Partida Rol por web

¡Dios te llibre de Castiella!

El Paso de Ribagorda

Cargando editor
20/03/2014, 14:23
Marcial

- ¡Esperad! es una locura ir así como así. Asomémonos un poco antes... -decía andando de puntillas y de paso en paso muy muy despacio.

- uff.... son demasiados -

Más adelante vísteis dos docenas de hermanos reunidos. Cuatro de ellos aporreaban unos extraños tambores con formas muy extrañas y el resto cantaba, algunos de ellos llevaban espadas con las hojas teñidas de negro de alguna manera. Lo más espeluznante es que formaban un enorme corro en cuyo centro había una hoguera apagada y un enorme espetón formado por dos vigas horizontales en las que había ensartadas dos seres humanos desnudos, la viga les atravesaba el ano y les salía por la boca.

Os quedásteis en el sitio...

Notas de juego

Tirada de Templanza

Otear/Descubrir tirada

 

Cargando editor
20/03/2014, 14:46
Don Alonso Carrillo de Peralta

Marcial tenía razón, no podíamos entrar a lo loco sin saber lo que nos encontraríamos y lo que vimos... ¡Dios mío! En mi vida había visto algo parecido. Los pelos se me erizaron y sentí un sudor frío recorriendo mi espalda. No sólo era el numeroso grupo que cantaba y emitía aquel horrible sonido con los tambores, sino los dos cuerpos empalados cuya visión me hizo estremecer. Era incapaz de apartar la mirada de los dos cuerpos puestos como si fueran corderos a punto de ser asados. Aquello sólo podía ser obra de los demonios más terribles que humanos o ángeles pudieran conocer.

- Tiradas (2)
Cargando editor
20/03/2014, 20:01
Nadir Bahar

Asomé mis ojos como Marcial propuso. Cuando vi aquello, una bola que me recorría las tripas se me vino a la garganta. Desde luego, la poca comida que llevara en el estómago se había revuelto y pareciera que se me iba a salir por la boca. Ni con diez muccadims a mi espalda podríamos dar muerte a tantos infames; sin duda que aquellos...

...herejes podrían destrozarnos -recité en bajito-. No sé cómo esperas limpiar aquestas maldades. Dos inocentes aquí, y puedo imaginarme qué pretender hacer, ¡qué apostasia, sea hebreos o cristianos! Va a pasar algo, lo intuyo... Josep -le dije muy seriamente-, sujeta fuerte la espada que encontré...

- Tiradas (2)

Notas de juego

Pruebo suerte para la tirada.

Cargando editor
24/03/2014, 09:59
Director

Alonso y Nadir no pudieron resistir la visión de semejante ultranza y profanación al cuerpo y a la dignidad humana y echándose a un lado, vomitaron todo lo que tenían en el estómago, que por fortuna no era mucho.

Notas de juego

Nadir, réstate 10 puntos de Suerte y pasas Descubrir.

Cada uno perdéis 2 puntos de Templanza, restadlos y vamos a esperar a Josep a ver si también pota :)

Te pongo la descripción de Descubrir solo a ti Nadir.

Cargando editor
24/03/2014, 10:04
Director

Antes de vomitar observabas la escena muy atento, viste cómo los hombres tenían las caras abultadas, como si la carne se les hubiese desprendido pero entonces al fijarte mejor, te diste cuenta de que no es que tuviesen la lepra o alguna enfermedad parecida, sino que lo que ocurría era que se habían puesto en la cara tiras de piel de otra persona y se las habían pegado con algo. También te diste cuenta de que lo que bruñía las espadas y parecía en la semioscuridad de la caverna hollín o algo similar, eran excrementos humanos, notaste cierto tufillo a mierda ahora que aguzabas el olfato. Era realmente asqueroso, aquellos no podían ser otra cosa que adoradores de alguno de los demonios del Infierno. Cuando acabaste de vomitar te persignarte, aunque no estabas muy seguro de si Dios podría estar allí abajo.
 

Cargando editor
24/03/2014, 23:46
Nadir Bahar

Definitivamente, lo poco que tuviera en las entrañas lo escupí todo, e intenté toser lo más discretamente posible, pero poco pude prevenir; que aquello que veía no era más asqueroso que algunos delitos que yo mismo he visto a lo largo de mi vida. Mas que jamás un servidor había visto tales locuras, propias más de un loco que de personas cabales.

Piel sobre piel, mierda sobre las espadas, Marcial... -le comenté mientras me limpiaba los labios con la manga tras vomitar-. No es peor que una masacre, pero hay que estar enfermo para eso. Sobre sus carrillos tienen pieles humanas colgando, y sus espadas lucen tan mal como si el filo lo hubieran metido en una motaña de heces... puaj...

Cargando editor
25/03/2014, 23:38
Don Alonso Carrillo de Peralta

No sólo la visión de lo que allí se mostraba sino también las palabras de Nadir hicieron echar por la boca, no ya la comida que había sido poca y hacía tiempo de ello, sino también la bilis que se había ido acumulando desde que nos adentramos en aquel maldito lugar.

- No podremos con todos. ¿No habrá otra manera de acabar con ellos? -Las palabras salían de mi boca mezcladas con aquel mal sabor que me habían dejado los vómitos.- Arder en el infierno es lo que merecen. El Altísimo debería dejar caer sobre ellos el fuego purificador.

Cargando editor
26/03/2014, 14:35
Nadir Bahar

Si ésta caverna se derrumbara... -decía mostrando mi pensar a través de su boca-, los aplastaría allí abajo. Sin embargo... -y veía yo poca posibilidad en ello-.
 

Notas de juego

De momento espero a ver qué dice Josep

Cargando editor
01/04/2014, 12:25
El Aguerrido Caballero Don Josep de Montesa

Puede que a los demás, la escena les resultase dantesca, asquerosa, e incluso dada a dar media vuelta y salir corriendo. Pero no a mí. Desde luego, me repulsaba de sobremanera. De eso no había duda. Pero esa repulsión no se transformaba en arcadas. Nada de eso, se transformaba en algo más. En odio.

Odio infinito hacia esos malvados adoradores del demonio. No, no podía permitir que esto continuase. Tenía que poner fin a esto, fuese al precio que fuese. Y si Dios tenía a bien que diese mi vida por ello, así sería.

Con esto en mente, cuando el resto se ha repuesto y he escuchado sus propuestas, comento—. Sea como sea, tenemos que acabar con esto. Destruir la caverna sería una buena idea, aunque preferiría mandarles al infierno que adoran con mi propia espada.

—Pero sé que eso es una locura —sentencio a la par que enfundo mi espada—. Así que, decidme, Nadir ¿Cómo podemos hacer que todo este infecto lugar caiga sobre sus cabezas?

- Tiradas (2)
Cargando editor
01/04/2014, 17:35
Nadir Bahar

No sabría yo decirte -le respondí-. No creo que ninguno de los aquí presentes pueda hacer derrumbar este sitio. Lo único que se me ocurre es que, como te dije antes, empuñes la espada que encontré sin miramientos... Encomendarte a tu dios, el cristiano, con ella, sea quizá una gran prueba de fe y poder para con ella... -respondíle-. Entonces miré a Marcial.

Claro que... -dudé-; no sé si es lícito o imprudente el que bajemos allá abajo para ver de cerca esas "ponzoñerías"...

Cargando editor
02/04/2014, 01:58
Don Alonso Carrillo de Peralta

Era más fácil decirlo que hacerlo como bien pude comprobar. Imposible hacer que aquella maldita cueva cayera sobre esos demonios impuros arrastrándolas al lugar del que nunca debieron salir... las llamas del infierno. ¡Llamas! Aquel pensamiento hizome pensar en otro plan, quizás tan descabellado como el otro pero por lo menos sería más fácil de llevar a cabo.

- Prenderles fuego... Quizás consigamos asustarlos y que salgan corriendo uno a uno de la cueva, nosotros desde aquí quizás pudiéramos acabar con ellos... O incluso el mismo humo los podría hacer salir.

Todo con tal de no tener que entrar allí dentro a buscar una muerte segura, aunque la idea del humo quizás no fuera tan factible porque incluso nosotros podríamos salir escaldados del asunto.

Cargando editor
03/04/2014, 14:35
Marcial

- Son demasiados para nosotros cuatro. Aunque no lleven apenas armas, no estoy de seguro de que pudiésemos matarlos a todos. Y aunque creo que merecen la muerte por sus fechorías, es demasiado arriesgado.  La idea del fuego me parece p...

No pudo terminar la frase porque de súbito notásteis un temblor que pareció sacudir la montaña misma. Piedrecitas se desprendieron del techo e incluso en varios puntos aparecieron grietas de diversa entidad donde antes no existían.

Entonces, se escuchó un chillido agudísimo, el sonido más agudo que un oído humano puede captar... todos los sectarios y vosotros mismos echásteis vuestras manos sobre vuestros oídos para intentar mitigar el dolor tan intenso que sentíais en los tímpanos.

Notas de juego

Tirada de Suertex2 todos. Si falláis, tirada de Suerte (sin multiplicador).

Cargando editor
03/04/2014, 18:14
Nadir Bahar

Atendía las palabras de Marcial, cuando...

... ¡Por Adonai! ¡MIS OÍDOS! -entonces solté la lanza, que teníala asida desde la posición de aquella roca, y lleveme las manos a la oreja, tapando mis oídos con las palmas (apretando bien fuerte mi cabeza)-.

Supe entonces que aquello no era un simple ruido. El tambaleo rocoso, la arenilla procedente del cielo de la techumbre ya oscuro, el cual era acompañado de pequeño guijarros, y el resquebrajamiento de las paredes no eran sino plegaria de los demonios, seguramente.

- Tiradas (1)
Cargando editor
03/04/2014, 19:13
El Aguerrido Caballero Don Josep de Montesa

En lugar de gritar, mi única respuesta ante el chillido fue taparme los oídos.

¿Qué era eso?

- Tiradas (1)
Cargando editor
03/04/2014, 21:43
Don Alonso Carrillo de Peralta

Aquel chillido no podía provenir de otro sitio que de las gargantas de los demonios del infierno, era tan insoportable que tuve que taparme los oídos para evitar el dolor que destrozaba mis tímpanos. Pero lo peor fue el temblor que sacudió todo, como si la misma cueva quisiera descender a los infiernos llevándonos a nosotros con ella. Intenté aguantar el equilibrio, y porqué no decirlo también mis esfínteres, para no irme al suelo y que o bien una piedra del techo o uno de aquellos locos dejáranme por siempre allí tirado.

- Tiradas (1)
Cargando editor
08/04/2014, 10:34
Director

Repentinamente, el paisaje de la cueva se transformó en un paisaje sacado del mismísimo Infierno. Surgieron grietas en el suelo, las rocas del techo empezaron a derrumbarse. Milagrosamente, el agudo chillido no acabó con vosotros pero el grupo de sectarios que había frente a vosotros no corrió la misma suerte.

Una cantidad considerable de los adoradores del Demonio vio cómo sus oídos reventaban y vísteis cómo manaba sangre de sus cabezas y algunos de ellos caían como fulminados y morían con las manos sobre las orejas.

Otros caían aplastados por una roca del techo, a vuestro lado cayó una parte del techo y levantó una nube de polvo que os impidió ver qué sucedía más allá.

Tan sólo pudísteis escuchar que el chillido cesaba y se veía sustituido por una risa infrahumana que helaba la sangre, cuando la nube de polvo se disipó, vísteis muy cerca vuestro a Marcial tendido bocabajo con un charco de sangre alrededor de su cabeza, como la aureola de un santo. Sus oidos y su cabeza no habían podido soportar el chillido y un trozo de roca le había aplastado las piernas, doblándolas de forma antinatural hacia arriba.

Más allá, pudísteis ver a dos de los sectarios en pie, a uno de ellos le sangraban los oidos pero se mantenía estoicamente en pie, mientras que el otro parecía estar en perfectas condiciones. A su alrededor, yacían los cuerpos de sus compañeros, unos destrozados, otros aún se movían, se retorcían esperando hallar la muerte cuanto antes.

Por encima de todos ellos, sobre el techo de la caverna, se hallaba una masa informe negra como la noche que más parecía una nube de vapor, era el lugar del que procedían las risas y no tuvísteis duda de que era el Demonio, el Oscuro al que se referían los grabados.

La masa informe se fue poco a poco definiendo para mayor repugnancia vuestra, hasta formarse en la parte superior un rostro sacado de las pesadillas de un demente, más que eso, era algo que una mente humana no podía imaginar per se.

JAJAJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJJAJAJAJJAJAJAJJAJAJAJJAJAJAJJAJAJJAJJAA

La masa se acercó hasta el sectario que estaba en perfectas condiciones y una parte del vapor tomó forma de garra y vísteis cómo penetraba por las narices del hombre, éste ponía los ojos en blanco y murmuraba algo. Luego gritó - ¡DIOS PERDÓNAME! y su cabeza reventó como un melón maduro y trocitos de masa gris sanguinolenta, esquirlas de cráneo y trozos de carne salían despedidas en todas direcciones.
 

Cargando editor
08/04/2014, 17:39
Nadir Bahar

Quedéme petrificado*, pues no sólo veía morir a Marcial, los sectarios o ver transformarse la cueva en los más oscuros salones de las séfiras oscuras, sino que aquella masa uniforme había sido invocada por los fanáticos. Estaba claro que con una lanza propia de muccadim poco podía hacer yo, aunque miré de nuevo al caballero de Montesa.

¡Empuña la espada! -le insistí, nuevamente-, ¡coge esa jineta, caballero, y destruyamos esa cosa cuanto antes!

Et que no decía cosa baladí o sin pensar, que con el cielo derrumbado, poca opción veía aparte de intentar darle muerte a la criatura, o demonio, o lo que fuera, para poder salir de aquel embrollo.

Notas de juego

*¿Por cuál tirada de IRR lanzamos?

Cargando editor
09/04/2014, 00:39
Don Alonso Carrillo de Peralta

Con las manos en los oídos y los ojos a punto de saltárseme de las cuencas, esta vez si noté yo cierta humedad en los mis calzones, pues el miedo que aquel horror había metido en el mi cuerpo no era para menos. Cuerpos con las cabezas reventadas, con las espaldas o los miembros rotos, el pobre Marcial a nuestros pies que ya debía estar viajando a los brazos del Altísimo y, lo peor de todo, aquella cosa informe venida de lo más profundo del infierno.

Caíme de rodillas ante tanto horror mientras mis manos se juntaban en una plegaria por nuestra vida, non porque fuera a morir allí sino más bien porque aquel demonio no nos arrastrara con él. Oí como en un sueño la voz del judío a mi vera, pero era incapaz de hacer que mis piernas o mis brazos se movieran.

Cargando editor
09/04/2014, 10:23
El Aguerrido Caballero Don Josep de Montesa

Jamás habría pensado que me encontraría con algo así. Sin duda, aquel ser era el Diablo, o uno de sus más cercanos seguidores. Así lo sentia en mi corazón, ahora acongojado y recogido. Mirar simplemente a aquel ser hacía que se me recogiese el alma, que se me entrecortase la respiración.

Mi primera idea es salir corriendo. Pero entonces es cuando caigo en la cuenta de que eso es lo que precisamente esa criatura busca. Que salgamos corriendo, que nos convirtamos en cobardes que vivirán toda su vida con miedo. Pero no le daré ese placer.

Si Dios ha querido que esto tenga que ser así, así será. Hice un juramento de defender el mal con el que me cruzase, y por Dios Nuestro Señor que así lo haré. Y si éste tiene a bien que muera a manos de este ser para acogerme en su seno, no prorrogaré ese momento más.

Así, miro a Nadir, para decirle—. Usad vos la espada, si queréis luchar. Dios proveerá —digo mientras saco mi cantimplora, hago una cruz con los dedos mientras murmuro una oración, para acto seguido echar un trago y verter el contenido por mi montante.

Tras eso, saco algún crucifijo que lleve, para atarlo junto a la empuñadura, y decir—. Es el momento. Si queréis luchar, hacedlo, y si queréis corred, hacedlo. Pero este es el momento de actuar.

Y, tras decir esto, salgo de mi escondite para mirar fijamente al ser y espetarle—. ¡Vos, monstruo! ¡Por la gracia de Dios os digo, que hoy será el último día de vuestra horrible existencia! ¡Os mandaré de vuelta al infierno, para que no volváis nunca!

Por supuesto, me preparo para el combate. Sé que el ser es poderoso, pero hay algo mucho más poderoso.

Mi fe.

Notas de juego

Sólo sé usar espadones, y no creo que sea la misma habilidad para estos que para esa espada. En caso contrario, sí que uso la espada de Nadir.
 

Cargando editor
10/04/2014, 10:01
Director

Ninguno se dio cuenta de a qué demonio se enfrentaban, ni sabían de qué manera podían llegar a vencerle. Así que hicieron lo único que podían hacer, preparse para el combate...

Josep no tenía las suficientes aptitudes para empuñar la espada encantada que os dijera el difunto Raimundo y le pasó el arma a Nadir para que hiciera buen uso de ella. Mientras tanto, Alonso quedóse quieto sin reaccionar. Para todos había sido un estremecimiento, una conmoción de la que nunca se recuperarían. Si bien es verdad, que en aquellos momentos ninguno de ellos pensaba en salir con vida de tan penosa situación.

El demonio fijó las dos llamas de un rojo intenso que parecían sus ojos en Josep, la masa gaseosa no se movió y tan sólo el aire a su alrededor pareció contraerse para formar sonidos de ultratumba

- TU DIOS NO HA VENIDO HOY, BASTARDO. ¡SODOMIZADOR DE NIÑOS! ¡MASTURBADOR! VÁIS A MORIR Y ME VOY A TRAGAR VUESTRAS ALMAS - con la garra atrapó ahora al último de los sectarios, sólo que en vez de hacerle reventar la cabeza, pareció solo rozarle y el hombre cayó desplomado con una mueca de terror dibujada en su rostro.

- Tiradas (12)

Notas de juego

Alonso réstate 8 de Templanza de forma definitiva

Nadir 2

Josep 9

Perdéis la mitad de IRR por haber pasado las tiradas de RR

Alonso pierde 4 de RR y las gana de IRR

Nadir 8

Josep 5