Partida Rol por web

El eco del Diablo

Los Devoradores de Sombra

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30/05/2016, 01:28
Director

CABECERA

 

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30/05/2016, 09:34
Director

Lo primero que sintió fue una sed que le habría hecho aullar si no fuera porque tenía la boca absolutamente seca.

Luego el agobio de estar encerrada, oprimida en su propio cuerpo. Y la oscuridad. Abrió los ojos y aun así no veía nada.

Había despertado tumbada dentro de un cubículo totalmente oscuro y muy estrecho. Con una pared metálica a pocos centímetros de cada lado de su cuerpo. Estaba encerrada en un cajón en el que apenas podía moverse.

Luego fueron viniendo otras sensaciones. Estaba desnuda y tenía mucho, mucho frío. Temblaba. Y el aire de ese lugar tan estrecho tenía un sabor desagradable, a formol, y se dio cuenta de que no estaba respirando y su corazón seguía parado.

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30/05/2016, 19:17
Leah Beth Tautou

Habia vuelto a quedar inconciente? Me desvaneci, me transporte, me dormí. Nada era claro.

Cuando tuve conciencia de mi existencia abri los ojos y no podia ver nada, estaba ciega. Quise gritar pero tenia tanta sed, tenia la garganta tan seca que me ardia siquiera respirar. Con mis manos sujete mi cuello tratando de calmar el ardor cuando me di cuenta que mis brazos chocaron con las paredes de algo. Extendi mis brazos y no podia.

Estaba en una caja o algo asi, no estaba ciega, simplemente no habia luz. Seguia desnuda, a oscuras y me estaba congelando. Mi cuerpo estaba entumecido y agarrotado por la falta de movimiento y el frio. Estaba respirando sumamente acelerada y sentia que mi pecho me dolía, me ardía, no podia respirar.

La caja era de metal y eso solo hacia el frio mucho mas insoportable, estaba temblando y trate de controlarme. (Tirada) Pero no podia dejar de temblar. No podia gritar, no podia hacer nada. Solo queria que toda esta miseria terminara. Mi piel se pegaba a las paredes de la caja y ni siquiera sudaba. El aire rancio como de formol no me dejaba respirar y sentia las arcadas normales por tratar de respirar.

Iba a volver a morir otra vez. Una y otra vez, que infierno es este, donde esta la niña, donde demonios estoy?

Seguía temblando y lo unico que podia hacer era golpear con mi piernas. Comence a dar patadas pero cada vez menos y con menos fuerza. Tal vez habre dado 5 u 8. Ya no podia pensar. Tenia mucho frio.

Me comence a mover mas lento para concentrarme. Mas lento y menos agitacion, conservar aire.

Eres una superviviente Leah, vas a salir de aqui. 

Me concentre y di una sola patada mucho mas fuerte. Luego varios minuto y otra. Tal vez hacia abajo o hacia los lados no estaba segura. Frio....

Me abrazaba con mis brazos pero ya me costaba moverme solo temblar... teeemblar.

Otra patada.

Como demonios vas a romper el metal. Trate de gritar y comence a patalear al mismo tiempo ya fuera de mi, desesperada, si control solo golpeaba y golpeaba con todas mis fuerzas en todas direccion mientras gemia. Estaba desquiciada, no podia pensar, no podia razonar, parecia un pez fuera del agua en sus ultimo segundos.

Exhausta me detuve y ya no podia moverme. Pero senti una lagrima. Y el frio.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Eres malo...  =P

Ya tengo frio.

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30/05/2016, 20:48
Director

La lágrima se detuvo en la mejilla. La tocó y estaba congelada, como si fuera de cristal. Su cuerpo no desprendía calor. No estaba respirando, y su corazón no latía.

De pronto, el cubículo cedió hacia abajo y se abrió hacia afuera, como pasa con los cajones cuando vuelcas un armario.

Y pudo salir, arrastrándose primero, caminando después, sintiéndose pesada. Corpórea. Demasiado corpórea: se diría que podía mover su cuerpo, pero no sentía que éste estuviera vivo. En la sala la luz era muy extraña, tenía un espectro de colores que no había visto antes.

Reconoció ese sitio a pesar de que lo infernal que parecía con esa luz. Era la morgue del doctor Benichou y ella había salido de una de sus cien cámaras refrigeradas.

De cada nevera se escapaba, por las juntas de su puerta, una pequeña llamarada, como un fuego fatuo poco violento, de color pálido, que era imposible de contener por la caja de metal. Cada nicho tenía su fuego particular, de un tono sutilmente distinto, azulado, verdoso, blanquecino, amarillo... Era un fuego frío, que no le calentaba.

Así en todos salvo en uno. Uno de los cubículos, a apenas un metro de altura, el número 43, desprendía por las juntas una llamarada más intensa, roja. Cálida.

Notas de juego

Has tenido éxito en la tirada. Hay modificadores nuevos. Todavía no los he puesto en la ficha, pero ya te los iré contando conforme tu personaje los descubra.

Sí que soy malo, sí... no creas que no me asusto yo también... pero las cosas pasan y los dados hablan... que le vamos a hacer...  >:-)

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31/05/2016, 05:04
Leah Beth Tautou

Habia abierto la caja y escurriendo por ella logre caer en el suelo frio de una habitacion extraña. Mi vision no estaba bien y todo lo miraba diferente pero todo era familiar. Di varios traspies mientras recordaba lo que era caminar. Mi cuerpo estaba entumecido, congelado, y moverme o incluso estirarme era un tormento y sin embargo estaba viva.

Lo estaba?

Note que mi cuerpo estaba demasiado frio para ser normal y no estaba respirando. No podia ser. Que me estaba pasando en que me habia convertido. Las cosas brillaban a mi alrededor de manera confusa, distinta, y solo el halito de los cofres que mantenian un extraño refulgor era llamativos.

El frio aun calaba en mi cuerpo y la sed se habia calmado pero tenia la garganta seca. El cuerpo seco. Mi piel estaba seca. Vi mi reflejo palido sobre algunos de los paneles de acero. Estaba asustada y ahora mas sin entender lo que pasaba pero podia moverme. Tenia mi cuerpo.

Era una pesadilla. La transicion de la muerte?

Uno de los cofres brillaba en particular. Calido y refulgente me llamaba y no quise luchar por la sensacion. Acercarme era un alivio, un lugar de respuestas, de calidez. Puse la mano sobre la manilla pero no la abri. Me permiti sentir por unos segundos e hice ademan de respirar profundo. Nada paso. Mi pecho desnudo no se expandio y no entro aire.

Dios mio!

Mi mano temblaba. Nervios? Frio?

Sin pensar abri la nevera y saque la plancha para ver que habia dentro.

- Tiradas (1)

Notas de juego

La tirada es de Razon con Psique. Mi idea es entender lo que pasa. Por lo visto estoy muerta pero de alguna forma animada, una especie de zombie, y si me equivoco, me vas a hacer cometer ciertas atrocidades que pienso resistir para que me avises la dificultad de resistirlo. Y que debo lanzar.

Asumo que aun tengo frio y eso. Pero no se que otras sensaciones tengo, calor, dolores, hambre, sueño, etc.

Igual puedo seguir haciendo tiradas para averiguarlo. Hay algun reloj en la pared donde pueda ver la hora?

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31/05/2016, 18:08
Director

El cuerpo brillaba color rojo, como iluminada por la luz de un cuarto oscuro de revelado fotográfico. Era un hombre grande, con poco pelo y barba. Su cuerpo, que antes le habría parecido banal ahora se le presentaba como una hermosa ofrenda, efímera, dispuesta a ser consumida.

Y con esa sensación el corazón de Leah latió una sola vez. Y su boca salivó  por un instante y el frío paró. Era como haber estado viva durante un segundo.

Al color rojo le acompañaba el olor a sangre y carne. Era asquerosamente apetitoso.

Se trataba del cadáver de un criminal. Supo Leah que las manos de ese cuerpo habían matado, que ese rojo, ese tono exacto que desprendía era el color, la huella del asesinato y la violación. Y que esa carne era alimento para ella.

Si comía, si comía de él, su corazón volvería a latir y la sed desaparecería. Aunque fuera durante poco rato. Si le hubiera matado ella la mantendría viva durante más tiempo, quizá mucho.

Notas de juego

Para que Leah se resista a devorarlo ha de tirar Introspección más Psiqué, esta primera tirada con dificultad 7.

No hay ningún reloj.

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01/06/2016, 03:51
Leah Beth Tautou
Sólo para el director

Al sacar el cuerpo de la bandeja alli estaba frente a mi. Brillante, apetitoso. Mi corazon latio por un segundo y senti como el dolor se iba, el frio se desvanecia. Puse mis manos sobre su piel y note como sus crimenes me daban permiso de cometer la atrocidad de morderlo de probarlo.

Estaba asqueada y temblaba de solo pensarme morder esa persona que alguna vez fue, exisitio y sintio.

No podia creerlo. Queria llorar, queria salir corriendo y queria morir alli mismo. Y asi mismo estaba frente la solucion a todos mis problemas. No era posible.

Dios mio no!

Me arme de valor y logre controlar mis ansias aunque mi cuerpo muerto me recordo que no podria resistirlo mucho tiempo. Acerque mi cara a su piel y alli estaba tan delicioso, tan infimo, tan al alcanze y sencillamente no pude. Me golpee en la cara para hacerme reaccionar y logre empujar la plataforma de metal para volver a encerrar el cuerpo en la nevera. Luego sali corriendo y me detuve en la esquina mas alejada de la morgue donde no hubiesen neveras ni cuerpo.

No puedo, no puedo, no puedo, maldito seas Edmund, maldito seas engendro.

Mire mi piel cetrina, mis manos grisaceas anunciando mi muerte. Mi vista seguia confusa... Necesitaba salir de alli. Mire a mi alrededor buscando algo con que cubrir mi cuerpo, una bata, un uniforme. Algo...

Daniel sabria que hacer, porque yo, porque yo dios mio??!!

Tengo que controlar esto. TENGO QUE CONTROLAR ESTO!

Recorde la iglesia donde habia ido hacia un par de dias y pense que podria refugiarme alli hasta saber que hacer. Incluso tenia miedo de llamar a Daniel o a alguien mas. Debía desaparecer.

Segui buscando en la morgue cualquier cosa que pudiese servirme y por instinto abri un poco la puerta hacia el pasillo para estar segura que no habia nadie. Luego trate de mirar por alguna ventana.

- Tiradas (2)

Notas de juego

La segunda tirada es para buscar ropa o algo y buscar una salida. Incluso algun dato adicional.

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01/06/2016, 15:59
Director

Leah subió los escalones hasta la puerta de ojos de buey. Cuando se cercioró de que al otro lado no había nadie entró a una sala más oscura, grande, con tres puertas. Una la conocía, conducía a la recepción. Otra, más pequeña, también abierta, daba paso a un despacho con estanterías abarrotadas de huesos etiquetados, un armario que contenía multitud de ropa en bolsas y una taquilla que tenía batas y todo tipo de vestuario médico: guantes, pantalones ligeros blancos, bolsas de plástico para los pies, zuecos…

Allí pudo vestirse, pero la ropa no le calentaba.

Helada, sedienta, con el corazón parado y esa sensación todavía más horrible que la sed de mover la masa muerta de su cuerpo, probó primero a salir por la entrada que conocía, pero el ruido de una televisión y los comentarios de varias personas que la estaban viendo le hizo volver atrás y probar con la tercera puerta, también grande, que le llevó a un garaje en el que estaban aparcadas varias furgonetas de atestados y el coche del vigilante, en cuyo interior el hombre estaba adormilado.

Ahora su vista era casi normal, ya no habían fuegos fatuos. Pero los colores eran más pálidos, como si la ausencia de vida en su retina fuera impedimento para captar la fuerza de los colores.

Por la persiana entreabierta se veía la calle desierta. Debían de ser sobre las tres o las cuatro de la madrugada.

Notas de juego

Puedes elegir qué ropa te pones. La ropa que no es de médico, la que hay en bolsas, Leah sabe que es la ropa de los cadáveres, y que en algunos casos puede ser parte de las pruebas.

Tienes que hacer una tirada de destreza más engañar, dificultad 9 para salir sin ser vista por el vigilante.

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01/06/2016, 19:46
Leah Beth Tautou
Sólo para el director

Luego de salir de la habitacion consigo ropa que seguramente es de otros muertos y lamento inclusive no consegui la mia. Se que habra muchu ropa vieja y alguna puede pertenecer a algun caso pero por ahora no tengo opcion. Habia una bolsa con una sudadera y me la coloque. Luego pense en tomar un pantalon pero no habia ninguno que me quedara.

Tuve que tomar unos minutos para visualizar bien con mis ojos que aunque ya no percibia las cosas brillantes aun no veia bien y no destinguia colores. Incluso enfocar era un problema.

Continue revisando y trate de no pensar en la sed y el frio de mi cuerpo. No podia seguir pensando en lo que no podia controlar.

Consegui un short como de gimnasia y me lo puse. Estaba manchado pero peor era no tener nada. Sali sin zapatos y sin hacer ruido. Casi todo estaba desierto salvo la salida en donde estaba un vigilante en su coche. De rodillas y arrastrandome por el piso cruce por el estacionamiento sin detenerme y alcanzar la calle. Ya fuera mire a mi alrededor sin tener una idea de la hora.

Era de madrugada. No podia con el frio y vi un charco de agua en una esquina. Como una perra me arrodille y tome agua entre mis manos para beber. Nada paso. No podia tragar. No podia digerir.

En desesperacion controle las ganas de llorar golpeando el piso por mi frustacion hasta darme cuenta que estaba por llamar la atencion. Sali corriendo hacia la iglesia sin detenerme, muy asustada.

Corria y corria y al darme cuenta que no me hacia falta el aire corria mas rapido. Incluso correr descalza no me molestaba en los pies pero de todas maneras evite charcos y piedras para hacerme daño. Solo pense en llegar a la iglesia. Debia llegar rapido antes de que amaneciera. Al menos eso queria, asi que fui cortando camino por callejones y calles oscuras tratando de que nadie me viera.

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Uff. Quiero ir a la iglesia del principio cuando hable con el sacerdote ese amable. Cuando llegue me quedare golpeando la puerta hasta que abra. Claro esta si no consigo algo en el camino, algo para la sed y el frio. =P
 

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03/06/2016, 17:15
Director

Corrió, corrió rápido. Más que nunca. Pero a veces la sed era tan grande que tenía que parar y se tenía que contener para no gritar o aullar de pura desesperación.

Su vista seguía siendo un tanto apagada. Se vio reflejada en el espejo de un escaparate y su aspecto era terrorífico. Su piel era blanca azulada y los pies y las manos, verdosas. Era evidente que su cuerpo estaba muerto. Hubo un momento en que hasta le pasó por la cabeza que tal vez estaba sufriendo una pesadilla. Pero no despertaba.

A pesar de que era madrugada se cruzó con muchas personas y supo mantenerse lo suficientemente alejada como para no llamar la atención, salvo con un trabajador de limpieza del ayuntamiento que se asustó mucho cuando entrevió su cara. En una calle estrecha vio pasar a un hombre que andaba mirando al suelo. Emanaba del transeúnte una luz roja muy intensa, más parecida a un resplandor que a un fuego fátuo. Sus colores eran vivos y agresivos. Su corazón volvió a latir, ahora durante el instante en que lo siguió con la mirada, y tuvo un gran impulso a lanzarse sobre él como un felino hambriento. Pero pudo resistirlo.

Seguía siendo de noche cuando llegó a la iglesia de Saint Pierre. La puerta estaba abierta y pudo refugiarse en su interior.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tirada de Introspección más Psiqué para ver si se controla.

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03/06/2016, 17:16
Jules Jalabert

Se encontró al padre Jules estudiando, tomando notas entre un montón de libros.

El hombre levantó su vista y no pareció asustarse. La luz de la lámpara iluminaba sus apuntes, y ella estaba medio oculta entre las sombras. Se incorporó de la silla mientras decía:

-Disculpe... Es... ¡Leah! ¿Qué le pasa?

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03/06/2016, 19:15
Leah Beth Tautou

Mire cuerpo cetrino en descomposicion y solo pude correr en desesperacion. Si hubiese podido llorar hubiese sido un mar de lagrimas. Sin embargo no paraba de gimotear. Y la sed. La sed era sofocante.

Me sentia ahogada.

Luego vi a un hombre que brillaba y mi ansias se enfocaron en el. Queria matarlo, necesitaba hacerlo, sabia que eso aplacaria mis ansias, que podria respirar un momento, pero no era lo correcto. Estaba convencida de que lo merecia y aun asi no podia hacerlo. No podia dejarme arrastrar por algo que no era yo. Si habia alguna otra salida debia encontrarla.

Cuando vi las puertas de la iglesia una esperanza me dio mas fuerzas para continuar. Aun no habia amanecido asi que no habia nadie dentro hasta que vi al cura con el que habia hablado antes. De rodillas cai a sus pies. Mi boca seca no me dejaba hablar asi que me tome un segundo para calmarme. Me sentia ronca, ahogada, ultrajada como nunca un ser pude sentirlo.

Me abri la sudadera y le mostre mi pecho palido en descomposicion. No habia necesidad de decir mas. De seguro mis ojos estaban vidriosos y mis labios azules. Estaba muerta.

- Padre, el me poseyo, estuvo dentro de mi y ahora soy esto. Dije abriendo los brazos.

Hice ademan de respirar sin conseguir sosiego.

- Quiero matar padre, se que me mantendra viva, pero no asi, padre no quiero, no puedo ayudeme por favor.... dije suplicante mientras caia sobre sus pies.

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06/06/2016, 10:14
Jules Jalabert

El cura se levantó apartando su silla con ímpetu, para ponerse de cuclillas frente a ella.

-Dios mío. ¿Qué te han hecho hija mía? ¡Claro, claro que te ayudaré!

La miró un par de segundos en silencio. Apartó un poco el pelo para verle el rostro.

-Leah, sigues siendo tú. Has vencido al deseo de matar por no hacer un mal y eso es signo de tu fortaleza. A pesar de lo que sea que te hayan hecho no te pueden quitar lo fundamental, lo fundamental no te lo puede quitar nadie. Sigues siendo libre.

Le levantó un poco la cara para mirarla a los ojos. Estaba visiblemente preocupado. Pero no tenía nada, nada de miedo.

-Aguanta hija, aguanta un poco más. En la oscuridad la luz brillará más. No pierdas la esperanza, encontraremos la forma de lidiar con esto.

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06/06/2016, 15:24
Leah Beth Tautou
Sólo para el director

De rodillas en el piso siento como mi corazon se quiebra ante el dolor que siento aunque ahora la esperanza vuelve a mi en los ojos del sacerdote. Vuelvo a cerrar la sudadera y si hubiese podido llorar estaria hecha un mar en este momento.

Me levante y camine hacia el.

- Debe ocultarme padre, nadie debe verme, esto es sobrenatural y nadie lo entenderia. Tiene algun lugar donde pueda esconderme.

Habia pensado en llamar a Daniel pero que le iba a decir, que podia hacer el, y si moría, tendría que verme morir dos veces... Debo resolver esto yo misma. Por otro lado estaba el pozo. El pozo era una salida y una entrada puede que tambien la solucion este alli pero no sabia como ni donde encontrarlo.

- Padre conoce usted algun pozo donde habiten cuerpo en descomposicion, conoce algo sobre el devorador de sombras, la criatura que me hizo esto dijo que ahora le serviría a su dios que era un devorador y .... continue todo el relato con todos los detalles que podia recordar.

De hecho le pedi papel y un boligrafo y comence a escribirlo tambien. Si definitivamente iba a morir tenia que dejar constancia y le informe al padre en donde contactar a Daniel. Necesitaba tiempo... Y no tenia.

El padre decia tener algun conocimiento, algun libro o al menos alguien a quien preguntar. Si nada funcionaba tendria que llamar a Daniel, pero como decirle, como explicarle. En algun momento fui al baño a revisarme y no podia volver a verme en el espejo. Mi cuerpo estaba rigido  y cada vez me costaba mas moverme. La piel se estaba poniendo mas gris y perdiendo su elasticidad. Cuanto tiempo podria resistirlo. Y la sed.... la sed....

En un momento de descuido me acerque a la pila de agua bendita y recogiendome el cabello bebi de ella. No sabia el resultado pero debia probar. El entro en mi boca al menos...

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06/06/2016, 23:22
Jules Jalabert

-Ese pozo... podría ser el mismo abismo. Has hecho un viaje largo, muy largo.

Cuando ella bebió del agua bendita, el cura se hizo con un pequeño paño y le lavó la cara en la pila, ayudándose con la mano en forma de cuchara.

-Has vuelto, y te ha cambiado. Pero sigues siendo tú. Siempre ha habido gente que ha vuelto de esos sitios. Y seguro que es por algo. Tiene que tener un sentido.

Con el paño la secó con delicadeza, como si le enjugara unas lágrimas invisibles. Durante ese instante casi se podría decir que la sed le dio un pequeño respiro. El padre Jules se atrevió a bromear:

-Claro que tengo un sitio. Será un escondite ideal. Aquí no viene nadie. Y para un día que entra alguien en la iglesia no lo voy a dejar escapar así como así.

Una vez seca le trajo doblado un pijama limpio.

-Ven. Cambiate en el baño y vamos a un sitio más cálido.

Ella se cambió en el baño de la sacristía. De ahí pasaron a una vivienda anexa con una cocina pequeña y una modesta habitación. Sin apagar la luz, la hizo sentarse en la cama, como si en ese estado fuera posible descansar y se sentó en un pequeño sillón, frente a ella. Encendió una lámpara de pie y leyó atentamente lo que acababa de escribir la detective. Preguntándole con todo el tacto que pudo los detalles que no le quedaban claros. Una vez leído todo habló:

-Me suena al Juicio de Osiris… era un momento fundamental en la cosmovisión de los antiguos egipcios. Para ellos la muerte era un tránsito, el comienzo de un viaje. El Libro de los Muertos, por ejemplo, era un texto sagrado con instrucciones para tener éxito en ese viaje...

Paró su explicación y se quedó pensativo unos segundos.

-Leah… conozco a alguien que nos puede ayudar con esto. ¿Me das permiso para hacer que venga?

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07/06/2016, 04:29
Leah Beth Tautou
Sólo para el director

Luego de cambiarme y llegar a su habitacion obedezco y me siento en su cama. Una cama! Parecia algo tan lejano, tan fuera de si. Extrañaba mi vida.

Escucho sus explicaciones y asiento entendiendo a medias lo que me dice. Algo se de la cultura egipcia pero no mas que lo que sabe cualquier persona que haya ido a la escuela o haya visto la pelicula La Momia.

- Osiris?

Sigo escuchando con humildad.

- Claro Padre, por supuesto, puede llamar a quien usted quiera. Mi vida o lo que queda de ella esta sus manos. No tengo mas a donde ir o en quien confiar. Y no quiero preocupar a mi compañero mas de lo debido. No es el momento de llamarle.

Mi compañero, suena tan lejano tambien. Ni siquiera recuerdo bien como me sentia con el, pero me hacia feliz. Eso lo recordaba.

- Tengo mucho miedo padre, no quiero morir... Pero el agua ha calmado mi sed, una sed de muerte que me ahoga. No se cuando durara pero mientras usted llama tendre un vaso a la mano.

La pijama que tenia puesta era un poco mas grande que mi talla, pero me arremangue lo que sobraba. Me sentia una niña de pronto, impotente e ingenua y muy asustada.

El Padre se levanto para ir a llamar cuando lo interrumpi.

- Padre disculpe, no he sido muy religiosa y no lo lamento, las cosas que he visto y he hecho no puede ser mas alejadas de la religion y mi vida es un verdadero desastre pero en estos momentos de desesperacion veo en usted una luz de esperanza. Podria darme su bendicion?

Y me quede en la cama esperando. Queria llorar, queria desahogarme, queria gritar, queria mi arma. Pero ahora solo quedaba esperar por la ayuda de dios si es que realmente existia.

Notas de juego

Por lo que leido en el otro panel, Daniel aun esta en el dia anterior. E imagino que tarde o temprano notaran que no esta mi cuerpo. Quisiera verle la cara. Ja ja ja.

No se te ocurra meter un ladron en la iglesia porque me lo como. Je je.

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07/06/2016, 20:33
Jules Jalabert

El padre dio de buena gana su bendición a Leah. Se notaba que era algo muy importante para él. En su forma de ejercer su rol, en sus gestos rituales, ponía toda la atención. Como si transmitir la bendición a la detective fuera en verdad cosa de vida o muerte.

-Tardaré en volver. Quizá un par de horas.

Suspiro y se puso la mano en la frente sin ocultar un gesto de preocupación.

-Bajaré la persiana. Nunca se sabe si el sol en tu estado te puede hacer daño. No pierdas la esperanza, hija. Encontraremos la manera. Traeré ayuda.

Y agarrando la chaqueta del perchero salió. Cerrando con cuidado, como si no quisiera molestar.

El agua apenas fue un remedio momentáneo. Dejó de surtir efecto y las articulaciones de la detective empezaron a pesar más y más.

No había pasado ni una hora cuando volvió, había que esperar a la visita. Trató de darle comida pero el estómago de Leah no la aceptaba. Pasarn el día entero y llegó un momento en que la carne de Leah empezó a oler. Como pasa cuando te dejas un muslo de pollo olvidado en la nevera y ya no se puede comer.

Apenas había tenido tiempo para asimilar ese estado de su cuerpo cuando alguien llamó a la puerta.

Jules la hizo entrar.

-Leah, ella es Ophelia. Viene a ayudarte, y le obliga la piedad.

Era una mujer alta, esbelta, de estricto luto. Llevaba un velo negro que ocultaba totalmente su rostro. Y unos guantes, también negros, como de terciopelo. Hizo una pequeña reverencia, sin hablar.

El cura la hizo sentar en el sillón y le enseñó el papel que había escrito la detective. La visitante leyó atentamente y cuando hubo terminado, dijo algo al oído de Jules, que se levantó:

-Os dejo solas. Leah, estás en buenas manos.

Y salió de la habitación.

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08/06/2016, 04:15
Leah Beth Tautou
Sólo para el director

Mientras espero al padre que regrese siento como mi cuerpo se va endureciendo y el olor, el olor a podrido que sale de mi cuerpo. No puedo creer que vaya a pasar la agonia de morir en descomposicion sin poder hacer nada. Angustiada trato de caminar de un lado a otro para mantenerme activa y tratar de no pensar. Cada paso es mas dificil y darme cuenta que solo me pueden quedar horas de vida me hace entristecerme mas aunque me aferre a la vida.

Tomo mas papel y le escribo una carta de despedida a Corinne que ya he terminado cuando el padre regresa. Luego de conocer a Ophelia, la extraña mujer que lo acompaña con humildad y desesperacion me entregue a su mandato con una sola esperanza.

- Soy Leah, dije susurrando, aunque suene mas de ultratumba que una voz normal.

Y una vez que el padre sale me quedo de pie frente a la mujer en espera de sus ordenes o sus acciones. No pareciere ser muy comunicativa pero eso no importaba si iba a ayudarme.

Dios mio, cuida de mi.

Y me extrañe de pensar en Dios de esta manera cuando nunca lo habia hecho.

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08/06/2016, 09:33
Ophelia luto

La mujer habló con una bella voz sedosa. Por el tono parecía rondar los cuarenta años.

-Yo soy Ophelia. Seremos amigas.

Se quitó con urgencia un guante. El blanco de porcelana de su piel destacaba tanto contra el negro de su ropa de luto que parecía brillar. Metió su mano desnuda dentro de su velo, como si se la fuera a besar y la sacó con un pequeño corte en la palma del que manaba una sangre llamativamente roja.

Quizá fuera por el color rojo sobre el blanco, por la belleza sobrenatural de su piel, o por la terrible sed, daba la impresión de ser una flor de la que manaba un néctar del que se podía beber.

Y la acercó a los labios de Leah.

-Bebe.

- Tiradas (1)
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08/06/2016, 20:58
Leah Beth Tautou

Hacia eones que me habia dado cuenta que no habia vuelta atras en este camino y si esa era mi salida, me arrodille frente a la mujer y tome su brazo. Con mi lengua lami la sangre que se habia derramado y luego pegue mi boca en la herida abierta.

Sabia que no podria tragar, podria no resultar pero era mi unica esperanza.

Succione de la herida y trate de tragar....

Si lograba salvarme no solo seria su amiga, seria lo que ella quisiera... ya no estaba segura, pero no importaba, solo queria beber.