Nezo sale tras Rhezakk; parece intrigado por la proposición del gnoll.
"Volveremos en un rato y os contaré que hacer." - Os dice vuestro nuevo aliado mientras sale del templo con una sonrisa.
Casi al mismo tiempo Tanathil y Krieg se van.
Os encontráis solos en el templo.
La armadura de Krieg ahora está adornada con runas que emiten un ligero brillo, como la espada de Nezo. Este resplandor es más purpúreo.
Sigver aparece entre la multitud que os mira intrigada por la coraza del enano.
"Ah, por lo que veo le habéis dado mejor uso a esta forja que nosotros. Me gustaría hablar con vuestro grupo a la hora de la cena, si no es mucha molestia..."
- Estaremos encantados, señor Sigver. ¿Querríais adelantarme el tema de conversación? Ni siquiera necesitamos pediros comida, veníamos preparados para el viaje y vuestras despensas quizá no pasan su mejor momento.
-Gracias a ustedes por dejarme usarla.
Digo mirando a Sigver y al aprendiz
-Iremos a verle mas tarde. Si necesitais algo en forja no me importaria ayudar, claro, si tengo el tiempo
"Muchas gracias por la oferta, maese enano. Quizás podáis enseñarle algo al chaval." - Dice mientras la da una palmada en el hombro al joven aprendiz de herrero.
Justo antes de que Sigver conteste a Tánathil, un gran y lejano rugido suena desde el bosque.
El rostro del anciano cambia a uno más serio y todos los aldeanos salen corriendo a sus casas, incluido el chico de la forja.
"Os quería comentar que no podéis estar mucho más tiempo en Luaf. No es que no os queramos acoger... es lo que viene de los bosques. El rugido indica que faltan pocos días para que vengan. Si os ven, os matarán."
-Quien? O que cosa fue eso? Por que nos mataria?
- ¡Caramba! ¿De qué está hablando Sigver?
"Darrals de la tierras indomables. La guerra y el saqueo los atrae... además de extorsionar a los más débiles. Están liderados por un darral de mayour tamaño; Borghur el arranca cabezas. Son unos treinta, pero seguro que hay más."
Sigver se sienta en una silla, parece cansado.
"Gracias a Belrio que Leidreran ha accedido a ayudarnos con este problema, un destacamento de soldados experimentados llegará pronto y se ocupará de ellos. No tenéis que entrometeros, por muchas armas y protecciones que tengáis, es muy peligroso."
- Que desdicha más horrible. Esos rugidos se oían muy cerca... y necesitaremos pasar aquí un par de noches o tres... - me quedo pensativo - ¿os extorsionan desde hace mucho? ¿Qué os piden normalmente?
-Si, debemos quedarnos unos dias para recuperarnos y organizarnos.
Me quedo pensativo mientras espero a que responda al elfo
"Llevamos así un poco antes de la guerra entre Veran y Leidreran, unos meses. Al principio era raro verlos, pero cada vez vienen más a menudo."
El viejo se lleva las manos a la cabeza.
"Comida, dinero... mujeres... niños... y el que se oponga termina con la cabeza arrancada."
Sigver se levanta.
"Pero eso se acabará una vez Leidreran instaure el orden. Podéis pasar unas noches, pero no os recomiendo más."
- Gracias por todo. Veámonos con todos a la hora de la cena.
-Gracias por advertirnos. Vamos a decirle a los demás
Le digo al elfo
-Hay que decidir rapidamente que hacer
Tras meditar unos instantes salgo buscando a Rhezakk y Nezo.
El gnomo sale corriendo a la salida del templo para alcanzar al tabaxi y al nuevo integrante del grupo.
Solo quedáis Vangh y Xsii.
Sales corriendo a la salida del templo, esperando avistar a Rhezakk y Nezo. Estos se encuentran en el linde del bosque cercano a la villa. Están apoyados en un árbol, mirándote fijamente.
Te acercas a ellos y una vez les alcanzas, Rhezakk sonríe.
"Te dije que vendría. Nunca dudes de las premoniciones de un chamán." - El gnoll se ríe y se dispone a adentrarse a el espeso bosque.
Nezo, que parece irritado, le responde. - "Es fácil ver las intenciones de un lerdo... en fin, vámonos."
Os metéis en el bosque.
Rhezakk te habla mientras anda a un ritmo tranquilo.
"Y dime, gnomo... ¿Qué lleva a un grupo tan extravagante a viajar juntos?"
-Tenemos una misión para salvar una civilización. Además, si lo conseguimos parece ser que podrán otorgarnos con magia aquello que más deseemos -comento mientras camino con ellos.
"Hmm... parece demasiado bonito como para ser verdad." - El gnoll avanza a paso firme, mirando a todos lados, como si buscara algo. - "Y si fuese cierto... supongo que querrás desperdiciar ese deseo en salvar a tu madre. Qué tierno."
Notas el cruel sarcasmo de sus palabras.
Salgo con Nezo para ver que pasa.