Partida Rol por web

[DM 06/21] Placer secreto

Una dama en apuros - Escena de juego

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01/06/2021, 00:16
Director

Mondragón (en Euskera Arrasate). En algún momento del siglo XIV

El Arcipreste de Mondragón, Sancho de Echavarría (quien era amigo tuyo desde hacía poco tiempo), te había llamado a su presencia a través de un clérigo-portero de su confianza. Éste pudo indicarte que podrías encontrarle en la Iglesia de San Juan Bautista, una vez acabada la misa pertinente del domingo. Y en el Día del Señor allí que te encaminaste. La Iglesia era de reciente construcción y resultaba un edificio amenazador más que imponente. Las gárgolas en su tejado parecían observar con rostro demoníaco a quien osase entrar. Pero no se podía negar que era también una edificación hermosa, construida siguiendo las modas arquitectónicas actuales.

Tras dar la bendición y los feligreses hacer la señal de la cruz (tú incluido), el Arcipreste abandonó el ábside y enseguida, tras dar varios paso, se internó en una de las cámaras auxiliares del templo (seguramente la sacristía o algo parecido).

Notas de juego

Comenzamos. Estás/vives en Mondragón (Guipúzcoa, en la corona de Castilla).

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01/06/2021, 20:09
Sancho de Irache

Llegué la noche anterior al pueblo, cansado y sucio del viaje. Me hospedé en una posada que había al lado de la iglesia, donde el precio por una habitación con un lecho lleno de pulgas era inversamente proporcional al número de ellas. En estos momentos no me podía permitir muchas concesiones. La noche era fría y había empezado a llover, por lo que después de comer algo caliente me subí a intentar dormir y descansar, si los bichos me dejaban.

La mañana siguiente amaneció nublada y fría, muy negra, como fauces de lobo, como dicen por estos lares. Almorcé algo frugal y me dirigí a la iglesia de San Juan, tan imponente como siempre. En este día, aún más, debido a que las gárgolas del templo parecían cobrar vida. Me introduje junto al resto de parroquianos en ella y avancé por el pasillo central hasta colocarme en un banco de las primeras posiciones. Los primeros bancos siempre estaban reservados para la nobleza o gente pudiente. Esperé a que terminara la misa dominical y al ver que el arcipreste se metió en una cámara aledaña, le seguí los pasos. Dentro de unos momentos sabría por qué había sido llamado ante su presencia.

Notas de juego

Bueno, ya estoy centrado en la partida. Espero que sepa adaptarme al 1 vs 1 y no me salga un churro, jajajajaja.

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02/06/2021, 12:08
Director

Cruzaste el presbiterio y avanzaste hasta la entrada de la sacristía. Un pequeño portón claveteado y recién barnizado estaba entreabierto, y sólo tuviste que empujarle. Enseguida cruzaste un pequeño pasillo de piedra y luego viste la luz en la siguiente y única sala que allí había. 

En aquella sacristía estaba de espaldas el arcipreste, mirando una gran cruz en el fondo de la habitación. Hacía la señal de la cruz (seguramente de manera rutinaria tras cada misa). A un lado había dos baúles y una mesa con una silla. Un estandarte de la Corona y los escudos de armas de la ciudad decoraban la fría piedra de la iglesia de San Juan Bautista, junto a una ventana.

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02/06/2021, 12:09
Sancho de Echavarría

Al oir tus pasos el arcipreste se giró.

¡Bienvenido, Sancho! -dijo, alzando sus brazos y manos y acercándose a tí-. ¡He te aquí, a la llamada de Dios! -parecía alegre de verte-. Cuantiosos días te esperé desde que envié al portero a buscarte, he rezado para que tu viaje fuera lo más propicio posible. ¡Entrad! -diste entonces unos pasos, y te sentaste en la silla invitado por él-.

Iré al grano, Sancho -dijo ahora, caminando bajo la ventana, y hablando al tiempo que miraba por ella el frío temporal de afuera-. Nos conocemos hace poco, pero he visto en tí fidelidad y eso es algo que valoro demasiado. Y digo que iré al grano por la cuestión maliciosa que ataque a esta comarca.

Como ya sabes, soy arcipreste, y estoy al cargo de varias parroquias de la zona, y no sólo la de Mondragón. Y eso incluye el cuidar del rebaño de Dios o, al menos, preocuparme de él cuantos sea posible: hace poco desapareció una joven campesina de la cercana aldea de Gesalibar. Ostatxu, que así se llama, es como la luz para sus padres y ahora, sin ella, la tristeza se ha apoderado de tan cristiana familia. Te diré más: no se conocen problemas entre Ostatxu y sus padres así que la cosa debió tratarse de un secuestro. Te mandé llamar para que investigaras el paradero de la joven y la traigas ante mi presencia para poder devolverla a lo suyos padres. Por supuesto, date por pagado con buena recompensa y el alojamiento que necesites. Puedo ofrecerte, además, un anticipo para gastos... ¿Estáis conmigo, Sancho? -te preguntó finalmente-.
 

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02/06/2021, 21:03
Sancho de Irache

Avancé hasta estar en la sala donde se hallaba el arcipreste. Al ver que estaba santiguándose, esperé pacientemente hasta ver que había terminado, pero se ve que escuchó mis pasos y se dio la vuelta. Extendió los brazos hacia mi para darme un abrazo bastante efusivo. Eso era buena señal, ya que implicaba que le caía bien y me tenía en estima.

-"Dios llama y el hombre responde. Gracias por su preocupación, su eminencia, el viaje ha sido tranquilo y sin incidentes reseñables." Dije sentándome donde me indicaba.

Observé cómo deambulaba por la sala, pensativo y con la mirada puesta en la ventana, mirando el mal tiempo que afuera hacía.

-"Gracias por sus palabras y su confianza." Le comenté al oírle decir que valoraba la fidelidad que yo le había demostrado en anteriores ocasiones.

Al oír el encargo, el semblante me cambió rápidamente. Yo no era hombre de armas ni tampoco sabía seguir rastros en los bosques o veredas. Desde luego, había hombres más capaces que yo para hacerlo. Un leve mareo me sobrevino, pero pasó rápidamente.

-"Sepa vuestra merced que estaría encantado de ayudaros en esta cuita, al igual que he hecho antes. Pero usted sabe que yo no soy hombre que sepa defenderse o sea un experto rastreador, mis aptitudes son otras. Soy cambista y el dinero es lo que sé manejar de forma magistral. No sé muy bien cómo podría ayudaros en esta desaparición." Dije meditando bien las palabras, no queriendo ofender a Sancho.

-"Desde luego es una lástima lo de esa joven, una pena, sí. ¿Se sabe si tenía algún amante que la cortejara? Ya sabe que la juventud hace muchas tonterías por amor."

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03/06/2021, 10:43
Sancho de Echavarría

Sé que no sois un cazador que siga rastros, ni un soldado que empuñe una lanza, pero sois quien sois, y quien sois no es sino alguien con buenas dotes de palabra, pues en vuestro oficio y negocios la necesitáis -respondió-. Quien haya raptado a esa joven, o quien sepa dónde está si acaso escondida es, vosotros habréis de averiguarlo. Y seguro que podéis hacerlo.

Entonces se giró y abrió el baúl que tenía en el suelo. Rebuscó un instante y escuchasta entre sus manos el tintineo típico de monedas (de quien estabas tú bastante al tanto). Entonces sacó una bolsita y la ató delante de tí. Era de piel negra.

Tomad, lo que os dije. Un adelanto -señaló, ofreciéndote la bolsita-. Cincuenta maravedíes para los gastos oficiosos y las dificultades. Si traéis a la joven os reportaré lo que necesitéis, si está en mi mano y en el de la diócesis de esta tierra -tal vez aquello estuviera incluso mejor, que no sabía uno cuándo habría de necesitar los favores de la Iglesia...-. Te recomiendo ir a hablar con Patxi Zintzoa, el merino del concejo. Él ya estuvo investigando la desaparición, y lo lógico es que sepa algo. El edificio del Concejo es ese mismo... -señaló con la cabeza, como si pudiérais verlo tras los miros de la iglesia-, el que está ahi fuera, delante de esta iglesia -efectivamente, antes de entrar lo habías visto, un edificio de dos plantas, casi tan grande como el santo templo-. Ahora, si me disculpáis, el deber de Dios me llama. ¿Tenéis alguna duda más? Yo estaré por aquí unos días.

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03/06/2021, 14:37
Sancho de Irache

Viendo que no podría rechazar el encargo sin quedar mal ante el arcipreste, me resigné a ello. Intentaría usar mis dotes de oratoria para intentar conseguir información que me llevara hasta el paradero de Ostatxu. Simplemente por intentarlo, me ganaría unos pingües beneficios, además del agradecimiento de la Iglesia, que siempre venía bien.

-"Está bien, acepto el encargo. Intentaré traer de vuelta a esa descarriada jovencita junto a sus padres."

Recogí de las manos de Sancho la bolsa con los maravedíes y me la até al cinturón. Miré hacia donde señalaba el arcipreste al mencionar la casa del concejo, para después volver a mirarle a él.

-"No necesito nada más mi señor. Iré ahora mismo a hablar con Patxi Zintzoa, a ver qué me cuenta al respecto, para después visitar a los padres de la chiquilla. Le dejo con sus quehaceres para con Dios y si hallo alguna pista importante se la haré saber de inmediato." Dije mientras me retiraba.

Al salir de la Iglesia, tomé el camino de la posada primeramente. Quería dejar allí a buen recaudo casi todo el dinero que me había proporcionado Sancho y coger una pequeña daga, por si acaso. Nunca sabía uno dónde se metía en estos tiempos tan convulsos. En la habitación, miré de que hubiera algún tablón de debajo de la cama que estuviera flojo y con la ayuda del puñal lo quité. En el hueco deposité la bolsa con cuarenta maravedíes, quedándome diez para imprevistos. Al bajar al salón, le dije al posadero que me quedaría al final unos días y que me reservara la habitación en la que había pasado la noche. Le comenté, como el que no quiere la cosa, que estaba de paso en el pueblo por la mismísima llamada del arcipreste Sancho, gran amigo mío. De esa manera, el posadero tendría buen cuidado de mis enseres y de que no me faltara nada. Al rato, salí en dirección de la casa del concejo para hablar con mi primer entrevistado.

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04/06/2021, 16:59
Patxi Zintzoa

Con gran inteligencia, te tomaste tu tiempo para llevar el adelanto a la posada, esconderlo y acrecentar la importancia de tu persona en el tabernero, por medio de la influencia del propio arcipreste. Y tal que así, que los dueños de la misma asintieron a todas tus propuestas acerca de la habitación.

Fue entonces cuando te encaminaste hacia el edificio de dos plantas. Su portón no lo guardaba nadie por fuera, pero sí por dentro, y nada más entrar una especie de funcionario te preguntó quien eras y qué querías. Tras referirle el nombre del arcipreste de nuevo (parecía que el clérigo Sancho abría muchas puertas con tan sólo escuchar tal nombre), fuiste llevado a una sala de la primera planta. El merino aguardaba allí en una especie de despacho diáfano (tan sólo con un mueble sobre el que había armas y poco más). Era un tipo de treinta y tantos, con aspecto decidido, pero con gran serenidad.

Tras presentarte debidamente le comentaste la propuesta del arcipreste, y comenzó a asentir a todo lo que le contabas.

Pues no sé qué contarle, señor -respondió-. Las pesquisas son las que son, mejor dicho, fueron las que fueron... y no fueron a ninguna parte, por desgracia. Eso sí, últimamente han habido varias desapariciones en el entorno rural de esta población, todas ellas siendo mozas de corta edad, en edad casadera, ya me entiende... Pues en Gesalibar, aparte de Ostatxu, desapareció otra muchacha llamada Nerea.
 

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04/06/2021, 19:54
Sancho de Irache

El tipo parecía duro y sabio para su edad, no en vano ser merino no era trabajo mal pagado y requería de ciertas dotes. Al llegar y presentarme, me comentó que había habido más desapariciones en la zona, cosa que me desconcertó bastante, ya que era un dato significativo y el arcipreste no me lo había referido. Supongo que esta joven era más importante que las otras para su merced.

-"¡Caramba! No tenia noticia de ello. Y dígame su señoría... cuando se refiere a varias desapariciones, ¿cuántas jóvenes en concreto han desaparecido? ¿Sabe si tenían algún nexo en común entre ellas? ¿Algún mozo del pueblo que se viera acechándolas o cortejándolas? ¿Algún forastero que haya llegado recientemente al pueblo?" Dije dando vueltas por la sala en actitud pensativa.

-"Hábleme de las jóvenes, ¿cómo eran? ¿Por qué círculos se movían y con quién? ¿Cuándo y dónde desaparecieron? Ya sabe, cuénteme todo lo que usted ha averiguado y lo que piensa del asunto, por favor." Dije parándome en seco y mirando fijamente al merino.

Me quedé dubitativo si preguntarle una cosa, pero al final decidí que sí, tenía que intentar recabar cualquier información que me ayudara a dilcidar qué había pasado con las jóvenes mozas.

-"Sabe si hay alguna santera, comadrona o alcahueta por la zona?"

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05/06/2021, 10:28
Patxi Zintzoa

No he llegado a Merino más que desde hace poco tiempo, pero mientras aquí he estado han sucedido estas dos desapariciones. En la comarca se cuenta que ha habido algunas más, pero no en esta época, sino tiempo atrás... Como sabrá, señor, me remito a Mondragón a las localidades más cercanas... en realidad a la Gesalibar. Y en ellas centré mis pesquisas -resopló, recordando que no logró encontrar demasiado-. Las dos jóvenes, Ostatxu y Nerea, son muchachas en edad casadera, pero no hemos encontrado a nadie que las acechara o que las pretendiera -aclaró-. Acudí yo hace más de dos meses atrás por el asunto de Nerea, a preguntar allí, y también hace menos de dos semanas por lo de Ostatxu. Nadie sabía nada, era una aldea tranquila, y los ánimos de los padres de ambas no estaban muy alzados como para tratar de recordar detalles menudos. Ya sabrá vos que Mondragón es una ciudad grande, y que hay más asuntos que atender... Asique aún no he retomado el asunto. Me alegra que el señor arcipreste lo haga a través de vos. Quizá usted pueda encontrar algo más en Gesalibar.

Luego quedó pensando... ¿una alcahueta? Mmm... -negó con la cabeza-.

Notas de juego

Haz una tirada de Elocuencia.

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05/06/2021, 10:38
Sancho de Irache

Quedé escuchando, pensativo. Al parecer había habido desapariciones desde hace tiempo, pero las dos últimas en escasos dos meses y algo. Ninguna pista encontrada ni nadie sospechoso. Poca información, por no decir nula me daba este hombre. Mis pesquisas tendrían que orientarse hacia otro lado si quería averiguar algo más.

-"Veo que es usted un hombre muy ocupado, ya que su cargo es de mucha responsabilidad. Yo intentaré desahogarle de esta investigación, ya que el propio arcipreste me lo ha pedido como un favor personal." Le comenté.

Ante la duda que ponía sobre mi última pregunta, fui más específico.

-"Sí, una alcahueta o celestina, o curandera o santera, tienen muchos apodos. Suelen ayudar a las mozas en asuntos de amor, ya me entiende, o cuando han quedado encintas sin quererlo... Esas mujeres suelen trapichear con información valiosa y puede que sea buena idea departir con alguna, si es que hay alguna en el pueblo." Le dije al merino.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues empezamos bien con las tiradas, la primera pifia.

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06/06/2021, 10:03
Patxi Zintzoa

Levantó su barbilla para luego seguir negando ante la explicación de lo que era era una alcahueta. Él sabía, pero le vino bien que le aclarases el concepto para reafirmarse en sus palabras, que eran que no había percibido nada así.

No lo sé -reiteró-. Ya os digo que el asunto se alargó más de la cuenta, y ninguna pista pude encontrar sobre las jóvenes. Dios las tenga vivas y saludables, y las devuelva pronto -añadió-.

Notas de juego

Pues debido a la pifia no logras saber mucho más.

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06/06/2021, 13:19
Sancho de Irache

Al no tener nada más que departir con él, me despedí formalmente y salí del edificio, no sin antes preguntarle por la dirección de la residencia de esas dos jóvenes. Primera iría a la de Nerea, por ser la más antigua y luego iría a la casa de Ortatxu, que era la que realmente me importaba. Pero creía que las dos desapariciones, incluso las que hubiera más antiguas, estaban relacionadas. Había conocido a muchos hombres ya en mi vida para saber que hay un tipo de personas que en vez de hombres, son demonios encarnados. Dan rienda suelta depravaciones y no les importa matar, violar o seducir con tal de saciar sus instintos.

-"Bien, gracias por la información, merino. Si se acuerda de repente de algo más, no dude en buscarme para comentármelo. Estoy pernoctando en la posada de enfrente. Adiós."

Al salir del edificio vi que el día estaba gris, lluvioso, con muchas nubes. Iba a ser una investigación dura, no ya por la dificultad de buscar pistas, si no por las inclemencias del tiempo. Después de andar un techo y llegar a la hacienda de los padres de Nerea, enfilé el trecho que me quedaba hasta la puerta de la casa. Debía de cuidar bien las palabras para no volver a dañar a los pobres padres, que seguramente aún guardaran duelo por la desaparición de su hija. Golpeé fuertemente la puerta con mis nudillos y esperé a que me abrieran.

-"Buenas paisanos. Vengo en nombre del arcipreste de Mondragón, hagan el favor de atenderme."

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07/06/2021, 09:55
Maite y Antxon

El merino asintió a tus palabras, y en cuanto pisaste el exterior del edficio del concejo no tuviste pereza en desplazarte hasta Gesalibar. Era un aldea que, como te había comentado el arcipreste Sancho, estaba próxima a Mondragón. No tardaste ni media hora en llegar a paso formal y sin apenas equipaje (sólo con lo puesto y tus objetos). Una vez allí viste un puñado de casas arremolinadas en una iglesia, la cual estaba en plena construcción (aunque no se veían por allí alarifes ni peones). Las cabañas eran de madera, y en casi todas ellas salía humo de chimenea, pues el tiempo apretaba frío en ese lugar. No tardaste demasiado en preguntar y averiguar cual era la vivienda de los padres de Nerea.

Abrió la puerta un matrimonio compuesto por una mujer de cabellos como dorados, ya algo envejecidos por la edad, y un tipo más mayor que ella, con abundante barba y cabellos blancos. Te miraron de abajo a arriba, sin decir nada, esperando a que hablaras tú primero.

Notas de juego

Si hablas con ellos, acompaña tu mensaje con una tirada de Empatía y otra de Elocuencia.

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07/06/2021, 18:54
Sancho de Irache

Al cabo de un par de minutos, la puerta se abrió, dejando ver parte del interior de la morada. El calor que salía de dentro me reconfortó un poco, dado que la lluvia y el frío me habían acompañado en mi caminata hasta Gesalibar. Los que tenía delante debían de ser los padres de Nerea, por su aspecto y edad. El varón, apostado en el medio del quicio de la puerta, me miraba rubicundo. La mujer, a su lado, me miraba de arriba a abajo.

-"Buenos días, si es que se le puede llamar así. La lluvia no ha dejado de caer desde que llegué a esta comarca." Dije para romper el hielo.

-"Permítanme presentarme. Me llamo Sancho de Irache y vengo en representación de su eminencia el arcipreste de Mondragón, su excelentísima, Sancho de Echavarría. Mi cometido es investigar la extraña desaparición de su joven hija Nerea. Me ha encargado personalmente que lleve esta investigación ante los pocos datos descubiertos por el merino de la zona. Si son tan amables, me gustaría hablar con ustedes sobre lo sucedido, a ver si yo puedo sacar algo más de información que mi antecesor." Dije esperando alguna contestación.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Pues... jajajajajaja, seguimos con las malas tiradas.

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07/06/2021, 23:51
Maite y Antxon

El matrimonio se miró entre sí en cuanto te presentaste. No supiste bien ni con exactitud lo que les sorprendió de tí. Tal vez que fueras forastero, tal vez que nombraras al arcipreste Sancho, o bien que te interesaras por su hija. El caso es que el marido bajó su mirada, y tardó unos segundos en contestar.

No señor. El arcipreste Sancho estuvo aquí, y el merino igual. No queremos más problemas, no queremos más lastres... Mi hija... -se mordió los labios, como queriendo decir algo de ella-. Entonces continuó hablando la esposa.

Vaya pues a buscar a mi hija, si es que viene en representación de quien dice, pues aquí estamos aún soportando el mal de su desaparición -la mujer parecía como si no te creyera, como si dudara de que vieneras en representación de nadie-.

Acto seguido te cerraron la puerta.

Notas de juego

Pues si, vaya tiradas :(

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08/06/2021, 21:36
Sancho de Irache

-Maldición...

No sabía si es que estaba perdiendo facultades, pero el caso es que ni siquiera había conseguido hablar con esta gente. Tanto el merino como los padres de Nerea me habían dado escasa información. Aunque... ¿Por qué vendría el arcipreste hasta aquí personalmente para hablar con esta pareja? Ya se encargaba el merino, así que... Otra cosa más en la que pensar.

De vuelta al poblado, me tocaba pasarme por la casa de los padres de la última joven desaparecida. Si allí no sonsacaba algo de información, debería de estrujarme los sesos para saber dónde buscar. La cosa se tornaba gris, como estaba el cielo. Encargarme de esta investigación me proporcionaría tener de mi lado a un personaje importante de la iglesia, pero si no llegaba a buen puerto, ¿qué pasaría entonces? Casi sin saber cómo, mi paseo me llevó ante la puerta de la casa de Ortatxu. No vacilé y fui hasta ella para golpearla fuertemente. La lluvia había cesado de caer, pero el cielo estaba encapotado. Miré hacia arriba, viendo las nubes bajas pasar veloces por encima. Esta vez no estaba tan alegre y vivaz como antes. Debía de conseguir información, sí o sí.

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08/06/2021, 22:35
Director

Sin demasiado que recoger y con alguna que otra duda en tu cabeza, te encaminaste hasta la casa de los padres de Ostatxu, la última joven desaparecida en la región. No sabías dónde estaba, pero pudiste preguntar a un joven de mediana edad que te señaló el lugar donde habitaban: en una cabaña situada en un claro en el bosque colindante a la aldea, donde comenzaba dicho bosque.

Mientras caminabas hacia allí pasaste por un edificio de mayor envergadura, junto a la iglesia aún en construcción. Se trataba de una especie de taberna (o posada, quién sabía), de una planta  donde salía humo de dos chimeneas y había voces en el interior y candiles y luminarias. Seguramente las gentes del pueblo se reunieran allí o dieran cobijo y comida a quien pudiera permitírselo.

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08/06/2021, 22:36
Madre de Ostatxu

El caso es que quedando atrás este edificio llegaste hasta la casa con tejado a dos aguas del claro. Tras aporrear a la puerta justo después de mirar al cielo, una mujer de aspecto serio te abrió la puerta. Le explicaste entonces que venías buscando a su hija por parte de las autoridades eclesiásticas de Mondragón (concretamente del Arcipreste). La mujer no habló mucho, y tampoco parecía muy preocupada por el grave asunto de la desaparición.

Los banderizos, señor, hicieron ésto. Las luchas entre clanes y familias llega hasta los lugares más pequeños... -aseguraba-. Contaba aquello como desganada, esperando que te fueras, arqueando los hombros un instante, como aquel que cuenta cualquier cosa.

Notas de juego

Haz una tirada de Empatía,  bonus del +25%. Una cosa, en tu ficha también tienes el valor de "Suerte", que sirve para invertir dichos puntos en una tirada y tratar de reducir el resultado hasta un porcentaje. El uso de suerte se declara antes de la tirada (en el motivo de tirada, para ser exactos), y a veces viene muy bien para rebajar un resultado hasta un éxito. Claro que también se pierde muy fácilmente (pero para eso está, para usarla en ciertas ocasiones).

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09/06/2021, 23:00
Sancho de Irache

Al presentarme, la mujer pareció más receptiva que los padres de Nerea. No había rastro del progenitor y la mujer parecía estar un tanto pasota con respecto a la desaparición de su hija, cosa que me chocó sobremanera. Pero más chocante fue lo que me dijo. ¿A qué se refería con todo aquello?

-"Disculpe que la interrumpa señora, pero no me hago a la idea de a qué se está refiriendo. Cuando habla de luchas entre clanes y familias, ¿a qué se refiere? ¿Qué clanes y familias? ¿Y quiénes son esos banderizos que ha nombrado?" Dije perplejo.

La miré de hito en hito. Pensaba que podía sacarla mucha información, así que respiré hondo y la hablé calmadamente.

-"Si no le importa, puede relatarme desde el principio todo lo sucedido con la desaparición de su hija, por favor. Y, si no es indiscreción, ¿dónde anda su marido? También me gustaría hablar con él."

- Tiradas (1)

Notas de juego

Perdón por la hora de postear, he tenido un día complicadillo.

Menos mal que me has dado el bonus, jajajaja, sino no la saco.

La Suerte prefiero dejarla para más adelante, aunque viendo las tiradas que saco...