidores de Satán que nos rodean. Alguien ha cometido el acto más infame posible y nosotros tenemos el deber de encontrarlo y juzgarlo -les digo a mis compañeros con la tez roja por el dolor que la traición de alguno de mis compañeros ha provocado.

Me acerque al trono vacio y con respeto apoye en el mi mano.

- Descansa padre, pues tu muerte sera vengada. - tras unos instantes me volvi hacia el resto de los presentes con llamas encendidas en el fondo de mis oscuros ojos - ¿Quien ha matado a mi padre?

San Agustín vio como se desvanecía, no solo el centro de su vida espiritual sino también el centro de toda su filosofía. Ahora tendría que reveer todos sus libros y escritos y eso, como mínimo, lo hastiaba. Levantó una ceja con irritación. 

Era obvio que esto iba a pasar. No sé como no lo pude ver antes. Si nos juntamos con herejes, el centro del universo dejará de existir. Bue, ya está. Averiguemos quien fue, y a otra cosa maripsa.

"Tranquilos hermanos" dijo con una voz que se parecía demasiado a la de un empleado público tras un mostrador "No debemos enojarnos, pero si meter manos en el asunto. Nuestro único y verdadero Dios se fue, asi que antes de volver a discutir sobre las razones espirituales de la realidad, propongo pensar y discutir quién fue el autor de tan... ejem... maléfico hecho."

 ¡Dudar de a maleficencia de un acto tan vil es el principio de la desconfianza!. Sabía que el culpable se delataría solo.Intentaste ampararte en el juicio y tus ideas te han traicionado. Para mi Agustín, tu eres el asesino.

-Sabia que todo esto era demasiado bueno para ser verdad- Smith, acongojado miraba hacia todos los presentes. Desde un principio no había estado muy de acuerdo con que se perdonara a todo el mundo y que se hiciera tanto incapié en las semejanzas y se descartaran sin dar mayor importancia las diferencias. Los hechos lo demostraban. Allí había quienes aún, luego del intento del Señor de pacificar el mundo seguían siendo corruptos, aún sus almas albergaban al demonio. Sin embargo, su Padre le había dejado una misión y él, como fiel seguidor y uno de los últimos profetas venidos a la Tierra antes de Su llegada, no iba a fallarle en su cometido.

Agustín alzó rápidamente su cabeza y miró a Jomeini con dureza.  

"Ruhollah, por favor. Dudar de la maldad de semejante acto sería una estupidez. Mi razón al dudar en usar la palabra "maléfico" se debió a que el mal es, para mi, acto del demonio. Y aquí no hay demonio alguno, solo somos servidores del Señor. O lo éramos. A lo que voy es que estoy seguro de que Satán no está metido en esto, sino un muy mal criterio de resolver cuestiones teológicas."

¿Mal criterio de resolver cuestiones teológicas? -bramo enfurecido mientras me dirijo a San Agustín -Han asesinado al Señor, nuestro Dios, nuestro Padre y usted dice que es un mal criterio a la hora de resolver cuestiones teológicas - le digo colocándome delante suya y, a continuación, escupo a sus pies - Dios inmortal ha muerto, esto es una obra clara de algún servidor del maléfico, de Satán y, usted, ¿continua dudando de la mano que ha forjado este herético acto?

Tras decir esto lo señalo con el dedo y miro al resto de presentes, mis compañeros y hermanos -Señores, este hombre parece no saber distinguir un debate entre hermanos con el asesinato de nuestro padre. Creo que sabe más de lo que dice. Y ustedes ¿que pensais?

-Pues... no lo sé, no estoy tan lejos de creer que ese santo puede llegar a tener algo de razón. Si Satán hubiera habitado en el corazón de alguno de nosotros, nuestro padre lo hubiera visto. Sin embargo, no previó que lo traicionaríamos. Creo que otra vez alguien quiso erigirse por sobre él como lo hizo al principio de los tiempos Lucifer. Más allá de los motivos, los hechos son claros. Hay que descubrir al o los asesinos cuanto antes y hacerles pagar por su crimen. Ojo por ojo dicen los judíos. Sepan hermanos que no podría estar más de acuerdo con ello.

 ¿Judíos?!!. Malditos sean aquellos que callan mientras nuestro padre yace. Pero estoy seguro que esto no es el final, púes aunque yazca durante eones no estará muerto, púes aun la misma muerte puede morir para que nuestro padre prevalezca Tal vez Agustín tenga algo de razón, pero no por ello deja de ser menos sospechoso. 

Tambaleándose Metatrón llega a la sala del trono de Dios, escuchando las últimas palabras de este comienza a asustarse. ¿Qué seria del mundo ahora?,¿Como se mantendría equilibrio? Y por su puesto la ultima pregunta que se hacia era la más importante ¿Quién cojones habrá sido? 

Intento tranquilizarse para después mirar con rabia a todos los presentes. 

- ¿Quien es tan estupido como para asesinar al todopoderoso? ¡Podemos estar ante el fin del mundo!

- Ruhollah tienes una lengua muy viva para un momento tan trágico, algunos sabemos respetar el luto del Padre. 

Metatrón no era capaz de creer como los mortales se recuperaban tan rápido de tal atrocidad y comenzaban  a incriminarse sin sentido alguno.

Mi señor Metatrón, ante este acto de indescribible herejía y terror, tras el cual la vida de todos nosotros se tambalea, acudo a ti en busca de consejo -le digo a Metatrón mientras trato de tranquilizarme y me alejo de San Agustín

Señor Metatrón, creo que todos los presentes, mortales como somos, jamás nos hemos planteado que Nuestro Altísimo Señor, Dios, pudiera ser mortal -le confieso para a continuación preguntar -usted era uno de los seguidores más cercanos de Dios, con quién compartía sus secretos y pesares, ¿sabe usted quién podría saber sobre la mortalidad de Dios? -le cuestiono mientras unas lágrimas recorren mi cara y trato de ocultar el tic que recorre mis manos, debido al horror cometido en este lugar

Y, por último, un fiel servidor de Dios solo pretende realizar su última voluntad, que los justos encontremos a los ímpios y les hagamos pagar por su deleznable acto -le comunico mientras mi voz se debilita poco a poco, sintiendo como la fragilidad inunda todo mi cuerpo y me hace consciente de mi insignificante vida.

Estaba cantando alabanzas al señor cuando ese grito consigue matar su voz en la garganta. Corre tan rápido como su orondo y desentrenado cuerpo se lo permite hasta llegar a la sala donde el único Dios se despide de sus hijos. Llega hasta la silla ya vacía y cae de rodillas llorando sobre el asiento. Levanta la cabeza cuando se da cuenta que los presentes ya han empezado a atacarse entre ellos.

- Hermanos, la desgracia ha caído sobre nosotros y tenemos que ser fuertes y encontrar al culpable. Y el Señor ha dicho que se encuentra entre nosotros. En mi opinión ha tenido que ser alguien fanático, muy arraigado a las viejas costumbres que no ha aceptado de buen grado esta unifiación- dice levantándose otra vez, consciente que diga lo que diga no puede ser tomado enserio desde el suelo.

Sandalfón observaba y escuchaba todo con sus múltiples oídos y ojos. Su imponente figura, mucho más grande que la de cualquier ángel o mortal, se erguía en el lugar.

Habló con voz fuerte y metálica.-Obviamente, el asesino no estaba de acuerdo con las últimas medidas empleadas por el todopoderoso, pero se me hace raro que el mismisimo Señor de absolutamente todo el universo, sea mortal. Incluso yo, como arcángel, soy incapaz de entender los incalculables misterios de esta atrocidad. Lo más importante es permanecer unidos y no dejar que los lobos separen a las ovejas.-Se acercó al trono, hizo una reverencia y lo besó.

Nuestro momento había llegado. Todos habian hablado. entre nosotros hay un culpable y ahora tendremos que descubrirlo - Hermanos... algo tendremos que hacer ahora... ¿Como podremos cumplir el deseo de nuestro padre? Hay traidores entre nosotros y ni aun así podremos descubrirlos... No entiendo que tenemos que hacer - levantó sus manos al cielo y las abrió - padre! Danos una señal acerca de como limpiar nuestro camino de los infieles que te han matado!

Malcolm habria sonreido al oir el comentario de Benedicto sino fuera por lo preocupante de la situacion. Habia estado de los primeros en aquella sala, pero no habia sido capaz de abrir la boca debido al shock que le provoco la imagen de su Dios desapareciando.

-¡Esta muerto! ¡No va a enviarnos ninguna señal si esta muerto!-acto seguido, lagrimas empezaron a brotar de sus ojos. ¿Como podria haber alguien hecho algo así? ¿Como podria el Dios Todopoderoso haber muerto? ¿Como no habria podido intuir la muerte que le aguardaba?

Con un gesto de su muñeca, se seco las lagrimas. No podia permitirse llorar delante de sus hermanos. No podia permitirse que vieran una sola debilidad suya. Habia que descubir al asesino, y llorando no arreglarian nada.

-Ni acusarnos los unos a los otros.-dijo en voz alta, sumiso en sus pensamientos. Sin darse cuenta, se dirige al sillon en el que hacia unos instantes, habia estado sentado su padre. Su verdadero padre y el de todos los demas presentes. Allí estaba el reverendo llorando, y se agacho, sujetandole por el hombro.

Despues de ver desaparecer al unico señor y creador de todo, llorar unos momentos habia sido la opcion tomada por Ibn, sin embargo sabía que se tenia que tomar cartas e el asunto, más despues de oir las palabras angustiadas de algunos fieles servidores del recien fallecido Dios.

Que la divina Providencia hable y nos revele la verdad, los caminos misteriosos de nuestro amado señor se resolveran y la mluz entre las tinieblas prevalecera. Pero la historia nos enseña lecciones, la historia es lineal y este pudiera o no ser el fin de todo lo que conocemos, sólo se que las acusaciones que haceis son una muestra clara de su amor al señor. Solo la serpiente prefiere quedarse callada, tira la piedra y se esconnde, por lo que se, aquellos que entre nosotros se oculten sois los más sopechosos.