Partida Rol por web

Don Lucas y Don Damián

IV. Nemo Malus Felix (Día 3)

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08/01/2013, 16:09
Rodrigo de Lara

Pero viendo que no tenía espacio para hacerlo, optó por usar su espada.

- Tiradas (9)

Notas de juego

Vale, entonces estando tan cerca no puedo hacer carga + empujar; en su lugar hago dos ataques.

Ignora la primera tirada de localización después del segundo ataque, fue un lapsus. Son 11 de daño la primera y 5 la segunda.

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08/01/2013, 16:52
Nicasio Juvenal de Ponferrada

Notas de juego

Mi Pj hace caso omiso... xDD

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08/01/2013, 17:10
Rodrigo de Lara

Notas de juego

Ya lo imaginaba :P

Había pensado en actuar a estilo cinematográfico, usando una acción para detener tu ataque y la siguiente para atacar al muerto viviente que está atacando a Jimeno; pero como diría Rodrigo, solo Dios puede estar en más de un sitio a la vez...

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10/01/2013, 10:55
Director

Turno 3:

¿¿¿¿????, todo nervioso, ataca sin éxito a uno de los muertos, e incluso su disposición de esquiva o protección no parece muy buena... Uno de los muertos que se acercaron a la pelea intentó echar sus "zarpas" (esas manos huesudas) a alguno de vosotros, sin éxito alguno. Lo mismo hizo lo que quedaba del hermano Casimiro, pero sin éxito. Jimeno, por suparte, llegó y le entregó rápidamente el arma a Rodrigo, esperando que las usara, quizá.

Fue en éstas que llegó Nicasio, apretó el mango de su espada y se enzarzó con el tipo encapuchado, sin que éste pudiera reaccionar, arremetiendo en la parte baja, en su pierna izquierda.

Daño: 8 + (4 de bonus) -1 de hábito de fraile [/2 por pierna]: 5 puntos de daño.

El mandoble le sesgó la pierna de cuajo, arrancando tela, ropa y carte a la altura de la cadera, y la pierna de aquel tipo voló una vara hacia atrás llenando todo de sangre. Inmerso en un terrible dolor agónico, el encapuchado cayó al suelo doliente y enfrascado en dolor, llevándose las manos a lo que quedaba de... en fin.

Fruto quizá de este lance, el hermano Casimiro, ya en manos del mal, intentó pelear, pero se distraería con la escena, pues no hirió  nadie. Entonces, el otro muerto, arremetió contra Jimeno, con manotazaos y unas largas como de bestia, provocándole algo de daño:

Daño: 3 -1 de ropa gruesa: 2 puntos de daño.

Finalmente, Rodrigo de Lara, sacando fuerza y valentía desde la inexistencia, empleó toda su moral para atacar al mismo ser muerto que abofeteó a Jimeno. Insertó su espada en uno de sus brazos, y luego en plena tripa.

Daño1: 9 + 2 (sin protecciones): 11 puntos de daño.
Daño2: 3 + 2 (sin protecciones): 5 puntos de daño.

Aquel muerto, hizo una mueca terrorífica antes de caer, definitivamente y "re-muerto", al suelo, fruto de las severas heridas de espada del Cortesano.

- Tiradas (2)
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10/01/2013, 11:12
¿¿¿¿???? - Don Lucas

En esos momentos, el espectral don Damián poseyó a otro de los frailes, el traductor Timoteo. Mientras, la capucha de ¿¿¿¿???? se le cayó mientras gritaba de dolor, y su rostro se descubrió, cuyo rostro parecía como de fraile. Los aún temerosos frailes y el propio espectro de Damián se sorprendieron, y dijeron todos al únisono: ¡Oh, es don Lucas!

Efectivamente, era el abad desaparecido, no estaba muerto, aunque ahora ya casi, pues estaba tendido sin una pierna ya en medio de una horda de muertos, y muy pronto en medio de una de "zombies" o "andantes" (conocidos actualmente).

Finalmente, los Caballeros del Filo Sagrado se percataron de los gritos de Don Lucas debido al cercenamiento de su pierna, se giraron y casi van a rescatarlo, pero se dieron cuenta de que la horda de muertos aún llegaba. Llegó un punto que eran tantos que los que ya quedaban desaparecieron antre esa gran multitud, y deducísteis por la visión tan aterradora delante de vuestras narices que, habiéndolos atrapado, los estaban ya despedazándo y comiéndoselos, que era aun peor.

¡¡Ayudadme!! -os gritó el abad habiendo soltado obviamente su espada-, id al torreón, que es mi aposento... allí... ¡¡¡aauugghh!!! -el dolor le sobrevenía-, allí hay, un ... augh... un libro, en mi escrit...orio... ¡leedlo!, ¡leedlo!, ¡¡uff!!, sólo así... sólo así nos libraremos de ellos... ough...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Bien. Si vais a entrar en batalla de nuevo tirad iniciativa. Como veis, los Caballeros de la órden son prácticamente historia, y en cuanto los devoren los muertos éstos buscarán más carne fresca, por lo que lucharéis con muuuchos enemigos ("fray-zombies" y "re-muertos", no digo más xD).

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10/01/2013, 11:39
Nicasio Juvenal de Ponferrada

Al darse cuenta de su error se encoge de hombros y mira hacia el torreón al que señala el Abad, asiente con la cabeza y se lanza a  la carrera hacia allí con la espada en ristre por si tiene que apartar algún podrido en su huída.

- Tiradas (4)

Notas de juego

Dejo un  ataque por si acaso.

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10/01/2013, 11:53
Jimeno Ibañez

La lucha no era lo suyo y menos aun contra seres demoniacos venidos de la muerte. Las indicaciones del antiguo abad convertido ahora en espectro o lo que fuera resultaron ser el empujón que el sevillano necesitaba para salir de allí. Corrió como nunca lo habia hecho nates en direccion al torreon. Quizás allí encontraría ese escrito del que hablaba el siniestro Don Lucas... Quizás sirviera para algo..

- Tiradas (1)

Notas de juego

Pues eso que voy al torreon.

Tiro otra vez INI por si acaso

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10/01/2013, 13:49
Rodrigo de Lara

Horrorizado por la carnicería que había hecho Nicasio con el encapuchado, Rodrigo corrió para impedir que el joven guerrero siguiera despedazándole, pero finalmente pareció entrar en razón cuando comprobó que aquel encapuchado era el abad. Cuando sus compañeros salieron disparados hacia la torre, él quiso seguirles, pero entonces vio a todos aquellos pobres monjes aterrorizados, y vio con tristeza que el bibliotecario Timoteo también había caído presa de aquella maldición.

-¡Vamos! -gritó a los monjes que restaban-. ¡Id a la torre!

La sabiduría de aquellos monjes podía ser vital en aquel momento; ellos, que sin duda conocerían la historia de aquel monasterio, sabrían mejor que él y sus compañeros qué pasaje del libro había que leer.

Retrocedió para salir fuera del alcance de los monjes afectados por la maldición y dejó paso a los otros, cubriendo su huida, hasta ser el último en entrar en el torreón y cerrar la puerta a cal y canto. Por el abad, desgraciadamente, nada podía hacer en aquellas circunstancias.

- Tiradas (3)

Notas de juego

Hago tirada de iniciativa y utilizo dos acciones de parada para defenderme a mí mismo y a los monjes sin son atacados mientras huyen.

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12/01/2013, 11:41
Director

Huísteis de allí, antes de que los muertos que habían "engullido" a los caballeros del Filo Sagrado" corriesen tras vosotros. Sin embargo, fueron monjes como Casimiro o Mateo quienes tomaron al Abad Lucas o al propio Herman hasta arrastrarle y ver cómo se enzarzaban en una pelea deseperada: los habían atrapado. Sin tiempo para reaccionar y poniendo pies en polvorosa, llegásteis hasta el torreón. Éste estaba abierto, y una vez dentro, empujásteis la puerta, echásteis el pequeño cerrojo habido por dentro y meditásteis la terrible situación que se había formado ahi fuera. Oíais aún algarabía y gritos, pero al menos vuestros pellejo estaba a salvo.

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12/01/2013, 12:55
Rodrigo de Lara

-¡Vamos! -alentó Rodrigo a los demás-. ¡Tenemos que leer el libro del abad Lucas!

Sin detenerse un momento, subió las escaleras en dirección a la planta donde estaba el escritorio, siguiendo las instrucciones del abad.

Notas de juego

¿Ningún monje ha conseguido huir con nosotros?

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15/01/2013, 10:54
Director

Haced una tirada de Memoria (PER).

Notas de juego

¿Ningún monje ha conseguido huir con nosotros?

No.

 

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15/01/2013, 13:54
Rodrigo de Lara
- Tiradas (1)

Notas de juego

Escribo desde el móvil y no puedo acceder a mi hoja de pj. Hago la tirada sin saber qué porcentaje tengo.

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15/01/2013, 16:14
Nicasio Juvenal de Ponferrada

Nicasio se colocó frente a la puerta del torreón de espaldas a Rodrigo y a Jimeno  con la espada en vertical y listo para vender cara su vida en caso de que los muertos subieran hasta allá.

Muchas vidas se estaban perdiendo hoy, y no sólo por los bondadosos caballeros a los que Nicasio envidiaba sino más bien por los hombres buenos y piadosos que ningún mal jamás hicieron y cuyas almas estaban siendo mancilladas en aquellos mismos momentos.

- No soy persona de cultura, mejor harés vos en leer Don Rodrigo. ¡ Nadie pasará por ese quicio! - menuda bravata, pensásteis.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Siento el retraso jefe pero he estado con gripe hasta hoy.

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15/01/2013, 20:44
Jimeno Ibañez

Buscad el libro Don Rodrigo. Me temo que estoy agotado... El respirar de Jimeno habia llegado hasta aqui con serias dificultades tan poco acostumbrado como estaba a semejantes esfuerzos fisicos. Cuando escuchó como la puerta se cerraba se sintió seguro. Era una puerta resistente desde luego. Quizás allí estarían a salvo al menos momentaneamente.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Fallo.

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15/01/2013, 23:47
Rodrigo de Lara

Con Nicasio defendiendo la puerta y Jimeno agotado tras su carrera de ida y vuelta a las catacumbas y su encontronazo con aquella abominación, Rodrigo corrió escaleras arriba para hacer algo de lo que mejor se le daba: leer. Nunca pensó que esa habilidad poco común en la gente de su época sería vital algún día; no podía hacer ahora otra cosa que recorrer las líneas de ese libro con sus ojos lo más rápido posible, tratando de encontrar el pasaje que traería la salvación al monasterio.

Notas de juego

Nada, mi tirada también era un fallo. 

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16/01/2013, 10:41
Director

Rodrigo subió, "a todo trapo" escaleras arriba. Nicasio y Jimeno quedaron junto a la puerta, esperando que bajara éste y escuchando lo que había tras la puerta.

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16/01/2013, 10:41
Director

E aquí que comienza la historia de este santo lugar, que es hogar de servidores de Dios; lugar encumbrado en la Guadarrama de las estepas de Castilla, y así... -ésta era su introducción, así empezaba...-:

En el libro se narraba, en los capítulos iniciales, cómo se conquistó el monasterio a los árabes infieles, los cuales lo estaban utilizando como fortaleza. Según se narra, la batalla, al parecer, fue muy corta, pero muchos soldados murieron durante la misma. Tras conquistar la fortaleza, fue remodelada y transformada en el actual monasterio, en lugar tan recóndito. Para honrar a los muertos en la batalla, se construyeron las catacumbas tras la iglesia, y se depositaron allí a los cadáveres, para que siempre estuvieran cerca de un sitio sagrado.

Capítulos después, Rodrigo os contaba cómo el libro hablaba de uno de los capitanes del ejército cristiano que asaltó el monasterio. Se narraba que durante el combate uno de los infieles musulmanes, le embrujó. Las fiebres se apoderaron del capitán y comenzó a perder las fuerzas y poco a poco la vida, pero que fue tal su lucha y su fe, así como la necesidad de ofrecer aquella plaza a Dios, que consiguió vencer la maldición y a los pocos días ya estaba de nuevo en combate, con el afán de capturar a aquel árabe que le había maldecido.

Lo consiguió y le dió muerte, pero antes el árabe le reveló una profecía: le dijo que la maldición se repetiría con el tiempo, hasta que alguien con la misma fuerza que él inventara la manera de contrarrestarla, pero que esto no ocurriría hasta el día que el mal pisara ese lugar. Continuaba narrando que tras la conquista y la construcción del monasterio, el capitán murió de viejo y le enterraron en una gran tumba labrada y hermosa en las catacumbas.

Cuando parecía acabar de leer, Rodrigo observó cómo había una parte final en el libro, la cual parecía  haberse escrito recientemente... Describía el cómo vencer al mal una vez que haya sido liberado, al mismo mal de la maldición a la que se refería el árabe de capitulos anteriores; literalmente decía así:

Reza, en primer lugar, tan sólo a Cristo, muy fervientemente, y de forma piadosa, sin demora, sin miedo (...) Toma la sangre del que pide ayuda, del moribundo, y en un altar de juicios derrámala cuan agua cae sobre pendiente. Cuando acabes lo descrito ve a la casa de Dios o la cobertura angelical de algún lugar sagrado, ¡cuan aprisa puedas!,para rezar de los Padres y los Credos.(...) Y cuando acabes, antes de que todo esto termine, ansiado lector, toma una daga ¡pero no cualquiera! ¡una del Filo Sagrado! y... ¡Quiébrala su hoja en el mismo altar de juicios! ¡No lo dudes! Tan sólo os quedará encomendaros a la jauría de Dios, a los Ángeles merodeadores del señor, que con sus blancas alas mueven la nubes y bendicen a los incautos... ¡Implorad su ayuda!

__________________________________________

Cuando acabó de leer, Rodrigo comprendió que ésto ya lo habían leído. ¿Porqué diantres había subido de nuevo a leerlo? ¿Es que acaso esperaban encontrar algo nuevo? ¡Era lo mismo! Tras mirar y remirar el dichoso libros, sin duda que ponía lo mismo tras haberlo leído minutos antes, antes de la batalla de los muertos... Ciertamente habíais perdido un tiempo precioso, valioso, porque... ¡¡BOOOM!!: Golpes abajo, muchos golpes, como en la puerta de entrada del torreón.

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16/01/2013, 10:45
Director

¡¡BOOOM!!¡¡BOOOM!!¡¡BOOOM!!

Golpes.

¡¡BOOOM!!¡¡BOOOM!!¡¡BOOOM!!¡¡BOOOM!!

Golpes y lamentos tras la puerta. Alguien quería entrar. Era un tropel de voces, gritos desesperantes y ansiosas manos que golpeaban la puerta del torreón. El miedo os envolvía el cuerpo.

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16/01/2013, 12:40
Rodrigo de Lara

Rápidamente, Rodrigo bajó de nuevo para reunirse con sus compañeros, con el libro en la mano.

-¡El ritual! -acertó a decir en medio de aquel estruendo-. ¡Tenemos que ejecutarlo! Pero para ello necesitamos la sangre "del que pide ayuda, del moribundo" -explicó, parafraseando lo leído en el libro que sostenía-. No sé a qué se refiere. ¿A una de esas abominaciones, ¿quizás? ¡Dios mío, si es así tendremos que abrir la puerta!

Rodrigo clavó una mirada de desesperación en sus dos compañeros, buscando en ellos una respuesta en aquella situación extrema, esperando que el Altísimo les iluminara.

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16/01/2013, 12:48
Nicasio Juvenal de Ponferrada

Nicasio envainó y con las dos manos sostuvo la puerta aprentando hacia afuera, haciendo gala de toda su fuerza para dar algo más de tiempo al resto.

- ¿Recordáis algo? ¡ ESPABILAD! ¿Sangre del moribundo....?-se miró a sí mismo y dijo -¿ Y si me clavo mi propia espada y os pido ayuda?- no era una broma - quizás funcione.