Partida Rol por web

El Ocaso de los Magos

Gran Torreón - Pasillos

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01/02/2020, 15:36
Irina

S... —La expresión relativamente seria que Irina había adoptado antes de hablar poco a poco comenzó a desmoronarse para dar lugar a una pequeña risita con una boca tapada por su mano—. Lo siento, lo siento, sólo bromeaba —confesó mirándolo a los ojos, divertida—. Han estado allí unas cuantas horas, pero no más de eso —explicó mientras la calma poco a poco volvía a tomar el control de su rostro—. Ah, ya hemos llegado —señaló un instante después, cuando estuvieron en frente a una de las puertas de las habitaciones, en particular la que se le había prestado a Milo—. La cena aguarda sobre la mesa. Buenas noches —dijo haciendo una leve reverencia con la cabeza.

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01/02/2020, 17:13
Misha de Schwarzfels

El chico agradeció a Kai con una sonrisa cortada que le quitase hierro al asunto. Aun así se sentía terriblemente avergonzado.
Hizo una inclinación ante las criadas. -Les ruego que me disculpen. En la oscuridad, medio atontado por la meditación, ver un cuerpo tirado en el suelo y a alguien salir de puntillas... Yo... mi entrenamiento de guardia me jugó una mala pasada. Estoy totalmente avergonzado por el susto que les he dado.

Esperaba que aquello le ganase el perdón de las señoras allí reunidas, en especial de la mujer mayor.

-No no hace falta investigar, Senca. Soy bobo, misterio resuelto.- Dijo con una sonrisa para que viera que hacia un chiste y no mortificándose.

-Buenas noches Milo. Buenas noches a todos.

Se volvió hacia Calíope. -No será la primera vez que como algo frío. No tienes que calentar nada. Solo ayúdame a llegar al cuarto y puedes irte a descansar... ¿Es el segundo corredor a la izquierda, bajar la escalera y torcer a la derecha?

"Vaya día más raro. Espero que mañana vaya todo mejor" pensó

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03/02/2020, 02:52
Morgause
Sólo para el director

La joven no había ignorado por completo las miradas que su sirvienta le había dedicado mientras se dirigían a la habitación. No había duda de que algo la preocupaba. ¿Había sido lo que había dicho el otro chico? Sea lo que fuera, a Morgause no le importaba mucho algo que no había llegado a ser. Tan sólo le importaba explorar aquel sitio, si bien parecía que el cansancio comenzaba a jugar en su contra, de modo que no creía posible el poder explorar como había deseado con anterioridad. - Bueno, siempre puedes explorar en otro momento. - Le aseguró la emperatriz en su mente, mostrándose más preocupada por el hecho de que su querida Morgause estuviera agotada luego de aquel tiempo de meditación. - No serás capaz de comprender nada si estás cansada, mi querida aprendiz. Mejor será refrescar tu mente para poder ver las cosas con claridad. ¡Y absorber todo el conocimiento que se encuentre frente a ti! - El mago oscuro no dudó en expresarse en una sonora exclamación, afirmando las palabras de su compañera que carecía de cuerpo como él. En cierto modo, tenían razón, no había necesidad de apresurarse a explorar, no cuando tendría varios días para cumplir dicho deseo. Tan sólo debía de ser paciente, incluso si a la joven se le hacía muy difícil esperar con paciencia. Odiaba esperar, y prefería divertirse cuando era libre de hacerlo. Aquel pensamiento no hizo otra cosa más que dificultar la decisión que debía de tomar en ese preciso momento. No obstante, al llegar a la habitación, y oler el hermoso aroma de la cena que la había estado esperando desde hacía cierto tiempo, no dudó mucho en tomar asiento, deseosa por saciar su hambre, a pesar del hecho de que parecía que no podría explorar aquel misterioso lugar.

- Yo siempre tengo tiempo libre. - Le respondió a la anciana, dejando en claro que, para ella, no existía nunca un momento en el cual no pudiera hacer lo que ella quisiera hacer. Sin embargo, estaba claro que tampoco deseaba desperdiciar las posibles lecciones de magia, por lo que debería de tener cuidado de cuándo elegía tener aquel tiempo libre que tanto afirmaba tener. Por otro lado, su atención se concentró por un instante en Auxibia, quien parecía estar bastante cansada, tal vez más que Morgause. No había duda de que la anciana se mostraría preocupada si la joven aprendiz no optaba por descansar en ese momento. - Mm... no lo sé. Tengo ganas de explorar. - Aunque también debía de reconocer que la meditación anterior la había agotado en demasía. Lo sensato sería descansar y pasear cuando hubiera recuperado sus fuerzas. No sabía muy bien con qué podría encontrarse en aquel sitio, por lo que no sería muy inteligente de su parte hacer algo de lo que podría arrepentirse luego. Al final, no tuvo otra opción más que suspirar, considerando que había algo de razón en las palabras de la anciana. - Está bien, Bi Bi. Voy a comer y luego dormir. Tú también tienes que dormir. Mejor con una piedra brillante a tu lado, ¿sí? - Se expresó de manera gentil, no deseando que la sirvienta estuviera cansada al día siguiente. - O una gallina gigante. Con todas esas plumas... son muy cálidas. - Afirmó la campesina. Sea lo que fuera, la aprendiz desvió su atención a su cena, para luego comenzar a comer, incluso si pudiera estar un poco fría. Luego se marcharía a dormir, como le había asegurado a la anciana. Aquel sitio no iría a ninguna parte. Tendría tiempo de sobra para explorar lo que quisiera, así como para hablar con Eliza, la cual le había parecido una muchacha bastante agradable con la cual poder conversar.

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03/02/2020, 15:26
Milo

Milo frunció el ceño y miro a Irina con gesto serio durante un instante antes de unirse a su risa. Era un sonido bonito. - Muy graciosa. Desternillante. - dijo Milo fingiendo seriedad durante un instante antes de volver a sonreír. Esa vez el camino se hizo corto y antes de darse cuenta estaban frente a las puertas de su habitación. Se sorprendió con las palabras de Irina que de despedía ya. - ¿No vas a entrar? - preguntó tímidamente. Le gustaba la compañía de Irina, era graciosa y le trataba como si fuese normal. - No...ya,claro. Estarás cansada. Y ha sido un día largo, todos deberíamos irnos a dormir. - dijo atropelladamente mientras se sonrojaba. - Hasta mañana Irina, pasa una buena noche. - dijo despidiéndose. 

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05/02/2020, 10:43
Kai

Arlette seguía con el mismo humor que antes y no parecía que tuviera intención de cambiar. Esperaba que si no generaba algo de simpatía por mi con el tiempo, al menos relajara esa actitud de desprecio que se esforzaba por esconder.

Miré a los demás asistentes como aconsejaban a mis compañeros que fueran a cenar y tuve cierta impresión que más que asistentes, eran una especie de guardias que vigilaban nuestros pasos dentro de aquel lugar. Supongo que las suspicacias que generas al vivir solo gran parte de tu vida, te genera cierta desconfianza a las atenciones que puedan ofrecerte.

Hasta mañana, chicos.

Y seguí a Arlette hasta mi habitación.

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05/02/2020, 20:54
Narrador

Arlette te había guiado en silencio hasta tu habitación. Aunque habías notado su mala, cara esta vez parecía distinto. Veías en ella un atisbo de... ¿preocupación? ¿Podría ser que se hubiese preocupado de que te hubiese sucedido algo? Por supuesto, aquello no necesariamente significaba que nada había cambiado, después de todo, a saber si en realidad lo que le preocupaba era que si el aprendiz al cual debía de servir moría y debía volver a trabajar como mucama general le pagasen menos o su propia seguridad si un asesino suelto andaba suelto en alguna parte del inmenso castillo. Sea como fuera, una vez habían llegado hasta la puerta de tu habitación se despidió con un escueto «Descansa» y se marchó del lugar a paso rápido. Tras la puerta de tu habitación aguardaban sobre un plato de cerámica un bife de carne bien cocido con un acompañamiento de puré de papas, todo a temperatura ambiente, una bastante fría. Había también un vaso de madera con agua y dos cubiertos a un lado.

Notas de juego

Postea en la escena Gran Torreón - Dormitorio de Kai

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05/02/2020, 20:55
Narrador

Irina le había devuelto una vez más las buenas noches a Milo con una pequeña inclinación de cabeza antes de marcharse y dejar al chico a solas frente a la puerta de su habitación, tras la cual sobre un plato de cerámica lo esperaban un bife de carne bien cocido con un acompañamiento de puré de papas, todo a temperatura ambiente, una bastante fría. Había también un vaso de madera con agua y dos cubiertos a un lado del plato.

Notas de juego

Postea en la escena Gran Torreón - Dormitorio de Milo

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05/02/2020, 20:55
Narrador

Calíope se detuvo un segundo, algo sorprendida de que el chico recordase con tanta precisión el camino a su habitación como para recitarlo sin tener que estar recreando en su mente los pasos dados para llegar desde esta a la Sala del Silencio, como había debido hacer ella con cada viaje entre sala y sala de Gran Torreón cuando era tan solo una recién llegada. Guió al aprendiz hasta su dormitorio y se despidió con una profunda reverencia una vez habían llegado hasta la puerta que daba al mismo, tras la cual sobre un plato de cerámica lo esperaban un bife de carne bien cocido con un acompañamiento de puré de papas, todo a temperatura ambiente, una bastante fría. Había también un vaso de madera con agua y dos cubiertos a un lado.

Notas de juego

Postea en la escena Gran Torreón - Dormitorio de Misha

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05/02/2020, 20:57
Narrador

Penélope te había agradecido con una sonrisa al escucharte decir que la protegerías en caso de un ataque y te deseado unas buenas noches, como hasta entonces en todas las despedidas o saludos con una pequeña reverencia con la cabeza. Había cada uno ido luego a donde debía y tras cenar la carne con puré fría que había sobre tu mesa te dormiste profundamente.

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10/02/2020, 18:59
Eiara

Eiara te llevó hasta el Patio Interior y rio mientras llevaba los ojos hacia arriba al escuchar tu pedido sobre la bodega, claramente tomándoselo como una broma. Una vez llegaron hasta el patio, se despidió, como siempre, con una reverencia, y se marchó del lugar.

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13/02/2020, 07:40
Narrador

El apagado sonido de tus pasos sobre el fino suelo de lino en la Sala del Silencio precedieron a la apertura de la puerta, tras la cual un rostro conocido esperaba: Mérope. Estaba sentada en un amplio banco de piedra caliza que estaba justo en frente a la sala en la que hasta hacía poco te encontrabas, recostada contra la pared, con los ojos cerrados y aparentemente en un sueño profundo. No había rastros de que hubiese nadie más alrededor. El fuego de las antorchas que iluminaban el lugar se veía disturbado por unas frías ráfagas de aire que de tanto en tanto recorrían los laberínticos pasillos del gran castillo, recordando a quienes estuviesen ahí lo cerca que se encontraban al solsticio de invierno.

Notas de juego

Tu resistencia mental ha disminuido en 10 puntos debido al cansancio.

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13/02/2020, 08:28
Narrador

Una vez terminado su desayuno o al menos la parte del mismo que parecía comestible, Morgause salió se su habitación y comenzó a caminar, y caminar, y caminar. Los pasillos parecían ser interminables y enreversados por igual, al tal punto que pensar que quienes los habían diseñado jamás debieron haber sido escogidos como arquitectos de un enorme castillo era una idea que había pasado por la mente de más de uno desde que aquella estructura estaba en pie. Aunque habían un sinfín de puertas y escaleras, muchas de ellas estaban cerradas o no parecían llevar a ningún sitio especialmente interesante; baños, habitaciones o pequeñas salas que servían para almacenar trastos viejos y diversos cachivaches. La chica de cabellos rojizos y pecas en el rostro había estado caminando de la forma más rectilínea posible, algo difícil de conseguir puesto que en muchas ocasiones los pasillos se subdividían y aunque había izquierda y derecha, la opción adelante era inexistente. Finalmente, después de unos largos y confusos minutos durante los cuales había visto a algunos magos ir de aquí a allá sin prestarle demasiada atención, se topó con lo que parecía ser la entrada a una biblioteca.

Notas de juego

Morgause ha descubierto: Biblioteca

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15/02/2020, 13:35
Sarthan
Sólo para el director

He de haber estado meditando un buen tiempo como para que todos se hayan ido. No hay rastros de los demás aprendices ni de los profesores, pero si veo a Mérope sentada. Dormida. Esa mujer me cuida como nadie antes lo hizo, incluso me ofrece su descanso, su sueño, con tal de que no me pierda en este laberinto. Sonrío y me siento a su lado, evitando despertarla, la observo en silencio, su arrugada piel, su cabello gris, su cuerpo deteriorado, su lento respirar. Si pude pasar horas en esa sala en silencio, también puedo hacerlo a su lado ahora. 

Señora Mérope, Señor Cemens, qué haría sin ustedes? Los dos son buenos compañeros, leales y perseverantes pese a la debilidad de su cuerpo, dos maestros de la fuerza de voluntad, de hasta dónde se puede llegar por encima de nuestros propios límites. - Gracias - pronuncio en voz baja, más para mi mismo que para ellos, aunque el silencioso pasillo se encarga de que esa palabra se escuche con nitidez.

Noto que el sonido perturba el descanso de la anciana, aunque no puedo saber de qué modo, tal vez aún dormida pudo percibir mi gratitud. Terminar de despertarla me parece algo desconsiderado, pero también lo sería dejarla sola allí, o permitir que pasase la noche sobre un banco de piedra en lugar de una cómoda cama. - Es tarde y hace frío - le digo lentamente y con suavidad - Espero que al menos hayas podido descansar algo mientras me esperabas - decido esperar a que termine de despertarse, le doy el tiempo que necesita.

- Tengo hambre y sueño, creo que puedo orientarme hasta mi habitación... pero sería mejor si vamos juntos, con tu compañía no me perderé.  Puedes mostrarme de camino hacia allá cómo llegar a donde residen Lord Hyo, Lord Martin, Lord Nolan y Lady Eliza? Es que puede que los visite pronto y quisiera saber cómo llegar hasta ellos - primero comeré, que tras un mes tan sólo he desayunado, luego veré si me gana el cansancio o puedo hacer alguna visita antes de dormir - Dime Mérope, estarán durmiendo todos ya? No se siquiera si hay alguna regla en la Academia con horarios y formalidades para conducirse aquí dentro -  

Notas de juego

El último párrafo tiene sentido sólo si se despierta, si sigue dormida, editamos el post.

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20/02/2020, 09:14
Narrador

Siguiendo las instrucciones de Penélope, te dirigiste hacia la Biblioteca.

Notas de juego

Senca ha descubierto una nueva sala: Biblioteca

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20/02/2020, 17:22
Mérope

La anciana abrió los ojos de pronto y se quedó mirándote, tomándose unos segundos para volver a la realidad.

Sarthan —dijo con las cejas levantadas, levantándose también ella misma del banco—. Disculpa, me he quedado dormida. Sí, sígueme, he dejado la cena en tu habitación, aunque ya se debe de haber enfriado —explicó mientras enfilaba hacia allí—. Uh... S-sí, sus residencias están...

Las explicaciones de cómo llegar a cada dormitorio habían sido confusas, y no porque Mérope no se supiese explicar sino porque los pasillos, escaleras y pasadizos de Gran Torreón eran considerablemente enreversados, y de intentar recordarlos todos habrías acabado confundiéndolos y quedándote con nada.

Sí, todos están durmiendo. No hay reglas sobre los horarios, pero no te recomendaría andar husmeando durante la noche. En primer lugar, la mayor parte de salas estarán cerradas, y en segundo lugar, podrías levantar sospechas... Ya sabes —dijo cerrando los ojos—, algunos magos están muy paranóicos últimamente.

Caminaron juntos hasta tu habitación, en donde Mérope se despidió con una sonrisa cansada y se retiró del lugar a paso lento.

Notas de juego

Elige a cuál camino prestar más atención para poder recordarlo.

Tu resistencia mental ha disminuido en 20 puntos debido al cansancio.

Indica si entras al dormitorio o si te vas a explorar por ahí. (Ten en cuenta que es más fácil perderse durante la noche)

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21/02/2020, 14:40
Sarthan
Sólo para el director

No puedo menos que sonreír con calidez ante el amable gesto de esta mujer, me ha preparado la cena, me ha esperado para que no me perdiese, y me guía por un nuevo camino, uno que no conozco y me esfuerzo en recordar mientras avanzo. Sería imposible pasar por todos los lugares que quisiera, estoy agotado y es un laberinto, así que priorizo conocer dónde encontrar al profesor Hyo, el Señor Clemens me ha de estar esperanto también. Mañana le llevaré algo de pan caliente.

- Gracias Mérope, que descanse bien - le digo a la dulce anciana una vez que llego a mi habitación. El olor de la comida se siente al otro lado de la puerta, el hambre y el cansancio me obligan en ir en una dirección, mi cama. Entrar, cenar y dormir es lo que más deseo, casi con desesperación. Dormiría otro mes más. 

Notas de juego

Sarthan va a su habitación,  pasaría por la de Hyo (que si no recuerdo mal es el que iba a experimentar con el perro).

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25/02/2020, 00:24
Narrador

Tomaron un camino largo para llegar a tu habitación, uno que pasaba por la puerta del dormitorio de Lord Hyo. Habiendo llegado a la de tu propio dormitorio y luego de despedirte de Mérope, entraste.

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25/02/2020, 00:40
Narrador

Eliron enfiló hacia la cocina comedor junto a Eiara.