Partida Rol por web

Los muertos se alzan de sus tumbas y se disponen a cobrarse su venganza...

 Ya-aagh, un zombie de casi 3 metros de altura, se levanta y empieza a husmear a su alrededor

-hambre- gruñe

GRRRRRRRRRRRRRRRRRRrrrrr - Camino agazapado - GRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRRR

Oh, padre. ¿Otra vez?

 —Hmprfffghhhh

Esto podría interpretarse como un vocablo de zombi, con la garganta destrozada e inarticulada. Pero no, los zombis de verdad se comunican. Es un fallo de las películas el suponer que no. Puede que no sean grandes oradores, por esto de que sólo piensan en sesos, cerebros y demás; pero hablan. Este terrible vocablo, que simula ser sacado de alguna oscura página de un texto perdido de Lovecraft, indica únicamente que Patrick Swayze estaba bostezando.

—Esto de la no-vida es un chollo, cojones, ya —dijo con acento maño.

Y es que... aunque en sus películas Patrick pareciese un hombre sensible y algo amanerado, aunque se hubiese creado una nube de mentiras en torno a su pasado para triunfar en Hollywood —habiéndose dejado una pasta en Euroschool y CCC— en realidad era un brutote salido de la más ruin tasca de Zaragoza ciudad.

Colegialas, quiero colegialas, Schools out for summer Gria cooper, al mejor estilo metalero de los viejos tiempos. Podrimaos montar una horca y colgar a alquien

Deambulando por las calles, aparecio el cadaver de Mr. Murray con los brazos en alto y gimiendo un - Aaaaah! - un friki se acerco ilusionado al ver al protagonista de los cazafantasmas y corrio a su lado para pedirle un autografo sobre el manual de D&D, pero cuando Mr. Murray quiso firmarle en el centro de la cabeza, se asusto y se aparto haciendole el Hadouken. El golpe hizo caer de culo al zombi permitiendo que el chico se alejara huyendo.
El cadaver se levanto y extendiendo los brazos siguio su paso adelante buscando un nuevo cerebro con el que saciar su dolor.

 AAAAAAAAHGGGGGGGGGRRRRRR!!

-Yo... hambre.... ahora.... después... luego.... siempre...-Jose camina por las calles con los brazos extendidos en típica postura zombie buscando algo más de comida. Al ratejo se encuentra con dos enamorados en un parque, se acerca a ellos: Yo... comer... vuestros.... bocadillos de atún y chorizo.

Se escucha el inconfundible y aterrador arrastrar de pies ... una figura desgarbada, con la cabeza tan agachada que parece arrancada del cuello y colgara por la espina dorsal visible en una masa de sangre coagulada y gusanos.

El pie izquierdo se entierra ligeramente sobre la arena humeda mientras avanza a pasos cortos, un sonido gurutal brota de lo que anteriormente fuera su garganta, haciendo recordar a los cantos gregorianos. Cuando está a punto de llegar a un area pavimentada, da media vuelta y sacando de su bolsillo unas semillas, las va dejando sobre la zanja recien abierta...

-"Zanahorias para la vista, tomates para la circulación, lechuga para la piel tersa"-

Quien dijo que el movimiento Punk había muerto se equivocaba. Al menos en parte.

Un zombie renqueante se acerca a una pared con un spray en la mano.

La joven se revolvió en su lecho, como si hubieran pisado su tumba. Bueno, la verdad es que su lecho era una tumba poco profunda, así que se podría decir que sí, habían pisado su tumba. Al parecer era el momento del alzamiento. Ya era hora. Salió con dificultad, escupiendo arena y atusándose el pelo. Ya fuera, se arrastró hacia un charco cercano y observó su reflejo.

 - Mierda, siempre pasa lo mismo.

Volvió a la tumba, renqueante. ¿Dónde diablos había dejado su nariz?

Los planetas se habia vuelto a alinear, abriendo el portal entre los mundos y Bozo, el payaso triste deja su tumba para recorrer  una vez mas las calles de Arkham.

- Ahhhh...

Dijo el carismatico payaso en la jerga de los zombies.

- C-e-r-e-b-r-o-s.

Una figura de orondez mórbida e infame aparece bamboleando unas caderas desencajadas y haciendo sonidos y movimientos obscenos con su lengua de cuarenta centímetros.

Sardá, Sardá....... brl brl brl... Ay, que bueno. Cuantos cerebritos me voy a meter p'adentro. Ay... en to' lo alto.

Soy rubia y estoy divina de la MUERTEEEEEE!! Si me dejas te daré un mordisquito... ummmmmmmm que rico

De una pequeña tumba, al lado de un costal de huesos y unos sables dañados aparece esta figura, pequeña y muy baja como un niño pequeño, de color verde, orejas puntudas, y piel en estado de descomposición.

Cierto es, dice con una voz grave

Sí la fuerza querer encontrar, cerebros respuesta dar.

Dice mientras camina a pasos lentos.

Practicar necesario es, para Padawans Zombies,

Sí  Jedizombies querer llegar a ser.

  Jose Luís despierta en plena oscuridad y comienza a palpar algo que parece rodearle...pero que coño!!...en un ataque de angustia sin igual comienza a dar patadas y puñetazos a aquellas paredes asfixiantes. En una de esas, la tabla a sus pies cede y con ello el marmol que tapara el supuesto nicho, puesto apenas una semana atras.

 Desde que se levanto el enorme zombie un montón de putrefactas criaturas han empezado a aparecer. Ya-aagh los observa con hambre, entre la asquerosa miasma de putrefacción le ha parecido oler algo, carne viva y sangre cálida ¡vivos!, ¿pueden haber vivos entre semejante turna no-muerta?

-Hambre-

Perezosamente, una chica de cabello negro vestida de enfermera sexy, con la bata más corta de la historia de la Sanidad, se abre paso por entre la tierra. Primero saca los dedos, que escarban intentando abrir un hueco más grande, cuando consigue sacar las dos manos, con las uñas llenas de tierra pero que aún se puede ver el bonito esmalte rojo rubí que le pusieron en el Tanatorio, luego saca los brazos y la cabeza (no necesariamente por ese orden). Bostezando y entreabriendo los ojos lechosos, consigue emerger la mitad de su cuerpo, la más interesante tal vez. Mira a su alrededor.

-Fieshhttaaaaaaaa!!!- intenta sacar algo del agujero mugriento donde la aparcaron hace... bueno, no sabe muy bien cuanto hace porque para eso supondría que tiene alguna consciencia del tiempo y bueno, a tanto no llegamos... Bueno, a lo que ibamos, Celeste se pelea con la tierra que la aprisiona para sacar su "algo" más preciado, Prímula y Sonrisas. Lo primero es su gato zombie al que adora por encima de todo, y lo segundo, bueno, es un hacha, porque no se puede ser una enfermera zombie y no llevar consigo un hacha algo ensangrentada y llena de muescas. Quien diga que los zombies no pueden ser listos es que no conocen a la Enfermera Celeste!

Con ayuda de Sonrisas y Prímula, Celeste consigue liberar sus piernas. Sus ojos blanquinosos miran con enbobamiento sus medias blancas algo rotas, y comprueba que sus ligeros siguen extrañamente enteros.

Desde luego, quien la enterró de esta guisa era una cabrón machista, pero no importa, ella y sus medias rotas y bata corta vuelven a alzarse sobre el mundo de los vivos para reinvidicar los derechos de los No-Muertos a comer cerebros y llevar una vida no-muerta normal!

-Cerebros, Primula?- acaricia el lomo del gato pestilente, que tras soltar un maullido desencajado, se sube a sus hombros para instalarse cómodamente ahí, desde las alturas, y Celeste coge a Sonrisas y decide encaminarse al punto de reunión del Sindicato.

Un llanto rasgó el silencio del cementario. Aunque parecía que más que silencio lo que había era un gran número de chillidos y alaridos pidiendo cerebros o simplemente diciendo Arrrrrg, lo que sus mentes muertas les permitan decir.

El llanto venía de una niña vestida de rosa. Una niña que podría parecer normal si no estuviera llena de pústulas, apestara como un zombi que no se lava ni la vez al año de rigor, o si la cabeza, en vez de estar sobre el cuello, no reposase en sus manos. Pero se calma al darse cuenta de que está entre los suyos, desechos murientes-vivientes con sed de alimentos frescos.

-Oh, bien. Con un ejército así podremos comer muchos intestinos y cerebros. A ver quien es el vivo que tiene narices a no dejarse comer por nosotros.

La niña olfateaba el ambiente, para ver si olía algo vivo que echarse a la boca.