Partida Rol por web

En esta sala se decide sobre las situaciones más importante de la villa. En ella, el Hokage trabja sobre los asuntos legales que pertenecen a Konoha.

Bijo llega a la sala del Hokage, acompañado de uno de los dos guardias que quedaban. Éste mira a Bijo con un marcado horror, camina tembloroso.

Cuando entra en la sala, se encuentra con el Hokage, su ayudante personal, y Kagome, que al parecer ha puesto al corriente de la información al Hokage. En una esquina, bien atados y con mordazas, se encuentran los primeros guardias capturados, y el objetivo.

Una vez que entra en el grandioso edificio de la villa, todo está como siempre, vuelve a la normalidad.Empuja levemente al guardia para que entrase en el despacho, donde ya estaban el resto de bandidos.

-Aquí viene otro......- comenta nada más entrar, señalándo al presunto objetivo.

Kagome realiza un rápido jutsu y encadena al guardia junto a los otros presos.

-Bien, ahora estamos todos. ¿Qué pasó con el otro guardia? ¿Se escapó? Como vaya con el cuento a los otros... Puede que tengamos que intervenir antes de tiempo.

-Mmmm...- se queda pensativo-.El otro guardia no apareció.Parece que se acobardó al ver que su compañero entraba en la cueva y no salía....- le explica a la sensei.

-Bien, no creo que tengamos que preocuparnos. Mañana saldremos a capturar a los que han planeado el atentado, con la ayuda del otro grupo. Hemos ideado un plan de ataque, ya os pondré en aviso cuando estemos a punto de atacar. De momento, podéis descansar, pero mañana con las primeras luces, os quiero aquí.

-Entendido sensei....- conesta con acomañado con una leve reverencia.Poco a poco se retira de la sala y sale del edificio, con la mirada perdido, comenzando a andar hacia ningún lugar en concreto, sumergido en sus pensamientos más profundos, que quizás algún día lleguen a ser oscuros de nuevo.

Cuando llegáis a la Sala del Hokage, encontráis a la sensei del otro grupo al lado de la mesa. Sin esperar a que os detengáis, empieza a hablar, con la urgencia de quien tiene prisa.

-Os he llamado porque tenéis una nueva misión. Un grupo de personas, ajenas a esta villa, ha planeado un atentado contra el Hokage, que piensan llevar a cabo mañana, durante una presentación debajo de las estatuas de los Hokages. Planean dinamitar las estatuas, y que éstas se desprendan sobre los espectadores. Debemos evitarlo, planeando una defensa. No sabemos cuántos son, pero sí sabemos que tienen muchos medios para llevar a cabo su plan. Actuaréis mañana temprano, junto con el otro grupo. ¿Alguna pregunta?

-No...- responde Bijô tras escuchar todo.

Egwene escucha atenta, aunque le extraña que hayan llevado a su grupo ante esa kunoichi. Cuando termina de hablar, se adelanta un paso

-Yo sí que tengo una. Ya que se sabe el plan de ataque, ¿van a evacuar a las personas de alrededor, o no pueden hacer la presentación algo más privada? Porque si sólo va el Hokage y algunas personas más es una cosa, pero si algo sale mal, evacuar a toda la villa es imposible...

-Buena pregunta. La verdad es que hemos limitado algo la gente que va a estar presente, pero aún así serán muchos, no podemos alertar a la gente sin que se enteren posibles espías. Por eso es tan importante que no falléis en vuestra misión.

-Bueno, parece que ya no hay más preguntas.Podemis ir ya, estoy impaciente....- dice algo alegre rascandose su rojiza cabeza.

-Bien, podéis coger el armamento que necesitéis. Tenéis a vuestra disposición una píldora de chakra para cada uno, 15 shurikens, y un arma o dos a la elección de cada uno. Pedid qué queréis, y alguien os lo traerá. Tened en cuenta que debéis pasar desapercibidos hasta el momento de la lucha.

-¿El arma de cualquier tipo? Pues...yo quiero utilizar una espada larga, que siempre viene bien. Bueno, pues eso, ¿a quién se lo pido?

Egwene mira alrededor en busca de la persona que le tiene que traer las armas...

-Mmm...yo quiero algunos makibishi, senbon, un kunai y bombas de humo....jeje- dice algo avergonzado.