Partida Rol por web

Iruga salto de su asiento dando una increible voltereta en el aire para caer al lado del mediano justo a tiempo para que el mediano, asustado, no robara el saquito de monedas del hombre que antes no queria ceder los asiento libres.

 Iruga de un salto exepcional por ensima de la mesa y sin querer se tropieza casi atropellando saltatrampas pero sin poder tirarlo al suelo. Entonces se levanta algo mareado y se reincorpora.

Idiota..

Piensa Iruga. Luego vuelve a sentarse.

 Saltatrampas se queda muy asustado, con una expresion que viene a significar ¿y eso? Despues sin decir ni una palabra, se aleja mas de la mesa, pasando entre la gente, para escuchar alguna conversacion interesante.

Shaanila observa con interés a los dos medianos. Al volver a sentarse el encapuchado, con la ceja enarcada de nuevo me dirijo a el:

Buena salida, supongo... quizá muy... llamativa.

De reojo me dedico a controlar que las acciones de los dos medianos no nos metan en una pelea, la verdad, los hombres son de lo más aficionados a pelear por sinsentidos... Con la mano apoyada disimuladamente sobre el pomo de mi espada, busco con la mirada al posadero fingiendo estar pendiente de la llegada de la comida, mientras me concentro totalmente en mis oidos para escuchar las reacciones en la mesa de al lado. Al oir al monje que se marchan, le hago un disimulado gesto para que espere.

A pesar de la acrobacia, parece que nadie se ha dado cuenta de ella o por lo menos si se han dado cuenta, no le han dado mayor importancia.

No escuchais ninguna conversacion interesante, tan solo murmullos.

Al ver que todo pasa inadvertido, hago un gesto despreocupado a Lyu y me concentro en mis compañeros de mesa.

Bueno, entonces, ¿qué hacemos después de comer? Yo creo que podriamos descansar o lo que sea mientras cedemos el puesto para comer a nuestros compañeros religiosos... y luego cuando estemos todos ir a ver al príncipe. ¿Qué os parece?

Mientras digo esto, pienso que para ese descanso me daré una vuelta por la ciudad, a ver si con algo de suerte encuentro alguno de esos rincones que, en el interior de algunas ciudades, resultan incluso agradables: un arbol que dé sombra junto a una fuente o un arroyo que atraviese la ciudad... algo así, fresco y verde.

El tabernero os trae la comida y las bebidos que pedisteis.

Aqui tienen jovenes aventureros, espero que sea de su agrado, dice el hombre despues de colocar cuidadosamente vuestro pedido sobre la mesa.

Si puedo serles de alguna otra ayuda haganmelo sabe, me podran encontrar detras de la barra.

Dicho esto, el tabernero se va.

El paladín se fija tanto en como Saltatrampas asustado por nuestro compañero mediano, como de la increible acrobacia del mismo.

Madre mia, la que van a liar la parejita como no sepamos controlarlos. Pienso.

Bien Lyu, en cuanto comamos nos damos una vuelta y visitamos el templo ¿te parece?. Respondo al monje a su pregunta de donde encaminarnos a lo que el monje responde afirmativamente. En cuanto a la pregunta de la cazadora repondo. Pues, Shaanila, yo creo que lo mejor que podriamos hacer sería quedar sobre las 9 de la noche para ir a ver al principe y mientras podriamos visitar la ciudad o lo que queramos hacer y la mision la comenzariamos mañana, en el supuesto de que nos la den claro. Digo mientras espero a que acaben de comer y nos dejen sitio a Lyu y a mi.

¿Qué os parece la idea?. Reservamos unas habitaciones ahora para pasar la noche aqui y mañana dirigirnos en pos de la aventura, la fama, el dinero y la destruccion de todo mal. Digo haciendo grandes aspamientos y fingiendo un tono como de narrador de historias epicas para este último trozo, mientras sonrio.

Tras arrancar con los dientes lo poco que queda de carne en el poyo, limpio el plato con un trozo de pan, y vaciando de un trago lo que queda de cerveza me dirijo al Paladín, y, mientras me chupo la grasa de los dedos sin ningun en un alarde de compostura y "saber estar", le digo:

Me parece estupendo, a las 9 en la puerta de la casa del príncipe, si todos están deacuerdo. Voy a reservar mi habitación mientras decidís.

Toda vuestra, - esto último lo digo dando una palmada en la silla, tras recoger mi arco, mi mochila y mi carcaj, y esbozando una sonrisa hacia Lucian y Lyu, en un intento por ser amable para compensar mi actitud anterior - buen provecho.

Me dirijo hacia la barra, y sin esperar a que venga a tomarme nota, llamo la atención del posadero.

¡Posadero! Por aquí por favor. Me gustaría reservar una de las habitaciones sencillas para esta noche, le dejo el pago por anticipado, pues puede que vuelva tarde y marche temprano.

Tras dejar las monedas sobre el mostrador, dando por hecho que todo está en orden, me vuelvo hacia la mesa.

¿Y bién, que habéis decidido? Yo ahora mismo pensaba ir a echarme un rato en algun lugar fresco y tranquilo, si es que lo hay, y si no a explorar un poco la ciudad... ¿Alguien se apunta?

Sonrío nuevamente. Obviamente, la fría exploradora se vuelve alguien bastante más agradable cuando se toma una buena jarra de cerveza, aunque eso no consiga arreglar del todo sus modales...

-Bien a mi tráigame también pollo asi como lo a ordenado mi compañera y un par de vasos con vino, será agradable refrescarme la garganta – Dice acomodando su mochila entre sus piernas y su bastan alado reposado en su cilla mientras ve todo el espectáculo de saltatrampas. De repente entre todo lo que pasa olle claramente como Shaanila le pregunta a nuestro encapuchado amigo que por que no habla – Debe de ser, tal vez, un boto de silencio por alguna promesa? .. Ó tal vez es mudo? .. a lo mejor .. nooooo, a lo mejor, un Elemental de hielo o de las tormentas venerable lo ataco de bebe y le iso cosas feas .. NOOOOOO! .. si fue así por que no estuve presente, por la magia de Boocop por que, por que !!!!!!!!!– Exaltándose bastante cuando empezó a hablar del elemental, cuando termino de hablar solo se quedo sorprendido y callado e inmediatamente después disculpándose – Em, disculpen, jeje .. porque no vamos después de comer a visitar el templo y si por que no husmear la ciudad un poco – dice ya tranquilo esperando su comida.

Tan pronto como Shaanila me cede su lugar yo me siento y empienzo a comer. Mientras lo hago oigo como maxwell desvaria sobre tormentas y rayos lo que me hace pensar. Este tio está como una regadera o eso, o tendré que tenerlo más controlado no sea que se pase de la raya.

Mientras termino de comer oigo com Shaanila pide una habitacion y nos dice lo que quiere, a lo que yo le respondo. Si me esperas, yo me apunto a eso de explorar la ciudad. Despues de decir esto miro a Lyu y le digo, esperando que lo entienda. Lyu a ser cierto hoy no me apetece mucho ir al templo, además no es de mi deidad patrona, pero si mañana tienes ganas de ir, podriamos ir antes de partir en pos de la aventura o incluso despues de ver al principe también.

Tan pronto acabo la cena recojo mi arma y las piezas de mi armadura junto con mi mochila y me petate y le pregunto al mesero. Si aun te quedan habitaciones sencillas me gustaría tener una para el mismo plazo que mi compañera y lo más probable esque haga lo mismo que ella asique tenga el pago por adelantado. Tras decir esto le pregunto al mesero. Si tiene la habitación que he pedido, ¿me podria decir cual es, y dejar todas mis pertenencias con la salvedad de que estarán a buen recaudo?

  Ante el comentario de que habia sido muy escandaloso la mire con desconfianza pero guarde mis palabras. 

Al menos yo hice algo al respecto.. Penso, el siempre habia creido que las mujeres no servian para la guerra.

  Ante los comentarios de Maxwell hizo algo que no lo habian visto hacer JAMAS. Sonrio.

  Al muchacho los modales no le molestaban. El habia vivido una vida, algo diferente. El encapuchado se saco la mascara y bebio todo el vaso de leche de un trago. Luego comio todo lo que pudo de la comida corriente. Tomo los huesos de pollo de los otros platos y los junto todos en uno. Salio afuera y cuando regreso no llevaba ni los huesos ni la otra comida comun. Y el vaso de leche estaba vacio. Deposito todos los utensilios en la mesa y mirandola a Shaanila asintio con la cabeza Se señalo a sigo mismo y señalo afuera. Luego se marcho por la puerta. Sin decir nada.

Lyu esperaba como el Paladín a que alguno de sus compañeros acabase para tomar asiento, finalmente Shaanila es la que acaba primero y cede el sitio, el Paladín en un alarde de caballerosidad se sienta y pide comida, mientras escucha la idea de dar una vuelta por la ciudad lo cual le cambia de opinión de acompañar al monje al templo.

El monje recibe las palabras algo molesto, pero no transmite su mal estar todo lo contrario sonríe y agacha la cabeza en un gesto de saludo y que está de acuerdo.

 - Bien, entonces me acercaré yo solo. Hemos quedado cuando haya caído el sol delante de la casa del príncipe, allí estaré...

Sin más se gira y se marcha de la posada, dirección hacia el templo.

No tarda mucho en preguntar como llegar a algún transeúnte...

Os dirigis todos a vuestro destino, las horas pasan y llegan las 9, os encontrais todos en la casa del principe, en la calle. Se trata de un edificio de dos plantas bastante ancho y bastante alto, de su chimenea sale bastante humo y podeis ver en la parte de atras de la casa un hermoso y amplio jardin con arboles frutales y flores.

La puerta de la casa esta abierta y tiene un cartel bien grande: Por favor, pase, sea bienvenido a mi hogar. Decidis entrar; el interior de la casa es muy luminoso gracias a un gran numero de antorchas colgadas en las paredes, ademas, la claridad del sol inunda el primer piso completamente; una alfombra enorme de gran calidad adorna el suelo de la entrada, asi como varios escudos y espadas, las paredes; podeis ver a la izquierda un enorme ventanal asi como una puerta de madera.

A la derecha, veis lo que parece ser una sala de entrenamiento de un guerrero

En frente de vosotros al principie sentado en una hermosa silla.

El principe al veros se levanta con elegancia de su asiento y se inclina levemente.

Hola extranjeros, creo no haberos visto con anterioridad, sed bienvenidos a mi casa, espero poder seros de ayuda, ¿que os trae por aqui.