Partida Rol por web

El Convento [+18]

Acto I: Capítulo 1º "El ocaso"

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08/07/2020, 12:27
Director

El capitán tras el aviso se muestra visiblemente nervioso y mientras toda la unidad os preparáis con vuestros equipos, él revisa un mapa de la ciudad de Madrid que previamente ha descolgado de la pared y ha puesto sobre una amplia mesa que tenéis en la sala de descanso. Traza una línea desde vuestro punto a otro que no alcanzáis a discernir cual puede ser pero que a simple vista calculáis que debe estar a unos diez kilómetros de vuestra posición. Tras ello se acercó a un teléfono de la centralita y llamó a un número que parecía saberse de memoria y tras unos segundos de conversación colgó de nuevo.

Cuando ya todos estabais listos el capitán hizo lo propio y separó su unidad en tres equipos. García, Hervás, Almeida y Díaz serían el equipo Alfa. Martínez, Yuste, Antúnez y López serían el Bravo y por último, él junto a Domingo, Córdoba y Sáinz serían el equipo principal de la operación. Se había rodeado de sus mejores hombres a excepción de García que lideraría el equipo alfa. 

La operación era sencilla, debíais ir a un edificio determinado y pese a que dos o tres veces se preguntó cual el capitán no quiso determinar del todo el sitio, solo que era grande e iba a necesitar que el equipo Alfa tomase la zona este del mismo y el Bravo haría lo propio con el lado oeste del edificio. Comentó que la situación en la ciudad debido a numerosos disturbios no iba a ser fácil por lo que es posible que tuviesen que ir por rutas secundarios y no la principal hasta el lugar indicado.

Ya en la furgoneta el equipo Alfa y el equipo Bravo estaban frente a frente mientras que el equipo del capitán iba en otro furgón que se podía ver claro frente a vosotros.Federico iba conduciendo, como de costumbre, vuestro vehículo y tenía abierta la trampilla que comunicaba la cabina del conductor con la parte trasera. La conversaciones son más o menos como siempre aunque la reacción de vuestro capitán os tenía ligeramente desconcertados. 

El camino se torna tranquilo, hay alguna sirena a lo lejos pero nada fuera de lo común cuando hay disturbios. Por suerte, recorréis calles menos transitadas por lo que el tráfico no es un gran problema pese a que hay más vehículos de lo normal por ellas. Tranquilo, Feederico sigue la estela del otro furgón y al cruzar una esquina algo capta su atención. Una inmensa columna de humo se dirige hacia el cielo a unos escasos cien metros de vuestra posición. Allí varios vehículos arden, no sabríais decir desde vuestra posición si se trata de tres o cuatro coches, pero un aparatoso accidente corta la calle. 

La radio suena, es la voz del capitán, y os indica que deis media vuelta y toméis la calle paralela a esta en la siguiente salida. Federico da el afirmativo y comienza a maniobrar hasta que se fija en algo. Una pequeña masa de personas surgen desde las llamas, todas ellas ardiendo y haciendo imposible que alguien pudiese aparentar esa normalidad cuando su cuerpo está ardiendo casi por completo. El vehículo del capitán os sobrepasa y Federico puede ver como el conductor le reprenda que no haya tomado ya su camino. Aún impactado por lo que ves la radio habla de nuevo.

- Los bomberos ya han sido avisados, Martínez, de media vuelta y siga su camino, joder.

Confuso Martínez da la vuelta y sigue al otro furgón que ya está a unos cincuenta metros delante suya, girando hacia la derecha cuando un enorme camión arrolla el otro vehículo y hace que este se desplace unos quince metros en dirección opuesta a la que se dirigía mientras el camión del impacto pierde el control y choca contra un comercio local en la acera contraria. El copiloto, Almeida, trata de contactar por radio pero nadie responde. Tras ser informada, la sargento García da orden de despejar el vehículo y socorrer al equipo del capitán ¿estarían bien?

 

 

Notas de juego

Podéis poner en en vuestro post si comentáis algo durante el trayecto antes de lo que queráis hacer en la situación actual.

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08/07/2020, 13:35
Mónica García

Ser testigo de la actitud del capitán, entre el recelo y el secretismo, me dio mala espina. 

Me mantuve la gran parte del viaje en silencio, cavilando. Los repentinos disturbios, la localización desconocida a la que nos dirigíamos... No me gustaban las incógnitas, aunque uno se tenía que acostumbrar por cojones a ellas en esa línea de trabajo.

Al detenernos termino aproximando el cuerpo a la trampilla para echar un vistazo a aquello que hubiera más allá del salpicadero y el parabrisas. Observé el incendio con los ojos entornados, pero todavía más destacable que los vehículos ardiendo era aquello en lo que Federico había reparado: los civiles en llamas y caminando como si nada. ¿Estaba viendo bien? 

No obstante no dispuse de tiempo suficiente como para comprender la situación en su totalidad. El furgón del capitán se nos adelantó a la hora de cambiar la ruta y no podíamos quedarnos atrás, hecho que el susodicho no dudó en recordar a nuestro conductor.

Entonces... el feroz accidente que se llevó el vehículo aliado por delante. Me quedé con los ojos como platos al presenciar tal colisión, impresionante tanto a nivel visual como sonoro. Almeida trató de contactar con ellos, sin éxito.

¡Mierda! —escupí a viva voz.

Una operación sencilla... sí, desde luego.

¡Equipo Bravo, comprobad el estado del conductor del camión! —ordené de inmediato—. ¡Alfa, aseguraremos el furgón del capitán! ¡Martínez, salimos! ¡Vamos, vamos, vamos! 

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08/07/2020, 15:43
Diana Yuste

-¡Si Señor! - dijo contestando a su superior -  ¡Vamos, vamos, vamos! Ya habéis oído a la sargento, veamos como está el compañero. 

Sin mediar mas palabra saco entre sus manos su MP5 y abrió de un solo empujón el portón lateral del furgón para saltar fuera, antes de andar hacia la puerta miró a ambos lados asegurando que no hubiera nadie en las inmediaciones mientras esperaba que el resto de sus compañeros fueran bajando.

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08/07/2020, 15:55
Federico Martínez

Federico había saltado con la misma celeridad que el resto de sus compañeros a la hora de prepararse, pese a ello cierto es que estaba tan tranquilo como cualquier otro. La mirada y el secretismo del capitan no le indicaban a el nada mas que lo de siempre. Una misión de rutina, probablemente unos mafiosos o unos manifestante algo mas descontrolados que de costumbre.

Durante el camino iba mascando un chicle.

- Entonces... Diana ¿Alguna peli buena ultimamente?

Como dirian en su barrio, estaba en el trabajo, pero "con la calma". Calma que duró poco cuando vieron los coches incendiados. Al capitan le dieron las prisas y todo sucedió muy rapido. Un camión salió arroyando el vehiculo del capitan.

- ¡¿Que coño?!

Espetó al tiempo que daba un frenazo en seco. Joder... ¡Mierda! Pusó el freno de manera instintiva sin apagar el motor y bajó a la carrera acercandose al lugar del accidente.

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10/07/2020, 15:55
Alberto "Kid" Hervás

Alberto no había dedicado mucha energía mental a la situación de aquel día en la ciudad. La gente siempre tenía algún motivo para apalizarse, y de todos modos eso era trabajo de los antidisturbios, ¿no? 

Aunque aquella misión era un poco rara. Durante el trayecto, había tratado de alegrar el ambiente, describiendo con todo lujo de detalles una peli que había pillado el otro día en un canal secundario. 

-...y entonces agarra a la chica y¡HOSTIA PUTA!- el atropello y posterior frenazo cortó en seco su perorata. 

¿Pero qué pasa hoy? 

Tras oír a "la jefa", dedicó un segundo a asegurarse de que llevaba todo lo necesario encima, como buen agente entrenado (que en alguna ocasión se ha llevado un berrido por no darse cuenta de que le faltaba el walkie), y salió a toda velocidad por el portón detrás de Diana. 

 

 

 

 

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11/07/2020, 11:41
Director

Gracias a la sargento ambos equipos cumplen su función. Alfa se posiciona en los alrededores del furgón que está parcialmente destruido por su frontal y empotrado contra una acera. A lo lejos, por la dirección donde venía el camión se ve un pequeño tumulto de gente, seguramente algunos de los que causan disturbios, lejos, a unos ciento cincuenta metros. El camión no parece estar mucho mejor. La cabina ha recibido un brutal impacto contra el furgón, pero tras ello y empotrarse en una tienda cercana había un humo negro que salía desde su frontal. La puerta comienza a moverse, como alguien que desde dentro intenta abrirla sin suerte. Antúnez, el más servicial de todos se acerca hasta la puerta del vehículo y tras dos fuertes tirones consigue abrirla. De la cabina baja un hombre en mal estado, debido seguramente al accidente, con la ayuda de Antúnez que grita a voz pelada hacia la sargento. 

- Está vivo, señora. Necesita atención médica urgente o... 

No tuvo tiempo de decir más mientras ese hombre, apoyado sobre su cuello parece hundir sus dientes sobre la carne del policía. Antúnez por instinto lo deja caer al suelo dando el hombre contra el suelo y escuchando como al menos un hueso ha debido partirse. 

- ¡Joder, este cabrón me ha mordido! 

La cara de preocupación del policía es evidente cuando ve al hombre en el suelo. Seguramente ese hombre esté en shock y lo ha dejado caer sin más pese al mordisco. Se inclinó de nuevo hacia el hombre pero este parecía poder moverse por si mismo pese al accidente y la caída. La cara del policía cambia de preocupación a incredulidad y da un par de pasos hacia atrás por inercia mientras cruzaba miradas con la sargento hasta que desvió sus ojos hacia la calle por donde venían los disturbios y la mirada se le heló.

Mientras tanto el equipo Bravo había forzado la puerta del furgón trasero. Los dos hombres estaban aparentemente muertos y tras un rápido vistazo de Yuste a los cuerpos éste niega con la cabeza indicando que sus compañeros ya eran cosa del pasado. Por su cuenta, Martínez había ido directo al asiento del copiloto donde estaría el capitán. Por suerte era el lado contrario al del impacto y con algo de fortuna estaría vivo, algo que Fede descarta al instante del conductor debido al estado de su lado de la cabina. 

El capitán, sangrando con abundancia de la cabeza y con gestos visibles de dolor en su cara parece estar aún vivo. Cuando ve a Fede abrir la puerta sus ojos se clavan en los del calvo y con una mano lo aferra de su uniforme.

- Martínez... - dice con apenas un hilo de voz. - Vayan al convento San Lázaro. Vayan, o esto será imparable. Dígaselo a García.

Tras ese último momento, el capitán parece perder la consciencia y Fede, revisando sus heridas ve que necesita ayuda inmediata. Pide ayuda por la radio, una ambulancia pero no parece haber respuesta. Tras insistir varias veces sin respuesta, Federico decide presionar la herida más visible pero sabiendo tras unos segundos que ya era en vano.

Con la cara descompuesta, sus compañeros tras ver lo ocurrido parecen desorientados hasta que levantan la vista hacia donde miraba hasta entonces Antúnez.

Aquella masa de protestantes se hacía más y más grande y aunque el grueso de la misma estaba a más de cien metros todavía, había cerca de cuarenta personas que corrían hacia vuestra dirección a menos ya de ochenta metros. Solos no ibais a poder contener a tantos "manifestantes", además de que no era vuestro trabajo. Debíais tomar una decisión rápido ya que tras nuevos intentos por el equipo nadie respondía a las llamadas por los walkies. El convento estaba cerca, a unos dos kilómetros si rodeais a la gente que viene hacia vosotros. 

De pronto, una explosión enorme a vuestras espaldas os hace encogeros levemente y llevar la vista hasta una inmensa columna de humo que proviene de una de las calles por donde habíais venido.

- ¿Por allí no había una gasolinera? No me digas que... - dice López esperando que no tuviese razón. Pero la tenía.

- ¡Maldito cabronazo! - Antúnez tenía a el hombre del camión aferrado a su muslo y tras un alarido de dolor el policía cae al suelo lo que facilita que el hombre llegue hasta su cara y comience a morderla con vehemencia. 

- ¡Quitadme a este hijo de...! - y tras eso un gorgojeo apaga sus palabras.

Notas de juego

Vale, todo lo ocurrido lo sabéis todos, ya sea por cercanía o porque Fede haya contado al resto lo ocurrido, me da igual como prefiráis hacerlo. Tenéis libertad de movimiento, podéis quedaros o ir hacia el convento.

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11/07/2020, 16:33
Mónica García

Fui la última en salir de la parte de atrás del furgón. Llevaba en las manos, bien afianzada, mi MP5. A la par que los dos equipos se aproximaban a sus respectivos objetivos, yo no me quedé atrás. Me mantuve a la espera en un punto medio entre ambos accidentes, para tener una visión perimetral del lugar y estar atenta a todo lo que transpiraba en ambas situaciones.

En primer lugar desvié la mirada hacia el tumulto de individuos a lo lejos, entornando nuevamente los ojos. Aquello no tenía buena pinta, ¿qué estaban haciendo los antidisturbios? «No importa, ahora mismo tenemos otras cosas de las que preocuparnos...», me dije.

Acto seguido observé a Antúnez, que había logrado sacar al conductor del camión. Aseguró que seguía vivo, lo cual habría sido una excelente noticia si no le hubiera pegado un bocado. El cuerpo se me tensó de manera inconsciente.

¡Antúnez! ¿Está bien? —pregunté a viva voz para que me escuchara.

El camionero debía de haber quedado más que afectado como para hacer algo así. Dejar caer al tipo de aquella manera era una clara negligencia por parte del agente, pero no podía juzgarlo teniendo en cuenta el mordisco y las circunstancias. Sin embargo, la mirada de Antúnez me aseguró que algo iba mal. ¿Qué demonios le pasaba a ese sujeto? ¿Estaría drogado?

Martínez solicitó una ambulancia por radio, lo cual no era buena señal. Pero más perturbante aún que ese hecho fue que no recibió respuesta. Inspiré con fuerza. Sentía que la situación se estaba yendo fuera de control, y cuando eso ocurre... que tenga lugar una desgracia es cuestión de tiempo.

Traté de ponerme en contacto con la central por el walkie, pero no hubo manera...

Entonces los vi... muchos más que antes, corriendo directos hacia nuestra posición. No debería de haberlos ignorado cuando los divisé por primera vez. La piel se me puso de gallina al ser consciente de lo que se nos venía encima... 

¡Todos de vuelta al furgón! ¡YA! —vocifereé por la radio a ambos equipos, la urgencia bien patente en mi voz.

La explosión ya resultó ser la guinda sobre el pastel. Primero me giré cual resorte y entonces observé, incrédula, el pilar de humo. Pero aquello me duró poco, ya que los gritos de Antúnez captaron mi atención. Ese cabrón estaba encima de él, como un salvaje. 

¡Joder, Antúnez!

Eché a correr hacia los dos con la intención de quitarle de encima al camionero con una patada al torso del susodicho. Si ese tipo se había puesto hasta arriba de algo —lo cual explicaría el accidente— ya no importaba, había cruzado una línea muy fina. La salud de mis hombres era lo primero.

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12/07/2020, 01:32
Alberto "Kid" Hervás

Las radios no funcionaban y Alberto podía ver que aquellos "manifestantes" estaban cada vez más cerca. La explosión no hizo sino añadir a su confusión mientras vigilaba el perímetro del camión.

Además, los del otro equipo decían que los compañeros del furgón habían pasado a mejor vida y que las últimas palabras del capitán habían sido ordenar que siguieran hasta un convento. ¿Qué puede estar pasando en un convento, como no sea que las monjas se hayan puesto también en pie de guerra?

Estaba a punto de preguntarle a la jefa si en serio íban a dejar allí tirados los cadáveres de los compañeros cuando de repente vieron que Antúnez caía, y se lanzó él también a quitarle a aquel flipado de encima, a hostias si era preciso. 

Notas de juego

 

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12/07/2020, 23:00
Federico Martínez

Joder... joder, joder... Aquello se estaba saliendo de madre. ¿Que coño les pasaba a esos en la cabeza? En 0, se estaban viendo rodeados de una caterba de gente que no sabía si es que salían de una rave muy mala o que, pero no era seguro.

Aun a pesar de la orden de Monica, su primer reflejo fue ir a ayudar a Antunez, pero cuando vió el mordisco y la cantidad de sangre, sabía que ya estaría fuera de toda ayuda antes de que llegaran y sus vidas eran las que estaban en peligro.

A mitad de carrera agarró a Alberto por la cintura dandole un tirón para pararlo y obligarle a volver.

- ¡Al coche, coño, al coche! -señaló la horda de manifestantes que se acercaban- ¡O tendras que prepararte para salir a tiros! ¡Al coche!

Dicho esto emprendió la marcha al furgón tironeando a Alberto*.

Notas de juego

*Esto ultimo solo si Alberto presenta resistencia.

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13/07/2020, 08:50
Diana Yuste

Estaban rodeados, sus compañeros fueron a socorrer un cadáver. No hacía falta acercarse para entender que ese camionero había matado a Antunez.

Siguió asegurando la posición, alguien tenía que hacerlo ya que la turba cada vez era mayor y cada segundo iba a ser oro para poder salir de allí.

- ¡Sargento! Les tenemos encima, vuelvan.

Gritó a sus compañeros que, de forma pasional, habían tratado de ir a frenar al camionero. 

Todo estaba fuera de control, solo se veía gente y gente andar hacia ellos y algunas columnas de humo en el horizonte. Algo muy extraño estaba pasando, había visto manifestaciones y revueltas pero esta era muy extraña. ¿Donde estaban los antidisturbios? ¿Y los bomberos?

Sacó su pistola del bolsillo y sin dudarlo pegó un tiro al aire esperando que esa gente dejara de caminar hacia ellos, al menos esperaba que dudaran unos segundos, lo suficiente para que todos pudieran montar en el furgón y no lamentar mas bajas.

Pero no esperó parada la reacción, por fin estaban todos volviendo al furgón y ella, protegiendo el camino con su MP5 hizo lo mismo. 

- ¡Vamos señores! Espero que ese disparo nos de unos segundos pero si no nos vamos no podremos ni salir de aquí. 

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15/07/2020, 13:33
Director

La sargento se lanzó en la ayuda de su compañero que aún se removía bajo el sujeto. La patada hizo que el camionero cayese al lado de Antúnez, a un metro de él. La cara de vuestro compañero estaba ensangrentada, llena de agujeros hechos a dentelladas y ninguno de vosotros daba por seguro que pudiese salir con vida tras perder tanta sangre si no recibía ayuda inmediata. Esa que no podíais conseguir. 

Hervás por su parte fue detenido por Fede en su avance dado que la fuerza del segundo es superior y Alberto tampoco puso mucha más resistencia. Ahora estaba en manos del joven policía y de la sargento si hacían caso o no a sus otros dos compañeros. Diana, tras el disparo no esperó la reacción pero pudo ver como algunos siguieron el sonido y apresuraron la marcha. Los primeros ya estaban a escasos cuarenta metros de vosotros. El resto de policías revisaban la zona en busca del origen de la explosión y si podían hacer algo por los cuerpos del resto de compañeros. 

Preocupados por lo que tenían delante los policías no repararon en su espalda. Los cuerpos en llamas del accidente estaban llegando al furgón y sin poder reaccionar uno de vuestros compañeros cayó al suelo, también atrapado por dos de esas personas en llamas. 

El tiempo apremiaba y el furgón no iba a tardar en ser inaccesible por lo que era hora de decidir de una vez que haríais. Si escapar de allí rumbo a la comisaría, ir al convento como se os ordenó o quedaros e intentar ayudar a los compañeros caídos.

Notas de juego

Podéis postear libremente, no me esperéis salvo que sea una acción importante dentro de la trama. Si disparáis a alguno de los manifestantes podéis hacerlo al cuerpo con dificultad 10 o a la cabeza con dificultad 15. 

Diana, resta una bala a tu cargador del arma.

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15/07/2020, 15:40
Mónica García

Contemplé, incrédula, el estado de Antúnez. El disparo me hizo desviar la mirada en busca de su lugar de procedencia, aunque esto perdió importancia cuando caí en la cuenta de lo cerca que teníamos a la turba de "manifestantes". Era oficial y definitivo: habíamos perdido el control de la situación. 

Disponía de escasos segundos para decidir el curso de acción a tomar. Era terrible, pero debían salir de allí cuanto antes, aunque eso significara dejar atrás a los agonizantes...

Corrí sin mirar atrás, directa hacia el furgón. 

¡Todos al furgón! ¡AL FURGÓN! —grité. Ni me molesté en utilizar la radio, en esta ocasión exclamé a viva voz.

Entonces me percaté de los que ardían, que se habían aproximado a nuestra posición lenta pero inexorablemente. En todos mis años de servicio jamás había visto algo así. Parecía una mala pesadilla. Pero no desaceleré... si nos quedábamos allí, íbamos a morir todos. La desventaja numérica era demasiado pronunciada.

Tan pronto pudiera me metería por las puertas traseras del vehículo a la espera de los demás.

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16/07/2020, 18:28
Federico Martínez

Con un ultimo empujon a Alberto, Federico corrió al asiento del conductor.

- ¡El cinturón a la de ya!

Gritó al tiempo que hacía rugir el motor sonoramente dando un ultimo aviso a los rezagados. Esperaría lo que pudiera, pero no iba a ser mas de medio minuto. Hizo sonar el claxón dos veces y metió primera ya preparado para emprender la huida.

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17/07/2020, 11:15
Alberto "Kid" Hervás

Alberto se había debatido inútilmente -¡Joder Yunque suel-ta-me-co-jo...nes- hasta que vio que su compañero ya no tenía salvación y se quedó quieto. 

Y de repente estaban rodeados de flipados en llamas. Vio con horror caer a otro. Aquello sobrepasaba su capacidad defensiva, por muy armados que fueran. En cuanto oyó a García, corrió hacia la furgoneta y subió a ella.

 

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20/07/2020, 00:56
Federico Martínez

En el momento en el que el ultimo de los policias subió al furgón Federico hizo rugir el motor una vez mas y salió escopetado tratando de trazar una ruta alternativa hacia el convento y esquivando a los que se interponian en la carretera. Sin apartar la vista de la carretera alcanzó la radio con una mano y la activó con un sonoro sonido de estatica.

- ¡Furgón GOE-002 a Central! ¡Furgón GOE-002 a Central! ¡Nos vemos bajo ataque, hemos sufrido bajas! ¡Respondan!

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20/07/2020, 15:11
Mónica García

Le di varios golpes a la pared del vehículo que nos separaba a los de atrás con la cabina del conductor para llamar la atención de Martínez. La adrenalina y la urgencia me llevaron a hacerlo con mucha más fuerza de la que habría amasado en una situación calma.

¡Martínez! ¡¿Qué cojones ha pasado ahí atrás?! ¡¿Cuál es el estado del capitán?!

Claro que, el hecho de que ahora no estuviera con nosotros me decía todo lo que necesitaba saber... pero aún así, requería de un informe. 

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20/07/2020, 16:11
Federico Martínez

Da un vigoroso derrape que hace que los que no estaban con el cinturon se muevan en sus asientos.

- ¡Ha caido! ¡Sus ultimas ordenes fueron llevaros a todos al convento de San Lazaro! Esta relacionado con esto, pero no le dio tiempo a decirme por que.

Vociferó a traves de la ventanilla de comunicación. Nuevamente llamó por radio a central.

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20/07/2020, 23:16
Diana Yuste

Diana no entendía nada. Esa gente no solo no se había asustado sino que encima el disparo había llamado más su atención. 

Escucho la conversación de su compañero con su superior, el objetivo era un convento. 

- ¿Cuáles son las órdenes señor? - pregunto entre todo el caos que había a su alrededor mirando a Mónica, deseando que el convento fueran sus órdenes. 

Allí estaban superados y nada iban a poder hacer.

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21/07/2020, 01:33
Mónica García

Me agarré a lo que pude para soportar el envite del derrape. Con las prisas se me había olvidado abrocharme el cinturón, algo que no tardé en solucionar.

El capitán ha caído, no podemos comunicarnos con la central ni los servicios de emergencia, no tenemos información sobre nuestro supuesto objetivo... —enumeré, cabizbaja—. Y necesito que me confirmen que han visto lo mismo que yo... el jodido conductor del camión se ha "comido" a Antúnez... he visto a civiles ardiendo pero caminando como si nada...

Escuché la pregunta de Yuste, lo que me llevó a alzar la mirada y examinarla a ella, así como a los pocos que habíamos logrado escapar en el vehículo. Volví a darle unos toques al metal, aunque en esta ocasión más suaves.

Martínez, ponga rumbo al convento —ordené—. Seguiremos las instrucciones del difunto capitán.

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21/07/2020, 12:02
Diana Yuste

Diana miró a Mónica, normalmente estarían en el furgón hablando de sus cosas pero en ese momento no tenía ganas de decir nada.

Su superior preguntó y ella se limitó a contestar:

- Si, todos lo hemos visto. Ese puto camionero se ha comido a Antúnez y cientos de personas se estaban quemando pero andaban como si nada y para remate, disparé al aire para daros unos segundos, que se dispersaran pero en vez de eso, llamé la atención sobre nuestra posición a muchos más. - miró unos segundos a su arma - No se que coño le pasaba a es agente pero señora, he visto muchos disturbios, he vivido hasta atentados pero nunca antes había visto comportamientos tan extraños como esos. 

No iba a dudar un solo segundo en apretar el gatillo para completar su misión, pero vio a Mónica preguntarse si se estaba volviendo loca o habíamos visto todos lo mismo y la única forma de apoyarle que se le ocurría era confirmar que estaba en lo cierto y sus ojos no le habían engañado.