Tras dos horas andado y seguido por las driadas, llegais a lo que parece una torre. - Bien nosotras hemos cumplido con nuestra parte del trato. No podemos continuar mas allá. Fuerón ahí donde se dirigieron los hombres encapuchados. Os deseamos suerte en vuestra campaña - dicho esto las driadas se funden con los arboles y las perdeis de vista.
La Torre de Siltacuis se encuentra en lo profundo de Valleoscuro. Está compuesta por una pequeña torre de dos plantas y una casita adosada medio derruida.
Estooo!!! hay alguien por ahi¿¿¿ vais a postear??? No veis el post?? que pasa???
El anciano clérigo se despidió de las hermosas señoras del bosque. Por el trayecto no dejaba de admirarlas con fascinación. Casi recuperaba la curiosidad y la inocencia de su juventud.
Pero su destino estaba en frente y sólo les ocultaban unos árboles.
Queridos compañeros, hemos llegado a la torre, no tiene una apariencia muy fortificada, pero no quiere decir que podamos confiarnos. Deberíamos acercarnos con sigilo. Loy, puedes hacer los honores? Nosotros te seguiremos si nos haces una señal, pero ten cuidado, hijo mío.
Tirada: 2d20(+6)
Motivo: avistar y escuchar
Resultados: 14(+6)=20, 10(+6)=16
Exploremos antes de tomar decisiones a lo valiente, pero muerto, que somos pocos, xDD.
Me despido con un galante gesto, con una sonrisa acorde a lo que estoy viendo, pero el deseo de compartir algo más con estas damas que no sea solo palabras se esfuma con su partida. Desaparecen entre los árboles, tal como aparecieron ante nosotros la primera vez y ahora nos dejan frente a nuestro destino.
Nuestro sabio compañero da un sabio concejo y asiento a sus palabras cuando le pide a Loy que nos preceda, dado que es el mejor para esta tarea. Yo por mi parte dejo lista mi ballesta para estar atento a lo que pueda pasar dentro de mi rango de visión.
Tras despedirme de las Driadas,escucho atentamente las palabras del viejo elfo.
No te preocupes Loy,iremos juntos a inspeccionar el terreno.
Si no os importa podeis cubrirnos.
Tirada: 1d20(+1)
Motivo: escuchar
Resultado: 15(+1)=16
Chicos esperaremos un poco a Loy, creo que el a igual que cada uno de vosotros os lo mereceis ;D. Yo sigo atento diariamente a la partida ok¿
Saludoos!!!
El lugar parecia bastante sospechoso no habia mucho alboroto, parecía abandonado, pero desde la posición en la que estabamos no veiamos ninguna entrada hacia la torre. Los muros de esta estaba llenos de verdina, esa estructura era antigua y parecia estar vacia. - Esta bien Menthor vayamos con muchos cuidado he inspeccionemos la zona antes de nada, vamos - El monje y el guerrero empezaron comprobar la zona.
Tirada: 1d20
Motivo: Avistar
Resultado: 19
Tirada: 1d20
Motivo: Escuchar
Resultado: 15
Tirada: 1d20
Motivo: Esconderse
Resultado: 8
Tirada: 1d20(+8)
Motivo: Sigilo
Resultado: 4(+8)=12
Tirada: 1d20
Motivo: Buscar
Resultado: 1
Chicos tirad buscar todos menos Loy que ya se lo tire yo.
De acuerdo, compañeros, id con cuidado. Dragus y yo podemos inspeccionar por detrás vuestro y repasando por donde paséis.
Zaius sabía de las prisas de los jóvenes para encontrar, a veces sin pararse el instante necesario para buscar. Pero si algo tenía él, era paciencia.
Tirada: 1d20(+2)
Motivo: buscar
Resultado: 20(+2)=22
Digo yo que encontraré algo. xD
El lugar prometía pocos lugares por donde entrar, pero no me creo que no haya una entrada oculta en un lugar como este, algo debe haber. - Si. - Le respondo casi mecánicamente a nuestro sabio compañero mientras continuo buscando una entrada alterna.
Tirada: 1d20
Motivo: Buscar, pero con nuestro sabio compañero no hace falta :D
Resultado: 12
Muy lentamente empezamos a caminar hacia la torre,sabiamos que nos enfrentariamos a enemigos muy poderosos.
Tirada: 1d20(+2)
Motivo: moverse sigilosamente
Resultado: 11(+2)=13
Tirada: 1d20(+1)
Motivo: avistar
Resultado: 19(+1)=20
Una mano enterrada sobresale de entre la nieve. La mano claramente está congelada. Parece la mano de una persona mayor.
El anciano descubrió una mano enterrada bajo la nieve, perteneciente al alguna persona mayor. Sin duda el resto del cuerpo podía estar debajo. Hizo una seña a Dragus primero y a Loy y a Mentor después para que parasen.
Dragus, vigila mientras intento desenterrar a esta persona. Creo que no habrá nada que hacer por él, pero, al menos, podremos saber algo sobre quién puede ser.
Con su bastón comenzó a desenterrar para no congelarse las manos él también. Pero enseguida alguno de sus compañeros le ayudaría y verían algo más.
Tratando aun de buscar algo que pudiera ser una entrada oculta, nuestro anciano compañero me pide que vigile, al ver la mano me quedo atónito por el echo de haber pasado algo así por delante, sin prestarle la más mínima atención.
Mi curiosidad bulle por todos lados y vigilo lo mejor que me sale, pero las ganas de saber quien es el difunto cubo de hielo me hacen desviar la vista a cada momento al lugar donde están llevándose a cabo las tareas de profanación.
Cuando desentierras el cuerpo, puedes comprobar que es un hombre mayor y como Loy llega hasta donde estas rapidamente para darse cuenta desgraciadamente que es el gefe Yen-Yang.
Una vez más el monje siente cómo el corazón empieza a sangrarle. Uno podría creer que se acabáría acostumbrando a toda la muerte y destrucción que ha presenciado estos días, pero no es el caso. Ahoga un suspiro y un sollozo y examina el cuerpo con detenimiento. Tantea con sus manos desnudas el frío cadaver del otro monje sin poder encontrar nada de utilidad.
Se yergue con respeto y sin apartar la vista del monje, habla a sus compañeros.
-Ved si encontráis algo que pueda ayudarnos en la tarea que nos espera. Luego lo cubriré con nieve y, finalizado esto, le daré sepultura -dice con voz fría y distante.
Todo está bien.
Tirada: 1d20
Motivo: Buscar en cuerpo
Resultado: 12
El vejete, con sus manos temblorosas (por el frío, en realidad) comenzó a registrar el cuerpo del maestro monje.
Cuanto lo siento Loy. Pero si tiene algo, lo encontraremos.
Tirada: 1d20(+2)
Motivo: buscar
Resultado: 16(+2)=18
Tras mirar en el cuerpo del anciano jefe, no encontrais nada.
Démosle sepultura como dijiste, pero recordemos dónde le cubrimos de nieve, pues podemos, una vez acabado esto, alojarle en tierra, donde no quedará a la intemperie en verano.
Sin más, se dispuso a agrandar el agujero de donde le sacaron. Luego puso una rama de árbol gruesa rodeada de piedras para marcar el lugar.
Estamos ante la tumba provisional del hermano Yen-Yang. En vida llegó a ser un maestro, un sabio que daba ejemplo vivo de las mejores cualidades de quién se dedica al camino espiritual. Su muerte es dolorosa, pero los que le sobrevivimos estamos para recuperar su legado y el de tantos otros que han dedicado su existencia al mismo camino sagrado. Descansa en paz Yen-Yang.
Si alguien quiere añadir algo, adelante. ;D
Loy permanece en silencio y sonríe interiormente ante las bienintencionadas palabras del clérigo. NO puede dejar de olvidar que todos los aquí presentes tienen una idea clara de qué es la vida, qué es la muerte y qué ocurre de tras ella. Zaius habla del maestro en pasado, alabando lo que fue en vida. Pero Loy sabe muy bien que no se queda ahí. En efecto, el pasado del gran maestro es glorioso, pero a pesar de su muerte sigue siendo presente y futuro: pues su vida no acaba aquí; ya ha renacido, ya vuelve a caminar entre los hombres, como un igual, como un semidiós o, incluso, como un dios.
Cierra los ojos elevando una plegaria a todos los que son, fueron y serán, para que iluminen su camino con Su sabiduría, para que guarden el lugar que seguro corresponderá al maestro y para que esperen y vigilen como hicieron, hacen y harán.
Inspira.
Expira.
Todo está bien.