Aparentemente inmóvil en mitad de un océano de naves y satélites sobre el rutilante mundo de Brentaal, la estación Sel Zonn parece crecer un poco más cada segundo que pasa. Un pilón central forma el núcleo de la estación, y tres plataformas de aterrizaje que llevan a muelles de atraque se extienden desde la sección central, equidistantes la una de la otra y proyectándose hacia el espacio. En el borde dorsal de la estación destaca una estructura secundaria con forma de disco, en la cual luces centelleantes indican la presencia de una plataforma de aterrizaje reservada para los patrones ricos.
Al orbitar un planeta del Núcleo, la estación Sel Zonn está mucho mejor mantenida que otras muchas estructuras de su antigüedad, y se pueden ver en las áreas principales constantes renovaciones y reparaciones. Y al ser punto de paso entre varias rutas comerciales solía ser un buen sitio donde comenzar a labrarse un destino, como mínimo un sitio tan bueno como cualquier otro para comenzar el viaje
Con un suave movimiento el transbordador atraca en la estación, e instantes después las puertas del mismo se abren permitiendo el paso al espaciopuerto, parece que habéis pillado hora punta, por que la nave está llena de gente que se dirige hacia la salida.
Miré molesto a mi alrededor, mientras notaba la proximidad de la gente. Me sentía como un pez enlatado, aunque por suerte para mi, la mayoría de los pasajeros habían preferido mantener la distancia con un Mandaloriano durante todo el trayecto y me habían dejado en paz. Me dispongo a despedirme de las personas que había escoltado hasta la estación y, después de recibir mi pago, iré a buscar información sobre algún transporte que me llevase al Sistema Mandalore o alguno cercano, donde podría reparar mi armadura dañada, reponer mi equipo perdido y conseguir una nave nueva, con la que podría ir detrás de ciertas personas con las que tenía una cuenta pendiente....
Una pregunta, ya que se supone que hago de escolta de un grupo de gente, ¿recibo algo de Créditos como pago?.
-UTINIII! Grita un jawa montado en un pequeño aerochaser que alza el vuelo sobre el resto de pasajeros y lleva escrito en un lateral:
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"Ya era hora, maldita sea" Pensé para mis adentros, haber tenido que largarse de forma precipitada en una nave pública no era algo que me agradara especialmente y menos yendo tan saturada como era el caso. Aparte a los idiotas que se apelotonaban en la entrada, no quería seguir en aquella lata voladora ni un minuto más de mi tiempo y menos agobiado por un montón de extraños. En cuanto el transbordador abrió las puertas me dirigí al exterior tras asegurar que mi capa ocultaba el arsenal, mi "belleza exótica" ya era lo suficientemente llamativa como para sumarle que vieran que iba armado.
Un apestoso jawa pasó sobrevolando cerca de nuestras cabezas, al parecer el pequeñajo ya buscaba presas a las que estafar con su compraventa de chatarra, pero aquello también me ayudo a volver a caer en la cuenta de que no disponía de apenas efectivo, así que la primera parada sería la cantina de turno y otear el ambiente del lugar.
Tras un tiempo de haber estado en esa horrible nave con ciertas de personas a su alrededor, la causaba un malestar enorme que al momento de bajar de la nave sentía un poco de satisfacción, mientras tanto, aún pensaba en todo ese dinero que no pudo ganar tras haber perdido la última carga de un material ilegal a manos del imperio, por los pelos había logrado escapar de ser arrestada, cómo sacaría a su hermano si ella también iba a estar arrestada. Por suerte el sujeto que en éste momento iba con ella, un tal Sand dan Glockta, la había ayudado a escapar. Lo único malo era que él decía que ella podía hacer lo mismo que él, pero antes ya había visto lo que hacían con los de su clase, así que le causaba un poco de pavor, así prefería no entrar a su religión.
-Bueno, sabes qué, ya lo decidí, sería muy chulo hacer ese tipo de cosas que dices, ademas por lo que me has contado, podría llegar a ser mejor piloto -comentaba a Sand a la vez que saludaba a criaturas conocidas con las que había tenido el gusto de congeniar.
Por fin habíamos llegado a nuestro destino, la estación Sel Zonn, un paso más en mi huida continua de los siervos del emperador. En el último planeta estuvieron a punto de capturarme, pero eso me hizo conocer a Jean la cual tenía mucho potencial. Durante el viaje fui conociéndola un poco más y descubriendo de ella. Sus miedos la podrían llevar al lado oscuro y yo aún no sabía si tendría la capacidad de guiarla como me habían guiado a mí, pero era una época oscura y no me quedaba otra si quería transmitir mis conocimientos.
Estas naves la ventaja que tenían es que al trasladar mucha gente hacían que fuera más fácil pasar desapercibidos, al atracar me dispuse a salir de la nave esperando que los controles de aduanas no fueran muy rigurosos al encontrarnos en plena hora punta.
En la distancia vi al que parecía ser un viejo conocido, Slob-Olk, y mis sentidos me confirmaban que era el, no había otro igual. Seguro que más tarde le encontraría sin muchos problemas en alguna taberna.
Rápidamente me volví a centrar en las palabras de Jean, que por lo que me decía estaba decidida a aprender y a dejarse guiar.
-Comprobaras que si confías en la Fuerza, podrás llegar a realizar proezas sin igual, pero corren tiempos oscuros y ahora hay que procurar pasar desapercibidos-
Había demasiada emoción en ella, tendría que aprender a encontrar la paz dentro de ella.
Motivo: Usar Fuerza
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+8)=10
Dejo una tirada de usar fuerza para intentar saber si hay algún otro usuario de la fuerza en la estación.
El gentío avanza saliendo apresuradamente del puerto, empujándose unos apartándose de figuras amenanzantes fuertemente armadas que viajan en la lanzadera otros.
La estación parece bien conservada, da la impresión de haber 2 grupos de fuerzas del orden patrullando: Soldados imperiales y Fuerzas de Seguridad Planetarias.
Cada no demasiado podéis encontrar terminales de información a disposición del público (son muy simples y no requieren tirada de informática para la mayoría de la información que la gente necesita)
Sobre la entrada al pasillo principal (al que se dirige la mayoría de la gente) veis un cartel que indica que por ahí se accede a la zona comercial y dormitorios
Ya te pagaron por adelantado, y con ese dinero compraste una pistola blaster pesada, un cinturón de accesorios...
-Luppa butta unda! Dice el Jawa que sse apodera rápidamente de la primera estación de información..
Pues nada será cuestión de que la maquina le de toda la información diponible sobre la estación y sus leyes de comercio
-Estoy de acuerdo-le comenta a Sand mientras se pone la chaqueta que traía amarrada en la cintura-. Deberíamos intentar no meternos en problemas durante un tiempo -miraba a su alrededor-. Probablemente entre tanto tumulto pueda robarle algo de dinero a alguien. Por si acaso no conseguimos algo de dinero hoy para tener un lugar dónde quedarnos. A parte necesito una nueva nave, la anterior era de mi hermano, y había costado una fortuna, al menos para cuando la compramos.
Se pone a mirar a quién podría resultar fácil de robarle su tarjeta de créditos.
En esta zona, quizá por la aglomeración de gente, podría ser más tentador intentar robar a alguien... sin embargo ten en cuenta que al ser el punto de entrada a la estación hay varios guardias, y soldados imperiales, además es probable que haya cámaras repartidas por toda la zona
Fue una suerte que estuviera lo bastante cerca del tipo con barba de chivo y de la chica como para poder escuchar su conversación. Para ser francos, no había entendido ni una palabra del tipo raro, pero si lo suficiente de la chica, como para que, cuando su mirada se posara sobre mi, seguramente en busca de una posible presa, mi mano se posara sobre el blaster que descansaba sobre la funda de mi cinturón, mientras la miraba fijamente:
- ¡Inténtalo!. - Parecía que decía con mi silencio, desafiando a que se acercara a tratar de robarme.
;P
Editado, Eet, perdón.
No es el Jawa quien habla con ella, de hecho él se ha adelantado bastante con su mini moto voladora
Por fin fuera, aquella estación seguía sin parecerme gran cosa pero algo era algo, por lo menos de momento no habría amenazas de las que preocuparme, o eso esperaba. Al mirar al frente vi la primera posibilidad de encontrar un modo de orientarme en aquel lugar con las estaciones de información pero el canijo del jawa se adelantó en ocupar la más cercana, tentado estuve de agarrarlo por el pescuezo y apartarlo por aquello pero un extraño olor familiar pareció alcanzarme de improviso. Estaba seguro de no haber estado aquí antes y sin embargo me parecía sentir a alguien conocido, sin embargo un par de guardias imperiales hicieron que apartase también esos pensamientos por otros no tan "agradables", aquella puta plaga vestida de blanco no hacía más que extenderse sin parar por toda la maldita galaxia. Contuve las ganas de arrojarme sobre ellos escupiendo a un lado y dejándolos de lado para ir a otra de las estaciones de información, con un poco de suerte lograría dar con la información de alguna recompensa por algún bastardo local o alguna cantina en la que pudieran servir algo potable y empezar a hacer algunos contactos.
Posando la mano en el hombro de Jean –No es necesario robar, tienes que centrarte en hacer cosas justas, y además no interesa que nos descubran por una nimiedad como esta, busquemos algún sitio donde alojarnos-
No muy lejos cerca de los terminales de información observe a un viejo conocido, Slob-Olk, seria grato volver a verlo y charlar un rato, además si se complicaban las cosas su ayuda seria inestimable.
Dirigiéndome a Jean –Sígueme, acabo de ver a un viejo amigo-
Tras abrirme paso entre la multitud para acercarme
-¿Qué tal viejo amigo? Hacía mucho que no coincidíamos- Dirigiéndome a Slob-Olk
Los que buscáis información en los terminales obtenéis un poco más detallada, los que no, pues veis solo el nombre de los comercios y locales en diferentes carteles.
El área central comercial de la estación Sel Zonn es conocida como El Paseo. Repleta de tiendas de todo tipo, así como de grandes áreas abiertas para sentarse con fuentes, plantas y otros adornos, el Paseo es donde los nobles de Brentaal y otros visitantes de la estación acuden a divertirse.
Casi todas las tiendas están localizadas en "El Paseo", aunque algunas se encuentran fuera de las zonas transitadas. Algunos de los establecimientos más populares son:
Cantina Gundark: regentada y atendida por un Humano llamado "Gundark" Saff, la cantina de Gundark es un lugar donde gente de toda condición acuden a relajarse.
El Credichip: un casino local, atendido por un Humano llamado Cecil Vane. Los juegos más populares de la galaxia, incluyendo el sabacc y el pazaak, pueden jugarse aquí.
Suministros médicos Delgas: con atención médica y proveedor farmacéutico, los Suministros médicos Delgas atienden a aquellos que pueden permitírselo. La jefe médico en la consulta es Byra Fenn, humana
Aliados Mecánicos: Tienda de venta y reparación de droides. Atendido por un twi’lek llamado San, vende toda clase de componentes y androides reparados.
Existen dos fuentes principales de aplicación de la ley a bordo de la estación Sel Zonn.
El Imperio tiene una guarnición a bordo para mantener la paz y aplicar la ley imperial.
Las fuerzas de seguridad planetaria de Brentaal mantienen una estrecha vigilancia en todo lo que suceda en la estación Sel Zonn.
El Paseo vibra con el alboroto del ocio y el comercio. De las casas de apuestas surgen los sonidos de victoria y los gemidos de la derrota, mientras que la música de las bandas locales resuena desde las cantinas. Solo un puñado de ciudadanos recorren las áreas principales del paseo, mirando a través de los enormes ventanales que ofrecen la visión del planeta Brentaal. Los hombres de negocios venden sus mercancías a los transeúntes y unos cuantos soldados de asalto imperiales se abren paso a través de la avenida principal del Paseo en su patrulla habitual a un paso tranquilo.
Hacedme una tirada de percepción
Motivo: Percepción
Tirada: 1d20
Resultado: 9(+7)=16
A parte de lo dicho anteriormente, como buscas información sobre la política comercial, para informarte de las tasas de comercio te hacen rellenar (a través de la máquina) un montón de documentos, y acaban informándote de que las tasas son del 55%... Te parecen abusivas, así que te planteas haber rellenado algo mal, lo rellenas de nuevo, y al hacerlo te das cuenta de que una de las casillas a rellenar es la raza.... haces varias pruebas y llegas a la conclusión de que a todos los no humanos les cobran ese porcentaje, pero a los humanos les cobran solo el 35%
-Ikee nufuzu gomjam human eyeta! dice el Jawa que mira a su alrededor buscando algo, luego se acerca al primer humano solitario que ve1 -Sabioto ubanya! m'um m’aloo ikee upezzo tando toineepa. Ashuna kiizci cirkoza Gundark?
1Que por los misterios de la fuerza sera el mandaloriano
2Detente, buenos días! Hola, tengo un negocio que proponerte. Lo hablamos en la cantina de Grundark?
Motivo: Percepcion
Tirada: 1d20
Resultado: 8(+7)=15