Partida Rol por web

El Lobo

I. La aldea de Castrelo

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29/02/2016, 14:44
Director

Año de Nuestro señor de 1562.

Tras haber recorrido el Camino de Santiago y haber visto al Santo Apóstol, vuestro regreso se ha hecho también a la par. Llegásteis un poco por casualidad a la aldea de Castrelo, en la parte sur del Reino de Galicia. La población se encontraba en el valle de Limia, cercana a la frontera portuguesa.

Se trataba de poca cosa, algo más que una veintena de casas esparcidas a la buena de Dios, sin calles que pudieran llamarse tales. Más o menos en el centro de la aldea había algo parecido a una plaza, donde se alzaban los dos edificios que parecían más importantes en el lugar (y así debían ser): la posada, y una vetusta iglesia de estilo románico. Alrededor de la misma se estaba reuniendo, a toda prisa, toda la población (que a "ojo de buen cubero" no llegaría, seguramente, ni a de lejos al centenar de almas).

Notas de juego

Ritmo Alto. Comenzamos.

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29/02/2016, 14:58
Íñigo de Urrutia

Compañeros, a que se deberá este gentío? comenta Iñigo a sus dos compañeros de viaje. Sin pensarlo mucho y llevado por la curiosidad me voy acercando hacia el grupo de personas que se van agolpando a los pies de la iglesia

- Tiradas (2)

Notas de juego

Dejo hecha una tirada de Descubir por si algo me llamara la atencion entre las gentes del lugar o por si hubiese alguien de mas alto rango entre la muchedumbre

Tambien dejo hecha una tirada de empatía para ver si las gentes estan alegres, preocupadas, iracundas, etc...

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29/02/2016, 15:55
Prudencio

Prudencio caminaba apaciblemente por el camino que entraba en el pueblo. La naturaleza de la zona era generosa con sus gentes, regalándolse arboredas frondosas llenas de castaños rebosantes de frutos durante del otoño y de follaje durante el verano. Abundaban además los buenos pastos de modo y manera que era una zona próspera para la ganadería.

La llamada Vía De La Plata no había hecho honor a su nombre, al menos en lo que a Prudencio se refería, así que apenas le quedaban unos cuantos maravedises bailando en la faldriquera, pero ya estaba acostumbrado pues era este el pan nuestro de cada día. Sus pies estaban doloridos y necesitaban descanso. Con todo, parecía de buen humor. La jornada de marcha llegaba a su fin y por fin podrían descansar y con un poco de suerte, meterse algo en el buche.

No era la primera ni la segunda vez que el hombre pasaba por aquella zona. Lo cierto es que no le sorprendía ver cierto ajetreo en la zona central del pueblo. Quizá fuese una fiesta local o quizá un pregonero dictando un bando o cualquier otra cosa. En estos pueblos pequeños, cualquier acontecimiento, por pequeño que fuere, se convertía en un hecho de gran trascendencia.

Hizo memoria en cualquier caso, por si llegase a concluir si por la fecha se pudiere tratar de alguna fiesta o celebración local mas no caía en la cuenta.

-A decir verdad que no, mi buen Iñigo-llegó a decir en contestación a su compañero-mas no nos cuesta nada acercarnos hasta allí a ver. Total que todas esta algarabía viene de la plaza central, donde la Iglesia y la hospedería así que allí debemos dirigirnos sea como fuere.

- Tiradas (1)
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29/02/2016, 20:18
Teolfo

Teolfo no compartía la curiosidad de sus compañeros. Estaba cabizbajo desde que habían emprendido el camino de vuelta y no había hecho ninguna observación sobre rastros de animales, su manera de controlar el tema de las conversaciones para poder intervenir, como había venido haciendo.

- No os importunaria si quedárame aquí..- comenzó a decir bajo y carraspeando por no haber dicho nada en un buen rato, pero se calló, y sospechando que no había sido oído, siguió de tres pasos atrás a sus compañeros a la plaza.

No le gustaban las plazas de los pueblos, y menos cuando los villanos se reunían en ellas. Teolfo aprovecha que va tres pasos atrás para acercarse discretamente, como si no conociera a sus compañeros.

Notas de juego

 

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01/03/2016, 23:03
Director

os acercásteis pues, en pos de averiguar qué diantres ocurría en tal lugar, en la plaza. El cazador Teolfo marchaba detrás de sus compañeros, hechos ya como quien dice "amigos". Prudencio e Íñigo intentaban vislumbrar aquello que pudiera sonsacarse, sin éxito. Con tal curiosidad, os abrísteis paso a codazos (eso sí, los que miraban al clérigo de Urritia le barruntaban un hombre de cierto postín, porque parecían apartarse mientras él pasaba). En estando ya metidos en el meollo de la gente, vísteis que un hombre acababa de depositar con sumo cuidado, en las gradas de la iglesia, una capa de cuero ensangrentada sobre lo que parecía ser un cuerpo humano.

Claro que, a los pocos segundos, un tipo con alzacuellos y ropas oscuras también irrumpió entre el gentío (se suponía el sacerdote del pueblo) y cogió la capa que envolvía el bulto y lo destapó, apareciento ante vuestros ojos y los de la comunidad el cadáver de un muchacho de unos doce años, como cruelmente mutilado por fieras salvajes.

Notas de juego

Hoy se me ha hecho imposible postear antes :(

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02/03/2016, 06:12
Prudencio

Apenas Prudencio comenzó a abrirse paso entre la gente se dio cuenta de que los ánimos no eran de fiesta, sino de expectación. Parecía que alguien tenía algo que anunciar o que mostrar a aquellas gentes que se arremolinaban entorno a un punto concreto de la plaza murmurando. Por fin alcanzó a ver de qué se trataba. Primero la capa, llena de sangre, que auguraba que algo malo había sucedido. Y luego, cuando el cura aquel la retiró, la imagen de aquel joven, apenas un mozo, con la cara desencajada y el cuerpo desgarrado en varias partes, aparentemente por dentelladas de animales. Posiblemente una manada de lobos hambrientos.

Santiguose el peregrino y quedose en silencio, como muestra de respeto mientras intentaba discurrir cómo podría ser que en una zona tan fértil y llena de vida, el lobo se viese en la necesidad de echarse al hombre en lugar de cazar liebres, corzos o jabalíes,  que debían abundar en la zona.

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02/03/2016, 09:22
Teolfo

Teolfo no se santiguó. Miraba el cadaver, al principio con horror, pero después frunció el ceño. No dijo nada, pero miró a los lados buscando en las caras de los presentes alguien a quien pedir permiso para acercarse, y al no encontrar ninguna que le sugiriese autoridad, se agachó y empezó a mirar con detenimiento las heridas, pero sin atreverse a  tocar el cadaver.

Notas de juego

Me gustaría hacer una tirada de conocimiento animal, a ver si las dentelladas son de lobo.

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02/03/2016, 11:51
Director

Notas de juego

Hazla, Teolfo. Tira por Conocimiento animal y si no tienes por CULTURA.

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02/03/2016, 15:14
Teolfo

Teolfo escudriñó las heridas durante un par de minutos sin decir nada.

- Tiradas (1)

Notas de juego

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02/03/2016, 19:20
Director

Habrías de verle más de cerca (porque podría ser una ofensa que un forastero se acercase al cuerpo), pero jurarías que esas marcas que parecían de animal probablemente, no estabas seguro*, eran de haber mordido al muchacho, no devorado.

Notas de juego

* Para una mayor inspección, habrías de revisar el cuerpo frente a frente, teniéndolo delante. Poco más puedes sacar (pese al crítico) ;)

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02/03/2016, 20:54
Íñigo de Urrutia

Iñigo se hizo paso entre el gentío estupefacto por lo sucedido mirando con incredulidad el cadaver del joven. Malditas alimañas pensó para sus adentros. Sin dudarlo se dirigió al sacerdote Padre, que ha ocurrido aqui?. Si en algo podemos ayudar estos humildes peregrinos, fieles servidores del altśimo estamos a vuestro servicio. Tras esto, se pliega frente al cuerpo del muchacho y tomandole la mano con delicadez comienza a rezar una plegaria por su alma. Que dios le reciba en su gloria.

Dirigiendome de nuevo al sacerdote le expreso mis pensmientos. No quisiera importunarle, pero ha ocurrido algo asi en los ultimos tiempo? Estamos de camino por estos lugares y no sabiamos que eran tierras peligrosas por ataques de alimañas. 

- Tiradas (3)

Notas de juego

Presto atención, en la medida de lo posible, a lo que dice el resto de gente. Dejo tirada de escuchar por si procede. Tambien me gustaria aprovechar para mirar el cuerpo del mozo y ver el tipo de heridas que tiene. Dejo hecha tirada de Descubrir y medicina por si procede igualmente 

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03/03/2016, 12:04
Director

El sacerdote del pueblo, viendo que le hablaba Íñigo de Urrutia, sólo se limitaba a decir, entre como lágrimas y rabia, algo así como "una desgracia, una desgracia". Ante el ofrecimiento de ayuda, el padre negaba con la cabeza, suspirando. Entonces, desde la multitud, haciéndose hueco a base de codazos y a plena carrera, una mujer avanzaba entre la muchedumbre hacia las escaleras del iglesia y el cuerpo. Empujó sin querer a Iñigo, que casi cae al suelo. Estaba presa de histeria, y una vez delante del cuerpo se arrojó al muchacho ensangrentado, llenándolo de besos y de decenas de lágrimas de dolor y rabia. El sacerdote intentaba consolarla frente a las miradas de los vecinos, de manera inútil.

Poco a poco, la muchedumbre se fue yendo del lugar, dejando a la mujer sola con el cuerpo. Algunos de los vecinos cogieron el cadáver y lo llevaron a una de las casas, mientras la mujer lloraba tras de la marcha amargamente.

Notas de juego

Podéis ir donde queráis. Mucha gente se va a sus casa, otras a la taberna y la mujer se va con el cadáver y algunos vecinos  a una casa.
 

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03/03/2016, 12:24
Director

Con lo poco que has visto del cadáver (ni siquiera te ha dado tiempo a acercarte del todo y examinarlo, pues necesitarías un tiempo) te das cuenta que posee dentelladas bastante limpias. En el rumor popular entiendes como quejidos, penas ante tal situación y algún que otro comentario algo así como "otra vez igual...".

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03/03/2016, 12:37
Íñigo de Urrutia

Viendo alejarse a los hombres con el cuerpo del muchacho, Iñigo piensa en la levedad y fragilidad del ser humano. Respetemos estos duros momentos de intimidad, compañeros les digo a mis amigos de viaje. Deberiamos buscar donde pasar la noche y quiza tambien donde aliviar nuestra sed y hambre. Que os parece si nos acercamos a la taberna? No creo que los aldeanos esten de muy buen humor pero no veo otro sitio mas adecuado para nosotros.

Comento en voz baja a Prudencio y Teofilo Ademas, parece que lo acaecido aqui no es la primera vez que ocurre. No me gustaría pasar la noche al raso en estos parajes y que mi cuerpo sea alimento para fieras como fue el desgraciado muchacho

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03/03/2016, 21:56
Prudencio

Habría hecho la misma pregunta al sacerdote que su compañero, pero ya que se le había adelantado, permaneció callado mientras esperaba su respueta, que fue tan críptica como poco aclaratoria. En esto que sintió que Iñigo trastablilleaba así que le asió por un brazo para evitar que se cayera. En seguida vio que la artífice de aquel empujon era la que parecía ser la madre del mozo que yacía muerto a unos pocos metros. No pudo evitar sentir lástima. Ni siquiera él era quien presenciar el sufrimiento ajeno por la pérdida de un ser querido tan de cerca, sin que se le encogiese el corazón, mas no había nada que pudiese hacer para consolar o ayudar a aquella mujer.

Las palabras de su compañero lo trajeron de nuevo a la realidad.

-Sí...será mejor buscar el albergue y solicitar cobijo-contestó. Y a tal fin, señaló hacia la Iglesia a sabiendas de que los albergues suelen estar próximos a estas y hacia allá siguieron camino.

 

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04/03/2016, 00:02
Teolfo

-¿No pensáis que habiendo sido atacado el niño por una fiera hambrienta, habría sido devorado, al menos en parte?- Dijo Teolfo en voz baja ladeando la cabeza en el lado contrario de la casa donde se habían llevado el cuerpo del niño, como si fuera una precaución para que la madre no lo escuchara desde el otro lado de la plaza.

Después siguió mansamente, hambriento y cansado como estaba, a sus dos compañeros.

Notas de juego

 

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04/03/2016, 00:10
Teolfo
Sólo para el director

Notas de juego

Castrelo está al lado del Miño y además hay un lago cerca, ¿no?

Teolfo está inquieto por eso.

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04/03/2016, 08:13
Prudencio

 

-Poco sé de las costumbres de los lobos, amigo mío-contestó Prudencio mientras caminaban hacia el albergue-pero lo que decís tiene sentido ¿Habría pues, otro motivo por el que una manada de lobos pudiera atacar a un muchacho en el bosque?

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04/03/2016, 08:53
Íñigo de Urrutia

Iñigo asiente ante la acertada reflexion de Teolfo. Al igual que Prudencio poco se yo de estas fieras pero si a ti esto te resulta extraño, debe serlo en verdad, pues tienes experiencia dando caza a estos animales y sabes de sus comportamientos. Quien sabe? quiza fueron espantados por alguna otra fiera o alguien que pasaba, y no pudieron ensañarse con el cuerpo del muchacho

Notas de juego

Entonces vamos a la taberna o buscamos el albergue si lo hubiera?

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04/03/2016, 11:38
Director

Con las dudas en la mente, marchásteis a la posada, siguiendo sin pérdida a algunos de las personas que habían estado en la plaza. Nada más llegar, el gran edificio, que decíase "la posada de Obaratzal", hacia también las funciones de taberna local. Nada más entrar, vísteis bastante gente allí dentro. Buena parte de la población masculina allí reunidos se habían organizado espontáneamente a modo de asamblea. Escuchando unos instantes sin mucho afán, uno podía saber que estaban como decidiendo qué hacer con respecto al suceso del niño muerto.

Notas de juego

Estáis dentro. Podéis pedir algo de comer o una cama. Para enteraros de algo más podéis hacer una tirada de Escuchar (PER).