Partida Rol por web

Estación de nieblas

Capítulo 2: Pérdidas y bienvenidas

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04/02/2015, 03:45
Émille Lalique

Notas de juego

Lanzo el disco para probar a Nora. En caso de ver que sobrepasa su barrera y que le va a hacer daño, lo invoco en mi mano de nuevo antes de desgraciarla.

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04/02/2015, 20:54
Narradora
Sólo para el director
- Tiradas (3)
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04/02/2015, 22:58
Nora Leiva

Fruncí el ceño por la respuesta e Emille. Podía entender que cualquiera de los que había en el Instituto tenía mucha más experiencia que yo. Aun así si algo se me daba bien era aprender y cuanta más protección llevara cuando fuéramos a por la familia de Ethan mejor. Ese exceso de confianza acabaría pasándole factura, en los momentos de riesgo solo era necesario un segundo para que todo se pusiera en contra.

Me mordí el labio para evitar reírme cuando le dio su opinión a Ethan sobre el estoque. La verdad era que no me le imaginaba enfrentándose a un demonio poniendo la postura correcta y diciéndole en gard. Luego le imaginé tratando de levantar un enorme espadón y la necesidad de reír fue aún mayor… Y eso fue la demostración de que las cosas pueden ponerse feas en un segundo. Cuando me quise darme cuenta, Emille me había lanzado el disco directamente a la cabeza. Grité y cerré los ojos, con una mano me tapé la cara encogiéndome de forma instintiva y la otra la levanté para intentar para el disco.

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05/02/2015, 01:37
Narradora

El aro metálico brilló mientras atravesaba el aire a toda velocidad, partiendo de la mano de Émille que lo había lanzado sin demasiada soltura, pero dirigiéndose en una trayectoria clara hacia la cabeza de Nora. 

Sin embargo, algo pareció frenar el arma en el aire justo antes de que pudiera golpear la piel de la chica. El aire pareció ondularse ante ella durante un breve instante y el arma cayó al suelo junto a sus pies con un suave repiqueteo. 

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05/02/2015, 01:41
Carlo Greymark

Carlo se quedó mirando la pantalla de tu iPhone hasta que el vídeo terminó, con los ojos como platos y un brillo entre malicioso y excitado en la mirada. - Esto es cojonudo, tío. Qué putada que te pillasen. - Hizo una pequeña pausa y luego afirmó con la cabeza y soltó una carcajada. - Creo que voy a conseguir un teléfono de estos. Sólo por eso merece la pena. 

Cuando señalaste hacia el fondo del pasillo, él se encogió de hombros. - Por ahí hay una especie de mirador, una cúpula acristalada desde donde se ve la ciudad y eso. Muy bonito, pero aburrido. ¿Quieres ir a verlo? También podríamos ir a ver a qué hora se cena aquí. Empiezo a tener hambre, la verdad. 

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05/02/2015, 02:16
Nora Leiva

Sentí de nuevo la energía recorrerme el cuerpo y extenderse como una segunda piel. Cuando escuché el repiqueteo del disco contra el suelo abrí los ojos y miré a Emille con expresión furiosa.

-Joder Emille, ¿estás mal de la cabeza?- Le grité con ganas por haberme lanzado el arma, me sentí tan asustada como cuando me enseñaron a nadar y me tiraron a la piscina sin tener ni idea. –Cuando te he pedido que me entrenes, ¿qué narices te ha hecho pensar que podría pararlo? No he tocado un arma en mi vida.- Resoplé frustrada mientras me agachaba para coger el disco del suelo.- Si no es por el escudo me podrías haber hecho daño.

Miré el disco en mi mano deseando devolverle el susto, la verdad era que me gustaba cómo se ajustaba a mi mano y cómo me sentía con ella. No pesaba demasiado y estaba frío pero, definitivamente me gustaba. Levanté la cabeza y le miré de nuevo agarrando con firmeza el disco. Sin pensarlo y se lo lancé con todas mis fuerzas deseando darle, aunque fuera solo un poco.

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05/02/2015, 02:29
Narradora
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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05/02/2015, 02:25
Émille Lalique

Observé con una media sonrisa cómo la barrera de Nora hacía rebotar el disco y este caía al suelo a pesar de su patética defensa. Joder, ¿de verdad había intentado agarrar un disco que cortaba? No íbamos a necesitar entrenamiento, no. Íbamos a necesitar un reseteo de cerebro. Si puede que hasta Milton pudiera enseñarle algo...

- Probablemente hubieras perdido tres dedos. - Asentí, dándole la razón. - Pero sería únicamente tu culpa por intentar agarrarlo. - Continué hablando como si nada, como si realmente no hubiera corrido peligro nunca.

Luego, al ver que ella trataba de lanzármelo de vuelta, me quedé quieto, deseando que fuese en la dirección correcta, justo hacia mi cara.

Sólo en el último momento lo invocaría en mi mano para quedar fuera de todo peligro.

- Lo había enlazado. - Le dije antes de dedicarle una mirada cargada de sobreconfianza. - No habría llegado a darte. Pero había que ver cómo de malo era tu instinto.

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05/02/2015, 02:36
Narradora

El disco salió disparado desde la mano de Nora. Su trayectoria no parecía muy precisa y el arma se tambaleaba un poco, pero no quedaba duda de que iba directo hacia la cara de Émille. Quizá no le daría de pleno, pero seguro que le rozaría. 

Sin embargo, antes de que llegase a tocarlo, el aro se esfumó y apareció en la mano del muchacho.

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05/02/2015, 18:58
Andrea Youngblood

-Pues mañana subiré a echar unas cuantas fotografías, se las quiero enseñar a la mía mamma cuando la vuelva a ver. -dije guardando el telefóno en el bolsillo y yendo hacia las escaleras. -Vayamos a ver si rapiñamos algo en la cocina entonces, o al menos a ver si nos dicen cuando se cena.

La verdad es que no esperaba que fueran a darme de cenar, pero mira, que no faltara el intento. -Supongo que era de esperar, que me pillasen digo. -fui comentándole mientras bajaba los primeros escalones.

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06/02/2015, 00:23
Nora Leiva

Seguí con la mirada la trayectoria del disco, cuando desapareció y apareció en la mano de Emille, resoplé frustrada. Su explicación era tan absurda, que me hizo replantearme si sería el entrenador más apropiado.

-¿Instinto? ¡Cómo voy a tener instinto si no he hecho esto en mi vida! ¡Lo único que quería hacer era protegerme! ¿No crees que antes de ponerme a prueba deberías enseñarme cómo usar el arma?

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06/02/2015, 00:55
Ethan Evans

Le dediqué una mirada de desprecio a Emille, pero ni siquiera me digné a contestar. Había aprendido a usar el estoque, no un espadón. Consideraba el estoque mucho más manejable, más preciso, más ágil, más letal. La espada era burda  y sin personalidad. Me daba igual lo que dijese y lo que considerase aquel neandertal venido a menos.

Te has vuelto loco! Exclamé, cuando el gabacho casi mata a Nora. ¿Hacerle daño? La habría matado, así de simple. ¿Sabes? Los errores ocurren a diario. No hay que tentar a la suerte de esa manera tan estúpida, podrías haberla matado.

Negué con la cabeza, sin llegar a creérmelo. Algo estaba realmente mal con Emille. Exigiría que mi entrenador fuese otro. Tal vez el chico rubio... Sí, podría entrenar con él, parecía amable.

Al ver la maniobra que vino después, resoplé. ¿Porqué sigues empeñado en hacerte el machito? No te hace ningún bien.

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07/02/2015, 23:39
Émille Lalique

Puse los ojos en blanco al escuchar la respuesta de la camarera. Se notaba que no tenía ni idea de nada.

- Por eso se llama instinto. - Le expliqué con un tono ligeramente sarcástico.  - Y era una prueba de qué hacías sin enseñarte nada. - Continué entonces. A mí me parecía evidente, pero quizá era un poco obtusa. - No creo que enseñarte cómo usarla antes sea lo mejor, no. - Comenté antes de dirigirme al memo.

- Aumenté sus habilidades por algo. Tenía la barrera. Con eso y el arma enlazada no había problemas. - Empecé a explicar con el ceño fruncido, sin entender qué coño hacía yo dándole explicaciones a un mundano. - ¿Quieres recuperar a tu familia? - Pregunté entonces, cambiando de tema drásticamente. - Pues no vas a poder hacerlo si no confías en mis putas capacidades. Ni vas a aprender a tiempo a hacer algo útil sin arriesgarte un poco. Tenemos iratzes si pasa algo, joder. - Dije molesto antes de hacer una pausa. - ¿Quieres aprender, o no?

 

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07/02/2015, 23:48
Narradora

Mientras descendíais las escaleras hasta llegar de nuevo a la planta baja Carlo volvía una y otra vez al tema del vídeo, hablándote como si fueras un héroe y pidiéndote que después se lo dejases ver de nuevo.

El muchacho parecía tener bastante claro hacia dónde se dirigía, así que era él quien iba guiando el camino hasta que llegasteis a unas puertas de madera gruesa desde las que se escuchaban muy atenuados sonidos que sí, parecían propios de una cocina.

Cuando entrasteis os encontrasteis con un lugar muy amplio y que, al igual que los baños, parecía bastante preparado para el mundo moderno. Allí Scott y Josephine parecían estar cocinando juntos. O probablemente él cocinaba y la niña le echaba una mano. En el horno había algo cocinándose que olía de maravilla y en la vitrocerámica un par de pucheros echaban humo. En la mesa del centro se podían ver restos de verduras picadas. 

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08/02/2015, 00:31
Josephine Herondale

- ¡Ey, hola! - Saludó alegremente la niña al veros entrar. - Estoy ayudando a Scott a hacer la cena. Normalmente cenamos a las ocho, pero con todos de misión y todo eso...  - En una de las paredes se podía ver un reloj que marcaba las nueve menos cuarto. - A ver si llegan pronto, porque me muero de hambre. - Terminó, haciendo una mueca con la boca. 

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08/02/2015, 20:39
Andrea Youngblood

¡Qué plasta! Seguro que no paraba de decirme que era un héroe solo para que lo perdonase por humillarme antes. Estaba de acuerdo en que yo era el mejor, el más intrépido y el mejor colega que existía pero hasta yo tenía un corazoncito. No olvidaría fácilmente aquel comentario sobre mi cara y una bolsa.

Al entrar en la cocina y ver a aquel par, levanté la mano y saludé. -Ey, qué tal. Vaya eso es estupendo, nosotros también estábamos pensando que ya era hora de comer. -dije señalándonos en un gesto.

-¿Podríamos picar algo mientras esperamos? -dije con cara de bueno. Si queréis puedo echaros una mano, soy todo un cocinitas.

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11/02/2015, 00:43
Nora Leiva

Me calmé un poco ante la evidencia de que no habría permitido que me hiriese. Sin embargo no estaba de acuerdo en que no tuviera que enseñarme a usarla.- ¿Por qué no es bueno enseñarme a usarla? Esa es la idea, ¿no?

Notas de juego

Disculpad la tardanza se me olvidó que lo tenía pendiente. Sorry!!!!

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11/02/2015, 12:37
Émille Lalique

Fruncí el ceño ante la pregunta de la camarera. Iba a ser verdad eso de que no había que ser muy lista para trabajar en un bar...

- No he dicho que no sea bueno enseñarte a usarla. - Aclaré extrañado de que hubiera entendido eso. - He dicho que si quiero hacer una prueba de qué haces sin enseñarte nada, no es bueno enseñarte antes. - Dije, sin entender la parte que se había perdido. - Es algo evidente.

- Si vas a quedarte, es tuyo. - Le dije, acercándome para tenderle el aro. - Va con aquel cinto de allí. - Le indiqué señalando una pequeña prenda de cuero colgada en la pared. - Llévalo a todas partes. Cuando te hayas acostumbrado a su peso, empezamos.

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11/02/2015, 17:56
Ethan Evans

Quiero aprender. Gruñí. No me gustaba ceder ante el gabacho, pero puede que la única forma de salvar a mi familia fuese entrenando para hacer frente a aquellos seres. Al menos si Gareth y los demás no consiguen rescatar a mi familia. No se esperaba que fuesen a arriesgarse demasiado por unos desconocidos. Yo no lo haría.

¿Y desde cuando el estoque es mal arma? Pregunté, alzando una ceja. Creía que un experto como tú sabría que es la mejor arma contra las armaduras y cotas de mayas. Además, que era un arma ligera y manejable, además de letal, ya que penetraba más que las espadas comunes. Solo había que tener precisión y saber donde pegar... Y tenía estilo y personalidad, claro.

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11/02/2015, 19:17
Émille Lalique

- Debes aprender los encontremos o no. - Respondí a Ethan en tono serio. - De hecho, con más motivos aún so los encontramos. Tanto tú como ellos seréis objetivos de los demonios. Debes estar preparado para protegerles. - Aseguré como si aquello fuera evidente. Sin embargo, ante sus otras palabras no pude sino alzar una ceja con ironía y escepticismo.

- Está bien. - Le dije. - Procuraré llevar uno de esos estoques de marica encima la próxima vez que vea un demonio con cota de malla. - Comenté con una pequeña sonrisa, sin poder creer que hubiera dicho una tontería semejante. - Coge el arma que quieras, y vamos. - Enuncié luego. - Mi estómago no se va a llenar solo.