Partida Rol por web

El misterioso alfarero

III. Irrupción en la Casa y Cárcel

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09/02/2014, 03:43
Hans el Alemán

Grité de dolor cuanto pude, llevándome la mano al pecho, que no era ya más que una masa deforme, sanguinolenta y dolorosa. ¡Ay!. Mis aullidos fueron de aquellos que hielan el alma de cualquiera, y creo que incluso sorprendí al propio alguacil, sorprendido de su propia acción inverosímil. Debía darle un beso al hacedor toledano que había hecho aquella ropera del mismo Diablo. Sentí como la sangre se derramaba dulcemente, corriéndome cintura abajo. Debo hacer algo, pensé, o me desangro como un verraco. La idea me hizo desfallecer y aspiré aire en boqueadas, luchando por permanecer consciente; un desvanecimiento era el modo más seguro de vaciarme por aquella herida. ¡Ay!

No sé si fue la ira corriendo por mis venas, o la inconsciencia, pero el instinto asesino me llenó de cintura para arriba, pues si bien mis piernas querían tomar las de Villadiego, mis brazos ansiaban matar a aquel hideputa, y no solo a él sino a su mujer, sus hijos y su padre, poniendo así fin al intercambio de lances haciendo que dos cuartas de mi acero francés le asomasen por la espalda. Tampoco quería que los dos jaques que me acompañaban pensasen de mi que era un menguado, así que aunque fuese una maniobra de las de "ir y no volverás", lancé el espadín con fuerza hacia la cara del alguacil mientras sacaba demonios por la boca, alemanes, por supuesto, mezclados con esputos sangrientos. ¡Aaghashoolleeshkhgutaaghh!

¡Ay!

Notas de juego

Tras dudar mucho y analizar el carácter de Hans, creo que le puede la rabia y hace dos ataques altos para morir matando, nada de paradas. El dolor y el espasmo le harán no pensar en las consecuencias y enloquecerse un poco. O eso o sin cordura y llorando en una esquina, así que mejor de este modo. Golpe Alto + Golpe Alto.

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09/02/2014, 10:40
Alguaciles de la Villa

A1 hace fingimiento y Golpe alto

Notas de juego

Declara Tomás

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09/02/2014, 14:06
Tomás "Caracortada"

Uno menos. Ahora la ventaja era nuestra, o por lo menos eso pareciome a mí. Justo en ese momento escuché los gritos del alemán y vile sujetándose donde hacía un instante había una mano, la cual reposaba sangrante en el suelo. El matasanos estaba en problemas y a partir de ese momento iba a tener más difícil poder acabar él solo con el alguacil.

Con un brillo furioso en mis ojos lanceme contra el que atacaba al alemán dispuesto a sacarle las tripas como al fulano que ahora mismo acababa de reunirse con el Altísimo, o puede que más bien con los demonios del infierno. Preparé de nuevo mi espada y, con la ira propia de alguien que ha perdido el sentido, cargué contra el hombre sin pensarlo dos veces.

Notas de juego

Ataque y ataque a A3

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12/02/2014, 13:01
Alguaciles de la Villa

A3 Esquiva y Esquiva (al ver que tanto Hans como Tomás van a por él).

Notas de juego

Declara y actúa Braccio

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12/02/2014, 17:06
Braccio da Montone
- Tiradas (5)

Notas de juego

Arresto y Guardia alta.

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12/02/2014, 17:36
Alguaciles de la Villa

Uff, parece que lo llevaba crudo el corchete...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Actúa Tomás

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12/02/2014, 17:43
Tomás "Caracortada"

Cegado por la rabia lanceme contra el alguacil que había rebanado la mano al alemán. Mi arte con el acero no era muy vistoso pero, a quién le importaba si era eficaz. Y así eran los mis ataques.

Al igual que había hecho con el otro infeliz, hundí el arma en el abdomen para, nada más sacarla, acabar con él de una vez por todas, o por lo menos dejarlo tan inútil que no nos diera problemas, y lo mejor que podía hacer era pegarle tal tajo en la cabeza que le dejara un bonito recuerdo de mi parte.

- Tiradas (10)

Notas de juego

Que se me ha vuelto loco esto. Hay dos tiradas que no son válidas, creo que se ve bien cuáles son, pero de todas formas en una pone Ataque 2 que se ha tirado 1d10, y el otro que pone daño 2 con un d100

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13/02/2014, 17:40
Alguaciles de la Villa

Hoy no parece el día de A1...

- Tiradas (2)

Notas de juego

Actúa Hans

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13/02/2014, 17:49
Hans el Alemán

Con los ojos inyectados en sangre y lágrimas, fuera de sí, y sin pensar en las consecuencias me fui a por el alguacil derecho, sin tan siquiera componerme en guardia, lanzando un par de tajos furiosos con el espadín. Y poco más pude hacer pues era como el canto del cisne, que lanza sus graznidos al sol antes de morir... desfallecí por el sentir de mi mano ausente que sin embargo aún dolía... y mucho. ¡Ay! Así que tras afirmar un pie, avanzar el otro y lanzar gritos por la boca, no llegué ni a tocar la vizcaína del hideputa, que la blandía a la defensiva, y dejeme arrollar por Tomás, que venía como un toro embistiendo... para retroceder y apoyarme contra los barrotes de la celda falto de aliento y también de ganas de pelea, la verdad... Mal había empezado el día y peor terminaba...

- Tiradas (2)

Notas de juego

Pffff.... 

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14/02/2014, 11:14
Director

Resumen del turno 3:

Encarnizada lucha llevábanse los ayudantes de un médico ahora sin mano contra los alguaciles de la Casa y Cárcel, que las guardias tantas hechas y con tan poca distensión que parecieran sus sentidos embotados et sin estar a la altura del tris, tras, picada por alli y San Julián más allá...

Y en aquello andábanse las tornas; que Braccio hacía mover su cabello tan repentinamente como su impaciencia, muy precisa por cierto, al atacar en un aquí y un allá, en un vuelo de filo y paseo de su ropera larga, como cualesquiera matasiete de la Villa y además de los más peligrosos... Efectivamente, alguno de los estoques tenía que acertar (a A1), vive Dios:

Daño: 6 (-3 por Ropas de Cuerpo): 3 puntos de daño.

En éstas que el Caracortada no se "apocó" cuando vio a Hans sangrar, sino más bien al contrario, que con tremenda disposición y más ganas que un perro a longaniza, movió magistralmente su muñeca hasta internarle el cutlass en el estómago al otro Alguacil (A3), que nada pudo hacer, sino ver como la hoja, metida casi completa le salia reculando de nuevo de los intenstinos... Mas eso no fue todo. Ante la propia sorpresa

Daño1: 10 (-3 por Ropas de Cuerpo): 7 puntos de daño.
Daño2: Crítico: (x2 en cabeza): 13 x2: 26 puntos de daño --> Muerto

Nada pudo esquivar el malogrado corchete. Y mira que duras muertes tuvísteis que ver en la vuestra vida: algunos por darle matarile vosotros mismos, otras quizá por ver algún duelo a escondidas tras el amparo de alguna mala tapia o patio monacal en hurtadillas, o tal vez por que se os desangraran en la propia consulta... Mas los estoques de aquel cutlass fueron horribles: tras descoserle los higadillos, Tomás encauzo su arma a la cabeza, en un rápido lance. La hoja se introdujo bajo la barbilla y sobre la nuez y la arrastró con fuerza hacia arriba cortando mandíbula, la lengua, el paladar y llegando a la sesera, hasta que finalmente la punta del mismo asomó por la coronilla, toda ella manchada de rojo... En segundos, el Caracortada tiró hacia atrás y el cutlass salió del alguacil, muerto al instante, cuyo cadáver cayó redondo hacia atrás...

Por su parte Hans lo intentó, queriendo dar estocadas al  único que quedaba... más debido a su estado, resultóle harto difícil y doloroso...

Notas de juego

Estados:
A1: -7Pv
A2: Muerto
A3: Muerto

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14/02/2014, 11:47
Alguaciles de la Villa

¡¡Piedad!! ¡¡PIEDAD!! -suspiró entrecortadamente (debido a las heridas) el único alguacil que quedaba en pie, mientras hacía un giro rápido de muñeca y dejaba deslizar sus espada a través de sus dedo para poner el filo apuntando a tierra y desarmándose-.

El tipo se rendía.

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14/02/2014, 18:12
Braccio da Montone

Envainé con presteza la espada et con aún más rápido movimiento saqué la guardamanos. Púsele el filo en el cuello a ese malnacido que pedía clemencia, et agarrando con la siniestra fuertemente su cabello fízele girar la cabeza hacia el alemán.

- ¡¿Piedad decides?! ¡Mirad bellaco! ¿¡devolveréis la mano al mío amigo!?. - Et sin dejarle contestar proseguí; - Fablad rápido pues mi clemencia depende deello. ¿Hay rápida et segura salida de aquí? ¿Cuantos guardias quedan? Et aquella puerta, la oculta, la de la esquina, ¿a donde lleva? ¡¡¡Fabla!!!. -

Et fize gesto con la cabeza al caracortada para que se diera prisa y sacara a nuestro reo de su jaula...

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14/02/2014, 18:18
Hans el Alemán

Muerto el perro acabose la rabia... pero no para mi. Ahora me daba vueltas la cabeza y el aliento se me escapaba entre silbidos mientras agarraba mi siniestra con la diestra, espadín en suelo, llorando como cuando perdí la pierna en la riada de mi Germania natal. Odiaba a los españoles ya que cuando me rodeaba de ellos siempre acaban en desgracia... odiaba mi incompetencia por no ver el golpe y dejé que el lomo se arrastrase por los barrotes, sentando mis posaderas entre aquella mugre que cubría el suelo.

- Eine Fackel! Ich brauche eine Hure oder eine Feuerfackel für die Wunde ausbrennen.... Feuer! FEUER! Eine Fackel! EINE FACKEEEEEEL! - comencé en susurros para mi mismo y terminé gritando a mis dos amigos... cuando me di cuenta que lo hacía en alemán y no entendían nada. Señal inequívoca que no estaba yo para comedias.

Haciendo de tripas corazón me apoyé en la celda para levantarme, iracundo, errando un par de veces por querer usar la mano que ya no tenía. Una vez en pie cogí con determinación una de las teas que ardiendo en claroscuros hacían de aquel lugar poco más que el infierno de Dante.

- Vigilad al maldito carcelero - les dije antes de meterme el cuello del herreruelo en los dientes. No quería que aquel sádico se escapase.

Sujetaba el fuego con la derecha y me disponía a acercarlo a la que antes había sido mi mano. ¡Ay!

* ¡Una antorcha! Necesito una tea o un maldito fuego para cauterizar la herida... ¡Fuego! ¡FUEGO! ¡Una antorcha! ¡UNA ANTORCHA!

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15/02/2014, 16:56
Alguaciles de la Villa

¡Noo...! ¡Nooo! -decía estremecido el corchete amenazado mientra miraba, de manera obligada por la fuerza de Braccio y la de su daga, hacia Hans-. La... la puerta, no esta oculta, -balbuceaba el alguacil-, es el despach...despacho del alguacil mayor, ¡auuugghh! -se dolía de la presión del de Montone-.

El carcelero, que no estaba en escena, debía de haberse escondido allí, pues vosotros estábais tapando la única salida del ala diestra de la Casa y Cárcel.

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15/02/2014, 17:02
Encarcelado

A todo ésto, mientras el alguacil estaba oprimido por el italiano, los presos que allí había, metidos en las cárceles, y que habían visto la ristra de estocadas, cortes, arrestos y cuchilladas, comenzaron a jalear de alegría al ver reducidos a muerte o a rendición a aquellos que día sí y día no les empujaban, escupían o incluso torturaban, y ahora parecíanse cambiar sus tornas. Y mientras que todos los reos esperaban que el de Montone le brindase la digna muerte por limpia cuchillada cuanto antes para completar el ciclo de los otros dos (los cuáles estaban incorporados y agarrados a las barras y su cara entre ellas con más expectación que en los corrales más consagrados de la villa), otro de ellos habló a Hans.

Era un tipo viejo, quizá el más viejo de todos los de allí, y su aspecto era pésimo, ciertamente.

Muerde algo, ¡joven! -dijo mirando al malogrado barbero-. O te oirán -y le señalaba la entrada, recordando que a la otra parte del patio se encontraba el cuartelillo de la Villa, ni más ni menos-. Ven, acércate, ¡toma! -entonces rasgó lo que antes debió ser parte de una faltriquera puesta encima, o alguna prenda similar, y doblándo el largo pedazo varias veces sobre sí lo sujetó por ambos extremos (con las manos y brazos fuera de los barrote) y se lo dispuso a Hans a la altura de la boca, para que mordiera sin dificultad.

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15/02/2014, 17:47
Hans el Alemán

Y mordí. No era tiempo para remilgos y mi mano ausente me impedía preparar una mordaza como la que me daba aquel viejo. Sin mediar palabra la metí en la boca procurando no tocar mucho aquella roña que cubría el trapo. Acerqué con determinación el fuego a la herida, cómo si no fuese mía...

Pero sí que lo era. Chillé, grité, pataleé... y sufrí. Vinieron a visitarme todo el santoral de las Sagradas Escrituras, pero no me desmayé ni me fui con ellos. El trozo de cuero amortiguó el ruido pero no el dolor.

Cuando volví a abrir los ojos el muñón estaba negro y quemado. Parecía mentira que minutos atrás allí hubiese mano alguna...

- Tiradas (1)
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15/02/2014, 18:18
Braccio da Montone

Tenía sentido la respuesta que dióme el fideputa ese, pues aquella puerta parecía conducir a cuartucho pequenyo. Más non iba yo a averiguarlo, pues con premura debíamos salir de allí, et más valía fazerlo por camino seguro; el ya andado et conocido.

Et mirándo fríamente el blanco de los ojos de aquel, clavé mi guardamanos en su garganta hasta que la empuñadura chocó contra su nuez. Aquello complació a los reos, pues un coro in crescendo de vitoreos inhundó la carcel.

- Abassare la voce, scopriranno noi. - Pensé mientras limpiaba la daga con los ropajes del muerto.

Notas de juego

Remato al fideputa ;).

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16/02/2014, 22:18
Tomás "Caracortada"

Aún no entendía cómo no se habían presentado ante nos todos los guardias de la Villa, pues el escándolo que allí formose era para ser oído hasta en las afueras de la ciudad. Entre los presos jaleando, los gritos del alemán y todo el escándolo de la pelea habíamos hecho el ruido suficiente para despertar a los muertos.

Miré a todos lados buscando la manera de abrir las celdas, ya que mi intención no era hacerlo sólo con la del hombre que buscábamos sino también el resto, intentando de esa forma asegurarnos el follón suficiente para que, cuando huyéramos de allí, los mangas verdes no supieran tras quién tirar. ¿Dónde se habría metido el carcelero?

Sin pensármelo demasiado acerqueme a la puerta que habíamos visto, la que daba al despacho del alguacil mayor, para ver si el hombre se había escondido allí, sin por ello perder detalle de lo que por allí pudiera acontecer.

- Tiradas (1)
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17/02/2014, 12:36
Director

El vítore fue estruendoso, ciertamente. Mucho más que cuando cuelgan a un bandido en la plaza pública, a la vista de todos; ahora era como ver a los verdugos y opresores siendo merecidos por la justa, que no tardó el corchete en desplomarse mientras escupía gorgotones de saliva mezclada con sangre por la boca, antes de que Braccio retirase la daga de guardamano con suma limpieza.

Al tiempo que los presos clamaban, agarraban sus barrotes y comenzaban a tirar de ellos hacia delante y hacia atrás llenos de euforia (como si fueran de madera y pudieran tumbarlos) ,el barbero-cirujano se las veía y deseaba para acercar la brasa de la antorcha hacia su muñeca, ya sin mano. Y su rugido, cuando lo hizo acompañado del trozo de trapo del reo, (y que sin duda casi despertaría a toda la Villa de Madrid), quedó solapado con la de los presos. Y a punto estuvo Hans de desplomarse, que pareciera alguno de sus pacientes sacadas las sus muelas a golpe de alicates...

Mas en éstas que Tomás, rápido y hábil, vió como el carcelero asomaba la cabeza por el dintel  de la puerta anexa, en la esquina de la cárcel, y enseguida se escondía muerto de miedo, al ver cómo Braccio le "daba las buenas noches" al alguacil... Entonces, el Caracortada fue rápidamente a por él, y nada más cruzar la entrada del despacho, se le fue arrojado a las botas un manojo de llaves, ensartados en un oxidado aro de hierro circular.

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17/02/2014, 12:45
Carcelero

Allí pudo ver (Hans y Braccio sólo oir), las palabras del mismo.

No, no.. no... -decía tartamudeando, dando pasos hacia atrás mientras rodeaba la mesa del alguacil mayor-, ahí están... ¡las llaves! ¡lleváoslo! ¡A quién queráis, al que veníais a buscar...! ¡Pero no me matéis!

El hombre parecía rendido. No llevaba armas, y no hubiera suplicado de no haber visto al italiano darle matarile al guardia nocturno hacía escasos segundos...