Partida Rol por web

Sigo a mi oficial y preparo la granada, cuando da la orden la lanzo a la par que él.

Tras ello me coloco en posición mientras acaricio a mi preciada motosierra

Tranquila, seguro que quedará alguno con quien poder jugar.

Tivoy saca una de las granadas que aún le quedan y la arroja junto a la de sus compañeros.

Frank no tiene ninguna granada por lo que decide quedarse en una pared parapetado hasta que impacten las granadas y poder disparar con la escopeta si quedase alguno vivo.

Pego la espalda con la pared mientras dejo la escopeta colgando de una de las manos y saco una granada, respiro hondo mientras me preparo y la quito el seguro lanzandola contra el grupo de invitados no deseados que nos esperan al otro lado. Un arco perfecto, vuelvo a parapetarme en la pared esperando el resultado

Las granadas explotan estrepitosamente.Afectando a todos los monstruos.Las arañas desaparecen,uno de ls demonios reviente.Tan solo unos de los demonios y el mancubo,lográn impedir un impacto total.

El demonio,que estaba junto al cadáver,se dirige hacia vosotros.Intenta propinar un mordisco al oficial,per no llega a morderle.

El mancubo seposiciona y dispara hacia Mike.Pero tan solo consigue que su arma se levanta un mínimo ,conlo que las balas disparan contra el suelo.

Parece  que las granadas han afectado seriamente a los demonios.

Al ver acercarse al monstruo, me preparo para su ataque y cuando este se lanza a morderme aprovecho mi agilidad para moverme lateralmente mientras alzo mi ametralladora, apuntando al demonio a bocajarro.

Despídete de este mundo, escoria. - susurro, mientras aprieto el gatillo dos veces, con rapidez, logrando que amabas balas se introduzcan en el indeseable monstruo.

Soldados, acabad con el otro, de este me encargo yo! - ordeno, seguro de que el demonio no logrará aguantar el daño que acaba de sufrir por parte de mi arma...

Bien señor, cambio rápidamente el objetivo de mi ametralladora propinando una lluvia de balas al mancubo que nos acecha desde atrás.

Al igual que Antrax, Frank apunta a el que queda en la sala y dispara con su escopeta.

El mancubo cae frito al sangriento suelo del módulo.De nuevo,la sala está vacia de demonios,por el momento.

Hay un cadaver,en la sala espaciosa.Al final del pasillo hay una compuerta,normal.

Buen trabajo soldados. - afirmo, rotundo, al ver como todas las criaturas han caído bajo nuestro efectivo fuego. - Bien, según la información de Frank no tenemos mucho tiempo, hemos de llegar a las lanzaderas cuanto antes, así que tienen un minuto para recuperase. - agrego, mientras me muevo hacia el cadáver de la espaciosa sala, dispuesto a descubrir de que se trata. - Reaper, Antrax, estén atentos a la compuerta... Tivoy, Klins y Frank, ayúdenme en a registrar este lugar. - continuo ordenando, ya inclinado ante el cadáver. - Andy, si alguno necesita alguna cura, es el momento, así que encárguese de ello, especialmente Tivoy, ha sufrido algunas heridas que sin duda necesitaran ser controladas. - finalizo, centrando mi atención en registrar el cadáver así como la espaciosa sala.

Irónicamente se trata del hombre que se suponía debía acompañaros para en sañaros la base.La expresión se terror y desesperación en su rostro hace que te preguntes qué puede haber sido lo que le ha matado.

Cuando dispones a cruzarle las manos sobre su pecho,una llave de seguridad(amarilla) cae de su mano derecha,rotando sobre el suelo.

Ademas´encuentras un cargador para la metrallet(te lo agrego)

Casi no me ha dado tiempo a reaccionar, estaba mas ocupada en cargar mi arma. Asiento mientras intento centrarme en la busqueda

Centrate, que no estas en lo que estas, es como si te pasara algo y no supieras que

Frank hace caso a Mike y comienza a buscar en cualquier sitio, armas,balas,botíquines... todo podía servirles en este momento.

Bien señor, me dirijo hacia la compuerta mientras recargo mi arma, al llegar a ella intento escuchar cualquier sonido al otro lado de la misma.

Tivoy está hecho cisco, y ni siquiera es culpa suya. Normalmente es un buen soldado, obediente y disciplinado, pero esta vez cree que ha recibido sin necesidad, y no le gustaría que volviera a suceder.

Viendo que su Oficial no dice nada al respecto, Tivoy no puede permanecer callado ante lo que él vé como un error que, de no enmendarse, podría repetirse.

Tiene cojones que la herida más grave que he sufrido desde que estamos aquí dentro me la haya provocado un miembro de nuestro propio equipo...

Claro que es normal que sucedan estos "accidentes" cuando nos dedicamos a lo que no es nuestra especialidad. Deberíamos hacer un trato: los exploradores no suturan a nadie, y los suturadores no se encargan de la artillería pesada...

Trata de no cargar mucho las tintas con nadie en particular, pero que te vuelen un cacho de carne que satisfacería al mismísimo Yago no es algo que te deje indifierente.

Algo apenado al descubrir de quien se trata, alargo mi mano para coger la tarjeta de seguridad de color amarilla, la cual guardo en uno mis bolsillos antes de ponerme en pie.

De acuerdo soldados, nos ponemos en marcha. Antrax, ¿algo que informar acerca de la compuerta? Si no es así, adelante. - afirmo, saliendo de la sala y esperando que el resto de mis chicos así lo hagan. - Tivoy y Antrax delante, Klins, y Frank detrás, Reaper, y Andy, avanzarán detrás de mi. - ordeno, antes de que se abra la compuerta, a la cual apunto con mi ametralladora. - ¿Listos? Bien, pues tengan sus armas listas y abatan a cualquier cosa que se mueva.

Escuchas un retumbante ruido sordo.¡,notas como la "sala" tiembla bajo tus pies,golpeteos metálicos resuenan en la distancia.

Señor hay dentro tendremos compañía, las pisadas de lo que sea que hay hacen returmbar la sala, estemos preparados para cualquier eventualidad, yo diría que hay o uno muy gordo o varios mas, que opina que hagamos primero?, tiramos alguna granada?, o directamente abatimos a tiros a todo lo que halla.

Al escuchar el informe de Antrax, guardo silencio, atento a sus palabra mientras medito como encarar lo que será nuestro siguiente combate.

Mierda, si las pisadas logran retumbar en la sala, lo que haya ahí dentro debe ser muy grande, quizás alguno de esos a los que ya nos hemos cargado...

Buen trabajo soldado. - lo felicito, antes de iniciar las ordenes. - Ahora escúchenme, no quiero que nadie se enfrente a eso cuerpo a cuerpo, repito, nada de cuerpo a cuerpo, hemos de abatirlo de lejos, así que abriremos esa compuerta y lo esperaremos detrás del charco de ácido. Andy, usted resguardese en la sala, no quiero que quien nos puede salvar la vida caiga en este combate. - empiezo a ordenar, mientras señalo el ácido, para que todos vayan colocándose detrás. - Carguen sus armas y apunten a la maldita compuerta, yo la abriré y correré hacia ustedes mientras me cubren. - agrego, abriéndome paso hasta la compuerta, donde espero a que mis chicos terminen de tomar posiciones.

Cuando todos ellos se sitúan, abro la compuerta y corro hacia atrás, esperando que l fuego del resto me cubra hasta llegar a la entrada de la sala...