Partida Rol por web

Estación de nieblas

Capítulo 4: Ciudad de cristal

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01/07/2017, 10:31
(Gi) Sun-yun Herondale

Me detuve cuando Carstairs me tocó, con un escalofrío surfeando una ola de arena por mi piel desde el punto en que su mano rodeaba mi brazo. Y aquella sensación me hizo pensar en aquel beso del que no habíamos hablado y esperaba que el momento no fuera ahora.

Inspiré en silencio antes de girarme y enfrentarme a lo que fuera pero no estaba preparada por la mención a mi anillo. ¡Joder como lo añoraba! ¿cuántas veces lo había pedido de vuelta a estas alturas? Y nada.

Mis comisuras cayeron un poco con aquella información, me daba igual si alargaban mi tortura si al final me lo devolvían, pero que lo hicieran, coño.

Algo —repetí como si mi voz se hiciera más entendible—. ¿Qué significa algo? —me preocupé por la cuarentena que aquello podía significar para mi joya— ¿Me lo van a devolver?

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02/07/2017, 06:20
Émille Lalique

La casa de Amber siempre me había parecido como de miniatura, como un quiero-y-no-puedo. Era como que querían tener algo bonito, y también jardín, y chimenea, y no les cabía todo en el sitio que podían permitirse. Pero bueno, con el tiempo había aprendido que tampoco necesitaban mucho más, así que no estaba mal. Y además, me servía para meterme con ella.

Al llegar dejé que se adelantara y di por hecho que sus padres estarían esperándola. Entré sólo después de ella y cerré tras de mí, mirándolo todo con discreción. No como si estuviera investigando la guarida de un demonio, sino como algo peor: casi como si estuviera a examen.

Saludé con un asentimiento de cabeza a la mujer y miré a Amber antes de contestar a su pregunta.

—Señora Blackwell —enuncié. Pensé entonces en mis padres, en que sólo íbamos a pasarnos por aquí un momento y eso... Pero no pasaba nada por alargarlo un poco. Después de todo estaba claro que mi amiga quería estar con ellos—. Un café, por favor. Pero si quiere puedo encargarme yo —me ofrecí, sin darme cuenta de que estaba intentando hacer puntos sin saber ni para qué.

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02/07/2017, 10:44
Melissa Campbell

Me quedé mirando a Ella, a la expectativa de su respuesta y cuando empezó a contarme de qué se refería, mi rostro paso de su tono blanco habitual a un tono incoloro, haciendo resaltar todavía más las pecas de mis mejillas.

Sin embargo, eso sólo fue en un primer momento y contagiada por la preocupación de la chica, que de repente y por un instante, a mi lado, pareció más mulata de lo que era.

No dije nada hasta que interioricé lo que me había contado y tras una larga inspiración y contigua espiración, me dirigí un poco más relajada a la chica.

—Bueno, en realidad no me preocupa. No tengo nada que esconder. Ya conté a Gareth todo lo que sé... —dije mientras conduje mi mirada hacia los tortolitos—. Lo que no entiendo es por qué tiene que doler —opiné, dirigiendo de nuevo mi mirada hacia Ella.

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04/07/2017, 00:26
Milton Carstairs

El chico se encogió levemente de hombros, manifestando con ese gesto que no estaba muy seguro de lo que iba a decir a continuación. 

—Algo mágico. No sé si alguna runa que no pertenece al Libro Gris o un hechizo... No estoy seguro. Lo mandaron al Laberinto Espiral para que los brujos de allí lo examinasen, pero ni siquiera ellos han logrado todavía averiguar qué es. —Hizo una pequeña pausa antes de añadir algo más—. Supongo que te lo devolverán, pero no creo que lo hagan hoy. Quieren saber qué es lo que tiene.

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04/07/2017, 00:35
Ella Blackthorn

La chica pareció aliviarse un tanto al ver que no te alarmabas ni ponías el grito en el cielo. Con tu pregunta, inspiró despacio antes de responder.

—Es una espada que proviene de un ángel, forjada en fuego celestial. Es muy poderosa y poco le importan las emociones de quien la sostiene, sólo le importa conseguir la verdad por todos los medios. —Ella se encogió de hombros—. Si no te resistes durará poco. 

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04/07/2017, 00:54
Amber Blackwell

Tu amiga abrazó también a su madre y luego viste cómo sus ojos se escapaban hacia la escalera que llevaba a su cuarto en la buhardilla. No te costaba comprender que estaba pensando en cuánto habría cambiado en su ausencia. Al bajar la mirada sus labios se curvaron en una sonrisa y asintió hacia su madre.

—Yo cacao. Sabe a hogar. 

Y tras esa moñada, alzó su bolsa y empezó a caminar hacia la escalera. 

—Voy a subir mis cosas y bajo. No tardo nada —aseguró mirándote antes de desaparecer.

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04/07/2017, 00:54
Zara Blackwell

—Llámame Zara —te corrigió la madre de Amber cuando te dirigiste a ella, acompañando sus palabras de una sonrisa—. Ahora vas a ser como de la familia, ¿no es así?

Después contempló a su hija encaminarse hacia las escaleras por un instante, antes de volver a ti. 

—No hace falta, gracias, Émille. Yo me encargo. Sube con Amber si quieres. O ven con nosotros a la cocina —ofreció, empezando a moverse ella también.

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04/07/2017, 11:44
(Gi) Sun-yun Herondale

Mis ojos quedaron clavados en los de Carstairs, inexpresivos. Ya no sabía ni qué quería interpretar que sentía. Pero si algo estaba claro era que la culpa de todo ello la tenía A.B. ¡y la muy puta me había engañado con su rollo de mosquita muerta!

Genial... —me quejé sin ponerle ni siquiera ganas a ello—.

Sin el anillo, sin tecnología y renunciando a mi apellido en menos de doce horas, ¿qué iba a quedar de mí? Y encima ahora tendría que reconocer que sabía que el anillo tenía algo raro antes de que me preguntaran por ello. Y probablemente me quedara también sin musica. — La curiosidad mató a hello, kitty.

Sentí mi pecho escoser por el punto que Imil había atravesado con la espada, como si las runas no hubieran bastado para cerrar esa herida.

¿Dónde está eso de los magos? Iré a buscarlo yo misma.

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05/07/2017, 00:15
Émille Lalique

Al escuchar la chorrada de boca de Amber me entraron ganas de reír directamente en su cara. Sin embargo con su madre allí me sentía un poco intimidado, aunque sí le dediqué una larga mirada con las cejas alzadas. Una sonrisa se coló por mi rostro mientras negaba con la cabeza.

—Joder...

Acto seguido asentí en dirección a la madre de Amber.

—Zara, de acuerdo —acepté, aunque aquello se me hacía extraño, casi tanto como imaginar a Amber llamando a mis padres por su nombre. Casi no me atrevía a hacerlo ni yo.

La verdad es que con sus siguientes propuestas me apeteció más subir con Amber. Eso de estar en su casa como si nada y con ella en su cuarto era un poco... Raro. Sin embargo la verdad es que sentía algo de curiosidad por ver qué les había contado de mí a sus padres, y estaba claro que delante de ella iba a ser más difícil de saber.

—Los acompañaré —afirmé comenzando a seguirla. Tratarla por su nombre de pila no tenía por qué ser sinónimo de tutearla, claro—. La verdad es que huele bastante bien —dije tras esforzarme un poco en encontrar algo agradable que decir. No estaba muy acostumbrado. Acto seguido, sin embargo, me cargué todos los protocolos sin que fuera premeditado—, a su marido han debido salirle las galletas de puta madre.

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05/07/2017, 12:27
Milton Carstairs

Milton te observó con la frente levemente fruncida, pero con tu pregunta, su expresión se suavizó y una pequeña sonrisa se deslizó, divertida, en sus labios durante un par de segundos.

—Nadie lo sabe —respondió sacudiendo la cabeza—. Nadie que no sea un brujo, claro está. Se dice que está en un plano propio y que el brujo que intenta desvelar la forma de llegar allí cae muerto de inmediato. No sé si es cierto, pero, como sea, es su secreto mejor guardado. Y tienen unos cuantos.

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05/07/2017, 12:31
Christopher Blackwell

Amber respondió a tu mirada sacándote la lengua desde la escalera, antes de desaparecer en el piso superior. 

Su madre empezó a caminar hacia la cocina, dando por hecho que la acompañarías por ese pasillo demasiado estrecho para lo que tú estabas acostumbrado. 

La cocina era bonita y muchos dirían que acogedora, aunque a ti lo que te pareció fue diminuta. En ella el olor a galletas era más intenso y allí podías ver al padre de Amber inclinado para mirar dentro del horno a través del cristal. Al escuchar pasos a su espalda habló sin apartar la vista. 

—Creo que ya están listas, Zara, las voy a sacar. ¿Era Amber? 

En ese momento se dio la vuelta y al verte a ti también tardó un pestañeo en ubicar tu presencia allí. Cuando lo hizo sus labios se curvaron en una sonrisa amplia y franca y se acercó para estrecharte la mano.

—Émille, ¿verdad? Soy Christopher. Vaya, estamos encantados de tenerte aquí, ¿verdad, cielo? —preguntó, incluyendo a su mujer en sus palabras—. ¿Te apetece desayunar? Voy a sacar ya las galletas. Es una receta que encontré en un libro mundano, así que quién sabe cómo habrán salido —añadió con cierta jocosidad, dejándote entrever de dónde había sacado Amber su interés por los asuntos de los mundanos.

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05/07/2017, 13:35
Zara Blackwell

Mientras él hablaba, su mujer puso los ojos en blanco, se asomó por la ventanita del horno y tras un segundo lo abrió y sacó la bandeja de galletas, dejándola sobre la encimera. Después sacó varias tazas y empezó a preparar tres cafés y un cacao. 

Aprovechó cuando su marido te preguntó para intervenir ella. 

—Estamos emocionados por lo que vais a hacer hoy. Ni Chris ni yo tuvimos nunca un parabatai y nos encanta que Amber sí haya encontrado alguien con quien tener ese vínculo. Así que estamos deseando conocerte mejor —añadió, dedicándote una sonrisa.

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05/07/2017, 17:08
(Gi) Sun-yun Herondale

¡oh, dios mio! ¿Qué era aquello? ¿Estaba el universo conspirando para joderme la existencia? ¿Era el efecto bumerang por cargarme-o hacer que se cargaran- a Ami-son Aly?

Tenía ganas de gritar, mi pecho empezaba a quedar pequeño para toda esa mierda angelical. Pero no mengüé la curvatura de mis labios, que por otro lado ya era prácticamente inexistente.

Genial... — me cagué en todos los brujos, aunque admiraba ese rollo de morir antes que hablar. Les odiaba por fastidiarme pero les admiraba el honor.

Mis ojos buscaron en su rostro si había algo más que necesitara contarme antes de presentarme a la tortura rutinaria de los nuevos. Y de no tener más palabras, giraría sobre mi misma y saldría de ese jardín tan mal cuidado como los modales de esos nephilims.

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05/07/2017, 18:24
Ella Blackthorn

Tras hablar apartados unos minutos, Sun-yun y Milton regresaron junto a las dos chicas sentadas en las escaleras. Ella se giró al escucharlos y les sonrió mientras se ponía en pie. 

—Bueno, ¿vamos a dar una vuelta por la ciudad o qué? —preguntó, animosa—. Todavía son las diez, tenemos tiempo de sobra. 

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06/07/2017, 01:27
Émille Lalique

Seguí a la madre de Amber, un poco sorprendido de que todo fuese como en miniatura. A ver, no era un idiota y había estado en mil casas, pero aún así me costaba imaginarme creciendo en un sitio así. Mira que nuestras habitaciones del Instituto no eran enormes, precisamente, pero visto lo visto quizá eran un lujo comparadas con lo que tuviera aquí. Vale, sabía que los padres de Amber no eran los mas ricos de la ciudad, pero esto, bueno... Supongo que era acogedor.

Estreché la mano del señor Blackwell cuando me la tendió, y luego busqué una silla. No llegué a sentarme, sólo puse la mano sobre su respaldo. La verdad es que estaba un poco nervioso. ¿Habría sido más cómodo subir con Amber? Probablemente. Pero bueno, la decisión ya estaba tomada.

Una cosa es cierta: fue gracioso ver a la madre de Amber poner los ojos en blanco tal y como hacía su hija. De tal astilla...

—Huelen bien —aprecié sin llegar a mentir, intentando ser lo más amable que sabía. A ver, estaba claro que los mundanos sabían hacer putas galletas. Con el trabajo que hacíamos por ellos salvándoles el culo tenían tiempo para todo. Pero eso no iba a decírselo a ese hombre, claro.

Después de eso me quedé sin saber muy bien qué decir. No era muy bueno en esas cosas. Así que recordé las últimas palabra de la madre de Amber hice un gesto con la mano.

—Bueno, pueden preguntarme lo que quieran, claro —ofrecí mientras mi mente se iba directamente a lo de anoche. Menos eso.

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06/07/2017, 09:46
(Gi) Sun-yun Herondale

Al volver no estaba tan radiante como lo había estado ante mi habitación, y ni siquiera me apetecía mirar el pelo de Meli-san como si tuviera un bicho en él.

Me encogí de hombros a la propuesta de Ella y busqué en mi muñeca un reloj que no llevaba para comprobar la hora de verdad.

Tu mandas —respondió y echó infinitamente de menos sus cascos y la musica—. Te sigo.

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08/07/2017, 11:34
Melissa Campbell

Escuché a Ella atentamente. Me interesaba la respuesta así que mi expresión era de total concentración cuando Sun-yun se acercó a nosotras. 

Me quedé pasmada con lo que me había contado y en cuanto se giró hacia los demás hice lo mismo bruscamente, unos segundos más tarde.

—¡Vamos, vamos! —dije levantándome de golpe. Tenía muchas ganas de ver más cosas y más teniendo una guía que nos pudiera explicar curiosidades y particularidades del lugar.

Sin embargo noté que Sun-yun ya no estaba tan alegre y me acerqué a ella. La cogí del brazo y la miré con una sonrisa.

—¿Va todo bien? —le pregunté, con un rintintín en mi sonrisa, mirando por el rabillo a Milton.

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08/07/2017, 12:16
(Gi) Sun-yun Herondale

Al sentir una mano en mi brazo, giré lentamente la cabeza hacia ella, empujándola con los iris grises desde el rabillo del ojo.

Esperaba a Carstairs con algo que se hubiese olvidado y al ver a Meli-san me sentí fuera de guardia. ¿Era eso tener la guardia abierta?

La miré confundida en un primer momento pero luego sonreí con fachada.

Nada va bien —pensé—.

Me moría por contarle lo de mi anillo, por quejarme por su paradero y cagarme en todo por no tenerlo pero en su lugar mentí.

Todo bien.

Luego mis ojos fueron hacia Ella, sin molestarme a zafarme de la pelirroja, total, ya me habían contagiado.

Ella,¿Eso que es? ¿nombre o apellido? ¿cuántos Institutos hay en el mundo?

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09/07/2017, 15:15
Ella Blackthorn

Ella comenzó a bajar animosamente las escaleras, mientras que Milton prefirió quedarse al final del grupo, en una posición más discreta. 

Ante la pregunta de Sun-yun, la chica miró hacia atrás y se quedó pensativa tan sólo un instante. 

—Creo que en el último recuento de enclaves había unos ochenta registrados, pero no todos son Institutos, claro. Algunos son sólo pequeños refugios de apoyo. Institutos establecidos hay unos cuarenta y cinco, la mayoría aquí en Europa. Y luego están los Institutos principales, uno en cada continente, cada uno con su Gran Biblioteca. El más cercano es el de Londres. —Al nombrarlo hizo un leve gesto con la mano señalándoos.

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09/07/2017, 15:36
Zara Blackwell

El padre de Amber alzó las cejas cuando, al darse la vuelta para sacar las galletas del horno, se encontró la bandeja enfriándose sobre la encimera. Miró a su mujer y su sonrisa se amplió, divertida. 

Mientras tanto, fue ella la que aprovechó la veda que habías abierto. Acercó las tazas a la mesa, dejando una con café delante de la silla que usabas como apoyo, y se sentó en otra de las sillas. 

—Pues háblanos de ti —pidió, mirándote—. Cuéntanos qué te gusta hacer, qué tal te va en Londres... ¿Ya estás preparado para que Amber te arrastre por todo el mundo?