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El baile de los sueños

El Gato de la Bruja

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18/03/2022, 16:54
Director

El Gato de la Bruja

Aquel otoño había empezado frío y lluvioso. Mientras el carruaje avanzaba en dirección sur, las nubes negras de una terrible tormenta cubrían el cielo y descargaban con fuerza agua y granizo. El viento aullaba y los relámpagos rasgaban el cielo, los truenos estallaban con un retumbar terrorífico que agitaba a los caballos forzando al cochero a hacerles continuar a golpe de látigo. El trayecto hasta la posada duró tres horas y media, y la tormenta era cada vez más violenta.

A través de la empañada ventana de la diligencia pudieron ver el lago Malar al oeste, con sus olas espumosas rompiendo en la orilla, y un enorme bosque de pinos al este, azotado por el viento. Un relámpago cayó en uno de los árboles del linde del bosque, partiéndolo en dos con violencia. El resplandor de los rayos desvelaba enormes rocas cubiertas de musgo entre los árboles, sombras siniestras que parecían devolverles la mirada cuando la oscuridad se abatía de nuevo sobre ellas.

Casi de súbito, al llegar a una bifurcación, apareció frente a ellos la posada, El Gato de la Bruja. Estaba rodeada de arboledas, con el lago Malar bramando en el brazo de la bifurcación que se dirigía al oeste, hacia el pequeño embarcadero de un transbordador, según habían visto en los mapas, desde el cual se podía cruzar a la aldea de Hatuna. Las luces de la pequeña aldea de Sigtuna se podían ver a lo lejos, hacia el sur. La luz de un relámpago iluminó lo que parecía el campanario de una iglesia solitaria en la distancia, sobresaliendo entre los árboles a medio camino entre la posada y Sigtuna. Pero allí, la posada daba la sensación de ser la única construcción de los alrededores. El cochero les ayudó a bajar y prosiguió su camino hacia Sigtuna, donde tenía pensado finalizar su viaje. El pobre hombre se lo había ganado con creces tras soportar tamaña tempestad.

Las luces de la posada y el humo que brotaba de su chimenea les parecieron una salvación a la intensa lluvia que les calaba y a la densa oscuridad que devoraba el exterior del mundo. La posada era de madera y estaba formada por un solo edificio principal y un establo con un pequeño almacén. En la parte trasera había un jardín. Lotta, que había estado de paso allí un año antes, recordaba el edificio en muchísimo mejor estado. Ahora daba la impresión de que la casa entera se caía a pedazos. El jardín también estaba hecho un desastre, y no solo por la lluvia.

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18/03/2022, 17:44
Olaus Klint

Bajo el techo que sobresalía del establo había una figura que se protegía del viento y la lluvia sujetándose el cuello del abrigo mientras fumaba un cigarrillo. Al ver al grupo descender del carruaje se dirigió rápidamente hacia ellos. Era un hombre de unos cuarenta años, de nariz afilada, gafas redondas y barba bien cuidada. Sobre la cabeza lucía un sombrero combado por el peso del agua de la lluvia.

—¡Saludos! Soy el investigador privado Olaus Klint —les miró con su penetrante mirada, como si pudiera conocer sus secretos—. También soy un Hijo del Jueves. Permítanme que les ayude con el equipaje.

A pesar de que hacía un tiempo de perros, el investigador no se apresuró en coger las maletas e ir corriendo a la posada, sino que se contuvo, como si quisiera decirles algo más aprovechando la privacidad que les confería el exterior y la ruidosa tormenta. 

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19/03/2022, 10:02
Victor Simonsson

—¡Hola!— respondió el sacerdote ante la directa presentación de Olaus Klint. A continuación, y antes de descender del carruaje, se abrochó el abrigo y levantó las solapas de su cuello con la intención de cubrirse lo máximo posible del aguacero que estaba cayendo en esos momentos. 

—..muy amable, gracias— dijo Víctor respondiendo a su ofrecimiento a ayudar con el equipaje una vez había descendido —mi nombre es Víctor Simonsson..— continuó, esta vez alzando un poco la voz debido al ruidoso ambiente provocado por la tormenta que en ese momentos los envolvía —..¿qué tal si nos ponemos a cubierto y comenzamos con las presentaciones?— por un instante el sacerdote notó al señor Klint un poco turbado.

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19/03/2022, 22:10
Eamon De Valé

Eamon bajó del carruaje y saludó con un escueto buenas noches que dejaba entrever que no traía buen humor. 

-No traigo equipaje, así que le ahorraré trabajo. Espero que pueda sernos de utilidad su información. 

A continuación siguió adelante dejando al señor Klint con la palabra en la boca. Caminaba con tranquilidad hacia la posada sin prestar mucha atención a la lluvia, estaba más que acostumbrado a las noches al raso bajo duras condiciones. 

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21/03/2022, 14:06
Kiran Kumari

Kiran se limitó a saludar con una leve inclinación de la cabeza, recogiendo parte del equipaje al tiempo que sujetaba un paraguas para Alex. Normalmente no coincidía con Simonsson, pero agradeció que fuese lo suficientemente cabal como para sugerir ponerse a resguardo. Aunque no lo manifestaba externamente, Kiran detestaba aquella lluvia fina y fría del norte.

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21/03/2022, 14:11
Olaus Klint

En lugar de seguir a Eamon hacia la posada, Olaus Klint tomó una de las maletas y se dirigió a la cobertura que proporcionaba frente al aguacero el saliente del tejado del establo. Hizo un gesto al grupo para que se reunieran con él. Entre tanto, el cochero, al ver que ya habían descargado sus fardos, hizo restallar el látigo y el carruaje se puso de nuevo en marcha, desapareciendo bajo la intensa lluvia y la oscuridad que engullía el camino por el que se alejaba. 

—Aguarden un momento, por favor —dijo el investigador privado—. Deben saber algo antes de entrar ahí. He oído que, al igual que yo, ustedes están muy interesados en cuestiones ocultas. Conozco a Linnea Elfeklint, y como ella, y supongo que como todos ustedes, también tengo la capacidad de ver lo que los demás no ven —estudió al grupo con una intensa mirada antes de proseguir—. Hace unos días visité esta posada de manera casual, volvía de atender un negocio en Sigtuna y me sorprendió una lluvia igual de intensa que la de hoy. Hice noche aquí, y sentí un poder que me aterrorizó. Me gustaría que me ayudasen a descubrir qué ocurre. 

»La octavilla que les envíe sobre El baile de los sueños ha circulado por toda Upsala. Pero hay más, se rumorea que varios viajeros que han pernoctado en la posada han tenido sueños extraños. Hay quien dice que el edificio está bajo el influjo de la magia. 

Notas de juego

Lanzad Observación (Empatía).

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21/03/2022, 18:50
Alexandra "Alex" Aegirdottir

- Quizás hubiera sido mejor hablar de esto antes de venir aquí-dijo Alex mientras dejaba que la lluvia le cayera por encima sin preocuparse por resguardarse del agua-. Dice que notó una presencia... ¿se refiere a que vio algo? Normalmente cuando he seguido casos que tenían que ver con "lo imposible", en algun punto he podido descubrir o al menos ver brevemente alguna criatura. ¿Vio usted algo así? ¿Y la señora Elfeklint?

- Tiradas (1)
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21/03/2022, 19:57
Lotta Sjöberg

Lotta bajó la última del carruaje, sintiendo el aire frío sobre su cara que, en cuestión de segundos, quedó completamente empapada. Se puso la capucha mientras esperaba a que el dectective Klint les contara eso tan importante que no parecía querer decirles en el interior de la posada.

La escritora se había dado cuenta de cuánto se había estropeado la casa y sus alrededores en tan poco tiempo y pensó que quizás el negocio no estuviera yendo demasiado bien. Dejando apartados esos pensamientos escuchó lo que Klint les contaba.

Quizás eso pueda explicar el deterioro tan grande del edificio... —dijo Lotta, echando un nuevo vistazo a su alrededor. La tormenta no ayudaba a mejorar el aspecto del edificio—. Dígame, ¿se hacía algún tipo de representación como la de hoy el día que estuvo anteriormente aquí?  Por cierto, mi nombre es Lotta Sjöberg.

- Tiradas (1)
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21/03/2022, 22:05
Eamon De Valé

Eamon escuchó atentamente al señor Klint, observaba sus gestos y cara tratando de adivinar si aquel tipo era un farsante o hablaba en serio. No las tenía todas consigo pero la historia que contó captó su atención. 

-¿Puede dar más detalles sobre ese poder que siente? ¿Por qué dice que le aterrorizó? Señor Klint, he visto cosas increíbles y así que no me aterrorizo fácilmente, si espera que tomemos en serio su historia necesitamos que sea un poco más preciso. 

Eamon habló con tono enérgico e impaciente, como hablaba un capitán a un recluta. 

 

- Tiradas (1)
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22/03/2022, 10:52
Victor Simonsson

Victor siguió al señor Klint junto a sus compañeros hasta situarse frente a la puerta del establo, y escuchó atento las razones por las que les había pedido ayuda. Mientras el investigador razonaba su preocupación por el lugar en cuestión, el sacerdote no pudo evitar que le vinieran a la mente recuerdos que había reprimido años atrás. Recuerdos oscuros que creía superados, --..¿y si?..-- su pulso se aceleró por un instante y su mano se aferró a la biblia que llevaba.

La cantidad de cuestiones que originó la historia del señor Klint en sus compañeros hizo que el sacerdote saliera de su ensimismamiento, y atendiera concentrado las posibles respuestas que el investigador pudiera dar.

- Tiradas (1)
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22/03/2022, 19:18
Kiran Kumari

Cuando Klint mencionó los "sueños extraños", Kiran no pudo evitar darse la vuelta. La mayoría de los presentes jamás había visto un cambio tan brusco en el habitualmente impertérrito semblante del criado. Por unos instantes, su rostro fue el de un muchacho asustado y agobiado por una pesada carga.

Apretó el paraguas con fuerza. Dejó que el repiquetear de la lluvia le distrajese, impidiéndole concentrarse en nada más.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Menuda Observación tiene Simonsson. A ver si en realidad vamos a estar ante el famoso Padre Brown, ^^

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23/03/2022, 18:02
Olaus Klint

Klint desvió la mirada hacia el suelo ante la pregunta de Alexandra, parecía seriamente turbado con ese tema, y algo incómodo. Se centró en la pregunta de la escritora, respondiendo que desconocía que se hicieran representaciones teatrales y que no sabía de qué iría aquella pero que las octavillas de esa función se habían enviado por toda Upsala; sin embargo las palabras de Eamon le hicieron girarse hacia él algo ofendido.

¿Qué insinúa, señor? —Le dijo a Eamon frunciendo el ceño—. Cuando estuve aquí con anterioridad pude sentir la presencia de algo horrible, de un poderoso ser... Por eso les solicité ayuda. Pero si está insinuando que carezco de la Visión, me ofende usted. Cuando era adolescente una mara hechizó a mi hermana e hizo que se adentrara en el bosque para no volver jamás. Yo lo vi con mis propios ojos, y desde entonces juré estudiar y comprender lo oculto. Creía que ustedes eran de la misma condición.

Olaus Klint trató de calmarse, respiró hondo, suspiró, y a continuación quedó algo abatido. Hizo un gesto hacia Eamon, como pidiéndole disculpas y después torció la boca y se agachó a recoger la maleta que les ayudaba a cargar. En un susurro, con apenas un hilo de voz se excusó.

—Me... me resulta difícil hablar de lo que he vivido aquí —y acto seguido se adentró en la posada.

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23/03/2022, 18:33
Director

Victor había escuchado cientos de confesiones, había impuesto penitencia a todas ellas, y sabía distinguir perfectamente cuando alguien mentía, cuando alguien ocultaba algo, o cuando decía la verdad completamente arrepentido. El señor Klint no mentía, pero sí ocultaba algo. El padre Simonsson vio los demonios de su miedo acosándole tras el enfrentamiento tenso con Eamon. Aquello que el inspector ocultaba era algo que le aterraba.

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23/03/2022, 20:44
Victor Simonsson

Cuando el señor Klint entró en la posada, Víctor aprovechó para hablar con sus compañeros.

—Bueno, en mi opinión, creo que el señor Klint no nos está mintiendo, ese terror es complicado de fingir..— dijo esto en tono serio recordando cómo le afectaron a él sus primeras experiencias —..aunque, yo no lo perdería de vista. Un hombre así de asustado puede ser impredecible—

El sacerdote recogió su maleta y dijo a sus compañeros —Veamos lo que nos puede ofrecer "El Gato de la Bruja"— 

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24/03/2022, 23:35
Alexandra "Alex" Aegirdottir

-Desde luego aquí no vamos a conseguir nada excepto coger un resfriado-dijo levantando la cabeza hacia el cielo y sacando la lengua como si quisiera beber el agua de la lluvia-. Vamos dentro y a ver que nos encontramos. Muy terrible ha tenido que ser para que Klint prefiera hablarnos de la desgracia que le ocurrió a su hermana de pequeño que a lo que ha ocurrido aquí. 

-Me intriga-dijo antes de seguir sus pasos hacia el interior.

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25/03/2022, 11:54
Kiran Kumari

Algo más tranquilo, Kiran se acercó a Eamon, poniéndole una sorprendentemente pesada mano sobre el hombro.

Yo también albergo mis dudas, es mi trabajo, pero no conseguiremos nada siendo dudando abiertamente de Klint —le susurró—. Esperemos a ver qué nos cuenta y tengamos los ojos bien abiertos.

Tras esperar la respuesta de su compañero, se unió al resto del grupo para entrar en la posada, volviendo a convertirse en la sombra de Alex.

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25/03/2022, 12:10
Director

La precariedad en que se encontraba el edificio tenía su continuación en el interior. Si fuera el edificio estaba considerablemente dañado, el jardín lleno de maleza y el invernadero derrumbado, dentro las cosas no eran mucho mejores. La planta baja de la posada estaba formada por un gran salón con chimenea doble, una cocina con barra, un almacén y un dormitorio para el personal, sin embargo la lluvia se colaba por todas partes y habían puesto cazuelas y cubos para atraparla. Pese a todo, el comedor era un lugar cálido y animado, había varios huéspedes y un par de personas dedicadas al servicio de la posada que atendían la mesa, un hombre bajito y fornido tras la barra y una cocinera de la que solo pudieron escuchar su potente voz cantando las comandas. 

Los huéspedes se encontraban sentados en mesas separadas. La más cercana a la chimenea la ocupaba un hombre de aspecto rústico, que hablaba desde su mesa con el tipo que había tras la barra a pesar de la distancia mientras daba buena cuenta de una jarra de cerveza y de un plato de guiso caliente. El siguiente huésped era un cura, que al ver el alzacuellos de Victor movió la cabeza a modo de saludo a pesar de que no lo conocía de nada. Por último, en la mesa más alejada, se encontraba una joven muchacha que parecía algo nerviosa, temblaba de frío a pesar de tener la frente perlada de gotas de sudor, apenas miró hacia ellos de reojo y bajó la vista enseguida, rehuyendo sus miradas. 

Un chico muy alto y delgado, de voz suave y con unos ojos extremadamente curiosos, les atendió en la puerta y al ver que iban cargados les solicitó el equipaje. Olaus Klint ya había ocupado una amplia mesa donde cabían los seis y hablaba con una jovencísima muchacha, alta y rolliza, que al parecer también trabajaba en la posada. Klint se había tomado la libertad de pedirles algo de beber y también comida para todos. La muchacha tomaba nota y asentía con la mirada baja, evitando el contacto visual. 

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25/03/2022, 12:11
Olaus Klint

—Siéntense —les dijo el detective—, me he tomado la libertad de pedir algo de comer. Seguro que les apetece algo que les caliente el estómago tras esta lluvia horrible. También he pedido que suban sus pertenencias a las habitaciones. No se preocupen, tanto el alojamiento como la comida corren de mi cuenta. 

El detective se quitó el pesado abrigo y lo colgó de un gancho junto a la chimenea para que se secara. Después, volvió a la mesa con ellos y tomó asiento. Sus dedos tamborileaban en la mesa mientras esperaba a que los miembros de La Sociedad tomaran asiento junto a él. Cuando todos estuvieron reunidos se inclinó en la mesa y teniendo cuidado que nadie les estuviera observando bajó la voz y empezó contarles más cosas. 

—Ese tras la barra es Samuel Harjula, el dueño de la posada. Su hija es la encantadora jovencita que me ha tomado nota. El muchacho alto se llama Sven, es parte del personal, y la cocinera creo recordar que se llama Ingelie. Verán, el caso es el siguiente, la última vez que estuve aquí pasaron cosas horribles, como ya les he dicho. Y estos días, en Upsala, me encontré decenas de octavillas como la que les hice llegar —Klint miró de reojo a uno y otro lado, algo más nervioso, y bajó todavía más la voz—. Cuando estuve aquí la otra vez… Verán, tuve un sueño horrible. Una pesadilla. En el sueño estaba en un escenario, representando una obra tremendamente parecida a la que se describe en la octavilla, hasta recuerdo perfectamente el nombre: El baile de los sueños. Y entonces, alguien, no sé quien era, pero en el sueño lo sentía como un amigo cercano, se acercaba a mí mientras escenificaba la obra y me apuñaba con una cuchillo. El público aplaudía pensando que era parte de la actuación pero yo iba muriendo lentamente. Fue tan… real. Pude sentir el dolor, el frío acero cortando mi piel, la sangre brotando... —Klint tuvo que hacer una pausa y tragó saliva con dificultad—. Un sueño. Una pesadilla. Nada más, me dije. Pero en el desayuno me encontré a los otros dos huéspedes que compartieron techo aquella noche conmigo con la cara desencajada. Les pregunté, uno no quiso hablar, pero el otro me contó exactamente el mismo sueño. Y ahora llega esa octavilla, esa obra de teatro: el baile de los sueños… 

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25/03/2022, 13:34
Lotta Sjöberg

Lotta no entendía bien la suspicacia del resto. ¿Por qué iba a mentirles Klint sobre lo que le había sucedido o lo que había vivido? Podría tener sus razones más o menos creíbles o más o menos negativas; podría haber disfrazado sus secretas intenciones, pero la escritora no veía motivos para recelar de la veracidad de sus palabras.

Tiritando de frío, se arrebujó en su capa antes de coger su bolsa y seguir al resto en silencio al interior de la posada. Se detuvo en la puerta un instante intentando reconocer el lugar, comparando el salón que veía en esos momentos con aquel que recordaba. La primera impresión que había tenido desde fuera se confirmaba en el interior. Al menos el ambiente era agradable y se estaba más confortable que fuera, a pesar de las numerosas goteras.

Con un rápido vistazo Lotta observó al resto de huéspedes y al personal, fijando sus ojos en la joven que parecía enferma, quizás consumida por la fiebre ya que sudaba visiblemente a pesar de estar temblando; pudiera ser que hubiera cogido un resfriado, aunque también podría ser que tuviera miedo a... ¿algo? ¿Alguien?

Dejó su bolsa a cargo del joven que los recibió y se dirigió directa a la mesa que ya ocupaba Olaus Klint; el cual en aquellos momentos estaba pidiendo comida y bebida. Lotta enarcó una ceja ante la timidez de la joven que atendía, o pudiera ser otra cosa...

La escritora negó con la cabeza mientras se sentaba, esperando a que la empleada se retirara para escuchar lo que Klint tuviera que decir.

Pues no parece que vaya a haber demasiados espectadores... —dijo, cuando escuchó de nuevo que se habían repartido muchas octavillas.

Pero fue el extraño relato que contó el que llamó de verdad la atención de Lotta. Un sueño que se podía hacer realidad; un sueño compartido por varios soñadores...

Y teme que esta noche ocurra lo que vio en su sueño, ¿me equivoco? —preguntó, sintiendo como poco a poco iba entrando en calor—. Pero, ¿los otros dos huéspedes soñaron exactamente lo mismo o había alguna variación? Al menos el que si habló... ¿Ninguno de ellos se encuentra presente? ¿Supo algo más de ellos? ¿De verdad no puede decirnos nada sobre ese supuesto amigo que lo apuñala? —Lotta cerró de pronto la boca al darse cuenta que quizás estaba preguntando demasiado en poco tiempo, sin dar opción a Klint a contestar o al resto a formular las suyas propias—. Disculpe, cuando me emociono con algo no controlo...

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25/03/2022, 13:53
Eamon De Valé

Eamon se sentó en la mesa que el señor Klint les había reservado. A no era una persona acostumbrada a grandes comodidades, así que a pesar del mal estado de la posada se sentía agusto solo sentir un poco de calor. Escuchó atentamente el relato del señor Klint sin pestañear y mirándole fijamente a los ojos. Hubo unos segundos de silencio tras finalizar su relato, entonces Eamon habló con su característico acento francés:

-Señor, soy una persona de carácter pragmático y siempre tengo los pies en la tierra. No obstante, las circunstancias de la vida me han hecho ver que hay otras realidades, cosas más allá de la razón. No pretendo poner en duda su historia, pero un simple sueño no es suficiente para ser considerado un hecho sobrenatural. 

Eamon miró al resto de la mesa tratando de ver si estaban de acuerdo. 

-Si puede usted demostrar que realmente hay algún tipo de suceso sobrenatural yo no tengo problema en ayudar, pero de momento soy escéptico.