Partida Rol por web

El mar estrangulador - 13th Age Asalvajado

Grupo I - Escena II: El mar estrangulador

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22/07/2018, 17:11
Llenka

Llenka asintió en silencio a las palabras de Nada. Ella era poco dispuesta a la diplomacia y más al subterfugio o al asalto directo, pero estaban en una situación lo suficientemente extraña para requerir estrategias extrañas. No tenían la menor idea de lo que había en esta curiosa isla y tenían que obtener información de algún lado. Además, las estructuras eran lo suficientemente elaboradas como para temer una fuerte resistencia en un asalto. Sí, había que dar una oportunidad a la vía diplomática, pero acarició el mango de su espada para asegurarse de que estaba preparada por si las cosas se torcían.

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23/07/2018, 13:55
Mar Estrangulador

Tras la empalizada no se apreciaba el más mínimo movimiento. Si había gente ahí detrás, se cuidaban mucho de ser vistos.

Notas de juego

No sé si os acercáis o no. Pero en cualquier caso no veis a nadie. Si están, están escondidos.

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23/07/2018, 22:10
Grend, James Grend

Grend se quedó mirando la "muralla".

Que raro, deberían estar tratando de matarnos a estas alturas.

Si en verdad había enanos ahi, y de verdad estaban locos, no por eso dejaban de ser paranóicos.

A menos que realmente se les haya ido la cabeza y se hayan matado entre ellos.
¿Qué hacemos? Seguimos adelante ¿no?

- Tiradas (1)
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24/07/2018, 15:15
Mar Estrangulador

¿Por qué Dolgen no tomaba la iniciativa? Cuando se giraron para buscarlo, encontraron al mago absorto. Había dejado a un lado su inseparable bastón y avanzaba obnubilado hacia un agujero en el manto. Caminaba tórpemente hacia el agujero aparentemente con la intención sumergirse en las aguas. Lo cual era una idea pésima teniendo en cuenta la pareja de tiburones que les había pasado por debajo hacía unos minutos.

Nada le agarró del brazo y le obligó a sentarse tras los restos del naufragio. El mago volvió en sí sin ser muy consciente de lo que había pasado. Tan solo fue capaz de balbucear que las profundidades le estaban llamando. Aunque ya volvía a ser él mismo, estaba demasiado desconcertado para jugar ningún papel en la aproximación a la empalizada y el extraño barco-fortaleza. Nada, Llenka y Grend debían apañarselas sin él por el momento.

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24/07/2018, 16:11
Llenka

En cuclillas, camuflándose de quien quisiera que vigilaba la muralla, la pirata asintió incrédula al intento de peregrinaje de Dolgen hacia las panzas de los tiburones cuyas siluetas se dibujaban bajo el inseguro suelo. Se quedó tan sorprendida de la estupidez que no tuvo tiempo a detener el suicidio pero Nada sí que tubo los reflejos de detener el avance del mago y salvarle la vida de paso.

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24/07/2018, 16:19
Dolgen Klaus

El mago miró a Nada con extrañeza cuando el férreo agarre del guerreo cesó -¿Lo notáis?, ¿lo sentís?, ¡Por qué hace este maldito calor!- Dolgen gritaba mirando al cielo, agitaba el puño en señal de amenaza hacia el enorme sol amarillo que él veía con total claridad, agarraba la túnica que cubría su armadura de cuero pellizcándola y tirando hacia fuera una y otra vez, una y otra vez mientras resoplaba y con la otra mano se abanicaba mirando a sus compañeros con los ojos muy abiertos y una mueca de sofoco algo forzada.

No estaba muy seguro de por qué solo él sufría semejante calor, un calor que poco a poco fue disminuyendo, hasta que los engranajes de la sesera de Dolgen empezaron a girar de nuevo al unísono -Vais a tener que darme un momento, no me encuentro del todo bien- les dijo sentándose, o mas bien dejándose caer entre los escombros con una cara que era el claro reflejo de la confusión.

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24/07/2018, 20:14
Grend, James Grend

Grend estaba esperando, al igual que los demás imaginaba, a que el mago hiciese su parte. No le había hecho mucho caso al plan porque era aburrido tratar de parlamentar, pero no le sonaba el que Dolgen tratase de tirarse al agua por donde acababan de pasar unos peces enormes con muchos dientes.
Afortunadamente era un problema menor que Nada podía evitar facilmente agarrando de la pechera al mago. Al parecer se le había ido la cabeza un poco con el calor.

Bueno. Vamos a ver si hacemos algo útil. Que si no vamos a acabar todos igual de mal que el aprendiz de mago éste.

Si es que tengo que hacerlo yo todo.

Se levantó de su refugio, se alisó y limpió un poco la ropa y se adelantó, no mucho, a lo que parecía la entrada.

Ah del castillo...o barco, o lo que sea...Estamos buscando a un tipo. Un humano. Se llama Sharpe. Es para un trabajo. Muy bien pagado. ¿Si está ahí podría salir?

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24/07/2018, 21:07
Marinero Enano

De las almenas del barco asomaron dos enanos apuntando al grupo con sus ballestas y otros dos con hachas al cinto y cotas de mallas oxidadas y agujereadas, descendieron por unas escaleras laterales. Trotaron torpemente con sus cortas piernas por el manto vegetal hasta la zona de la empalizada más próxima a vosotros. No podíais verlos ocultos tras las estacas pero podíais oír sus voces.

-No parecéis estar con los piratas ni con los goblins. Bueno, quizá si podríais estar con los piratas, pero lo hemos estado hablando y creemos que no porque vuestra ropa es nueva. Parecéis recién llegados. Bueno, si queréis parlamentar dejaremos que entre uno de vosotros y lo llevaremos ante el capitán. O podéis entrar todos pero tendréis que entrar desarmados. Menos el que tiene pinta de mago, uno no puede fiarse de los magos. Parecen desarmados y de repente te sacan una bola de fuego del sombrero. Nada de magos. El mago se queda fuera. ¿Quién o quienes van a entrar?

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25/07/2018, 03:23
Nada

El guerrero observó con la ceja arqueada cómo Dolgen perdía la cabeza por momentos y estuvo tentado de dejarle que se sumergiera en las aguas para no regresar jamás. Pero había demostrado su valía en la cámara de aquella isla y aún tenía que probar que sus habilidades mágicas costaban el oro que había cobrado, así que aprobó con un leve asentimiento el gesto de Llenka para evitar su muerte.

—¿Qué mago? Este es un profesor de la Universidad de Horizonte y nos ha contratado para escoltarle —espetó a los enanos, con menos tacto del debido en una situación así— A mí estos tipos me parecen todos iguales, pero os puedo asegurar que no es capaz de atarse los cordones sin ayuda, así que menos lanzar un puñetero hechizo. Nos ha contratado y no se va a quedar solo en este sitio, que seguro se nos pierde. Y tenemos una reputación.

Aunque no le gustaba la idea de entrar sin armas, le gustaba menos dejar sólo a uno de su equipo. Esa maraña de plantas flotantes parecía una trampa mirase donde mirase.

Entramos todos.

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25/07/2018, 09:39
Grend, James Grend

Que pena, precisamente ibamos a envíaros al mago para que parlamentara.

Grend evaluaba la situación de aquellos enanos. No debería haber más de siete u ocho. No serían ningún problema. Aunque Nada parecía querer que entraran todos, y eso a Grend no le gustaba precisamente. No le gustaba lo más mínimo desprenderse de Diestra y Siniestra.

Mmmm. Tampoco creo que haga falta entrar todos. Tan solo queremos saber si está ahí el tipo éste. Puedo entrar, echar un vistazo y salir. Y si la cosa se pone fea cargarmelos a todos.

Notas de juego

Iba a decir lo primero en voz alta, pero como Nada ya ha dicho que no lo era simplemente lo he susurrado. XD

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25/07/2018, 13:18
Llenka

A Llenka no le hacía ninguna gracia desprenderse de su acero. Habría preferido quedarse tranquilamente fuera, en la agradable compañía de su espada pero el patrón mandaba. Se desabrochó el cinturón con la funda y buscó un sitio seguro donde pudiera apoyarlo sin riesgo de que acabara en el fondo del mar.

Nada mientras trataba de colar a los enanos que el mago no era el mago si no un erudito. Lo que preocupaba a Llenka era tener que desprenderse de sus dagas. No tanto por su valor ofensivo si no porque era un coñazo desatarse y atarse el arnés que las enfundaba. Confiaba en que los enanos no consideraran estos cuhillitos como armas de verdad.

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25/07/2018, 14:01
Marinero Enano

Sacaron un par de estacas de la empalizada que estaban que estaban más sueltas con el propósito de servir de puerta. A través de aquel hueco se podía pasar de uno en uno. Los enanos examinaron al grupo más de cerca.

-Bueno, tal vez tengas razón, el humano ese no tiene pinta de estar en posición de hacer mucha magia. Bueno, que pase. Pero si vais a entrar más de uno, las armas se quedan en la puerta con mi amigo mientras estéis dentro. Bueno, decidíos. No tenemos todo el día, bueno en realidad sí tenemos todo el día, pero no quiero pasarlo al sol.

- Tiradas (1)

Notas de juego

El enano no se percata de las dagas de Llenka o si lo hace, no les da importancia.

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25/07/2018, 17:51
Nada

Nada asintió, desenvainó la espada y con un rápido movimiento, la dejó clavada en uno de los maderos. No iba a dejar su acero, ese acero que había arrebatado tantas vidas y se las había entregado a la oscuridad, que se perdiera en el manto de algas flotante. Sin embargo, dejó su escudo a la espalda. Al fin y al cabo, no era ningún arma. Los dioses proveen.

Seguro de sí mismo, y con la tranquilidad que tiene alguien que se sabe elegido por los seres más poderosos de la existencia, Nada encabezó la marcha hacia el interior de la improvisada fortaleza —Vamos, esto no debería durar demasiado.

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25/07/2018, 18:51
Dolgen Klaus

Afortunadamente las habilidades sociales de Grend habían estado a la altura, o mas o menos, para hablar con cuatro enanos locos tampoco había que ser un gran orador. La cabeza de Dolgen iba poco a poco volviendo a ser la de antes, se sentía mareado, y todavía algo confundido mientras se limitó a escuchar y observar la situación.

Cuando vio que todos sus compañeros comenzaban a desarmarse dudó -¿un bastón es un arma?, -pensó, pero cuando el guerrero clavó con fiereza su espada en los antiguos escombros de un barco naufragado, el mago lo imitó, lanzó su bastón con rabia contra el madero de al lado sólo para ver como éste rebotaba sin orden alguno sonoramente entre los escombros, se encogió de hombros y manteniendo el silencio que por el bien de todos aún no se atrevía a romper se encaminó con decisión al interior de la empalizada.

 

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26/07/2018, 00:39
Grend, James Grend

Grend seguía teniéndole mucho cariño a sus espadas. De hecho se sentía desnudo sin ellas, así que hizo otra propuesta.

Como comprendereis maese enano, no es de sabios entrar en un barco desconocido estando desarmados. Aunque entendemos vuestro temor. Así que yo me quedaré aquí en la puerta de la entrada con éste buen enano vigilando nuestras armas. Sólo para que no se pierdan

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27/07/2018, 00:27
Mar Estrangulador

Grend se quedó junto a la empalizada con uno de los enanos.

El resto fueron llevados a la presencia del contramaestre Gratruc que les interrogó sobre su propósito. Después de estar interrogándoles un buen rato, decidió avisar al capitán.

El grupo esperó sobre el manto vegetal al pie del casco metálico de aquel extraño armazón que los enanos usaban para navegar y que tan poco se parecía a un barco. La estructura era en su mayor parte de metal y había tubos que asomaban a la altura de la cubierta de los que periódicamente salían chorros de vapor acompañados por chirridos estridentes y lastimeros.

El capitán se asomó desde la cubierta a cuatro metros sobre la cabeza de los aventureros. Se presentó como el Capitán Toresgrolin Lavamarina, un enano con un torso desporporcionadamente grande y unos brazos musculados como los de Nada, pero que no llegaba al metro cuarenta de estatura. Tenía la cabeza rapada y una profusa barba que en su día era de color de fuego y que ahora contaba con más canas que cabellos de color. Sus brazos y su torso estaban al descubierto y estaba cubierto de tatuajes con motivos tanto marineros como mineros. Numerosos piercings adornan sus orejas, nariz y cejas.

-¿Aquel al que buscáis no está aquí? A parte de nosotros, en esta región del Mar Estrangulador hay un campamento de goblins al Norte y otro de piratas al Este. Tanto unos como otros son unos indeseables. Si está con los goblins, dudo que sea por voluntad propia... aunque bueno, salvo que el humano al que buscáis sea un pirata, también es raro que esté con los piratas por voluntad propia aunque la mayoría de los piratas sean.

Los piratas intentarán mataros para robaros vuestro barco o lo que sea que os ha traído hasta aquí. Los goblins intentarán mataros porque no quieren compartir lo que consideran sus dominios. Están todos locos. Nosotros somos los únicos cuerdos porque somos enanos y este sitio no va a poder con nosotros.

Estamos demasiado ocupados tratando de volver a poner en marcha el Martillo del Mar. Si alguno de vosotros tiene conocimientos de ingeniería naval y nos puede ayudar, luego podríamos ayudaros a buscar a vuestro Sharpe ese que andáis buscando.

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27/07/2018, 04:08
Nada

La conversación con el capitán Lavamarina había sido refrescantemente civilizada, cosa que Nada atribuyó a la intervención de los Dioses Oscuros. Sin duda, la elección de aquel campamento, y no otro, como el primer lugar que visitar había sido gracias a su guía, lo que les había llevado a obtener valiosa información sobre los demás inquilinos temporales de aquella trampa mortal flotante. Cuando el enano preguntó acerca de quién podría ayudarles, palmeó la espalda de Dolgen para que se ofreciera voluntariamente a echarle una mano.

Pielesverdes y piratas —comentó distraidamente mientras se rascaba el mentón. Una oscura sombra empezaba a aflorar en su barbilla y mejillas, recordándole que debía rasurarse para evitar tener problemas con los piojos— Si buscan la muerte, muerte es lo que encontrarán. 

Había resultado bastante bien. Y si el mago podía conseguir su ayuda, mejor que mejor.

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27/07/2018, 11:55
Llenka

 

Llenka entro con Nada y Dolgen a parlamentar con los enanos. Se tranquilizó al ver que no tenían intenciones agresivas y observó con fascinación la extraña construcción. Cuando escucho al que parecía ser el líder mencionar que los piratas de la parte Este tratarían de robar su barco un escalofrío  recorrió su espalda. Tranquilo Petit, no lo permitiré. Pensó para sus adentros.

Parecía que los enanos tenían problemas con su navío – normal, ¿a quién se le ocurre hacer una nave sin velas? – y Llenka no tenía la menor idea de cómo ayudar, pero sí que tenía curiosidad por entender como funcionaba. Nunca se sabe que barco te puede traer el destino.

- Yo también os acompañaré. – Dijo al mago. – Veamos que podemos hacer por ayudar a estos caballeros.

Dijo dispuesta a cotillear las entrañas de la embarcación.

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27/07/2018, 16:53
Dolgen Klaus

El capitán Lavamarina parecía cuerdo, al igual que sus hombres, afortunadamente no todos los rumores estaban resultando ser ciertos. Dolgen escuchó con atención sin poder dejar de lanzar miradas de curiosidad a cada chirrido, a cada parte metálica que hacía parecer el navío una máquina y no un barco.

Aunque por el comentario de Nada refiriéndose a los goblins como pielesverdes cualquiera pudiera pensar que sólo eran criaturas malignas y sin cerebro, el mago había leído varios tomos y escuchado diversas historias de goblins que convivían con otros seres normalmente humanoides con los que comerciaban y vivían en relativa paz; quizás no fueran el enemigo, pero eso ya lo expondría cuando llegase el momento, porque las palabras de Llenka lo pusieron un poco nervioso.

-Cla... claro, ¿por qué no íbamos a ayudar pudiendo hacerlo? -dijo en un tono susurrante lleno de duda mirando con una mueca de confusión a su compañera pirata -¿Por qué no intentarlo?, -pensó. Se dirigió al capitán enano intentando sonar lo mas convincente posible -Las máquinas y sus engranajes, vaya si son un rompecabezas- le dijo esbozando una sonrisa lo menos forzada que pudo -¿La sala de máquinas, o por dónde cree usted que deberíamos empezar a buscar, han conseguido aislar la zona del problema?. -le preguntó mientras ya ponía su cabeza a pensar intentando recordar todo lo que había leído sobre mecanización y sus distintas aplicaciones, que para ser sinceros, no era mucho.

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27/07/2018, 20:47
Mar Estrangulador

Lavamarina se quedó boquiabierto y con los ojos grandes como platos. - ¡¿Entendéis de ingeniería?! Adelante, adelante.

Para entrar en el barco tuvieron que trepar por uno de sus costados metálicos hasta la cubierta que de lejos parecía una fortaleza almenada más que un barco. Desde cubierta descendieron por otras escaleras hacia el interior.

Gran parte del casco había sido desmantelado, pero aún quedaba en pie la estructura básica de lo que debió ser un navío magestuoso y extravagante. A Llenka le resultaba incomprensible que aquella pesada estructura pudiera flotar. ¿Es que los enanos no sabían que los barcos se construían de madera? Desde el suelo de la bodega veían vigas metálicas que sostenían las planchas laterales y la cubierta sobre sus cabezas. Había palés amontonados en un lateral, herramientas sobre una mesa de trabajo y virutas en una esquina dando sensación de lo que un día debió ser el famoso órden y pulcritud enanos pero que se había ido perdiendo con el paso de los meses.

En la nave central del casco había una estructura metálica grande como una cuadra capaz de albergar una docena de caballos. En uno de sus extremos había una caldera. Distintas escaleras y pasarelas permitían pasearse por encima de la maraña de tubos y acceder a las válvulas del motor. Dos enanos en mono de faena, tozudos e inasequibles al desalientom examinaban la estructura como seguramente llevaban haciendo meses.

Toresgrolin Lavamarina ordenó bruscamente a los mecánicos apartarse e hizo un gesto a Dolgen invitándole a acercarse al motor: Todo suyo maese ingeniero.